En Argentina hubo 20.000 desaparecidos desde 1975 a 1984. Explicación (Con fuentes) - Refutación a Luis Labraña - Posición Nominalista VS Posición innominada en la cifra de desapariciones


         Los apologistas del proceso militar suelen ofrecer argumentos que parecen intuitivamente inteligentes o ciertos para el lector desprevenido o desinformado. Si a eso le sumamos que el grupo "supuestamente" más interesado en defender la verdad histórica, como lo son las madres de plaza de Mayo, carecen de la capacidad para explicar adecuadamente estos temas, o padecen una indiferencia para ello, el resultado actual es un incremento notable del negacionismo como si se tratara de una verdad, a pesar que sus argumentos son fácilmente desmontables

Edit: un youtuber llamado "Es de Peroncho", que es amiguito del nabo de Agustin Laje y Nicolás Márquez, intentó sin mucho éxito refutar algunas de las pruebas que presentamos aquí. Nuestra respuesta a ese youtuber la encuentra aquí:


Aunque primero es menester leerse este posteo para entender la respuesta


A continuación, nos dedicamos a explicar el problema de la cifra de desaparecidos. Demostraremos que la discusión sobre la negación de la cifra es más televisiva o mediática que "académica". Y pongo "académica" entre comillas porque lamentablemente no he encontrado en la literatura especializada una exposición consistente del tema, asi que este blog que escribí es el primero que lo explica de manera orgánica. Igual, la mayoría de las fuentes que presentamos aquí ya eran conocidas desde hace ¡¡¡¡Más de tres décadas!!! Asi que no me voy a jactar de revelarte la "historia que no te quieren contar" o de descubrir "la historia oculta que el relato oficial no quiere que sepas" y esas pavadas que dicen los charlatanes como Ceferino Reato o Agustin Laje como si descubrieran la rueda. Muy básicamente se puede resumir en que, con independencia del registro estatal, existen pruebas nada despreciables que los militares confeccionaron en cada centro clandestino las listas de los detenidos que pasaron, y que dichas listas sumadas, y nunca entregadas por ellos, no solo existieron sino que poseen una cifra más alta





No es algo novedoso: hasta el famoso fiscal Strassera sabe de la existencia de listados que se hacían DENTRO de cada centro clandestino. Esas listas nunca fueron aportadas por los militares, pero hay material documental que indica tanto su existencia como su número aproximado de registros, y 
que vamos a detallar extensamente en el primer capítulo de este blog. En este video el fiscal Strassera menciona el ejemplo de centros clandestinos como "Club Atlético" donde el secuestrado era numerado con una letra y una cifra (lo veremos más adelante); o el caso de la ESMA donde los listados se microfilmaron




Fotografías de dos prisioneras sacadas en la ESMA durante la dictadura, de las que no se conocen sus nombres. Estas fotos fueron retiradas del centro clandestino en secreto por el sobreviviente Victor Basterra. Se cree que fueron liberadas estas detenidas (es decir, serían "sobrevivientes no registradas"). Lamentablemente la palabra "desaparecido" ha sido tan bastardeada y malinterpretada por izquierdistas y derechistas, que a menudo se olvidan que también existen víctimas sobrevivientes que no quisieron denunciar su status de supervivencia ni cobrar indemnización alguna



(ver minuto 14:30 a 16:35) El 28 de abril de 1983, la Junta de Comandantes emite por cadena nacional de televisión su "Documento Final de la Junta Militar sobre la guerra contra la Subversión y el Terrorismo" en el que intentan convencer a la población que los militares lucharon contra 25.000 subversivos, de los cuales 15.000 eran combatientes "técnicamente capacitados e ideológicamente fanatizados para matar". Como se verá más adelante, la cifra de combatientes fue artificialmente inflada de cara a los televidentes, para justificar los niveles que alcanzó la represión y dar la "sensación" que al menos 15.000 desaparecidos fueron "terroristas" o "combatientes irrecuperables". Los apologistas como Ceferino Reato, Nicolás Márquez, Victoria Villarruel se "olvidan" de estas cosas, aún siendo declaraciones del mismo gobierno militar; a pesar que según ellos tienen la "memoria completa" 

En este posteo que escribimos, un análisis más extenso de la enigmática cifra de "15.000 combatientes" del Documento Final:




Diario Clarín 29 de abril de 1983, donde resume los puntos más destacables del Documento Final, que como veremos después tiene importancia capital ya que la propia junta de Comandantes reconoce eufemísticamente una cifra de desaparecidos muy elevada de 15.000 personas. 
Tal vez sea una de las razones por las que Graciela Meijide en el libro "El Drama de la Autonomía Militar" propone el número de 15.000 desaparecidos. Pag. 134:



Por lo pronto, tal como se ha planteado "mediáticamente" la cuestión de la cifra de desapariciones -o tal como la enrostran los apologistas consumados del proceso- nos enfrentamos implícitamente a una discusión de corte epistemológico ¿Qué quiero decir con esto? Hay dos posturas "intelectuales", o más bien son dos posturas epistémicas legítimas para asumir el número de represaliados: una de ellas, la más conocida y la que seguramente el lector adhiere, es la postura netamente "nominalista" que predica que los desaparecidos en cantidad son únicamente los que el Estado (o cualquier ente privado) pudo individualizar corpóreamente o con nombre, apellido y número de cédula. Cabe aclarar que los nominalistas más mediáticos como Ceferino Reato, no suelen mencionar la cifra de sobrevivientes.... cuando estas personas también pasaron por un centro ilegal de concentración para sufrir tormentos de variado tipo. Si sumamos la cifra de sobrevivientes que tiene el Estado y otros organismos públicos y privados, junto con la de asesinados o desaparecidos, el número se aproxima a los dichosos "30.000" con nombre y apellido. Lo que revela que nuestra experiencia dictatorial fue "parecida" a la de Chile de Pinochet, con mayor número de víctimas sobrevivientes (el régimen de Pinochet dejó 3 mil muertos y desaparecidos, sumado a casi 40 mil víctimas de tormentos) 

Las cifras se dividen en:

-Muertos y desaparecidos desde 1975 a 1984 (incluye denuncias de la CONADEP no ratificadas en el RUVTE):        

9.400 personas 

-Sobrevivientes de centros clandestinos y secuestrados ilegalmente a disposición del PEN desde noviembre 1974 (sin desglosar cada rama):

18.000 personas


Total: 27.400 víctimas

(esta cifra no incluye muertos, desaparecidos y sobrevivientes no registrados. Algo que veremos posteriormente en este blog)


el número de sobrevivientes y secuestrados del PEN es un dato actualizado de febrero del año 2023. Los investigadores Florencia Cataldo Díaz, Joan Portos Gilabert y Cristian Rama obtuvieron acceso a dicho número, pag. 41 referencia 11:


El Estado, por una razón incomprensible, siempre difundió la lista de muertos y desaparecidos, pero nunca las demás listas. Una de las excusas que ponen, es que se tratan de personas todavía vivas que no quieren difundir su identidad públicamente y por eso el Estado protege los datos. Pero es una excusa que bien puede aplicarse a los familiares de los muertos también. Y además esta medida, lejos de calmar aguas, terminó por alimentar los delirios conspirativos de los llamados "negacionistas" y los izquierdistas

Pero en este artículo no nos centraremos en ese número del RUVTE, salvo brevemente en nuestro capítulo final. Por contra, aquí vamos a hablar largo y tendido de aquellas fuentes que estipulan muertos, desaparecidos y sobrevivientes NO REGISTRADOS. Aquí juega por un lado la postura "nominalista", que asegura que toda fuente es inválida si no contiene el nombre, apellido y/o DNI de la víctima

La otra postura, que es al menos la posición que nosotros mantendremos a lo largo de este posteo y la justificaremos, se la puede denominar como "innominada", y sostiene que existe epistemológicamente otros métodos para obtener una cifra confiable de represaliados sin que necesariamente tengamos sus nombres y apellidos, o sus cuerpos. Estas dos posiciones, que son legítimas, ineludiblemente colisionan pero en una relación de género a especie: los "nominalistas" son totalmente incompatibles en sus objetivos con las fuentes innominadas, pero la postura innominada no es incompatible con los registros estatales o privados que individualicen a las víctimas

Básicamente, los nominalistas dirían "si no hay nombres, no hay prueba" y rechazarían cualquier fuente que no tenga nombres (incluso fuentes muy confiables como las de los mismos represores). Explicaremos oportunamente si existen fundamentos objetivos y jurídicos para justificar esa posición 

En el siguiente posteo vamos a exponer las fuentes de la posición innominada y, en el segundo punto, explicaremos las virtudes y desventajas de cada postura epistémica, tanto la nominalista como la innominada

No va a faltar alguno que me critique: "Ay, vos hablás de los desaparecidos pero no hablás de los muertos por la guerrilla". Que te calles pesado!!! que ya escribí un posteo sobre la cifra de muertos por la guerrilla y ¡Sorpresa!! descubrimos que los apologistas como Victoria Villarruel también inflan el número de muertos los muy hipócritas: 




Listado de víctimas letales de la guerrilla desde 1969-1979 publicado por el mismo gobierno militar de Videla en el libro del Poder Ejecutivo Nacional titulado "El Terrorismo en la Argentina" del año 1979. Curiosamente apologistas como Victoria Villarruel o Ceferino Reato inflan la cifra de muertos a más de 1.000 cuando los militares dieron un número de menos de 700 muertos en 10 años


Finalizo esta introducción con una aclaración: al negacionismo más duro no le importa tanto que los desaparecidos hayan sido 100 mil o 500, lo que le importa a la gentuza como Nicolás Márquez o Agustin Laje es decir que casi todos los desaparecidos eran "terroristas"; por tanto el esfuerzo en rebajar la cifra tiene que ver con su ingenua creencia que así se vuelve más "coherente" la equivalencia. En este sentido, les recuerdo que también escribí sobre la cifra de combatientes de Montoneros y ERP en estos apartados: 









Gráfico de inteligencia militar firmado por el jefe de inteligencia Carlos Martínez en octubre de 1975 como parte de la directiva 404/75 que acompañaba al decreto de aniquilamiento de Luder. Allí cuantifican al ERP con 430 combatientes mínimo y 600 combatientes máximo. Esa era toda la capacidad de fuego que el Ejército estimaba de su enemigo ese año que fue el de mayor capacidad ofensiva de la guerrilla.... desmintiendo ipso facto los 15.000 combatientes que posteriormente inflarían en su "Documento Final" para 1983, en circunstancias políticas adversas para los militares

Pag. 44: 




Cifra de pelotones de combate mencionados por la revista oficial clandestina de Montoneros, "Evita Montonera", desde el año 1975 hasta marzo de 1976 (véase nuestro artículo "¿Cuál fue la cifra de combatientes de Montoneros en 1976?")





Aparato financiero de Montoneros, que alimentaba a toda su militancia. Hasta las finanzas montoneras desmienten a los apologistas de la dictadura (véase nuestro posteo "¿Cuál fue la cifra de combatientes de Montoneros en 1976?")


Diario "La Gaceta" de Tucumán, 23 de marzo de 1976 (1 día antes del golpe). Exponen a Miriam Prilleltensky, una guerrillera del ERP capturada y violada (esa última parte no salió en los diarios, claro) que iba a responder a los periodistas en calidad de "arrepentida". La entrevista, influenciada por el control de prensa de los militares en la provincia, da a entender que el ERP tucumano no tenía más de 30 o 40 combatientes para esa fecha (marzo de 1976). Es decir, estaba casi totalmente aniquilada la guerrilla rural antes del golpe del 24 de marzo


Como verán, aún si suponemos que los desaparecidos únicamente son 9 mil, de todos modos la mayor porción de esos 9 mil no era combatiente de guerrilla. Lo lamento mucho por los negacionistas, sigan participando

Esto es significativo, pues ¿Qué es más importante para entender el fenómeno represivo? ¿La cifra de desaparecidos? ¿O la cifra de combatientes? La respuesta es categórica: la cifra de combatientes. Es mucho más preferible que la gente repita "9.000 desaparecidos y muertos" pero que al menos tengan bien en claro cuántos combatientes juntaron Montoneros y ERP, que no superaban los 2 mil efectivos armados para 1975. Esto desarma el tan ansiado mito apologético que los militares lucharon en una guerra contra un enemigo poderosísimo apocalíptico. Por eso los apologistas como Ceferino Reato o Victoria Villarruel NUNCA TE DICEN CUÁNTOS COMBATIENTES TENÍA LA GUERRILLA.... porque no les conviene. A ellos les conviene más que nos centremos en el número de desaparecidos, y no en el de combatientes. Por eso rogamos al lector que se centre en lo verdaderamente importante de este blog y del cual le dedicamos varios posteos: el número de combatientes. No obstante, en este posteo específico vamos a dedicarnos a analizar en extenso este "enigma" de la cifra de desaparecidos

Pero si la gente dice "Son 9 mil desaparecidos y la mayoría no era combatiente", ya con eso me doy por satisfecho (esto ha sido un grave error de los izquierdistas: darle de comer a la derecha al considerar la cifra de desaparecidos como "el gran debate". En vez de arrinconar a los derechistas con la cifra de combatientes, y demostrar que ESA es la discusión a darse, y que el número de desaparecidos es irrelevante frente al número de combatientes). Si el talón de aquiles de la izquierda son los "30 mil desaparecidos", el talón de aquiles de la derecha es la cifra de combatientes de Montoneros y PRT-ERP

Indice de contenidos

-¿Hay pruebas que fueron asesinadas y desaparecidas 30.000 personas? ¿Existe evidencia de un número más alto de desaparecidos que los registrados por el Estado?? Fuentes de la posición innominada

*¿Redondear para arriba o para abajo las cifras de desaparecidos?

-¿Es correcto creer en la cifra del Estado o el Nunca Más como prueba exclusiva de la cantidad de desaparecidos? Comparación con otros casos históricos. Ventajas y desventajas de la posición nominalista

-Los 75.000 desaparecidos de Francia: el informe del gobierno militar argentino para responder a la CIDH

-La duplicación de prisioneros en la investigación

-¿Es cierto que Luis Labraña inventó la cifra de 30.000 desaparecidos?

-¿Por qué Ceferino Reato rebaja la cifra de 8.961 denuncias del Nunca Más a 6.348 desaparecidos en su conteo?? Número de sobrevivientes

***Bonus Track: BASTA DE RETRASADOS MENTALES PROGRESISTAS (una crítica mía a tontitos como Rebord, Martin Kohan, Mauro Brissio y otros pelotuditos)

-Conclusión

Para aquellos que consideren que lo único válido es la lista con nombres y apellidos, entonces mejor deben dirigirse al apartado titulado "Ventajas y desventajas de la posición nominalista". Si quiere enterarse si la historia que contó Luis Labraña sobre su "invento" es verdad o un chamuyo de él, entonces hay un capítulo dedicado específicamente a desmentirlo
PD: el amiguito de Luis Labraña, llamado José D'Angelo Rodriguez (escritor de dos libros titulados "Mentirás Tus Muertos: Falsedades y Millones detrás del mito de los 30.000 desaparecidos" y "La Estafa con los Desaparecidos") ya sabe de la existencia de este blog. Pero a él le da igual si su amigo inventó o no inventó el numerito famoso.... y eso que Labraña le prologó su primer libro "Mentirás Tus Muertos"!!!! Así de rigurosos y "serios" son los apologistas extremos como D'Angelo. No me consta que Luis Labraña sepa la existencia de este blog, pero SI su amigo apologista D'Angelo

¿Hay pruebas que fueron asesinadas y desaparecidas 30.000 personas? ¿Existe evidencia de un número más alto de desaparecidos que los registrados por el Estado?? Fuentes de la posición innominada


Es necesario distinguir dos aspectos que se confunden: una son las pruebas de un número más elevado de desaparecidos o víctimas que el registro estatal, y la otra es el hecho que ese número se aproxime a 30 mil. En el segundo interrogante, el material documental y testimonial disponible no permite concluir que la cifra aproximada sea de 30.000 desaparecidos sino la de un número menor: 20.000 desaparecidos
Estos 20.000 desaparecidos abarcan un lapso temporal mayor: desde el año 1975 a 1984, aunque es de advertir que para el año 1979 la represión se encuentra casi totalmente desactivada, con remanentes que continuarían hasta poco después de la asunción de Alfonsín en el poder. Hay víctimas de la represión estatal anteriores a 1975 pero es a partir de ese año cuando las fuerzas armadas deciden llevar un cómputo más adecuado sobre los crímenes que cometían, deciden institucionalizarse sobre las operaciones. No obstante, algunas fuentes que veremos como la nómina de Etchecolatz, no tienen un "corte" temporal en 1975, sino que arrastran una huella represiva de años anteriores
20.000 víctimas de la represión, de las que menos del 10% eran combatientes de la guerrilla
La inexistencia de una lista completa con todos los nombres DE NINGUNA MANERA es una carta blanca para poner el número que se me da la gana como "30 mil". Cuando por ejemplo los historiadores académicos del holocausto estiman en 6 millones, no es porque la cifra de 6 millones les parezca más bonita que 10 millones, sino porque la evidencia documental/testimonial apunta a ese numerito. No es cuestión de repetir la filosofía barata que promueve el bobo de Martin Kohan de "son 30 mil porque se me salen de los huevos, total digo alguna pavada filosófica y se acabó". Se trata de argumentar EN SERIO. Después el que quiera rechazar la verdad, allá ellos. Aunque no pueden rechazarla con el facilismo de "no me gusta esa prueba porque no me convence o no me conviene, entonces no la acepto". Eso les gustaría a muchos negacionistas pero, no funciona así



Duelo de bobos: el ganso de Darío Lopérfido discute con el otro ganso de Martín Kohan. Pese a que esta respuesta de Kohan sobre la cifra se hizo viral en su momento, es una argumentación ridícula que en nada contribuye a explicar el tema del número de desaparecidos


El que pida la lista con nombre y apellido de los 30.000 desaparecidos (o 20.000), por favor haga fila y espere su turno, que yo pedí primero la lista con nombre y apellido de los 150 millones que dice Milei. Esperen su turno

En el segundo capítulo, hablaremos largo y tendido de esta problemática de las "listas con nombres" en las masacres mundiales, y el valor común de las fuentes innominadas entre ellas


Existe una suerte de mito en la sabiduría convencional, que señala que los represores no han hablado. Esto no es del todo cierto. Bueno, es verdad que la mayoría no habló, o que hablaron únicamente para su conveniencia (como el caso de Videla, quien a Ceferino Reato le contó que solo tenían planeado matar a 7 mil u 8 mil personas. Es obvio que Videla no iba a "confesar" nada públicamente). Pero hubo poquitos represores que SI hablaron. Y no estamos pensando en personajes menores, sino también figuras muy destacadas. Ellos han hablado y contado detalles. No muchos detalles, es cierto, han soltado poquita información... pero lo poquito que hablaron es suficiente y revelador sobre la cifra de desaparecidos. Hasta el mismo gobierno militar en su día ofreció minúsculos elementos de información pública, como el Documento Final, que analizaremos posteriormente su importancia

Ahora, hay algo muy importante que es obligatorio que a usted se le meta en el cerebro lo más pronto posible: muchas de las fuentes que vamos a mostrar, al margen de ser innominadas (esa cualidad se discutirá en el segundo capítulo), son fuentes que desestabilizan semánticamente el concepto de "desaparecido", porque refieren a personas que no denunciaron.... pero que no sabemos si están muertas, o si en cambio sobrevivieron y no quisieron denunciar ¿Cómo es esto? Siga leyendo y lo va a entender perfectamente. Pero desde ya aviso, que tendríamos que cambiar el vocablo "desaparecido" por otra palabra más taxativa al momento de abordar estos debates. No se puede debatir con conceptos imprecisos, y la palabra "desaparecido" es imprecisa para analizar esta problemática

Las pruebas documentales/testimoniales pueden referirse al número de víctimas a nivel nacional, como al número de víctimas en un determinado centro, en una determinada provincia. Las que no remitan a la cifra nacional, son pruebas cuyos números se suman para dar un aproximado a escala de todo el territorio. Por cuestiones de interés, empezamos por las fuentes más importantes para pasar progresivamente a las menos relevantes o la evidencia contextual, periférica

Algunas de estas pruebas son:

-En el año 1975, los militares incursionan en Tucumán a través del Operativo Independencia, con el objetivo de destruir el movimiento obrero azucarero tucumano, utilizando como pretexto la lucha contra 120 guerrilleros del ERP instalados en el monte. El Estado tiene aproximadamente casi 800 denuncias de desaparecidos, asesinados y sobrevivientes de aquel operativo hasta el 23 de marzo de 1976. En este enlace, la página CIJ (Centro de información judicial) indica 269 casos llevados para procesar a Videla por el Operativo Independencia en el año 2012:

https://www.cij.gov.ar/nota-10612-Lesa-humanidad--procesan-a-Videla-en-la-megacausa--Operativo-Independencia-.html 

Según la chica Ana Jemio que se dedica a investigar sobre este tema mucho mejor que yo, su base de datos consta de 769 casos de personas reprimidas antes del 24 de marzo, tal como lo dice en el siguiente video: 
https://youtu.be/VabC5YL7IYY?t=705 
Un "negacionista" entonces dirá que solo hubo 769 casos de la represión tucumana en 1975, porque esos fueron los "comprobados". Bueno, vamos a ver qué decía el mismo represor de ese lugar.......

El conductor principal de la represión, general Acdel Vilas (Adel Vilas su nombre real), sintió que su criminalidad era una labor patriótica y decidió escribir un diario de operaciones en 1977 donde narraba sus experiencias, pensamientos y tareas sobre la represión. Allí Vilas orgullosamente confiesa que se utilizaban métodos “no convencionales” (torturas) en los centros clandestinos de detención como parte de la “guerra de inteligencia” que él llevaba a cabo. Vilas y los militares en general llamaban a estos centros con la sigla L.R.D., que significa “Lugar de Reunión de Detenidos”, un eufemismo de los campos de concentración y exterminio

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(extracto del diario de operaciones de Acdel Vilas, máximo responsable del Operativo Independencia. Allí escribe que el guerrillero tarde o temprano se ablanda frente a la tortura en los LRD, y que los torturadores no quedan traumatizados por la misión asignada deviniendo en sádicos gratuitamente)


Pues bien, el máximo responsable de la represión tucumana en 1975 escribía sin ningún escrúpulo ni ánimo de ocultamiento lo siguiente:

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enlace al diario de campaña del represor Vilas (el fragmento que tomamos está contenido en el capítulo "Plan Táctico número 1", en el apartado "Los interrogatorios"):

https://web.archive.org/web/20031112080748/http://www.nuncamas.org/investig/vilas/acdel_00.htm 

Allí queda absolutamente demostrado que por el LRD de Famaillá pasaron 1507 personas, donde casi seguramente la mayoría de esas 1507 personas eran torturadas (Vilas confiesa en su libro que se interrogaba con métodos no convencionales en el LRD). Pero el Estado no tiene ni de lejos los nombres y apellidos de 1500 personas entre asesinados y sobrevivientes. Vilas no precisa cuál es el porcentaje de sobrevivientes de ese número de 1507 detenidos, pero es evidente que el Estado tiene más de 700 personas (sobrevivientes o muertas) sin registrar

Pero aún suponiendo que las más de 700 personas sin denunciar sean todas sobrevivientes, la prueba revelaría la existencia de una masa no despreciable de víctimas que no denunciaron, que es justo uno de los elementos que los "negacionistas" se empeñan en negar: que exista tanta gente que no denuncie, sobre todo con la posibilidad de obtener una cuantiosa suma de dinero como indemnización. Pues ya vemos que el "sentido común" ha fallado en este caso: existen esas personas en buen número

Este material se filtró a la prensa en el año 1986 y es citado en muchos libros. Asi que los negacionistas que no sabían de este dato, era porque no tenían ganas de saberlo
Esta es una fuente primaria porque proviene del máximo responsable de ese campo de concentración, del mismo comandante de ese centro de tortura y muerte. Nadie mejor que él sabe cuántos detenidos pasaron por ese centro. Por otro lado, es casi imposible que Vilas haya exagerado la cifra, por una serie de cuestiones: la exageración (en perjuicio suyo por ser el principal responsable) solo hubiese beneficiado a los organismos de Derechos Humanos, los cuales contaban obviamente con el repudio de Vilas. 

Vilas no exagera otros aspectos de su diario de operaciones como la calidad de los combates reconocidos (Pueblo Viejo; Manchalá; etc.), ni oculta hechos graves verídicos que lo comprometen como la tortura a los interrogados. Asi que no hay indicios razonables para suponer que justo Vilas quiera exagerar la cifra de prisioneros. Tampoco es factible creer que Vilas exagerara para impresionar a sus superiores, puesto que éstos estaban al tanto de los números de reprimidos que se llevaban a cabo

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(Acdel Vilas junto a Isabel Perón pasando revista a las tropas en Tucumán; Operativo Independencia 1975)


                                                                     (Acdel Vilas)



Jorge Rafael Videla junto a Acdel Vilas en Tucumán, 1975. Con ropas de fajina, Videla visita la zona de Famaillá durante el operativo anti extremista. 
En una entrevista con Ceferino Reato para su libro "Disposición Final", Videla niega la existencia de un número mayor de desaparecidos o siquiera la existencia de listas de desaparecidos.... pese a que Vilas se "auto-delata" en su diario y por consiguiente incrimina indirectamente a su superior Videla sobre el manejo de listados


Tampoco es posible que se equivocara de número al escribir, ya que el manuscrito original tiene correcciones (Vilas hubiese visto su error si se hubiese equivocado)


Y no nos confundamos: Vilas se está refiriendo en el pasaje aludido al centro de detención de la escuelita de Famaillá. El Operativo Independencia tuvo varios centros clandestinos, clasificados en transitorios y de reunión de detenidos (exterminio); cuya cabecera provincial era la escuelita de Famaillá, pero no era el único centro (el conventillo de La Fronterita también era un LRD pero emplazado en zona rural). Por consiguiente, no debe de considerarse que “1507” sea la cifra total de las víctimas del Operativo Independencia, sino la cifra total de la escuelita
Repetimos: el Estado tiene al momento unas 769 denuncias de desaparecidos, asesinados y sobrevivientes sobre el Operativo Independencia hasta el 23 de marzo del 76…… y el mismísimo represor principal de ese operativo, general Acdel Vilas, escribe en su diario de operaciones que solamente por la escuelita de Famaillá pasaron 1507 personas hasta el 18 de diciembre de 1975 (fecha en la que Vilas es reemplazado por Antonio Bussi)

Jurídicamente esta clase de fuentes entra en lo que, en Derecho Procesal Civil o Penal se denomina "Confesión simple" o "Confesión calificada". No vamos a explicar esto ahora, el interesado tiene en el siguiente anexo una explicación más jurídica del valor de esta fuente y de las otras que le siguen:

https://spineoff.blogspot.com/2020/06/anexo-valoracion-de-la-evidencia.html  

Recordemos el punto: con independencia del registro estatal, LOS MILITARES CONFECCIONARON LISTADOS DE DETENIDOS EN SUS PROPIOS CENTROS CLANDESTINOS, y tal como exponemos en este primer ejemplo, la cifra que tiene el represor Acdel Vilas es más alta que la registrada por el Estado. Obviamente los militares se hicieron los re boludos y jamás entregaron esos listados. Quizás algún día los encontremos, quizás no. Pero ese no es ahora el tema
También a esto me refería con la imprecisión del vocablo "desaparecido". Esta fuente primaria de Acdel Vilas, es totalmente irrefutable pero da cuenta de personas que no denunciaron..... que no necesariamente significa que estén muertas. Los organismos de DD. HH. tienen toda la legitimidad de reclamar información sobre qué sucedió con esas personas. Pero como esta clase de fuentes no especifican si las personas no-denunciadas fueron asesinadas o liberadas, entonces hablar de "desaparecidos" puede llevar a confusión. No obstante, de alguna manera hay que llamarlos, porque de lo contrario se podría generar la opinión contraria en los legos: creer que todas las víctimas de la represión denunciaron y no queda ninguno sin denunciar. Y esto no es así como acabamos de ver: hay más de 700 personas en Tucumán que no hicieron la denuncia, siquiera para adjudicarse su status de superviviente. No es poquito número: 700 personas sin denunciar en una sola provincia en un periodo muy chico de 1 año (1975)
Obviamente los apologistas como Laje, Márquez o Villarruel se hacen los tontos con estas fuentes, con independencia de si hablan de personas muertas o vivas. Da igual para ellos: si pueden ocultar estas fuentes bajo la alfombra, lo hacen
(esta fuente además desmiente el pretendido "negocio de los DD. HH.", ya que no se entiende por qué los organismos de DD. HH. no utilizaron esta fuente de Acdel Vilas para inventarse 700 sobrevivientes falsos que cobren indemnización. El hecho cierto que 700 personas no denunciaron, implica que los organismos derecho-humanistas no se aprovecharon de esta fuente para currar)
Es por ello que, aunque en este posteo sigamos hablando de desaparecidos por comodidad, debemos aclarar que el vocablo "desaparecido" es un misnomer (nombre erróneo para referirnos a la discusión). Ni los derechistas ni los izquierdistas se han molestado en corregir el concepto, que debiera incluir a aquellas personas sin denunciar de las que se desconoce su status de muerto o vivo

El espacio de la memoria Escuelita de Famaillá utiliza el diario de Vilas como una fuente legítima para calcular el número de detenidos: 
Este documental del canal gubernamental también se vale de la indiscutible fuente de Vilas (a partir del minuto 2:06): 

Aunque para ser más rigurosos, el documental se equivoca al afirmar que "muy pocos sobrevivieron". Lo más exacto es decir que no se sabe lo que ocurrió con las restantes personas que no fueron denunciadas

Si el canal 7 o el espacio de Memoria les parece muy "kuka", téngase en cuenta que la fuente de Vilas es demasiado conocida entre historiadores y periodistas, que hasta Jorge Lanata la menciona en su libro "Argentinos: Tomo 2" en la página 356 (pag. 230 del siguiente PDF):


O el historiador Marcelo Larraquy: 

Incluso en este informe sensacionalista de Chiche Gelblung de los años 90 contrario a la guerrilla, menciona la cifra de 1.500 personas de Vilas "acusadas de mantener relación estrecha con el enemigo". Minuto 10:30:


No es una fuente "novedosa" o desconocida.... salvo para los olvidadizos apologistas que jamás mencionan esta fuente de Vilas

Testimonios de 2 sobrevivientes (de los 1507 detenidos) del “Lugar de Reunión de Detenidos” de la escuelita de Famaillá:




-Miguel Osvaldo Etchecolatz publicó su libro “La Otra Campana del Nunca Más” en el año 1997. En su libro adjunta esta nómina de cadáveres NN de Buenos Aires, fechado por año. La nómina no refleja los desaparecidos de centros de detención como ESMA y Campo de Mayo, porque se cita a muertos sepultados (en ESMA/Campo de Mayo los arrojaban al mar)

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Centrándonos en el periodo de la dictadura, observamos años como el de 1979 y 1982 donde se computan más cadáveres que todos los que el Estado ha registrado. El Estado enlistó 125 desaparecidos y asesinados de 1979, cuando en la nómina de Etchecolatz hay más del doble de cadáveres. El Estado tiene solamente 7 denuncias del año 82, mientras la nómina de Etchecolatz tiene unos 46 cadáveres. Es cierto que el mismo Etchecolatz advierte un porcentaje de muertos por otras circunstancias ajenas a la represión (“no todos los N.N. de figuración en la nómina se deben a integrantes o simpatizantes de las huestes terroristas”), como así también puede haber en los cómputos un porcentaje de prisioneros secuestrados años antes de su asesinato y enterramiento como NN (esto no perjudica los años previos al 75). Pero incluso aplicando un generoso margen de error continúa superando al Estado

enlace al libro escrito por Etchecolatz:

https://es.scribd.com/document/375764380/La-Otra-Campana-Del-Nunca-Mas-Crio-Grl-M-Etchecolatz 
Si los cadáveres computados del año 1971 a 1974 fuesen correctos, es ostensible que superan lo registrado por el Estado, pues el Estado tiene menos de 250 denuncias anteriores a 1975 y tal como contemplamos en la nómina hay muchos más

En la página 13 del siguiente listado del RUVTE, observará un cuadro con la cantidad de denuncias de desaparición y asesinato recepcionadas por año en la totalidad del país. Del año 1979 hay 125 casos, y del año 1982 unos 7 casos; esto contrasta con la nómina de Etchecolatz solo en Buenos Aires:

https://www.argentina.gob.ar/sites/default/files/2._anexo_i_listado_de_v_ctimas_de_desap_forzada_y_asesinato-investigacion_ruvte-ilid.pdf 



Gráfico del RUVTE con las desapariciones individualizadas por año  

Demos un ejemplo sobre el margen de error: el Estado tiene 16 muertos y desaparecidos para 1971, cuando en la nómina del represor hay 288. Suena bastante exagerado los datos de Etchecolatz y muy probablemente muchos no sean "subversivos"; no obstante para compatibilizar con el Estado el margen de error de la nómina tendría que ser del 94,44%, lo que también sería absurdo y no coincide con el objetivo de presentar "cadáveres de subversivos no identificados" enterrados por la propia policía de Bs. As., ni tampoco coincide con la noción de "si basamos las fechas con los enfrentamientos armados, se estaría indicando un elevado porcentaje de coincidencia". Aplicando así un muy razonable margen de error del 70% para los años menos "duros", supera al Estado. Del año 1979, aun aplicando un margen de error del 40 o 50%, supera lo registrado al Estado (y no olvidemos que estamos indicando las cifras del Estado EN TOTAL, mientras la nómina de Etchecolatz se circunscribe a Buenos Aires solamente). A la fecha en que escribo este artículo, el señor Miguel Etchecolatz todavía se encuentra con vida. He intentado comunicarme con Etchecolatz para preguntarle sobre los datos de la nómina en los años anteriores al 75, pero las medidas de seguridad que pesan sobre su persona en la cárcel vuelven prohibitivo un contacto fluido con él (tampoco hay certeza que Etchecolatz quiera hablar sobre el tema o decirme la verdad al respecto, o siquiera si se acuerda de lo que adjuntó en su libro) 



En este polémico programa de Mariano Grondona de 1997, el represor Miguel Etchecolatz presenta su libro "La Otra Campana del Nunca Más" que intenta refutar a la CONADEP; y se enfrenta a Alfredo Bravo, una víctima del gobierno militar que sufrió torturas por parte de Etchecolatz y fue liberado de los centros clandestinos gracias a la presión internacional. En el programa, el represor Etchecolatz asegura que su libro está "poseído" por la verdad, y nos invita a leerlo. Bueno, en ese libro se encuentra publicada la nómina de cadáveres de "subversivos" sepultados por la policía de Buenos Aires.... en ese libro poseído por la verdad y que ahora es una prueba en contra del represor y reveladora de la cifra de desaparecidos


De nuevo, se trata de una fuente primaria. Quien la promueve es un represor del que nadie puede acusar que se auto-incrimina o perjudica a las fuerzas de seguridad a propósito para beneficiar a las Madres de Plaza de Mayo. Esto no significa que sea una fuente perfecta (debe aplicarse un margen de error para ser adecuado; su contabilización de muertos previo a 1975 es inédita en comparación con la restante evidencia de esos años), pero esas trabas de ninguna manera le restan todo valor probatorio. Esta nómina se presentó en el juicio de 1986 a Etchecolatz, antes de ser beneficiado por las leyes de Alfonsín. Esto es sintomático de su credibilidad como fuente, puesto que los jueces y fiscales podrían haber ordenado la correspondiente investigación sobre los cadáveres al presentar Etchecolatz esa nómina como defensa en el juicio

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(Miguel Osvaldo Etchecolatz, tanto en situaciones familiares como judiciales. En una de las fotos está leyendo su propio libro “La Otra Campana del Nunca Más” que contiene la nómina que vimos sobre los cadáveres NN)


El total de cadáveres sepultos en la nómina durante los años 1975 a 1983 es de 1438 cuerpos. Por su parte, el represor Ramón Camps, en enero de 1983 le concedió una entrevista a un periodista español, y  le detalló en una conversación que no debía ser publicada (pero el periodista le traicionó y la publicó) la cantidad de cuerpos sepultados tanto NN como identificados. Los cuerpos identificados los sitúa en aproximadamente 860 cuerpos

https://seniales.blogspot.com/2015/05/el-informe-de-la-dictadura-que-guarda.html 
Camps no especifica si corresponden todos a Buenos Aires, aunque hay presunción que se refiere a la totalidad del país como más adelante veremos

Por cierto, Nicolás Márquez leyó, o tuvo que haber leído, el libro de Etchecolatz. En el siguiente artículo escrito por Márquez, lo menciona en la fuente 11: 


Ya que Márquez leyó ese libro, me parece que debería ser el primero en explicarnos cómo refutar la nómina del represor, si es que puede refutarla o demostrar su invalidez. Lo esperamos


Miguel Etchecolatz en octubre de 1986, siendo juzgado en la Causa 44. En este juicio el represor presentó esa nómina que luego adjunta en su libro. Como fiscal del caso se encuentra Julio Strassera


-En el año 2005 se encontró en la provincia de Córdoba una carpeta titulada "Registro de extremistas" junto con unos negativos con 130.000 fotografías del D-2, el departamento de policía de la provincia que funcionó desde 1974 hasta 1978 como centro clandestino. El registro de extremistas comienza su derrotero desde los años 60 (!), pero es a partir del periodo de los 70 (el periodo que interesa a este posteo) donde se incrementa el número de prisioneros; más específicamente a partir de 1973 en adelante cuando el D-2 adopta progresivamente métodos más clandestinos de detención como golpes, capuchas, "submarinos", etc. De las fotografías halladas, tenemos los siguientes ejemplos:







De los años 70, aparecen en las fotos prisioneros que serían posteriormente desaparecidos. El fotógrafo incluso capturó imágenes "fuera de foco" que revelan parcialmente el procedimiento represivo, como el caso de un agente sosteniendo la venda a una detenida, o un prisionero al lado de su carcelero sosteniendo la ficha de prontuario, o un detenido fotografiado todavía vendado antes de quitársela para la foto policial. Estas fotografías, junto con una carpeta incompleta encontrada en el lugar titulada "Registro de Extremistas" da cuenta que los detenidos eran registrados, que existe material no descubierto sobre el tema, que existen listas confeccionadas detalladas. 

El registro encontrado consta de 5.561 asientos con nombres de detenidos políticos "legales" o "liberados" y otros desaparecidos desde 1960 hasta mediados de 1977. Aunque algunos de estos asientos están repetidos porque hubo prisioneros detenidos más de 1 vez. Como sea, el Estado no tiene, que se sepa, todas las denuncias de esas personas detenidas clandestinamente a partir de 1973 para ser encapuchadas, atormentadas y/o fotografiadas en el D-2 

El registro hallado está incompleto, por lo que el número de detenidos clandestinos es superior; aunque imposible cuantificar los que faltan: solo se encontró esa carpeta, las demás no se encontraron


-Otra prueba, bastante menos espectacular en la cifra que las anteriores pruebas pero que igualmente revela un número desconocido de desaparecidos, tiene que ver con el libro "Yo Fui Vargas: el antiterrorismo por dentro" escrito en 1995 por el capitán de ejército y torturador del L.R.D. de La Perla, el señor Héctor Vergez. Este hombre relata en uno de sus párrafos, la hazaña conocida como "La Noche de los Moncholos", ocurrida en los días 7 y 8 de enero de 1976, donde el Comando Libertadores de América (un émulo de la Triple A en Córdoba y que era comandada por Vergez) secuestró a decenas de militantes tanto de Montoneros como de la JUP (Juventud Universitaria Peronista) para enviarlos al campo de concentración de La Ribera a torturarlos y asesinarlos. El Estado en los juicios llevados en curso tiene solamente a 21 personas registradas de esa masacre ¿Y qué es lo que escribe el torturador Vergez en su libro? Este es el párrafo de su libro:
"En plena democracia, el apoyo oficial de la Gobernación no obstaculizó, en ningún aspecto, el proyecto [de secuestros]. Apenas celebrados los festejos de reyes, el 7 y el 8 de enero ejecutamos la fulmínea operación. Mediante allanamientos cronométricamente calculados, en cuarenta y ocho horas detuvimos a cuarenta y ocho delincuentes terroristas; prácticamente, como promedio, un subversivo montonero por hora"

21 víctimas registradas por el Estado versus 48 víctimas contabilizadas por Vergez, quien estaba a cargo de ese operativo. Es decir, más de 1 víctima por asesinado no ha sido registrada por el Estado

en el siguiente link, está la megacausa judicial "La Perla". Los jueces mencionan el libro, mencionan el párrafo que nosotros reseñamos, y mencionan el episodio de "La Noche de Los Moncholos" donde la cantidad de víctimas registradas es de 21, bastante lejos de los 48 sindicados por Vergez. En el siguiente enlace, en las páginas 1387 y 4155

https://www.cij.gov.ar/adj/pdfs/ADJ-0.964064001477324616.pdf 

Aunque Vergez quiso deshacerse de la autoría del libro en tiempos de juicio, ya era tarde: su nombre figuraba en la Dirección Nacional de Derechos de Autor (tal como explican los jueces en la megacausa), lo que significa que se tuvo que tramitar el libro con la documentación correspondiente para acreditar autor; por lo que es incuestionable la autoría del torturador en ese libro



A la izquierda, la portada del libro "Yo Fui Vargas" escrito por el jefe del Comando Libertadores de América y torturador de La Perla, el capitán Héctor Vergez (a la derecha, en los actuales juicios de lesa humanidad)


(Como curiosidad, en la siguiente entrevista, cuando el periodista le preguntó al torturador Vergez por qué se abrió La Perla, éste contesta que se abrió para evitar que la policía esté metida, pero también porque La Ribera le quedaba "chico"

https://enredaccion.com.ar/hector-vergez-confesiones-de-un-capitan-indecente/   

)


Héctor Vergez en entrevista a Crónica, niega la autoría de su libro "Yo Fui Vargas" (minuto 5:07)


-En el año 2010, un sobreviviente de los centros de detención de Tucumán, aportó en un juicio de Lesa Humanidad una serie de documentos que pudo rescatar de la policía tucumana en la época del gobierno militar, donde se enlistaban las víctimas y su destino final: libertad; a disposición del Poder Ejecutivo; o “DF” que significa “Disposición Final”, un eufemismo del asesinato. Un repaso superficial a estas listas advierte la existencia de algunos nombres con su categoría DF que no aparecen en el registro del Estado

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Hay al menos cuatro nombres de personas en DF que no las tiene contabilizadas el Estado. Estas personas son: Obed Esteban Paredes Mejías; Luis Pablo Díaz; Mario German Linares Fernández; Jorge Sixto Corralan. Como curiosidad, Ceferino Reato en su libro “Disposición Final” menciona estas listas

https://books.google.com.ar/books?id=yRykCwAAQBAJ&pg=PT53&lpg=PT53&dq=disposición+final+195+de+los+293+nombres&source=bl&ots=7uSg9ftn9M&sig=ACfU3U2JOkd0LqCIF9-WDXjg00xnRjNCbA&hl=es&sa=X&ved=2ahUKEwjH3OPivsTqAhWMIbkGHTtlBZ8Q6AEwAHoECAoQAQ#v=onepage&q=disposición%20final%20195%20de%20los%20293%20nombres&f=false 

pero no se percata de la existencia de personas que el Estado no las registró y que aparecen aquí con el DF (eso derriba el dogma de Reato que únicamente cuenta la lista estatal)

En este artículo de prensa tienen el detalle de incluir las hojas con los nombres para que podamos revisarlas: 
Pero lo más importante ni siquiera son los muertos. Los listados rescatados se componen de 195 personas en "DF" y 98 liberadas. Según la investigación de la Fiscalía Federal de Tucumán, de esas 98 personas sobrevivientes, unas 55 no denunciaron su status de superviviente. Pag. 5-6:


Ya no se trata que haya muertos sin denunciar, sino que hay sobrevivientes sin denunciar


O está el caso del listado fotografiado en la ESMA (aunque perteneciente a otra fuerza secuestradora distinta a ese centro clandestino), en el que aparecen nombres como el de Ana María Cassuchi


pag. 30: 


Estas fuentes, al igual que el registro de extremistas, son nominadas (o parcialmente nominadas), es decir contienen el nombre y apellido (aunque no contengan otros datos como el número de cédula)


-El documento de Enrique Arancibia Clavel: Clavel era un espía chileno que, en el marco del Plan Condor, tuvo contactos muy importantes con el ejército argentino durante la represión militar, a tal punto que Arancibia Clavel pudo entrar a un centro clandestino argentino, el Club Atlético, para torturar a dos prisioneras chilenas en el plan de coordinación de los países (solamente las personas autorizadas por las máximas jerarquías de la represión argentina podían entrar a un centro clandestino, lo que demuestra que Arancibia Clavel no era un cualquiera). Sin embargo, Clavel espiaba a los argentinos para mandarle información a la DINA (Dirección de Inteligencia Nacional de Chile, la policía secreta del gobierno de Augusto Pinochet). Fue descubierto por el gobierno argentino y arrestado, y los documentos o reportes que enviaba a la DINA quedaron incautados por la policía argentina. Años después, estos reportes saldrían a la luz. Uno de ellos, el más famoso, señala que desde 1975 hasta mediados de 1978 hubo 22.000 personas entre muertos y desaparecidos, en lo que sería una cifra a nivel nacional

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¿Cómo obtiene Arancibia Clavel esta información? Se la provee el Batallón 601 de Inteligencia. No hay probabilidad razonable de creer que el Batallón exagere a propósito el número de sus crímenes para sí mismo (recordemos que Clavel obtuvo la información en tareas de espionaje). Por consiguiente, estamos nuevamente con una fuente primaria. Tampoco hay probabilidad razonable que Arancibia Clavel haya falsificado el número, porque el documento no era propagandístico sino información que le transmitía a la DINA

https://es.scribd.com/document/343170701/Documento-de-la-DINA-que-computa-22-000-victimas-del-terrorismo-de-Estado-en-la-Argentina 
Esta fuente sin embargo tampoco es perfecta: hay indicios para suponer que la palabra “desaparecido” podría comprender a los sobrevivientes. Por ejemplo, Clavel anota en un informe que Mariano Grondona estuvo “desaparecido” por 3 días, refiriéndose al extraño episodio en el que el periodista estuvo secuestrado brevemente en Automotores Orletti pero sin hacerle daño:

https://www.pagina12.com.ar/2000/00-11/00-11-12/pag18.htm 

El reporte de Clavel no es seguro acerca de si en el número de 22.000 se computan sobrevivientes también (el registro estatal de víctimas del Terrorismo de Estado sitúa el número de supervivientes en 3400 aproximadamente). El otro desperfecto es que 22.000 es un número redondeado, no sabemos si el número real es levemente superior o levemente inferior a 22.000 (los redondeos también se hacen presente en documentos nazis). Pese a todo ello, no hay motivos racionales para rechazar esta fuente
Si el número de Arancibia Clavel contuviera a los sobrevivientes, entonces a esos 22.000 habría que restarle 3.400 sobrevivientes (total: 18.600 aprox.). En este link, en la página 9 letra chica, el Estado computa unos 3432 personas liberadas en la represión 1970-1983:

https://www.argentina.gob.ar/sites/default/files/2._anexo_i_listado_de_v_ctimas_de_desap_forzada_y_asesinato-investigacion_ruvte-ilid.pdf  
El número de Clavel también puede abarcar los enfrentamientos del ejército contra los guerrilleros o militantes (me refiero a los enfrentamientos "reales", los que no fueron fraguados)
Otra cosa a destacar, es la posibilidad que el número de 22.000 comprenda la contabilización de algunos muertos por la guerrilla. Esto lo digo porque previo al párrafo de Clavel donde habla de 22 mil, el represor Clavel adjunta una pequeña lista de muertos y desaparecidos por razones políticas del año 1976, y aparecen hechos atribuidos supuestamente a grupos como Montoneros. Para luego informar el represor Clavel que consiguió las listas en el Batallón 601 y blah blah todo lo que ya sabemos de los 22 mil 
De todas maneras, el mismo gobierno militar en el libro publicado en 1979 "El Terrorismo en la Argentina" le adjudica a la guerrilla menos de 700 muertos. Por lo que en términos "netos", la cifra sobrante es de 21.000 casos  de represión por parte de la "derecha" y el Ejército, si suponemos que se contabilizaron todos los muertos por la guerrilla en el número de 22 mil


El documento de Arancibia Clavel, asi como demuestra que las víctimas de la represión supera a lo que dicen los apologistas, por otro lado demuestra que los desaparecidos no llegan a 30 mil. El documento culmina su intervalo temporal a mediados de 1978, cuando la represión estaba disminuyendo. Después del 78, hubo pocas desapariciones. Eso significa que el número de víctimas totales desde 1975 a 1984 sin dudas es un poco mayor a las 22.000 que computa Clavel para mediados del 78, pero que no llegan a 30.000 ni siquiera a las 25.000 

*Aclaraciones sobre este documento y el artículo de La Nación: en el año 2006 se escribió el siguiente artículo para La Nación titulado "El ejército reconoció 22.000 crímenes":
Es un artículo bastante conocido y difundido por los sectores "progres" que desean contra-argumentar el negacionismo. Sin embargo, la nota periodística comete un par de errores. La historia "real" es la que conté más arriba: a Arancibia Clavel lo arrestaron en 1978, y la policía argentina le incautó los informes que el espía le enviaba a sus superiores chilenos. Después salieron a la luz esos informes; más precisamente la periodista chilena Mónica Gonzalez tuvo acceso por primera vez en 1987, o sea 9 años después que la policía secuestrara esos documentos. El ejército argentino no "admitió" 22 mil crímenes como sugiere el título marketinero, sino que esa cifra surge de la fuente del Batallón 601, de la que el espía era un contacto y obtiene la info. Clavel simplemente se limita a pasar el número de desaparecidos a sus superiores. El informe ni siquiera se desclasificó gracias a Estados Unidos, sino que en el juicio a Arancibia Clavel por el caso Carlos Prats, la fiscalía en el año 2000 (6 años antes del artículo de La Nación) ya presentó esos  documentos como un modo de probar los vínculos de Clavel con la DINA y el Plan Cóndor. Estados Unidos no tiene nada que ver en esta historia


Este es Arancibia Clavel (derecha), el que espiaba a las fuerzas armadas argentinas y mandaba informes a sus superiores chilenos. El que escribió ese "famoso" informe contando a sus superiores sobre los 22.000 desaparecidos. Fue sentenciado a prisión perpetua por la Justicia argentina a principios de este siglo por el asesinato del general Carlos Prats, y luego sentenciado a 12 años por el secuestro y tortura de dos chilenas en el centro clandestino argentino de Club Atlético. Salió en libertad posteriormente por el beneficio del 2x1. Lamentablemente ya no se puede pedirle entrevista, pues fue asesinado en el año 2011 por dos Taxi boys que le robaron dinero mientras estaba en su casa. Si, muy bizarro (en el sentido anglosajón del término)

Lo que ocurrió después, es que el periodista estadounidense John Dinges obtuvo ese juego completo de documentos de Arancibia Clavel, y el Archivo de Seguridad Nacional de la Georgetown University tal vez haya fotocopiado o subido a internet el informe; pero eso no significa que los estadounidenses "desclasificaron" el documento como erróneamente entiende el escritor de la nota. Fuera de todos estos errores minúsculos en la nota de La Nación, el informe de Clavel es válido como evidencia, porque proviene de una fuente autorizada como el Batallón 601 que centralizaba los datos de detenidos. Y tampoco es la única prueba de 20 mil represaliados, como veremos ahora

-Otra prueba del número a nivel nacional proviene del general de brigada Ricardo Flouret, quien comenta en una conversación de embajada estadounidense a inicios de 1979, que hubo 20.000 vidas que se tomaron en la “batalla” (la “guerra” contra la subversión) para salvar al país ¿Quién es Flouret? En los tiempos de dictadura, fue funcionario de Ministerio del Interior y asistía como una suerte de "secretario técnico" del presidente Videla (de acuerdo al testimonio de Emilio Mignone quien lidió con él). Ya con lo primero, se presupone lógicamente que su acceso a la información era muy alto. Nuevamente, se trata de una fuente primaria. Flouret también participó en la represión del Operativo Independencia, no era un cualquiera
No hay probabilidad razonable que Flouret esté exagerando la cifra: recordemos que Argentina enfrentaba serios problemas de cara a Estados Unidos con el tema de los Derechos Humanos (precisamente es por esos conflictos que la hoja conlleva el apartado “Human Rights”, ya que era parte de la agenda de conversación que debía realizarse). Si los desaparecidos fuesen menos ¿Qué sentido tiene exagerar el número en ese contexto?? Además Flouret dice otras cosas que se pueden comprobar como ciertas, por ejemplo la reducción de la represión a mitad del 78, o su participación en Tucumán

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El número de Flouret prácticamente coincide con el de Arancibia Clavel en los 20 mil, revelando el origen común de la información (el ejército argentino y sus registros), acrecentando su valor probatorio
Otra prueba que demuestra un número mayor a lo que desean los apologistas, pero menor a 30 mil

Esta hoja forma parte de los archivos desclasificados de Donald Trump del año 2019. La encuentra en el PDF titulado "Political - Conversations with Argentine Leaders" de la sección "Argentina - Department of Defense (Defense Intelligence Agency Part 2)" del siguiente link

https://www.intelligence.gov/argentina-declassification-project/records 

Tal vez alguno se pregunte ¿Por qué Flouret fue sincero? ¿No le convenía mentir en esa conversación? ¿Qué sentido tiene ser honesto en ese contexto? Es una pregunta interesante que no tiene respuesta. Pero es inconsecuente. Desde la lógica de la no-contradicción, no existe el concepto de “no mentir” y “no decir la verdad” al mismo tiempo. Alguna de las dos cosas tiene que hacer: o mentir, o decir la verdad. Y si dejamos en claro que no hay indicios racionales para que mienta, entonces tiene que estar diciendo la verdad. De lo contrario, no solo nos adentraríamos a una contradicción lógica, pero es que además estaríamos fantaseando con un ideal epistemológico sobre la mentalidad perfecta del criminal, en donde éste nunca confesaría sus delitos. En el mundo real no existe tal abstracción: no es descabellado que un asesino mienta pero tampoco es imposible que diga la verdad, incluso si no le beneficia (caso Flouret o Vilas) ¿Puede decir una verdad a medias? Si, pero nos enfrentamos de nuevo al problema de una cifra mayor a lo que tiene el Estado


Me olvidaba, que en este informe de Amnistía Internacional de 1976 lo mencionan a Flouret, como uno de los funcionarios del Ministerio del Interior que mantuvo conversaciones con el organismo internacional. Allí Flouret niega que se torture en la Argentina (si.... cómo no). Pero bueno.... como para que vean que no les miento y que Flouret era un funcionario de cierta importancia en el gobierno militar para entonces. Página 8 y 49 por ejemplo:


En este testimonio sobre un conscripto desaparecido durante el Operativo Independencia, se vislumbra el papel lamentable que cumplía Flouret engañando a la familia del desaparecido, inventando pavadas sobre la suerte real de su familiar:


Por cierto, el ex-SIDE Juan Bautista "Tata" Yofre lo considera a Flouret como un amigo:


Sería interesante preguntarle a Yofre qué opina de lo que dijo su amigo en 1979 en esa hojita: "Las 20.000 vidas tomadas en la batalla han sido necesarias para salvar el país"; palabras que no requieren una interpretación demasiado retorcida para entender a lo que se refiere 

¿Y los apologistas como Ceferino Reato qué van a decir? No pueden decir nada; menos Reato que en sus libros decide creer en declaraciones como las de Roberto Perdía (segundo jefe de Montoneros). Asi que Reato no puede quejarse que yo le crea a Flouret. La diferencia en todo caso es que lo mío es una fuente primaria, en cambio lo que utiliza Reato no siempre lo es 

-La clave numérica asignada a los prisioneros: en centros clandestinos muy importantes como ESMA; Club Atlético; La Perla o Campo de Mayo, los prisioneros eran numerados. Y esa numeración era correlativa, por ej. si cuatro personas eran enviadas a ESMA, le asignaban a una persona la clave “01”, a la otra la clave “02”, a la tercera la clave “03”…. y así sucesivamente. Este sistema no es muy diferente a otras instituciones concentracionarias. Yéndonos a ejemplos de otros gobiernos represivos, los nazis utilizaron el sistema de numeración correlativa en campos de concentración como Auschwitz. La diferencia con la dictadura argentina es que los nazis le tatuaban los números a los prisioneros, mientras para el caso argentino los carceleros le transmitían oralmente el número al detenido, quien debía de memorizarlo so pena de sufrir las consecuencias
Gracias a este sistema, los sobrevivientes contaron cuál era la clave que le dieron a ellos y a otros que desaparecieron. Y se puede establecer aproximadamente la cifra de prisioneros en los centros a través de la inferencia lógica de la correlatividad. En Club Atlético por ejemplo, disponemos de esta tabla con el código alfanumérico construído por los testimonios de sobrevivientes: los carceleros asignaban una letra fija seguida de un número sucesivo, y cuando llegaban a 100 detenidos aproximadamente se cambiaba la letra y reiniciaba el conteo para los posteriores secuestrados

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En la página 1124 de la siguiente causa judicial, tenemos el cuadro alfanumérico sobre Club Atlético:

https://www.cij.gov.ar/nota-14634-Lesa-humanidad--el-juez-Rafecas-elev--a-juicio-oral-una-causa-por-cr-menes-en-Atl-tico--Banco-y-Olimpo.html 


No están todos, por ej la víctima Carmen Lapacó recibió el código F50:
Las chilenas torturadas por Arancibia Clavel en Club Atlético, obtuvieron las claves K52 y K53
El código alfanumérico E57 no aparece en la tabla, sin embargo la sobreviviente Susana Stremiz relata que durante su cautiverio llamaron a un prisionero al lado de su celda con ese código para llevarlo a la sesión de tortura (véase causa judicial)


Ana María Careaga, sobreviviente del CCD "Club Atlético", testimonia sobre el cambio de nombre por un código alfanumérico (minuto 6:36)

La planilla no se encuentra exenta de detalles incongruentes propios de un caos circulatorio de los represores hacia los detenidos, que nunca lo sabremos porque no hemos estado ahí. Estamos hablando del caso que algunos números que deberían ir antes, van después; o letras que reaparecen bruscamente. Pero salvando esto, la numeración es correlativa en su mayoría, no azarosa; no debe alegarse que esta sea una prueba endeble. Algunas letras se presumirán más endebles que otras, pero el nivel de "casualidad" es elevado
(En el siguiente enlace, se reafirma que los números no serían azarosos, porque tres prisioneros del centro de detención Club Atlético, reciben en conjunto las claves “K33”; “K34”; “K35”. Por otro lado, una mujer recibe la clave “H26”, y su marido secuestrado horas antes, recibe la clave “H23”
Uno de los correlatos queda trunco. Se trata de la letra “A”, que es interrumpida por la continuidad de la letra “M” posterior al número 100. Debemos desechar por consiguiente esa letra
Entre todas las letras que se asignaron (con excepción de la “A”), tenemos 13 letras. Si cada letra llegaba a los 100 prisioneros (en algunas letras a más de 100), son 1300 prisioneros en total. Aunque en la tabla no aparecen todas las letras que se asignaron

*Curiosidad: el detenido que recibió la clave A-01, Marco Bechis, sobrevivió al centro clandestino y más tarde filmó la conocida película "Garage Olimpo", que narra el derrotero que sufre una desaparecida en este centro. Tal vez a modo de "homenaje", el jefe del campo de concentración le asigna a la protagonista la clave A-01

En La Perla, la clave numérica correlativa se aplicaba con series de 400 números:
Aunque en ocasiones superaban los 400, como el caso de Carlos Pussetto, que tenía el número 538:
Más específicamente, las claves de La Perla se dividían en series de números que llevaron también una letra como prefijo al reiniciar
En el juicio a las juntas, la testigo Cecilia Suzzara es interrogada por el fiscal Moreno Ocampo (ayudante del fiscal Strassera) acerca de la numeración en el centro clandestino:
-Moreno Ocampo [dirigiéndose al juez Gil Lavedra]: Si, ella [la testigo] señaló que cuando llegó [al centro] le dieron el número "80". [Le pregunto] Si puede calcular hasta qué número llegaron, en el tiempo en que estuvo en La Perla
-Juez Gil Lavedra [a la testigo]: ¿Conoce usted esta circunstancia?
-Testigo: No lo recuerdo precisamente [...] porque después empezaron otra vez de 0, pero agregándole las letras "A" y después "B", creo que llegaban hasta el número 500 cada una de estas listas. 400 o 500, o sea terminaban la numeración en 400 -no estoy muy segura-, y después empezaban en "1 A" 
-Juez Gil Lavedra: ¿Y sabe usted hasta qué letra llegó?
-Testigo: me acuerdo de "A" y "B" y nada más
pag. 19:

La sobreviviente Suzzara fue liberada aproximadamente en abril de 1978, después de ser secuestrada el mismo 24 de marzo de 1976. Las claves que ella escuchó y se acuerda entonces fueron: la clave simple sin letra, la clave con la letra "A" y la clave con la letra "B"
Los sobrevivientes coinciden en que la numeración "A" comenzó a partir de fines 1976-principio 1977, como el caso de Teresa Meschiatti
y por lo que recuerda Suzzara, se llegó por lo menos a la letra "B". Es decir, desde 1977 en adelante al menos otras +400 personas estuvieron en el LRD La Perla. El RUVTE no tiene 400 muertos desde 1977, pag. 23: 
ni tampoco hay tantos sobrevivientes que denunciaran, para alcanzar esa cuota (pag. 25):
Al respecto, el prisionero Héctor Teodoro Kunzman, secuestrado a fines de 1976 y obligado a trabajar en las oficinas de los represores en La Perla, dice sobre el trayecto de 1977 en adelante:
De quinientos casos de los que yo he escuchado, solo dos casos no pasaron por la sala de torturas
Evidentemente hay detenidos (muertos o sobrevivientes) que no denunciaron. Probablemente el año 77 no haya tenido más de esos 400 prisioneros de la numeración "A", por ser un año más "tranquilo" a diferencia de 1976; según cuentan los sobrevivientes. Lo que resta conocer entonces, es cuántos detenidos hubo en el lapso 1976-1977. Teresa Meschiatti testimonia que a ella, secuestrada el 25 de septiembre de 1976, le dieron la clave "400" justo. Dice que "evidentemente yo conformo una segunda tanda", en alusión que ya hubo otra serie de 400 secuestrados anterior a la de ella; pero no explica cómo lo sabe o cómo lo fundamenta
Llegados a este punto, nos encontramos con el siguiente problema para la investigación de este blog: no hay un relevamiento público de las claves numéricas en La Perla, tal como ocurre en la causa judicial de Club Atlético o aún la de la ESMA, que si bien son incompletos estos registros (ya que solo se asientan los que participan en juicio o de acuerdo al testimonio de quienes se desempeñan en la causa); son una base para la investigación. De La Perla, en la causa judicial, que nosotros sepamos no se hizo el relevamiento de claves numéricas 
Probablemente el Archivo de la Memoria de Córdoba tenga la información que permite relevar las claves numéricas que recibió cada detenido. Pero lamentablemente eso ya no está al alcance de quien escribe este modesto blog. Como sucedió con otras personas o instituciones, he intentado comunicarme con el Archivo Córdoba para este asunto de las claves numéricas. Pero no me dieron mucha bolilla. El único modo de obtener los datos seguramente es ir directamente al Archivo, pero de nuevo: eso no está a mi alcance
Pero como prueba de verosimilitud, uno de los tenientes que participó de la represión ilegal en Córdoba, Ernesto Barreiro, jefe torturador de La Perla, aparece mencionado en un legajo militar para recibir la correspondiente felicitación de su superior por la labor realizada. En dicho legajo, el torturador expresa que participó de 697 "operaciones" desde marzo a diciembre de 1976. Pag. 295-297: 
Es significativo en principio, puesto que en Córdoba hay menos de 460 muertos y desaparecidos en el lapso marzo-diciembre de 1976. Pag. 23: 
Y aún si sumamos los 138 sobrevivientes de La Perla del periodo 76-78 que consigna la causa Acosta, tampoco llegamos a las 697 operaciones que el propio represor Barreiro escribe en su legajo desde marzo a diciembre de 1976
Barreiro cuenta que participó de 697 operaciones en el marco de una lucha "encubierta" "no convencional". Aunque no lo menciona en la oración, es evidente que no iba solitario a operar, sino acompañado de un grupo. Pero como sea,  no era el único grupo de Córdoba para secuestrar, detener, atormentar...... y "solo" ese grupo ya estuvo implicado en 700 operaciones antisubversivas 


Importante lección para aprender: si vas a cometer crímenes, no seas tan estúpido como Acdel Vilas o Ernesto Barreiro de "escribir" tus hazañas, porque puede ser utilizado más tarde como prueba en contra. El teniente Ernesto Barreiro (foto), prominente torturador del centro clandestino La Perla, en un legajo militar escrito en 1977 para recibir un ascenso, cuenta de propia mano que participó de 697 operaciones antisubversivas (léase secuestros/torturas) desde marzo a diciembre de 1976 


Una prisionera secuestrada en La Perla el 23 de marzo de 1976 (un día antes del golpe), tenía el número 77; sus dos hermanos los números 74 y 75
Elmer Fessia, enviado a La Perla el 26 de marzo de 1976, testimonia que recibió el número 104. O sea que en 3 días pasaron unas 28 personas por el centro clandestino (9 personas por día aprox.). Pag. 28: 

Más adelante veremos el testimonio de Graciela Geuna, que cuenta haber visto 3 listas de detenidos en La Perla: 2 de esas listas con 500 nombres cada una y la tercera con 600 nombres

La clave numérica tenía 2 utilidades: la primera, evitar que los detenidos supieran en exceso los nombres de los demás compañeros de cautiverio; los carceleros eran estrictos para inculcarles a los secuestrados que solo debían responder por su número y olvidarse de sus nombres. En segundo término, y de acuerdo al testimonio del represor Cendón a la CONADEP, la numeración de prisioneros permitía elevar la información de los interrogatorios de secuestrados a los respectivos comandos de zona y sub-zona, sin mencionar el nombre real del detenido sino su numeración; de modo que si por casualidad los papeles se extraviaban no se podían asociar con un desaparecido. Solo las jefaturas que ya tenían previamente la lista con los nombres y sus números, podían conocer el prisionero del cual se hablaba. En base a este testimonio de Cendón, cabe suponer prima facie que las numeraciones no eran excesivamente azarosas, ya que integraban listas de detenidos y las jefaturas debían acceder a estas listas con facilidad (algo que en una numeración azarosa no tendría sentido)

-La siguiente confesión debe ser analizada bajo cautela, porque involucra una serie de variables que explicaremos enseguida. Pero por lo pronto, en 1979 el general Guillermo Suárez Mason le dijo a uno de los embajadores estadounidenses, que había firmado entre 50 y 100 sentencias de muerte durante mucho tiempo. Para quien no sepa, Suárez Mason fue una destacadísima figura de la represión ilegal, porque era el jefe del tremendo Primer Cuerpo de Ejército, que tenía jurisdicción por toda la provincia de Buenos Aires, incluyendo Capital. Es decir que toda la represión de la provincia tiene vínculo directo e indirecto con Suárez Mason
Cuando el embajador le preguntó a Suárez Mason si esa carga tan alta de sentencias de muerte que firmaba por día no le suponía una enorme responsabilidad, Mason contestó que no, porque la mayoría eran terroristas o colaboradores. Es una hoja desclasificada bastante conocida, que hasta La Nación le dedicó una nota 

https://www.lanacion.com.ar/politica/firme-entre-50-y-100-sentencias-de-muerte-por-dia-dijo-suarez-mason-nid424881/ 
En principio, esta confesión no sirve para cuantificar el número de muertos. Suárez Mason no establece parámetros precisos como número de meses, rango medio de detenidos diario, etc. "Largo tiempo" puede significar muchas cosas. Un año es "largo tiempo", como así también 6 meses. Incluso aplicando un margen razonable de 6 meses al ratio mínimo de 50 muertes diarias, serían 9.000 personas. Un número demasiado alto para tan corto tiempo en una sola provincia, por lo que no sirve esta confesión en ese sentido por su vaguedad e imprecisión

Pero la declaración de Suárez Mason cobra relevancia frente a las reconstrucciones de sobrevivientes sobre las fichas de traslados. Un caso de ello son los sobrevivientes de Club Atlético, quienes por accidente o por trabajo esclavo, lograron acceder a las fichas de eliminación, a los pedidos de secuestros, entre otros papeles sobre la burocracia represiva. Una de las fichas que vieron fue la siguiente:


pag. 19: 

Esta era una típica ficha que se le hacía a un prisionero del centro ilegal Club Atlético/Banco/Olimpo. Cada uno de los funcionarios responsables del centro ilegal, marcaba una cruz en la casilla que les parecía más acorde a la evaluación que hacían del detenido. Por ejemplo unas 3 cruces en el apartado DF (Disposición Final) significaba que el prisionero era asesinado. Así se decidía el destino de un detenido

Entonces, que Suárez Mason (jefe del Primer Cuerpo de Ejército) firmara entre 50 y 100 sentencias de muerte diarias no significa que realmente todas esas personas "firmadas" por él fueran a morir, porque aún faltaban las "opciones" de sus pares para decidir qué hacer con el desaparecido. Lo importante de la confesión de Suárez Mason es que implica, al menos, que un rango de 50 personas (y más) ingresaba con periodicidad al sistema concentracionario ilegal de Buenos Aires

La cifra de muertos y desaparecidos solamente en Buenos Aires puede estimarse en 10.000 durante el periodo 75-79. De cuales 8 mil de ellos fueron arrojados al mar, de acuerdo a lo que dirá Alejandro Lanusse en el juicio a las juntas (más adelante lo veremos) y los restantes 2 mil son los muertos enterrados de la nómina de Etchecolatz y las declaraciones de Camps. Pero recuérdese que las declaraciones de Suárez Mason no se limitarían a los muertos, sino que incluye a los sobrevivientes del sistema concentracionario de Buenos Aires. Por lo que, en principio, se entiende por qué Arancibia Clavel o Ricardo Flouret arriban a números tan elevados a nivel nacional (en torno a los 20 mil). En cualquier caso, la confesión de Suárez Mason es solo UNA prueba más del conjunto, no la única


El general Suárez Mason recibe un severo escrache físico por parte de algunas de sus víctimas pasadas

-Los +4.000 detenidos de la ESMA: se puede fundamentar con seriedad que en la ESMA pasaron más de 4 mil personas. Hay varios testimonios al respecto e indicios que se interrelacionan:

-Los testimonios más importantes, pertenecen a aquellos que tuvieron contacto directo con listas de prisioneros en el LRD ESMA, o las fichas que se microfilmaban. Es el caso de Carlos Muñoz por ejemplo: con motivo de las denuncias que 3 sobrevivientes liberadas hicieron en España en el año 1979 sobre el asesinato masivo que ocurría en ese centro clandestino, los oficiales represores le encargaron a Muñoz que bajase al sótano a buscar las fichas microfilmadas correspondientes a esas mujeres liberadas. Muñoz tuvo acceso a 3 cassettes con 1000 a 1500 legajos de prisioneros en cada uno de ellos (es decir: 3,000 mínimo y 4500 máximo). Llevaban una letra "T" y una letra "L" cada ficha. Que Muñoz deduce como "Traslado" (muerte) y "Libertad"

-Carlos Lordkipanidse, otro sobreviviente que tuvo que revisar 10 rollos de microfilmados. Cada rollo contenía aproximadamente 500 casos, pero uno de ellos contenía aún más casos
El relato de los 10 rollos con 500 casos me lo contó en Facebook a pesar que en los juicios ha testimoniado al respecto sobre ese asunto. Creo que la parte más trascendente de la conversación que tuve fue:

-Yo: me olvidé de preguntarle sobre el tema del microfilmado. Cuando usted dice que había 500 casos en cada uno de los rollos ¿Usted dedujo esa cifra de 500 por la capacidad máxima que tenían esos rollos? ¿O porque le dijeron que entraban 500 en cada uno? ¿Cómo sabe que eran 500 casos por rollo?
-Lordkipanidse: El número de 500 por rollo surge de haber controlado el primero y segundo de ellos buscando compañeros míos que habían caído en 1976. Los rollos se podían ver en una pantalla, como un televisor, y se los podía hacer avanzar en forma manual o automática. Esto lo hicimos [con otro compañero] a escondidas y fuera del control de los oficiales y guardias. Si nos sorprendían revisando, no estaría acá escribiéndote

-Lázaro Gladstein también tuvo acceso a las microfilmaciones como Carlos Muñoz. También estima 5.000 casos 
-La sobreviviente Lidia Vieyra: a principios de 1978 tuvo acceso un día domingo, a una lista de 4 mil casillas con nombres a las que le asignaban una letra "T" o una letra "L". Esto coincide con lo visto por Muñoz. Pag. 2213 de la siguiente causa judicial:
-Andrea Marcela Bello (pareja de Gladstein) secuestrada el 6 de diciembre de 1978, testimonia en sentido coincidente sobre este libro de registro. Aunque ofrece un número más alto (probablemente por tratarse de fines de 1978). Dice el testimonio judicial de Bello:
En la parte de abajo [del centro clandestino] había mucha documentación, un mueble bajo, apoyado en la mampara que dividía la sala con carpeta colgante con solapitas con nombres. En esas carpetas estaban todos los casos de los que se encontraban secuestrados en la ESMA. Habían armado todo un organigrama de todos los que estaban secuestrados en una pizarra blanca
Recordó que era las de ellos, porque pudo ver nombres conocidos, Lordkipanidse, Oviedo, Bello, etc. Arriba de ese mueble había un libro de actas, que cuidaban mucho que estuviese abierto; pudo ver que tenían cuatro columnas, una de número, otro de nombres, dos columnas que se completaban con cruces y en la parte de arriba de estas tenia un "T" y una "L". El libro estaba abierto; lo que le impactó era el número, porque superaba el 5000

pag. 5410:
-El sobreviviente Rodolfo Olivieri fue secuestrado el 21 de diciembre de 1977. Al ser conducido a la ESMA para un interrogatorio inicial no tan violento, los interrogadores le manifestaron que era conveniente que dijera todo lo que sabía, porque por allí habían pasado 4 mil personas (dándole a entender que si no hablaba, sería un muerto más de la lista). Después el interrogatorio se hizo más agresivo con picana. Pag. 2033:
-La sobreviviente Ana María Marti, testimonió que los oficiales de inteligencia de ese centro clandestino comentaron que, a marzo de 1978, había 4.726 personas en las carpetas de "El Dorado" (una sección de la ESMA donde se registraban los datos de los prisioneros). Si se quiere, esta es la segunda fuente existente, junto con el diario de Vilas, de un número exacto de detenidos que pasaron por un Lugar de Reunión de Detenidos en un lapso de tiempo (no obstante, a diferencia del diario de Vilas, esta afirmación de Osatinsky debe tomarse como fuente secundaria). La ESMA continuó funcionando posteriormente a marzo de 1978
pag. 15,  donde el fiscal adjunto Moreno Ocampo, del juicio a las juntas, resume el testimonio de Marti: 
-El represor Adolfo Scilingo a mediados de los años 90, testimonió en la Justicia española que pasaron 4.400 personas por el centro clandestino, de acuerdo los comentarios que se hacían en el lugar durante su desempeño. La diferencia es que Scilingo no especifica mucho más su fuente (no dice si estos comentarios provenían siquiera de oficiales el centro. Es por consiguiente una fuente terciaria que hay que utilizar con muchísima cautela, pero que tiene congruencia con el caso Marti). Scilingo dejó de trabajar en la ESMA iniciando 1978
-Algunos de estos testimonios, como el de Ana Marti, son anteriores al de Alejandro Lanusse en el juicio a las juntas del año 1985 (más adelante veremos lo que dijo Lanusse), quien habló de más de 8 mil cuerpos arrojados al mar. Aunque la ESMA no fue el único centro clandestino de la provincia de Buenos Aires que arrojó gente al mar, es evidente que solo con un número tan alto de prisioneros en este centro clandestino (y en otro como Campo de Mayo) se puede llegar a las cifras de Lanusse
También este testimonio de Marti es anterior al Documento Final y es anterior a la desclasificación de documentos como el de Arancibia Clavel o el de Ricardo Flouret. No podemos inferir malintencionadamente que la sobreviviente Ana Marti haya estado influenciada por estos documentos y testimonios, y mintiera en consecuencia con un número alto para la ESMA
pag. 4 de este informe de 1980, donde se ofrece el número de 4726 detenidos de la ESMA:
-El sobreviviente Héctor Coquet trabajó a fines del 78 en la microfilmación de las carpetas de detenidos que pasaron por el LRD. Luego de cumplir la tarea de microfilmar cada carpeta, el represor Acosta (jefe de la ESMA) ordenó destruir las carpetas con una máquina de cortar papeles. Se generaron 3 copias de microfilms para cada represor importante del centro: una copia se la llevaba Acosta, la otra Chamorro y otra copia se la quedaba Massera. Coquet estima 4700 detenidos. Pag. 1425:
-El testimonio más conservador fue ofrecido por Enrique Fukman, secuestrado a mediados de 1978. El sobreviviente testimonió que el oficial Scheller (un importante torturador de la ESMA), le había dicho que pasaron 3500 prisioneros en el centro. Pag. 2941:
Aún así Fukman sostiene que son 5.000 personas porque sus colegas del centro le hablaron sobre las microfilmaciones

Esto también es ilustrativo de la existencia de listados. Para aquellos que piden legítimamente una lista con nombre y apellido.... aquí vemos que la Marina en la ESMA tenía carpetas con hasta más de 4 mil nombres. La Marina nunca entregó siquiera una mísera hoja de estas carpetas ¿Es problema mío que no las hayan entregado? Si el Estado por ejemplo, no tuviera 4 mil denuncias sobre la ESMA ¿Significaría que no fueron derivadas 4 mil personas a la ESMA, solo porque no hay 4 mil denuncias? Sobre este aspecto profundizaremos en el próximo capítulo
Después se podrá discutir con total legitimidad, el por qué hubo muchos que no denunciaron. En el caso Tucumán por ejemplo, por qué la mitad de los secuestrados en la escuelita no fueron a denunciar aunque sea su condición de sobreviviente (si es que sobrevivieron efectivamente). Eso es totalmente válido de discutir, pero en orden de prelación esta duda de ninguna manera puede poner en cuestión la autenticidad de las pruebas que revelan que los militares, en efecto, confeccionaron listas de detenciones ilegales, que poseen números más altos que lo recogido por el Estado. Una duda de ese estilo, no tiene la entidad suficiente para borrar eventos como la confección de una carpeta, con sus hojas, con sus listados. Sobre todo cuando la duda solo puede plantearse a posteriori de asumir como cierta la existencia del listado invocado, no antes

*La caótica clave numérica de la ESMA. Hipótesis: muy lamentablemente, no todos los centros de detención dejaron suficientes sobrevivientes para que sus testimonios reunidos conformen una congruente correlatividad sobre esos campos. En ESMA, la ausencia de mayor cantidad de testimonios de sobrevivientes, además de un sistema diferente de numeración (3 cifras en vez de alfanumérico como Club Atlético), hicieron que la tabla final sea la siguiente:

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en el siguiente enlace de la megacausa ESMA, tenemos el cuadro de la clave numérica, abajo del todo:


es de aclarar que, según los testimonios, las claves fueron manifestadas como si tratasen de 3 cifras. Por ejemplo, a Graciela Daleo no le dieron el número "8" a secas; sino el número "008"

No pusieron todos los códigos en la causa judicial del 2011, por ejemplo Susana Burgos (secuestrada en enero de 1977) recibió la clave 842; la detenida María Inés Imaz (secuestrada en julio de 1977) recibió la clave 416. Pag. 16 del siguiente enlace: 


También en la siguiente causa judicial del año 2018:


se agregan otras claves numéricas, siendo las más destacables para ilustrar el cuadro: Hernán Abriata con el número "002" el 30 de octubre de 1976 (pag. 1048); Luis María Salvatierra con la clave "097" el 24 de noviembre de 1976

Se supone, que al llegar a la cifra 999, la clave se reiniciaba desde el 001 en adelante


La tabla, como se observa, luce incoherente en su pretensión correlativa, debido a la falta de mayores sobrevivientes. Algunos sobrevivientes de la ESMA incluso han dicho que no creen que la clave numérica de ese centro sea correlativa, han negado que los carceleros asignaran números correlativamente. Es indudable que la tabla luce desordenada para hipotetizar una posible cifra de prisioneros con convicción de acero, pero también queda muy claro que la tabla no es azarosa. En varios detenidos la clave de la ESMA sigue un camino correlativo y no azaroso. No tiene sentido tildar de "azaroso" un recorrido donde el largo trayecto Loza-Marti es numéricamente coherente en ascenso, donde el trayecto Buzzalino-Carazo / Osatinsky-Soffianttini sea coherente en ascenso, y donde el trayecto Daleo-Basterra sea coherente con pequeñas brusquedades. Más que aleatorio, da la sensación que el recorrido numérico de la ESMA es correlativo con cortes muy bruscos

Pero incluso con estos graves baches de información, hay detalles testimoniales de varios detenidos que permiten reconstruir parcialmente el sentido de la clave numérica de la ESMA, por lo menos hasta marzo de 1977. Es el caso de Horacio Domingo Maggio, quien recibió la clave 866 y cuenta que desde octubre de 1976 a febrero de 1977 se escuchó 3 veces ese mismo número (incluyendo el suyo); Idem con el testimonio de Martín Gras al que le marcaron con la clave 808 y relata que su número también lo tenían otras dos personas, pero a diferencia de Maggio él desconoce el lapso temporal de esos reinicios o claves concurrentes. Toda esta suma de indicios proyectan inicialmente una cifra teórica para la ESMA de +2.400 personas para febrero de 1977 en 3 claves concurrentes. Siendo los casos de Abriata, Monforte, Salvatierra y Arrostito un reinicio y clave concurrente con otra serie de numeros asignados

en este link algunas de las observaciones de los sobrevivientes sobre su número:


Testimonio de Maggio a la prensa en 1978 (Maggio fue asesinado el mismo año 78):



Según el testimonio de Carlos Figueredo Ríos, durante su estadía de 1 mes en la ESMA (enero a febrero de 1977) dedujo que pasaron 300 personas a través de lo que escuchaba por la clave numérica. Recibió la clave 801 y en su tiempo de detención por el lugar, ya superaron los 1.000 números y volvieron a contar, llegando a la clave 150 en febrero (cuando hemos visto en la tabla que para febrero del 77 están todavía con el número de 800)


Este testimonio sería otro indicio de clave concurrente. Es decir, de prisioneros "agrupados" en distintas claves paralelas

Para terminar de ilustrar el panorama, Maggio testimonia que al momento de su secuestro, febrero de 1977, en la ESMA había entre 600 y 700 prisioneros allí detenidos (forma constante); mientras que para la fecha de su fuga en 1978 la cifra de detenidos constantes era entre 150 a 200 detenidos. De allí se explicaría que durante 1976 hasta principios de 1977 hubiese una frecuencia infernal en la entrada de prisioneros que casi supera los 3 mil detenidos, mientras en el resto del trayecto el número de secuestros disminuye (aunque es de aclarar que Maggio no especifica cómo obtuvo este cálculo de 600-700 prisioneros, por lo que esa parte de su testimonio debe calificarse como información terciaria)


Para el resto del trayecto que va de marzo de 1977 hasta el final del ciclo de ese centro clandestino, no puede determinarse con exactitud qué camino ha seguido la clave numérica; dando solamente indicios concretos de: con Sara Solarz de Osatinsky habría un reinicio, que sería el tercero o cuarto si sumamos el testimonio de Maggio / Gras. De Osatinsky hasta los 481 de Beatriz Tokar el recorrido es coherente con excepción del imprevisto "747" de Ayala. Y tal vez llegando a los 500 casos con Tokar, vuelta a recomenzar desde el 008 de Graciela Daleo hasta el 325 de Basterra, también con algunos imprevistos (da la sensación que se entrecruzan dos series paralelas: por un lado el grupo Pisarello-Clemente y del otro el grupo Lewin-Actis-Larralde. La clave "556" de Calabozo es imprevista)

Aún si teorizamos la deshilachada clave numérica de ESMA, el número es de 3,300 prisioneros aproximados (los 2500 a febrero de 1977 + 500 hasta el caso Graciela Daleo + el derrotero desde Daleo hasta Victor Basterra). Todo esto es teórico y no sustituye las fuentes de los listados microfilmados

No es casual entonces que en el museo de la ESMA, establezcan un mínimo de 3.000 prisioneros y un máximo de 5.000


Por las irregularidades antedichas, nosotros no consideramos que la tabla numérica de la ESMA sirva para establecer la cifra de prisioneros. Aunque SI es útil para entender otros detalles que comentaremos enseguida

Los más conservadores pueden quedarse con el número chico de 3.000 (lo que no modifica sustancialmente la cifra nacional de 20 mil). Pero el material testimonial arroja con claridad que pasaron más de 4 mil personas. Tal vez no se sepa si superaron los 5 mil, o no llegaron a los 5 mil, todo ese lío de la precisión no puede establecerse a menos que los mismos represores entreguen las listas; pero eso no invalida la cifra de más de 4 mil detenidos en el "Lugar de Reunión de Detenidos". Además este posteo no se enfoca en el caso ESMA sino en la cifra a nivel nacional, por lo que todo este material de la ESMA es una prueba más que se suma al conjunto de otros centros y materiales

De todos modos, si yo fuera un "apologista" o "negacionista" de la dictadura, me convendría mucho más sostener el número de 5.000 de la ESMA y no el de 3.000. Porque con esos 5 mil puedo alegar en principio, que son representativos de la provincia en su totalidad. Enseguida lo veremos


Por el material testimonial, sumado a la capacidad edilicia de la ESMA, es más que probable que muchos prisioneros hayan estado muy poquito tiempo, pocas horas en el lugar. Ya sea porque fueron rápidamente liberados al no tener "nada que ver" en la persecución, o simplemente porque eran detenidos de otros centros clandestinos que fueron conducidos a la ESMA únicamente para su eliminación en avión, o porque los mismos prisioneros capturados por la patota de la ESMA se derivaron a otro centro. Sobre esto nos explayamos en el apartado de la duplicación



Cartel de señalización en el actual museo de la ESMA, donde aseguran que pasaron alrededor de 5.000 personas en el CCD (Centro Clandestino de Detención). Como suele ocurrir con otros espacios de memoria, se vuelve a cometer el error de apresurarse a decir que todos los secuestrados están "desaparecidos" (o que la mayoría fue desaparecida). Lo cierto es que NO SE SABE cuántos de esos 5 mil fueron desaparecidos, y cuántos fueron sobrevivientes que no denunciaron. El vocablo "desaparecido" se emplea como un misnomer 


Buenos Aires y Capital Federal tienen aproximadamente 5.800 asesinados registrados por el Estado en el periodo 74-83 según datos del RUVTE (pag. 21):


La ESMA entonces tenía 4.700 casos a marzo de 1978, una cifra que parece coincidir con el número de muertos que el Estado tiene registrado en todo Buenos Aires desde 1976 a 1978 (alrededor de 5.000); en algún sentido esto beneficia a los apologistas: quizás esos 5 mil archivos de la ESMA tengan algo que ver con la represión total provincial, por lo que no habría ningún desaparecido "extra" sin denunciar. Pero dentro de estos 4.700 casos de la ESMA debemos incorporar los sobrevivientes que también se registraban en las carpetas, y tener en consideración que el objetivo de la ESMA era la persecución de Montoneros y la izquierda peronista, dejando la eliminación del PRT-ERP para el Ejército. Lo que impide sostener que el número de la ESMA sea representativo de los muertos y sobrevivientes de toda la provincia o de otros centros clandestinos como el Circuito Camps, por dar un ejemplo. A eso debemos sumarle los detenidos de otras provincias que pasaban por la ESMA 

Hay más: la nebulosa clave numérica, independientemente de su correlatividad (o ausencia de ella), sirve objetivamente para entender que los prisioneros eran numerados y registrados al entrar en la ESMA, lo que desvirtúa una recopilación de ficheros a nivel provincial. Por ejemplo Miriam Lewin fue secuestrada en mayo de 1977 y enviada al centro clandestino Virrey Cevallos, donde permaneció 10 meses hasta que fue derivada a la ESMA en marzo del 78. Recién en la ESMA le asignan la clave 090 (correlativa con los detenidos de ese mismo lapso). Si la ESMA realmente en sus 4.726 ficheros hubiese incluido a todos los detenidos de la provincia de Buenos Aires y Capital, entonces prisioneros como Lewin tendrían que haber estado ya numerados desde mayo de 1977 y no cuando entró en la ESMA. Este es otro motivo para descartar que los 4.726 detenidos correspondan a toda la provincia, sino que son las personas que entraron directamente a la ESMA

De hecho estas fotos conocidas se las sacaron en la ESMA para registrarla, no en Virrey Cevallos donde ya estaba secuestrada desde casi 1 año atrás:



La ESMA tenía listados de prisioneros como el de la siguiente foto, que pertenecían a otras fuerzas secuestradoras y a otros detenidos ajenos a ESMA. Estas listas datan del año 1978 pero contiene nombres de prisioneros desaparecidos dos años antes. Cabe descartar prima facie que estos listados formen parte de los 4726 prisioneros del centro clandestino de la Marina (excepto duplicados)

pag. 30:



¿Qué dijeron los represores de todo esto? No mucho. Antonio Pernías, torturador de la ESMA, en su declaración judicial sostuvo que se trataba de una falacia aseverar que en ese centro pasaron 5.000 personas. Sin embargo, Pernías no ofreció ningún número más bajo o más alto para refutar

Jorge Acosta, uno de los jefes de la ESMA, también en su declaración judicial refirió que era factible que la numeración a los prisioneros tuviera dos o tres claves repetidas, pero negó que las claves tuviesen 3 dígitos, intentando refutar al sobreviviente Martin Gras quien dice haber escuchado su número 808 unas 3 veces (2.400 prisioneros). Cabe aclarar que Gras no es el único que recibió 3 cifras como clave




La única ficha de prisioneros que se "salvó" de la ESMA, es la correspondiente a Ana Marti. Esta ficha fue fotografiada por el sobreviviente Victor Basterra y es, por el momento, la única que se conoce de todos los detenidos en ese lugar:




Curiosa fuente terciaria: el libro "Los años 70 a Fondo" escrito por Pablo Anzaldi, es un libro bastante recomendable..... por lo terrible que es. Repite mucho de los tópicos que ya ilustramos en este blog sobre el apologismo (por ejemplo: la "legalista" Cámara Federal, que el ERP dominaba un tercio de Tucumán, que la guerrilla quería matar medio millón de personas, etc.); y bien es un libro que constituiría la delicia de Nicolás Márquez. Sin embargo, es de reconocer que el autor logra interesantes entrevistas con represores como Riveros o el represor de La Perla Ernesto Barreiro. Y en cuanto a la cifra de desaparecidos, aunque niega que lleguen a 30 mil, en el prólogo de Eugenio Kvaternik no obstante la sitúa en 11.000. Al respecto dice:

El número [de desaparecidos] es mayor que el de la CONADEP, que lo sitúa en los 8.500. Llegamos a ese número estimativo [de 11.000 desaparecidos] sumando los 5.865 que da en su entrevista el general Santiago Omar Riveros (ver pág. 207 de este libro), a los 5.000 que se estiman murieron en la Escuela de Mecánica de la Armada. Riveros menciona el número de víctimas que, a fines de 1978, cuando las operaciones antisubversivas ya habían concluido, le dieron Viola, Harguindeguy y el Estado Mayor antes de partir hacia su destino a la Junta Interamericana de Defensa en Washington. Los 5.000 de la Marina los proporcionó una fuente fidedigna que mantenemos en reserva


Lo de Riveros olvídense: menciona la cifra a nivel nacional, asi que no tiene ningún valor (la CONADEP proporciona una cifra mayor que la desvirtúa). Pero lo interesante es que el autor habla de 5.000 secuestrados en la ESMA de acuerdo a una fuente "fidedigna" que no quiere revelar. Es una lástima, no podemos conocer qué tan fidedigna es la fuente. Pero es de recalcar que el autor del libro no es para nada un "zurdito" con intenciones de favorecer la prédica montonera (el libro repite la tesis dos-demonista y algunas de las falacias del apologismo), por lo que estimamos nosotros que su fuente es confiable y muy probablemente una fuente militar, ya que los sobrevivientes que tuvieron acceso a las listas de la ESMA hicieron público sus relatos y carece de sentido que pidan reserva en el libro. En cualquier caso, esta parte del libro es una fuente secundaria/terciaria que se suma al conjunto probatorio. Es curioso: un libro cuasi-"apologético" de los militares contribuye inintencionalmente a este posteo nuestro


Volviendo al microfilmado o registro, además de haber sobrevivientes de ESMA que cuentan sobre ello, además de sobrevivientes de otros centros clandestinos que cuentan lo mismo, está el testimonio recogido por la CONADEP de un represor integrante de los grupos de tarea (grupos que secuestraban), donde relata el relevo de la información para los distintos Comandos y zonas de las fuerzas armadas. Eso explicaría que el Batallón 601 y Flouret puedan fácilmente arrojar una cifra nacional: la información de los prisioneros se reúne



-En 1983, el general Ramón Camps (en la época fuerte de la represión era coronel) concedió unas entrevistas a periodistas a raíz de un libro que estaba por publicar. En dichos reportajes, Camps declaró en OFF (con la grabadora apagada o sin ella) que había eliminado a 5.000 personas. Se suponía que el periodista no debía sacar a la luz esta información, pero no le hizo caso. Concretamente dijo:

"Mientras yo fui jefe de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, desaparecieron unas 5.000 personas. A algunas de ellas, les dí sepultura en tumbas NN"


Camps no solo no se retractó de las declaraciones que salieron a la luz incluso antes de la finalización del régimen militar, sino que además las ratificó en la prensa. Estas declaraciones jactanciosas de los desaparecidos le valieron al represor que el presidente Alfonsín determinara su proceso y arresto preventivo a través del decreto 280/84

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En la provincia de Buenos Aires, el RUVTE tiene unos 3741 casos de desaparición y asesinato de personas en todo el periodo 1970-1983, contra los 5.000 clamados por Camps desde 1976-1978, porque Camps solo estuvo dos años al mando de la policía tal como cuenta en el siguiente video, a partir del minuto 2:31 de esta entrevista de 1981



pag. 21


Ramón Camps asumió la jefatura el 23 de abril de 1976. El audio de su asunción: 



Si uno le echa una mirada a la nómina presentada por Etchecolatz en su libro, también aparecen cadáveres de "subversivos" en Capital Federal, a pesar que no era la jurisdicción "original" de la policía de Buenos Aires; sin perjuicio que esta policía secuestrara personas de la Capital. El problema entonces a resolver es ¿Ramón Camps se refería a la provincia de Buenos Aires sin incluir la Capital Federal? ¿O en su declaración incluía a la Capital? No sabemos. Sin embargo, desde nuestro punto de vista, consideramos que podemos "invertir" el problema fijándonos en los Grupos de Tarea, o los GT, en ESMA y Campo de Mayo: tal como escribimos más arriba, los 4.700 prisioneros de la ESMA no pueden incluir a los subversivos de los restantes centros

De todas las maneras, Camps objetivamente no es el responsable de todas las desapariciones de Buenos aires y Capital, en vista de los centros clandestinos disponibles en la provincia entera


-Tenemos los testimonios de los vuelos de la muerte/traslados en ESMA y Campo de Mayo, ya sea por parte de sobrevivientes como también de represores y colaboradores del exterminio. Estos testimonios poseen las siguientes pautas: son "traslados" semanales en ambos centros de detención; se elegía a un número de personas a eliminar que en ESMA podía oscilar entre los 10 y 20 prisioneros mientras en Campo de Mayo un poco más; en la ESMA los testimonios hacen hincapié en que a veces se ejecutaban 2 vuelos semanales, mientras para Campo de Mayo el ex-sargento Victor Ibañez (colaborador del centro) y el sobreviviente Juan Scarpati recuerdan que en 1977 hubo un momento de mucha intensidad con la cantidad de prisioneros al punto de organizar más vuelos que lo acostumbrado por semana. Hay testimonios de números muy superiores en algunos traslados (40 personas en un traslado de la ESMA de mediados de 1977; 80 personas en un vuelo de la muerte de Campo de Mayo). Todo ello lo encuentra en el anexo "Sobre el número de desaparecidos" de este blog


(Victor Ibañez, un ex-sargento colaborador del centro clandestino o "Lugar de Reunión de Detenidos" de Campo de Mayo, fue de los pocos agentes arrepentidos de la represión que decidió hablar sobre lo ocurrido. Su testimonio sirvió para el libro "Campo Santo" que se encuentra en el siguiente enlace:
http://www.desaparecidos.org/nuncamas/web/investig/almiron/cposto/cposto00.htm    )

Esta capacidad de eliminar cuerpos en los vuelos de la muerte es necesario entenderla, para comprender lo que dirá Lanusse 

Pues bien, en el juicio a las juntas militares de 1985, el ex-presidente de facto Alejandro Lanusse testimonió que Enrique Holmberg (hermano de Elena Holmberg) se había reunido con Suárez Mason y el jefe de unidad de Tigre en 1978, para conversar sobre el reconocimiento del cadáver de Elena Holmberg. Suárez Mason le reprochó al jefe de unidad la ineptitud para identificar a los cuerpos. El jefe de unidad aceptó su proceder, pero dijo que no había manera fácil de reconocer un cadáver cuando se habían tirado más de ocho mil cuerpos al río
8 mil cuerpos al río. Supera el total registrado de Buenos Aires que oscila en los 6.000 desaparecidos y muertos desde 1970-1983. Y este número lo esbozó un miembro de la represión que es el jefe de unidad de Tigre, delante de un jerarca de la dictadura como Suárez Mason; según el testimonio de Lanusse

La cifra puede no tener nada que ver con los cuerpos de la nómina de Etchecolatz, porque esa nómina alude a cadáveres enterrados, mientras en este caso se habla de cuerpos tirados al mar. El número de muertos en Buenos Aires podría ser todavía más alto (en el apartado de Duplicaciones de prisioneros se tratará más en extenso esta suerte de compartimentación)
Si bien es cierto que Lanusse tuvo problemas con la junta militar (hubo un enfrentamiento entre Lanusse y Acdel Vilas por la “subversión cultural” en Bahía Blanca; a Lanusse le asesinaron a su prima Elena Holmberg), por otro lado no es la persona más peronista ni izquierdista del mundo, además de su complicidad con la represión de principios de los años 70 hacia los sectores populares. Además su declaración sobre los vuelos de la muerte fue meramente accidental, ya que el resto del testimonio no se enfocaba en ello. No hay motivos razonables entonces para creer que el ex-dictador Lanusse esté mintiendo

Testimonio de Alejandro Lanusse en el juicio a las juntas:

http://www.desaparecidos.org/nuncamas/web/testimon/lanusse.htm  

Resumidamente se explica en este proceso judicial de la ESMA:
En la causa n° 4903/84, caratulada “Holmberg, Elena s/privación ilegal de la libertad y homicidio”, del Registro del Juzgado Federal  N° 6 de esta Capital, a fs. 1213/13 vta. y 1255, deponen testimonialmente; César Román Montenegro y Leonardo Carlos Giles, respectivamente, afirmando haber participado el día 22 de diciembre de 1978 en un operativo con el fin de rescatar un cadáver N.N. del sexo femenino, de las aguas del Río Luján, el que con fecha 12 de enero de 1979 fuera exhumado en el Cementerio de la localidad de Tigre, Provincia de Buenos Aires, y reconocido por un familiar como perteneciente a Elena Holmberg. Al prestar declaración en la audiencia el Teniente General (R) Alejandro A. Lanusse, en relación a este caso, relató que al reprochar el ex General Suárez Mason a un oficial de la Unidad Regional Tigre de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, la tardanza en informar el hallazgo del cuerpo, obtuvo como respuesta que habían sido más de 8.000 los arrojados al río
Pag. 28 del siguiente enlace (conduce a la descarga automática):

El testimonio de Lanusse, además de ser revelador por sí mismo, es congruente con el material testimonial que fundamenta cifras superiores a 4 mil personas en ESMA y Campo de Mayo (ya vimos algunos ejemplos de ESMA como el caso de las microfilmaciones o el caso de Ana Marti, y puede usted profundizar en el anexo "Sobre el número de desaparecidos"). Para Campo de Mayo, tenemos el testimonio del sobreviviente Juan Scarpati, quien para septiembre de 1977 cuenta que fueron destruidas 3.500 personas entre Montoneros y PRT-ERP. Esa cifra la obtiene porque los torturadores se lo cuentan (Scarpati había logrado obtener la confianza de ellos), mediante dos grupos de tareas en ese centro clandestino. El testimonio de Scarpati se presentó por 1ra vez en el año 1980; incluso algunos testimonios de la ESMA fueron por la misma época. Es decir que se presentaron antes que Lanusse testimoniara en el juicio a las juntas, por tanto no pudieron haber estado influenciados por el ex-dictador para su relato. El testimonio de este sobreviviente Scarpati se encuentra aquí:

http://www.ruinasdigitales.com/revistas/ddhh/1980%20-%20CADHU%20-%20Testimonio%20del%20Genocidio.pdf 

La cifra que arroja Scarpati es coherente con el número volcado por el jefe de la policía de la provincia de Buenos Aires, Ramón Camps, quien hablaba de 5.000 muertos; teniendo como principio que los mayores centros clandestinos en la provincia de Buenos Aires era Campo de Mayo y Circuito Camps (ESMA se encuentra en Capital Federal). Lo que dijo Scarpati es anterior a las declaraciones de Camps, impidiendo la presunción que el sobreviviente se aprovechara de las declaraciones del represor para inventarse a conveniencia el número


En La Perla los traslados eran por camiones. Al principio, bastante habituales e incluían un promedio de 20-40 personas por traslado. Entre junio y noviembre de 1976, la cantidad de traslados se disparó. A principios del 77, se fijó en un promedio de 3 prisioneros diarios trasladados

pag. 146 y 149: 


pag. 18 y 35: 




Gráfico del RUVTE sobre la cantidad de muertos en Córdoba año a año. Desde marzo a mayo de 1976 no supera las 70 muertes mensuales con una caída en abril; desde junio a agosto no supera las 60 muertes mensuales; desde septiembre a noviembre se observa una caída importante de la tasa de detenidos muertos. Aún si suponemos que todos estos prisioneros se tratan de secuestrados en La Perla (cuando en Córdoba había otros centros clandestinos), el gráfico se mantiene ligeramente por debajo del material testimonial que ubica los traslados semanales de La Perla en un promedio de aproximadamente más de 20 personas semanales; y que insiste en un periodo de actividad muy intenso desde junio a octubre de 1976, justo donde el RUVTE cae en picada



"La Cuadra" del centro clandestino La Perla: el lugar donde los detenidos estaban reunidos y dormían. En cada una de las separaciones de las paredes había 1 prisionero en una colchoneta durante el periodo sostenido de represión. Pero a partir de mediados a fines de 1976, en el medio del pasillo había otras dos hileras de prisioneros en colchas, totalizando aproximadamente 150 secuestrados al mismo tiempo. Teresa Meschiatti fue secuestrada el 25 de septiembre de 1976 y ya había para ese entonces ese escenario abarrotado de detenidos: 



-En abril de 1983, la junta militar emite por cadena nacional de televisión una larga defensa titulada “Documento Final de la junta militar sobre la guerra contra la subversión y el terrorismo” donde intentan justificar su accionar represivo. Para ese momento, los militares se veían amenazados a enfrentar un “Nüremberg argentino”, incluso se habían activado causas judiciales contra represores a pesar de continuar vigente el régimen militar. En ese clima, los militares intentan auto-justificarse soltando una de las declaraciones más importantes sobre la cifra de desaparecidos. Aunque el Documento Final no alude de ninguna manera a las desapariciones en las siguientes cifras, no obstante remarca que en el país hubo en su apogeo (1974-1975) unos 25.000 subversivos, de los cuales 15.000 fueron combatientes

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¿Cuál es el problema con esta declaración?? Los militares en años anteriores, durante su propio gobierno militar, habían difundido o elaborado fuentes primarias y declaraciones que demostraban absoluta y categóricamente que la guerrilla para 1976 estaba militarmente derrotada, y que no superaban los +1000 combatientes ese año. Todavía retorciéndonos con estimaciones muuuuuy exageradas, la cifra total de guerrilleros nunca superó los 2-3 mil combatientes en su época de apogeo. Pero los militares, que durante 1976 a 1979 no tuvieron problemas en producir datos importantísimos de la pobreza de la guerrilla, en este documento de 1983 afirman que la guerrilla ¡¡Contó con 15.000 combatientes fanatizados para matar!!! Esta exageración, desde un punto de vista muy lógico, solo puede indicar una cosa: los militares exageraron a propósito la cantidad de combatientes en el documento por un motivo un poquito bastante obvio: intentar equiparar la mayor cantidad de combatientes con el número real de desaparecidos 



Gráfico de inteligencia militar de octubre de 1975 firmado por el jefe de inteligencia Carlos Martinez, en donde las fuerzas armadas cuantifican las fuerzas del ERP en 600 combatientes máximo y 430 mínimo. Página 59 del siguiente enlace: 




Reporte de la embajada estadounidense, donde se estima que Montoneros tiene una fuerza de 2.000 combatientes para 1975. No especifica la fuente del número pero indica que las fuentes del reporte provienen tanto de los medios locales como de la Policía Federal. Pag. 10: 


Los cálculos sobre los combatientes son demostrativos de la falsedad intencional de los 15.000 combatientes alegados en el Documento Final

Veamos, a modo de ejemplo, las expresiones de los represores acerca de la guerrilla armada antes del golpe de Estado de 1976. Esto escribía el general Acdel Vilas en su diario de operaciones, sobre la situación a fines de 1975:
En medio del cariño de sus habitantes y el respeto de los soldados, dejé Tucumán el 21 de diciembre de 1975, próxima la Navidad. El “Operativo Independencia”, si bien no había terminado, era un éxito completo. La subversión armada había sido total y completamente derrotada por un Ejército que luego de cien años de paz demostraba su capacidad de combate. La mayor satisfacción fue recibir días después, ya estando en la Capital federal, el llamado del general Bussi [sucesor de Vilas en Tucumán], quien me dijo:
“Vilas, usted no me ha dejado nada por hacer”

Bussi le llamó y le comenta que no le dejó nada ya por hacer…. y a pesar de esta declaración del mismo Antonio Bussi, se continuaron las desapariciones en Tucumán y Bussi mandó a construir el centro clandestino de Arsenales donde funcionó durante todo 1977
Y esto a pesar que la subversión armada había sido total y completamente derrotada por el “victorioso” ejército en 1975

enlace con la declaración de Vilas:

https://web.archive.org/web/20030920003431/http://www.nuncamas.org/investig/vilas/acdel_40.htm 

El 31 de enero de 1976, Jorge Rafael Videla, en su carácter de Comandante en Jefe de Ejército, elaboró un informe sobre la situación militar de las organizaciones guerrilleras, a raíz del intento frustrado de copamiento en Monte Chingólo el mes anterior por parte del ERP

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(diario Clarín el 31 de enero de 1976. En un titular “Ejército dio un informe sobre el fallido ataque al batallón 601”. Allí Videla emite sus conclusiones sobre la capacidad militar de la guerrilla)


Videla declaraba lo siguiente en el informe que reprodujo el diario Clarín un mes y medio antes del golpe de Estado:
El ataque al arsenal 601 [por parte del ERP en diciembre de 1975] y el consiguiente rechazo del intento demuestra la impotencia absoluta de las organizaciones terroristas respecto a su presunto poder militar, a lo que se agrega su nula captación de voluntades populares. La derrota del oponente reveló graves falencias organizativas y operativas, que muestran escasa capacidad combativa, y sí gran peligrosidad en la delincuencia mayor, es decir el secuestro, el asesinato, el robo, el atentado, la destrucción de la propiedad. El episodio de Monte Chingólo indica la incapacidad de los grupos subversivos para trascender al plano militar. Su actividad se relega al ejercicio del terror, obvia evidencia de su debilidad

Videla es contundente en declarar la derrota militar de la guerrilla, relegándola al campo delincuencial y al terrorismo “hormiga”, es decir actos de pequeñas unidades que no le signifiquen grandes costos pero tampoco grandes ganancias

Compare estas declaraciones de los personajes más destacados de la represión poco antes del golpe de Estado…. con el inflamiento de combatientes en el Documento Final de 1983, cuando estaban por dejar el poder, con el aluvión de críticas y de amenazas de juicios masivos por los crímenes cometidos
La estimación del número de combatientes de la guerrilla la puede encontrar en los apartados correspondientes de este blog. Ahí pueden notar que muchos datos los entregó o elaboró el propio Ejército: desde el allanamiento a "La Pastoril" donde se recaban las cifras de combatientes del ERP a nivel nacional (350 combatientes a fines de marzo de 1976), hasta el número de viviendas de las células de combate de la organización Montoneros
Ciertamente la cifra del Documento Final se trata de una prueba que requiere una interpretación. Pero la interpretación es muy lógica: si el gobierno militar hasta antes de 1980 había mostrado datos de la pobreza numérica de la guerrilla, no tiene ningún sentido que ahora exageren las cifras. En el contexto, en el clima que se vivía, la interpretación lejos de ser personal o excesivamente subjetiva, posee un significado bastante evidente: inflar la cifra de combatientes para equiparar con los números de desaparecidos, y así “empatar” las desapariciones aseverando que casi todos fueron guerrilleros irrecuperables (“fanatizados para matar”). Otros autores como Prudencio García, Emilio Mignone, Fernando Almirón han hecho la misma interpretación, incluso la CONADEP realizó una interpretación similar en las conclusiones del Nunca Más, lo que muestra el carácter objetivo o evidente de esa interpretación
Emilio Mignone en el prólogo del libro "El Mito de La Guerra Sucia" del año 1984:
"Resulta inaceptable la afirmación contenida en el llamado Documento Final de la junta militar, en el cual se sostiene, sin probanza alguna, que las organizaciones subversivas alcanzaron a tener 15.000 hombres armados y adiestrados y otros tantos igualmente fanatizados como apoyo logístico
Esta absurda aseveración tiene, a mi juicio, dos propósitos. El primero justificar los métodos adoptados sobre la base de una situación de necesidad, derivada de un peligro mortal para las instituciones civiles y militares, que nunca existió. Y el segundo una suerte de mensaje destinado a insinuar que los treinta mil detenidos-desaparecidos y asesinados son, precisamente, esos treinta mil presuntos terroristas
Como he dicho otras veces, si en el país hubiera existido en la década del 70 una fuerza de 30.000 guerrilleros, ideológica y militarmente entrenada, hoy no existirían las fuerzas armadas argentinas. La incompetencia, la corrupción y la cobardía demostrada por su oficialidad en las Malvinas, indica claramente cuál hubiera sido su destino. Su subsistencia es una prueba de la falsedad de la afirmación del "Documento Final" 
Prudencio García, en su libro "El Drama De la Autonomía Militar" sostiene:
"La inclusión de ambas cifras (25.000 subversivos, 15.000 de ellos armados) no era precisamente arbitraria, sino escogida con un doble objetivo: por una parte, justificar la aplicación de métodos clandestinos, extrajudiciales, anticonstitucionales y extremadamente crueles, ante la tremenda magnitud -deliberadamente «inflada»- de la amenaza terrorista, pretendiendo que ésta, por su gran volumen, no podía ser combatida en el marco de la legalidad. Y, por otra parte, equiparar lo más posible el número de subversivos armados con el número real de desaparecidos, con lo cual se intentaba establecer una especie de «empate», tendente a justificar los atroces resultados de la técnica de la desaparición"
El libro "Campo Santo" del año 1999:
En marzo de 1976, el ERP y Montoneros tenían su estructura militar prácticamente reducida a la mitad de lo que habían logrado consolidar un año atrás. En otras palabras, en el territorio argentino no había más de 600 guerrilleros armados; el resto pertenecía a las ramas política, logística y otras igualmente ajenas a las operaciones de combate
Ya en enero de 1976, el propio general Videla, en ese entonces Comandante en Jefe del Ejército, elaboró un informe referido a las organizaciones insurgentes en general, el que se originó tras el frustrado copamiento del Batallón de Monte Chingolo por parte del ERP. En ese documento, después de afirmar que las organizaciones guerrilleras se encontraban ante una "impotencia absoluta" en cuanto a su "presunto poder militar", señalaba que se había demostrado repetidamente "la incapacidad de los grupos subversivos para trascender en el plano militar" 
Sin embargo, en los últimos meses del gobierno militar, en abril de 1983, bajo la presidencia del general Reynaldo Bignone, la junta de Comandantes elaboró un "Documento final", con el que pretendía dar por cerrada toda revisión del pasado y que, entre otras cosas, afirmaba que los subversivos habían contado con 25.000 militantes, de los cuales 15.000 habían sido combatientes 
Una exageración absurda que contradecía los datos aportados por los propios militares, pero políticamente oportuna
enlace: 
El libro "Nada Más que la Verdad" (1995) de los periodistas Martin Granovsky y Sergio Ciancaglini, haciéndose eco de la interpretación de Prudencio García, comenta (pag. 266 del libro):  
García interpreta que los militares difundieron documentos con números que mostraban la real fuerza guerrillera, en momentos en que no tenían ninguna necesidad de buscar excusas para lo que estaban haciendo
En cambio en el Documento Final, cuando el régimen estaba en retirada, se multiplicó desmesuradamente la cifra [de combatientes] para justificar los niveles que alcanzó la represión
Hugo Vezzetti, en su libro "Pasado y presente: guerra, dictadura y sociedad en la Argentina" del año 2002, en la página 77 escribe:
Finalmente, el "Documento Final" justificatorio de la masacre, en mayo de 1983, crea la cifra de 25.000 a 30.000 efectivos, de los cuales 15.000 habrían sido combatientes, con lo que pretende hacer creer que la cifra de alrededor de 30.000 desaparecidos, que empezaba a ser expuesta públicamente, coincidía con esos supuestos efectivos de la insurgencia armada
(nota al margen: Vezzetti se equivoca con los "30.000 efectivos". El Documento Final no menciona ese número; pero se entiende la intención de Vezzetti en aludir al Documento Final)

Emilio Mignone en "Derechos Humanos y Sociedad" vuelve a decir:
El mismo comandante en jefe del ejército, Videla, que en enero de 1976 sostenía que la guerrilla estaba vencida y no constituía un peligro, encabezaba el 24 de marzo de 1976 un golpe de Estado, explicando que era necesario para combatirla. Es importante señalar estos hechos para desmentir la falacia de una supuesta guerra contra un enemigo poderoso, inventada para justificar el frío genocidio perpetrado a partir de la asunción del poder político. Con el igual propósito el denominado Documento Final emitido por la junta militar en vísperas de su retiro, el 28 de abril de 1983, sostenía, sin aportar prueba alguna, que existieron 25.000 militantes subversivos, de los cuales 15.000 eran combatientes. Como sostuve en esa ocasión, si estas cifras hubieran sido exactas, otro habría sido el resultado de la confrontación, dada la notoria incapacidad demostrada por los mandos en la guerra de las Malvinas. En rigor de la verdad esos guarismos del Documento final sólo pretenden justificar el asesinato de 20 o 30 mil detenidos-desaparecidos, que fueron apresados indefensos en sus hogares, sitios de trabajo y de estudio o en la vía pública
enlace:
El libro "Nunca Más" de la CONADEP, año 1984:
A pesar de afirmarse en el «DOCUMENTO FINAL DE LA JUNTA MILITAR SOBRE LA GUERRA CONTRA LA SUBVERSIÓN Y EL TERRORISMO» que la subversión reclutó veinticinco mil efectivos de los cuales quince mil estaban «técnicamente capacitados e ideológicamente fanatizados para matar», los Consejos de Guerra con competencia para juzgar tales delitos sólo sostuvieron cargos que concluyeran en condenas contra aproximadamente trescientas cincuenta personas. Ello demuestra claramente cual fue entonces la otra modalidad adoptada para suprimir a millares de opositores, fueran o no terroristas 

Asi que, los apologistas como Nicolás Márquez o Victoria Villarruel o Ceferino Reato nos deben una explicación sobre el significado de "15 mil combatientes ideológicamente fanatizados para matar" en el informe de los militares de abril de 1983; recordándoles que los mismos militares habían manifestado cifras mucho menores de combatientes en los años anteriores (cuando todavía no había empezado el crimen masivo a escala nacional). Fíjense que hasta el libro "Nunca Más", del cual los negacionistas sacan el numerito de 8 mil, hasta ese libro está pidiendo tácitamente una explicación creíble de la cifra de 15.000 subversivos fanáticos para matar. Que los apologistas nos puedan dar un fundamento coherente para torcer la hipótesis que ese número, expedido en el año 1983, con un gobierno vapuleado a punto de irse, no tiene nada que ver con el número de desaparecidos. Un documento que, como en su texto manifiesta, sería la última explicación que el gobierno militar institucionalmente daría a la ciudadanía sobre el tema
En términos más "jurídicos", esta prueba y la operación inductiva con el número pasado de combatientes, formaría parte de una "presunción hominis": 
en nuestro anexo, hemos explicado más detalladamente el aspecto jurídico en esta clase de fuentes:

Cuando algunos apologistas como Reato insisten en la existencia de un "relato" para inflar la cifra de desaparecidos, deberíamos recordarles que el "creador" de ese relato fueron las juntas militares, con su "Documento Final". Todavía el apologismo tiene que ofrecer una explicación creíble sobre los "15.000 combatientes" que derribe la presunción hominis de nuestro lado
La operación lógica entre los dos indicios "cifra de combatientes expuesta en el pasado" / "cifra de combatientes expuesta en el presente" (1983) nos daría la presunción que se ha mentido intencionalmente con el número de combatientes en el presente. "Intencionalmente" implicaría una razón de ser, una intención, un motivo para mentir en ello. El motivo, deducido por nosotros por el contexto (el intento de explicar a la ciudadanía la lucha antisubversiva), es que se mintió con el número para justificar un determinado nivel de represión (en este caso, justificar al menos 15.000 unidades de represión). Esta deducción nuestra puede caber en 4 posibles categorías:
-Presunción temeraria: la suma de indicios no permite inducir un hecho distinto o, si lo permitiera, serían varias presunciones a escoger. Lo que impide tomar una conclusión adecuada de la prueba indiciaria por vaguedad o ambigüedad
-Presunción probable: la suma permite medianamente inducir la existencia de otro hecho
-Presunción violenta: la suma de indicios hace muy verosímil el hecho que se intenta inducir
-Presunción necesaria: la suma deja fuera de toda duda el hecho que se intenta inducir

El Documento Final y la exposición de la cifra de combatientes en el pasado, esos dos indicios sumados tal vez no permitan crear una "presunción necesaria". Pero es absolutamente imposible que un negacionista nos quiera acusar que nuestra presunción es "temeraria", puesto que la suma de indicios trae la consecuencia lógica de una mentira intencional por parte de la Junta Militar de exagerar el número de combatientes en su texto de 1983; y no hay modo de explicar que el motivo de esa mentira intencional sea ajeno a la justificación de la represión y las desapariciones. Así, el Documento Final para los más conservadores o prudentes, quedaría en una "presunción probable", y los menos conservadores lo considerarían una "presunción violenta"
De todos modos, insistimos en que esta fuente del Documento Final la explicamos mucho más detalladamente en nuestro anexo que trata específicamente de esta fuente y su enigmático número de 15.000:

Curiosamente, el borrador original del "Documento Final" iba a contener el siguiente párrafo, donde se compara el caso argentino con las "decenas de miles" de desaparecidos en otros conflictos internacionales:
En toda guerra resulta difícil dar datos completos: en la guerra clásica, donde los contendientes son de nacionalidades distintas, usan uniformes que los diferencian y están separados por líneas perfectamente identificables, según lo prueban las estadísticas por cada muerto en combate existe siempre un desaparecido. En una guerra como la que debieron enfrentar las fuerzas armadas argentinas en defensa de la libertad, esta relación se multiplica en forma significativa, lo que se ratifica plenamente en las decenas de miles de civiles y militares desaparecidos en Argelia, Vietnam y otros enfrentamientos de características similares
Significativamente suprimieron este párrafo para la transmisión final en televisión, referido a las estadísticas de desaparición
citado en el siguiente programa: 

[Uno podría llegar a pensar que, bueno, tal vez lo de "decenas de miles" es metafórico. Si bien no lo tomamos como prueba absoluta, tampoco podemos desecharlo como simple forma de decir. Ya que al referirse a las muertes de la guerrilla, mencionan la palabra "centenares" y no "miles" ni "decenas de miles". Textualmente el borrador decía:
Las bajas producidas se cuentan por centenares. Hombres y mujeres de todas las edades, de todas las profesiones, de todos los niveles sociales y hasta niños, cayeron bajo las armas de la delincuencia terrorista en todas las latitudes de la república
Y efectivamente son "centenares" porque la publicación "El Terrorismo en la Argentina", publicado por el Poder Ejecutivo en el año 1979, contabiliza 687 muertes provocadas por la guerrilla desde 1969 a 1979. Sobre este punto, hemos hablado en el siguiente enlace: 
]

A diferencia del documento de Arancibia Clavel o el comentario de Ricardo Flouret, que pertenecen al ámbito de los documentos y conversaciones secretas, el Documento Final fue un documento público, emitido a la televisión nacional el 28 de abril de 1983


En el juicio a las juntas de 1985, lamentablemente ni el fiscal Strassera ni los jueces tuvieron la inteligencia o la "intuición" de interrogar a la última junta militar acerca de los 25.000 subversivos / 15.000 combatientes impresos en el documento. Lo más parecido a una interrogación de ese estilo, son las siguientes preguntas -y sus respuestas- que el tribunal le hizo a Cristino Nicolaides y a Augusto Hugues, ambos integrantes de la última junta militar que comandó el gobierno militar. Fueron citados para prestar declaración sobre el elaborado del Documento Final. A continuación destacamos las preguntas relacionadas con el nivel de información de ese documento:

-Juez Arslanian: ¿De qué tipo de documentación, antecedentes o informes se valieron ustedes para elaborar el Documento Final?

-Nicolaides: Claro, fue bastante complejo señor Presidente, porque fue una suma, más que una suma fue un sistema de trabajo de distintos organismos que tenían vinculación en la lucha contra la subversión. Se hizo una reunión de antecedentes, se hizo una evaluación, una recopilación de antecedentes, y sobre la base de esa recopilación y evaluación se fueron sacando las conclusiones habidas a la luz de todo un sistema de trabajo, y como sistema de trabajo que estaban las secretarías de Estados mayores, estaban los Estados mayores, estaban los informes policiales, estaban los informes de los organismos de inteligencia, estaban los informes de gobierno. Es decir, era una trama muy compleja de antecedentes que había que elaborar, pero sobre la base de una adecuada -insisto- depuración y evaluación


De lo dicho por Nicolaides, se infiere que la información volcada en el Documento Final no fue improvisada, aunque esto no es una novedad considerando que tenemos los documentos preliminares que lo demuestran. En todo caso, es una prueba más para derribar cualquier argumento malicioso que acuse de "espontaneidad" el Documento

enlace a los testimonios del juicio, a partir de la página 24 en adelante: 



Sin embargo, el represor Albano Harguindeguy, igualmente citado a testimoniar en el juicio a las juntas del 85, reafirmó el caudal tan elevado de "subversivos": 

-Juez Gil Lavedra: el Tribunal quisiera que usted manifestara qué estimación aproximada numérica tiene usted de los efectivos de los delincuentes subversivos en la época en que usted asumió el Ministerio

-Harguindeguy: la clandestinidad total en que actuó la subversión hacía muy difícil dar una estimación real de los efectivos subversivos, clasificados en dos componentes: los combatientes, y los apoyos logísticos, más correo, mimetización dentro de la población, etc. Yo no tengo una cifra ni soy la persona más indicada, creo que son los servicios de inteligencia, y las propias fuerzas armadas, quienes podrían dar una cifra aproximada, aunque se barajaron en algunas oportunidades, se habló de 25.000 hombres combatientes

-Gil Lavedra: ¿Esta cifra de 25.000 hombres es la que usted escuchó, es las que se rumoreaba dentro de los efectivos de las fuerzas armadas de aquella época?

-Harguindeguy: si, era alguna de las cifras que en algunas oportunidades, en conversaciones más informales, barajaban miembros de las Fuerzas Armadas

-Gil Lavedra: ¿Conoce usted las bajas sufridas por los delincuentes durante la lucha?

-Harguindeguy: yo no he llevado una estadística de las bajas sufridas, y nunca he participado de alguna reunión donde se haga mención expresa de las bajas sufridas por el terrorismo en la lucha contra la subversión

pag 12: 


Es posible que Harguindeguy se equivocara con "25 mil combatientes" y quisiera expresar que eran 25 mil hombres en total, incluyendo combatientes y logística. Pero por lo demás, las fuerzas armadas estimaban la magnitud de su "enemigo" en 25 mil. Esto en principio no significaría nada, de no ser porque en su cifra de combatientes, los militares ya habían estimado números mucho, mucho menores a los 15.000/25.000 del "Documento Final" años antes. Por ejemplo, la policía en su allanamiento a "La Pastoril" del 29 de marzo de 1976, logró acceder a las estimaciones que la cúpula del ERP hacía sobre sus propios combatientes (tengo un posteo al respecto y no voy a extenderme aquí). El mismo ERP, el mismo Santucho, el mismo Buró Político-Militar del ERP estimaba su propia fuerza en 350 combatientes para fines de marzo de 1976..... Ahora díganme por qué los militares dijeron en 1983 que la guerrilla TUVO 15.000 COMBATIENTES cuando ya sabían en el año 76 que el ERP no llegó ni a 500 combatientes para ese año. Montoneros tampoco llegó a tantos combatientes para cubrir ese faltante, ni otras organizaciones. Por eso el Documento Final no puede ser tomado como un simple indicio, sino como una prueba en toda regla (con la valoración prudente que le amerita por supuesto, al ser un nexo indiciario entre dos exposiciones contradictorias)

Creo que se entiende ahora por qué es tan sospechosa la cifra deliberadamente inflada de 15.000 combatientes en el Documento Final.....

...Y porque además el discurso militar que seguramente muchos recordarán es que "los militares ganaron la guerra contra la subversión, aniquilaron la subversión". No se entiende, en principio, que ganaran una guerra desapareciendo "solo" a 6 mil personas, dejando sin aniquilar a los restantes 9.000 combatientes, que al parecer no tuvieron muchas ganas de oponer resistencia al gobierno militar tampoco


En las hojas halladas del Edificio Condor, que transcriben una porción importante del periplo que sufrió el Documento Final en su elaboración por parte de la Fuerza Aérea, los mismos represores tipean:

El documento en sí, es una recopilación cuidadosamente analizada en todo cuanto han dicho las FF.AA. desde 1976 para justificar su accionar y explicar las desapariciones

citado en este programa (recomendable poner el video en HD para ver mejor el párrafo aludido del documento):


Esto quita aun más la posibilidad de espontaneidad y de falta de cálculo en lo que escribieron, aplicando al ejemplo de los 15.000 combatientes fanatizados para matar. El Documento fue claramente elaborado con el objetivo de explicar y solucionar el problema de los desaparecidos


El general Roberto Viola, uno de los imputados en el juicio, declaró que la guerrilla contó con 20.000 combatientes. Es el mismo Viola que en la conferencia de 1977 expuso los datos de las 18 células de combate de Montoneros para junio del 76 y sus escasas viviendas. Ese Viola testimoniaba que hubo 20 mil combatientes de la "subversión". Es una reafirmación de las intentonas del Documento Final (página 29):


Como comparación, vale señalar que en la guerra de Malvinas, se destinaron 7.500 combatientes ingleses a las islas. El número no tiene en cuenta el apoyo detrás de esos cuadros (como la fuerza aérea), pero limitándonos a la invasión por tierra, ese fue el total de soldados (al respecto véase el libro "El Drama de la Autonomía Militar"). Y perdimos la guerra (incluso con la gran posibilidad de haberla ganado por simple ubicación geográfica). Ahora, el Documento Final emitido un año después de la derrota de Malvinas, pretende convencernos que la guerrilla aglutinó en su apogeo el doble de soldados que los ingleses: 15.000 combatientes "fanatizados para matar"; cifra que no considera el respaldo logístico dentro de las 10 mil personas que quedan de los "25.000 subversivos". Y se supone que le ganamos a 15.000 combatientes, en una guerra "irregular" supuestamente más difícil que la guerra regular para la doctrina militar
El siguiente enlace conduce a una explicación más detallada que impide sostener que la cifra de 15.000 combatientes fue erróneamente falseada, sino intencionalmente falseada; lo que descarta cualquier acusación de especulación al momento de interpretar su valor como fuente importante:

Aunque hay más elementos para mostrar, ya podemos hacernos una idea sólida del por qué no es arbitrario estimar un número mayor de personas desaparecidas y muertas que el registro estatal
"Ay, pero ez ke Videla le dijjjjo a Zeferino Reato ke zon 7 mil u 8 mil" Claro que si, campeón...... y Firmenich dice que los Montoneros no mataron a Rucci ¿Le querés creer a Firmenich ahora? Sobre el valor jurídico de una confesión y declaración, me remito al siguiente enlace: 

Además, el mismo Videla se contradice en su rebaja numérica puesto que en el libro "El Dictador" de María Seoane, él declaró sobre las desapariciones: 
"No, no se podía fusilar. Pongamos un número, pongamos cinco mil. La sociedad argentina no se hubiera bancado los fusilamientos" 
Y en el libro de Ceferino Reato "Disposición Final": 
"Pongamos que eran siete mil u ocho mil personas las que debían morir para ganar la guerra contra la subversión; no podíamos fusilarlas"
Videla entre una declaración y otra aumentó a 3.000 desaparecidos máximo su estimación ¿A cuál Videla le creemos? ¿Al Videla de María Seoane, o al de Ceferino Reato? Parece que cuando le conviene, a Videla no le molesta "inflar" 3 mil muertos más para encajar con los cálculos de Ceferino Reato ¡¡¡Y después se quejan de Estelita de Carlotto cuando infla las cifras de desaparecidos!!! 
Eso sin olvidar que las 2 declaraciones de Videla van a contramano de lo que la misma junta militar publica en su Documento Final de 15.000 combatientes ideológicamente fanatizados para matar. Videla tendría que haber dicho que al menos unas 15 mil personas debían ser eliminadas para ganar la guerra contra la subversión (más allá de si después se alcanzó ese número de muertes o fue menor). Es de recordar que Videla formula sus declaraciones muchos años después de 1983, cuando el negacionismo sobre el número de desaparecidos se había instalado en favor de +6.000 desaparecidos. Mayor mérito de predicción hubiese tenido que Videla dijera "7 mil u 8 mil" en 1983 o antes. A pesar de su escaso valor, Ceferino Reato continúa abrazando lo que dijo Videla como algo válido y relacionado con el número real de muertos ¿Por qué Reato no toma lo que se anotó en el Documento Final? No digo que Reato se circunscriba a la cifra de 30 mil o 20 mil, pero si quiere tomar las palabras de las "altas jerarquías", es evidente que el Documento Final de 1983 posee un valor más alto que el Videla del año 2001 en adelante. Pero Ceferino Reato demuestra un escaso interés en contrastar fuentes y cronologías

Otro represor que le "acomodó" los números a la prédica de Ceferino Reato, es Albano Harguindeguy. En el libro "Disposición Final" y "Los 70: La Década que siempre vuelve", Reato saca a relucir la siguiente conversación entre él y Harguindeguy:
-Harguindeguy: se recopilaron [en el año 1979] todos los pedidos ya hechos por personas desaparecidas y se abrieron oficinas para recibir denuncias, sobre las cuales el ministerio pedía datos a quienes podían haber intervenido por razones de espacio, tiempo, actividad. Y con eso se hacían las fichas; todo estaba en el archivo. La compilación de todos esos datos era la lista que yo tenía en la caja fuerte del ministerio
Harguindeguy aseguró que le dejó la lista “al ministro siguiente”, el general Horacio Liendo, y que no se quedó con ninguna copia porque “me continuaba un ministro de la misma fuerza, de la misma posición”
-Ceferino Reato: ¿Cuántos nombres había en esa lista?
-Harguindeguy: Alrededor de ocho mil

Desde ya, el represor habla de 8 mil en una conversación de principios de siglo con Reato. Hubiese tenido muchísimo mayor mérito que Harguindeguy manifestara públicamente que eran 8.000 desaparecidos en el año 1979 (antes de la CONADEP), y no en el 2010 (después de la CONADEP). Asi que en la misma base cronológica el relato de Harguindeguy no tiene valor alguno, y Reato comete la irrelevante o pésima práctica investigativa de incorporarlo en sus libros como si fuese relevante. Tampoco se resuelve el problema de los "15.000 combatientes ideológicamente fanatizados para matar" del Documento Final
Pero más allá de esto, se puede afirmar que Harguindeguy acomodó los números a 8 mil para hacerle un favor a Reato (más allá de si éste le pidió o no que acomodara el número) ¿Por qué estoy diciendo esto? Porque en las cifras de la CIDH que llegó a nuestro país en 1979, obtuvo menos de 6.000 denuncias (es un dato tan público que la CIDH llegó a Argentina en 1979 que ni merece poner el enlace). Y en segundo lugar, hay un acta secreta del año 1983 del gobierno militar donde los pedidos de paraderos son menos de 6.700. Pag. 222: 
Harguindeguy infló a más de 1.300 casos para "acomodar" la cifra a las pretensiones "ocho-milistas" del apologismo

(Y eso que Harguindeguy aseguró en el juicio a las juntas que el ejército calculaba que la subversión tenía 25.000 personas. O sea que quedaron 17.000 personas sin reprimir..... y aún así, según ellos, "ganaron" la guerra)


De hecho, Ceferino Reato podía haber tomado la declaración que Ramón Camps le espetó al periodista Vicente Romero:

-Vicente Romero: ¿Qué cifra de desaparecidos considera usted más real? 

-Camps: entre seis mil y ocho mil. Pero no puedo precisar una cantidad exacta, porque no sé cuántos se encuentran en el extranjero


Esto lo dijo antes de la CONADEP, por lo que tiene mucho más mérito para demostrar que son 8 mil en vez de 20/30 mil (aunque después Camps se contradice con la cifra de muertos enterrados y los 5.000 desaparecidos suyos). Pero al tonto de Reato no se le prende las luces ni siquiera para construir su relato con alguna solidez ¡¡Que encima lo tengo que ayudar yo!!!

-Hay otros testimonios muy directos de una cifra mayor de desaparecidos. Por ejemplo, sobrevivientes de La Perla que trabajaron como esclavos, testimonian que los obligaron a realizar la transcripción del inventario de detenidos. La sobreviviente Graciela Geuna testimoniaba en los años 80 que había 3 listas de prisioneros: dos de estas listas tenían 500 nombres y una tercera lista de 600 nombres. Eso daría un mínimo o promedio de 1.600 detenidos en La Perla desde 1976 a 1978. Pag. 145:


El registro estatal tiene 750 muertos y desaparecidos de Córdoba en todo el trayecto 1970-1983 (no todos ellos pasaron por La Perla). Pag 21:


Las cuentas no dan: sumando liberados, hay muchos detenidos de La Perla que no se denunciaron (aún suponiendo que sean sobrevivientes, no denunciaron)

La página APM agrega otros testimonios para una nueva suma: ellos recuerdan haberlo confeccionado en 5 libros donde entraban 500 nombres cada uno, pero el último no lo llegaron a completar, por lo que el número de detenidos que pasaron por La Perla es mayor a 2.000 personas y menor a 2.500 (véase el anexo "Sobre el número de desaparecidos"). Desconozco personalmente quiénes son estos testigos "nuevos" 

Se trata en el caso de Geuna, de una fuente primaria debido a que tuvo contacto directo con listas. Es cierto que alguien puede insinuar que la sobreviviente miente e inventa ese cuento, pero estos no son los únicos testimonios sobre cifras de desaparecidos en determinados centros o lugares
Hay testimonios de sobrevivientes, represores y terceros, que mencionan personas o segmentos cuyas características no concuerdan con lo que el Estado tiene registrado. Daremos algunos ejemplos:

*El médico Alberto Augier, sobreviviente del centro clandestino de detención de Arsenales de Tucumán, escribió un libro titulado “Mi Purgatorio ¿O el Infierno?” antes de morir en el 2007, donde relata su cautiverio. Allí conoce a algunos desaparecidos registrados como Damián Márquez, pero también a un viejo apodado “el carancho”, y un hombre de supuesto apellido Maldonado al que lo trajeron junto con su hijo de 11 años. Luego de torturarlo por más de 1 hora, le pegaron un tiro en la cabeza; todo esto delante del hijo. El chico estuvo aproximadamente un mes en el centro, después se lo llevaron ignorando el testigo su suerte. El Estado sin embargo no tiene denunciado la desaparición de un padre con su hijo menor en Tucumán en la brecha que narra Augier (ni tampoco a ningún viejo que lo apodaran como “el carancho”)
¿Quizás este testigo mintió e inventó personas ficticias?? Es una posibilidad…. pero tenemos una posibilidad mayor que Augier esté diciendo la verdad, y esto por lo siguiente: Augier en su libro cuenta que lo llevaron al senador Damián Márquez a Arsenales de Tucumán. El señor Damián Márquez continuaba desaparecido al momento que Augier escribe su libro. Augier muere en el año 2007. Y en el año 2011 el equipo de antropología forense descubre en Arsenales los cuerpos de varios desaparecidos, entre ellos el de Damián Márquez. Eso significa que Augier no estaba mintiendo en su testimonio cuando lo vio al senador en ese centro clandestino (salvo que los negacionistas quieran decir que Augier ya hecho fantasma colocó el cuerpo del senador en el centro clandestino…….)

en el siguiente video se narra sobre el libro de Augier y también acerca de las fosas de Arsenales:

https://www.youtube.com/watch?v=EHvVnhvlefA 

*El jefe de la plana mayor del Comando del Primer Cuerpo de Ejército, el señor Roberto Roualdes, le espetó al señor Emilio Mignone en una conversación de 1977 que mantenían sobre un Comando de Ejército por Palermo, mientras golpeaba con su bota el suelo:
¡¡Aquí en las mazmorras, tengo a 34 hijos de militares y ninguno de ellos los verá nunca más!! A usted [Emilio Mignone] lo recibo porque es un civil y sé que no está empiojado. Pero ellos [los padres de los detenidos] por ser militares no tienen derecho a preguntar nada
34 hijos de militares para octubre de 1977, según el represor Roauldes. Que se sepa, el Estado no tiene registrado esa cantidad en el lapso descrito

en la página 67 de la siguiente conferencia, Emilio Mignone relata lo que le dijo Roualdes sobre los hijos de militares:

http://ijdh.unla.edu.ar/advf/documentos/2018/10/5bb7af43ad461.pdf 

(En algunos lados, la cifra que se indica es de 33 en vez de 34 hijos de militares. No modifica sustancialmente la evidencia)

La declaración proviene de la conversación entre Roualdes y Mignone. Mignone solía asegurarse de registrar las conversaciones en una minuta, y distribuirla por fotocopias, incluso a quienes entrevistó. Por ejemplo, Mignone mantuvo conversaciones con el almirante Massera, redactada también en minuta y cuya distribución le llegó a las manos del represor de la ESMA. En este video Mignone lo explica (a partir del minuto 1:40):

No queda claro sin embargo si en efecto existe una minuta sobre esta conversación con Roualdes. El antecedente con Massera hace poco probable que las conversaciones se hayan fraguado. De todas maneras, es una prueba más que se suma al conjunto


*En La Ribera, hay un caso bastante señalado de un grupo de 17 personas que fueron secuestradas en un baile, pero del cual solo se conoce el nombre de 1 persona. No hay denuncias ni de familiares o de amigos militantes que tengan como desaparecido a chicos que fuesen a un baile. Es decir, se presume que hay 16 personas (muertas o sobrevivientes) sin registrar en un evento. Los organismos de DD. HH. en La Ribera proyectan por lo menos a 700 personas en esa situación de desconocimiento de sus nombres (a partir minuto 15:32):



*Está el testimonio del teniente coronel Jorge Mittelbach, un hombre que se rehusó a colaborar con Bussi en la represión. Mittelbach cuenta que al ser enviado como integrante de la fuerza de tareas Berdina en la continuidad del Operativo Independencia de 1976, y al llegar a su lugar de destino, vio cómo torturaban a varios prisioneros, entre ellos una pareja de ancianos y una niña de 12 años

Mittelbach ordenó que se detuvieran los tormentos, y rescató temporalmente a la chica de 12 años, encargándole que le cebe mates para salvarla de las garras de los demás. Mittelbach logró el desmantelamiento del lugar clandestino de detención, y sus superiores se llevaron a los prisioneros a otro destino que se desconoce

No hay constancia en el RUVTE (el registro estatal) de una chica desaparecida de 12 años o edad similar en Tucumán, ni con las características del caso aludidas por Mittelbach

Trailer de la película "Santa Lucía", donde Mittelbach cuenta su oposición a Bussi: 



*E
l sobreviviente de la "La escuelita" de Bahía Blanca, Ricardo Bustos, referencia que escuchó a un bebé llorar porque estaba siendo torturado con quemaduras de cigarrillo; la madre gritaba que no lo quemaran más. Bustos fue secuestrado el 23 de marzo de 1976 (un día antes del golpe) y estuvo detenido en el L.R.D. por aproximadamente 17 días. Que se sepa, el Estado no registró esa clase de víctimas en Bahía Blanca: las embarazadas denunciadas son posteriores al secuestro de Bustos, y aquí estamos hablando de un bebé ya nacido ¿Quién es entonces el bebé torturado con cigarrillos? ¿Sobrevivió él o su madre? ¿Son desaparecidos no registrados? ¿Son sobrevivientes que no denunciaron su situación? Pag. 578 de la siguiente causa judicial:



*Otro caso de posibles sobrevivientes no registrados: una pareja de ancianos en el centro clandestino "Servicio de Informaciones" de Rosario:



*El siguiente testimonio de la CONADEP perteneciente a un integrante de la Inteligencia de Campo de Mayo, dice que le consta la liberación masiva de aproximadamente 30 personas del lugar en abril de 1976. Serían entonces sobrevivientes no registrados?
enlace (conviene poner la resolución en HD para ver mejor la foja; respuesta al cuestionario 20):


*Después tenemos las estimaciones basadas en una frecuencia de tiempo; es decir en la cantidad de días promedio que estaban detenidas las personas. En mi modesta opinión personal, son estimaciones muy inestables porque no se basan en un testimonio o documento "duro" como lo que mostramos del caso Etchecolatz o Vergez o el caso Vilas, sino que se fundamentan en un deber ser del comportamiento carcelario. Solo pueden servir (de nuevo mi opinión) para evaluar la verosimilitud de otra prueba (ya sea a nivel "local" o nacional esa prueba). Pero en fin, un ejemplo de ello es el centro clandestino de la Mansión Seré: el promedio de días de detención de aquellos que pasaban por ese "Lugar de reunión de detenidos" era menor a 30 días. Considerando que el centro clandestino estuvo funcionando por 1 año y 4 meses, y que había 4 habitaciones con prisioneros, se calcula que por el centro clandestino pasaron entre 600 y 800 personas



En cuanto a la capacidad de detenidos que tenía Campo de Mayo, está el testimonio de Victor Ibañez, quien el 26 de marzo de 1976 (dos días después del golpe de Estado) es designado a colaborar en ese centro clandestino atendiendo a los detenidos. Para ese entonces, el CCD ya albergaba más de 300 prisioneros (probablemente muchos de ellos fueron secuestrados antes del golpe) y los represores estaban planificando hacer lugar en el campo para meter más gente. Prima facie, la capacidad operativa es de +300 detenidos


No sabremos nunca la frecuencia y niveles de vaciamiento / llenado de secuestrados, pero si Scarpati a mediados de 1977 (supongamos el mes de junio) tenía el número de 3.500 prisioneros que pasaron por el LRD, esto es un promedio de 37 días por prisionero si se cumple el ratio de 300 detenidos al mismo tiempo. Cuota bastante alta de tiempo de detención, suficiente para volver verosímil la cifra aportada por Scarpati

En ninguna parte de su testimonio Ibañez deja anotado un vaciamiento brusco, casi total o evidente del centro clandestino por largo tiempo; más bien todo lo contrario: enfatiza un periodo de llenado compulsivo de prisioneros

A las mujeres embarazadas, cuando estaban a punto de parir, las llevaban al Hospital Militar que funcionaba dentro de Campo de Mayo. Después, ninguna de ellas volvió al pabellón. No te puedo decir qué pasó después ni con los bebés ni con las madres. No lo sé. 

Tampoco te puedo decir cuántas fueron las mujeres embarazadas que pasaron por El Campito. Por momentos llegamos a alojar a más de 600 detenidos al mismo tiempo, era imposible saber qué pasaba con cada uno de ellos. 

Los pabellones estaban tan llenos que con otro muchacho, del que me reservo su nombre pero que después de todo esto también quedó loco, empezamos a hinchar las bolas por la falta de colchones. Caía y caía más gente y no había suficientes para todos; tampoco frazadas. Estaban durmiendo de a dos o tres por colchón de una plaza. A algunos los tuvimos que ubicar directamente en el piso, arriba de un trapito y sin ningún abrigo, en pleno invierno. Tanto insistimos que al final cometimos un error. 'Ya está solucionado el tema de los colchones', nos dijeron un día. '¿Dónde tenemos que ir a buscarlos?', preguntamos nosotros. 'Ustedes no tienen que ir a buscar nada, ahora los vienen a buscar a ellos', nos respondieron. La solución fue eliminar a todos los que para ellos ya sobraban, y nos dejaron a uno por colchón. Después de ese día ya no pedíamos nada más



Ibañez también narra el flujo de raciones de comida en Campo de Mayo: podía ser que un día se llevaran raciones de comida a 140 prisioneros y a las 48 horas iban a buscar raciones solo para 20 porque quedaban esos detenidos en el campo, y cinco días más tarde debía traer 150 raciones. Ese era el tipo de movimiento varias veces


Cuando le preguntaron a Ibáñez cuantas personas secuestradas vio en Campo de Mayo, respondió: “No sé. Pero en los partes de cocina para racionamiento, se cocinaba a veces para 350. A las 48 horas se cocinaba para 50 y a los tres días para cien más. Así era el movimiento ahí adentro”


Estos testimonios de Victor Ibañez, permiten afirmar sin muchos márgenes de arbitrariedad:

--Que la capacidad del centro clandestino podía exceder las 300 personas al mismo tiempo (con independencia que estuviera lleno siempre con ese número, la permanencia de los mismos detenidos, etc. Ese no es el punto ahora)

--Que se podía, en un corto tiempo, deshacerse de una gran cantidad de prisioneros hasta dejar semi-vacío el centro clandestino; lo que repercute en la evaluación de verosimilitud de los vuelos de la muerte, por ej. recordemos que Lanusse habló de 8.000 personas arrojadas al mar en la provincia (aunque Ibañez desconoce qué sucedían con esos detenidos)

--Que se podía, en un corto tiempo, sumarse abruptamente una gran cantidad de detenidos en el centro clandestino

Los testimonios de Ibañez de ninguna manera permiten estimar con precisión el número aproximado de detenidos que pasaron por Campo de Mayo. Pero tiene la suficiente sustancia para evaluar otras cosas de importancia en el conjunto probatorio que se ha ilustrado modestamente en este posteo (caso Lanusse)


*La película "El Lado Oscuro" reproduce el testimonio real de un torturador bastante psiquiátrico que decidió hablar y jactarse de sus andanzas ante uno de los abogados de la CONADEP. En el film, tenemos datos que no concuerdan con lo que tiene el Estado (como el arrasamiento que cuenta durante el Operativo Independencia)

https://www.youtube.com/watch?v=sxnOIU_Opog 


Como observan, la evidencia no es unidireccional. No se trata solo de testimonios de sobrevivientes interesados en dejar mal parados a los militares, sino también de represores, colaboradores de la represión, terceros con información destacada. A través de diversos medios como testimonios orales, documentos, testimonio escrito

-Kevin Mullen, primer secretario de la nunciatura, declaró en diciembre de 1978 en una reunión informal de la Embajada local de oficiales de derechos humanos, que un oficial superior del ejército había informado al Nuncio que los servicios armados se habían visto obligados a “encargarse” de 15.000 personas en su campaña anti-subversiva
Si bien es una fuente secundaria (se trata de lo que le dijo un oficial del cual se desconoce su jerarquía y acceso a la información) y por ende de menor valor, no obstante es una de las fuentes secundarias más importantes. Primero porque no deja de ser un oficial superior del ejército quien le entrega esa declaración, es decir todavía nos encontramos en un ámbito relativamente sólido de acceso a información sensible. Y segundo, es importante si lo sometemos a un análisis crítico con la cronología y constancia de la información privada sobre el número de desaparecidos: Emilio Mignone en agosto de 1976 tenía un dato sobre 15.000 desaparecidos; Rodolfo Walsh en 1976 y en la carta abierta de 1977 también tenía el dato de 15.000 desaparecidos. El Documento Final de 1983 habla de 15.000 combatientes. Amnistía Internacional en noviembre de 1976 había recibido dentro del propio país 3 hipótesis de cifras de desaparecidos: una era 3.000; la otra 30.000; y la tercera era la de 15.000; que en declaraciones de Amnistía esta última era la hipótesis más escuchada. La revista del ERP “Estrella Roja” tenía un número similar de 17.000 desaparecidos para fines de 1976. El represor Roberto Viola en 1978 dice que la subversión contó con menos del 0,1% de la población (menos de 30.000 personas) en este video [a partir del minuto 8:49]….

…. lo que vaticinaba o anticipaba el dato del libro “El Terrorismo en la Argentina” que publicó el Poder Ejecutivo en 1979, que señala que la subversión había contado con no más del 0,05% de la población como efectivos (entre 13.000 y 15.000 personas como límite: 13 mil si la población es de 25 millones; 15 mil si la población se redondea a 30 millones). El número aproximado de “15.000” se hace demasiado presente en este largo recorrido, y la declaración de Mullen es indicio claro que no se trata de un número meramente periodístico, sino una estimación arraigada que tenían las fuerzas armadas sobre la gente que debían de eliminar y que, al parecer, de acuerdo a Mullen, eliminaron o “se hicieron cargo” (de otro modo, no tiene sentido decir que se encargaron de 15 mil personas si todavía no lo habían hecho) 

La revista "Estrella Roja", en la página 7, avisa de 17.000 desaparecidos:

http://www.ruinasdigitales.com/revistas/EstrellaRoja%2088.pdf 

Es probable que el dato de esa revista provenga, en parte, de enmarañadas confusiones con el número de habeas corpus, con el número de detenidos del PEN, etc. No obstante, también existe la hipótesis que la cifra sea un reflejo del número de "15.000" que en aquellos tiempos se escuchaba, y que resulta difícil atribuirlo meramente a cálculos de los habeas corpus

En el cable de ANCLA del 27 de agosto de 1976, Rodolfo Walsh habla de 15.000 pero detenidos a disposición del PEN:

https://www.agenciapacourondo.com.ar/militancia/rodolfo-walsh-los-cables-de-la-agencia-de-noticias-clandestina 

(en su carta abierta lo reformula a 15.000 desaparecidos)

Emilio Mignone en agosto del 76 en cambio habla de 15.000 muertos o desaparecidos clandestinamente:

https://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-43387-2004-11-09.html 

En cualquier caso, lo importante no es esto, sino la fuente de Kevin Mullen, que encuentra aquí:

https://nsarchive2.gwu.edu//NSAEBB/NSAEBB185/19781227%20Disappearance%20Numbers%200000A8B1.pdf  

-Faustino Fernández, sobreviviente del centro clandestino "Vesubio", testimonió que escuchó a los guardias comentar que por ese centro clandestino pasó toda la Columna Sur de Montoneros, unas 1.200 personas. Pag. 191:
(esto parece contradecir los estimativos 100% de Carlos Martínez, si bien no se sabe si en este testimonio están contando a los periféricos o colaboradores accidentales)
Esta declaración, la tomamos como fuente secundaria (en tanto se desconoce cuánta información buena podía tener un guardia)

(Todos los puntos que siguen a continuación es relleno poco trascendente como evidencia; puede saltar usted hacia el próximo capítulo)
-La siguiente prueba es incierta en su valor. Todavía no podemos discernir si nos sirve o no nos sirve, ya que debe ser sometida a interpretaciones diversas y, sobre todo, requiere de información complementaria que al día de hoy carecemos. Por lo que simplemente la exponemos como "hipótesis"
Primero, empecemos con un dato concreto: el libro publicado en el año 1979 por el gobierno militar de Videla, "El Terrorismo en la Argentina", estima que la subversión llegó a acumular no más del 0,05% de la población como efectivos. Página 18 del siguiente enlace: 
Este porcentaje de 0,05%, analizando la población de aquel entonces (26 millones de habitantes), se traduce entre 13.000 a 15.000 personas. Es concordante con el número de "15.000" del Documento Final
Hasta aquí, bien. Nada raro que decir. Es un dato más que se añade al conjunto

Ahora, veamos los siguientes gráficos: en abril de 1977, hubo una directiva, la 504, firmada por Videla y en donde Carlos Martínez, jefe del Departamento II de Inteligencia, aparece firmando dos gráficos del estado actual de las organizaciones político-militares Montoneros y ERP para fines de febrero de 1977. El mismo Carlos Martinez había informado a la prensa el 20 de abril de 1977 que el ERP tenía el 90% aniquilado y Montoneros un 25% de su capacidad, en comparación con 1975. Siguiente enlace, página 78 referencia 9 (avisamos que el enlace conduce a la descarga automática de su PDF):
pag. 30 del siguiente enlace están los dos gráficos el del ERP y el de Montoneros:


Ejemplo de los gráficos de fines de febrero de 1977, firmados por el jefe de inteligencia Carlos Martínez: la organización Montoneros estaba fuertemente desgastada para esa fecha   

En este enlace, la Directiva 504 de Videla. En la página 36, tenemos el gráfico de aniquilamiento de Montoneros en una mejor resolución:

Lo extraño es que en los gráficos, los militares parecen estimar el número de efectivos que todavía les queda a estas organizaciones. Lamentablemente al ser dibujitos hechos por lápiz o lapicera, están en muy mala calidad para ser legibles. En el caso del gráfico del PRT-ERP, es imposible su lectura. Pero todavía es factible leer con detalle casi todo lo relacionado en cuanto a Montoneros: la columna de La Plata tiene un 70% de aniquilamiento y 550 efectivos disponibles; Buenos Aires Sur tiene un 30% de aniquilamiento y 350 efectivos; Capital Federal tiene un 50% de aniquilamiento y 900 efectivos disponibles; Buenos Aires Oeste tiene un 60% de aniquilamiento y 300 efectivos disponibles; Buenos Aires Norte tiene un 90% de aniquilamiento y parece que 41 efectivos disponibles; Paraná tiene al menos unos 110 efectivos disponibles; Santa Fé un aniquilamiento del 75% y 56 efectivos; Córdoba está fuertísimamente al borde del aniquilamiento y únicamente cuenta con 18 efectivos. Solo con estos números (sin sumar los otros casilleros que son poco legibles) tendríamos unos 2325 integrantes 
Aplicando la proyección contraria, es decir rellenando cada columna a su 100%, llegamos a una cifra de aproximadamente 6.000 personas

Veamos cómo llegamos a los 6.000 "efectivos" de Montoneros, para 1975:
Si la Columna de La Plata tiene un 30% salvado para 1977, y esto constituye 550 miembros, entonces el 100% de la Columna sería 1833 personas
Si la Columna de Buenos Aires Sur tiene un 70% salvado para 1977, y esto constituye 350 miembros, entonces el 100% de la Columna sería 500 personas
Si la Columna de Capital Federal tiene un 50% salvado para 1977, y esto constituye 900 miembros, entonces el 100% de la Columna sería 1800 personas
Si la Columna de Buenos Aires Oeste tiene un 40% salvado para 1977 y esto constituye 300 miembros, entonces el 100% de la Columna sería 750 personas
Si la Columna de Buenos Aires Norte tiene un 10% salvado para 1977 y esto constituye 41 miembros, entonces el 100% de la Columna sería 410 personas (en verdad no es muy claro el número escrito por lapicera, asi que asumimos que se trata de 41 personas las sobrantes)
De la Columna de Paraná, el gráfico no es exacto en sus porcentajes de desgaste para 1977 porque ofrece dos opciones: 30% y 40%. Y el número de efectivos sobrantes también varía entre 110 miembros y 150 miembros. Si elegimos la cifra más baja de 110 miembros que constituye el 70% no aniquilado, entonces el 100% de la Columna serían 157 personas
De la Columna de Rosario, hay un 40% salvado para 1977 pero en el gráfico de Martínez, el número de efectivos es 152; entonces el 100% de la Columna serían 380 personas 
Si la Columna de Santa Fé tiene un 25% salvado para 1977, y esto constituye 56 miembros, entonces el 100% de la Columna sería 224 personas
La Columna de Córdoba no tiene el porcentaje de aniquilamiento aclarado, pero tiene la cifra de efectivos disponibles: 18 miembros. El cuadro de su regional está pintado con tachas oblicuas, que significan "Muy fuerte desgaste y próxima a ser aniquilada", que es el código gráfico utilizado para Columnas que van del 60% al 90% aniquiladas. Suponiendo conservadoramente que Córdoba esté un 70% desgastada, esos 18 miembros constituyen el 30% salvado, por lo que el 100% de la Columna serían 60 personas 
El resto de las Columnas no las he sumado por desconocer el significado de sus porcentajes y números. El gráfico no es comprensible para mí en esas regionales. Solo el caso de Mendoza parece tener algún sentido, con 15 militantes sobrantes en total en dos destacamentos, pero sin conocer el desgaste sufrido (aunque están casi aniquiladas). Casos como los de Bahía Blanca, tienen sus gráficos ilegibles y con números que parecen demasiado altos para su envergadura como destacamento y su nivel de desgaste (probablemente sea culpa de la escasa legibilidad que puede hacer confundir sobre la materia); por consiguiente no los tomamos

Si sumamos todos los totales 100% de las Columnas: 1833 + 500 + 1800 + 750 + 410 + 157 + 380 + 224 + 60 + 15 = 6129 personas. En realidad son más de 6129 porque no sumamos las otras Columnas, y porque fuimos conservadores en asignar porcentajes de aniquilamiento en las Columnas dudosas. Es un poco absurdo creer por ejemplo que Córdoba solamente tuviera 60 personas como regional de Montoneros (acuérdese que Héctor Vergez solo en el episodio "La Noche de los Moncholos" secuestró a 48 montoneros, antes de la "inauguración" de La Perla). Algunos autores le atribuyen 900 militantes a la Columna Norte todavía para 1976, pero desconozco de dónde sacaron el dato
El jefe de inteligencia del Operativo Independencia, coronel Eusebio González Breard, en su libro "La Guerrilla en Tucumán: una historia no escrita" cuantifica el número de militantes de Montoneros en la Columna de Tucumán a inicios de 1976 en 180 efectivos aproximados (30 combatientes + 150 militantes). Página 140:
El gráfico de Carlos Martínez habla de "efectivos" que poseen las organizaciones. Lamentablemente no sabemos el alcance de la palabra "efectivos" para los represores. Desconocemos si refiere a los militantes estructurados, si incluye simpatizantes, si incluye aspirantes, etc.

El gráfico del PRT-ERP de Carlos Martínez es ilegible sobre la cifra de efectivos, aunque sus códigos gráficos muestran que todas sus regionales están "próximas a ser aniquiladas" o inactivas. Martínez a la prensa había dicho que el PRT-ERP estaba aniquilada en un 90%, lo que coincide con los códigos gráficos
Paradójicamente, el "Tata" Yofre en su libro "Fuimos Todos" nos ayuda con los datos de los militantes que todavía no habían sido aniquilados al año 77. De acuerdo a informes militares, el PRT-ERP en suelo patrio tenía: en la Regional de Buenos Aires Norte-Oeste unos 72 militantes, la Regional Buenos Aires Sur unos 87 militantes, la Regional Capital Federal unos 90 militantes. También agrega que la Regional Riberas del Paraná está aniquilada en un 95% pero no indica su cifra de militantes. Y no mencionó a todas las columnas; lo que daría un aproximado de 250 efectivos a fines de febrero de 1977
(Quién diría que Yofre nos terminaría por beneficiar a nosotros más que a los apologistas)
Proyectando a su 100%, daría unos 2.500 miembros del PRT-ERP en 1975. Esto coincide con los estimativos realizados por la propia organización en "La Pastoril" de 2.750 miembros (Véase el siguiente enlace para entender de qué anexos estamos hablando:
Pero con una salvedad: esas 2.750 personas comprenden marzo de 1976, no el año 75: en teoría los muertos del ERP en el año 75 y principios del 76 nada tienen que ver con estos cálculos
Ya dijimos, que el concepto de "efectivos" no lo aclaran: ¿Abarca el simple colaborador, aunque no estuviese estructurado?? ¿Solo los militantes encuadrados? Cabe recordar que el PRT-ERP tenía otros 2.000 colaboradores y simpatizantes, totalizando casi 5 mil personas entre militantes y simples colaboradores. Los militares ¿También fueron a por los simples colaboradores?
Susana Sastre, una sobreviviente de La Perla que funcionaba como correo del PRT, testimonia que cuando la capturaron los militares, la llevaron al centro clandestino donde, además de torturarla, le mostraron un organigrama del PRT donde ella figuraba como correo. Esto significa que los militares también castigaban despiadadamente a los colaboradores o simpatizantes de esa guerrilla; al menos en Córdoba: 
Sin olvidar que los militares consideraban a todo colaborador o militante del PRT como potenciales combatientes: 

pag 30-31:
Recuérdese el triste ejemplo de la escuelita de Famaillá, donde fueron enviados 1507 prisioneros a ese centro clandestino a pesar que la guerrilla rural nunca superó los 120 combatientes. Asi que es ostensible que no solo los militantes "estructurados" eran enviados a estos antros

Si sumamos los "efectivos" de Montoneros y PRT-ERP según los militares, llegaríamos a un número de 8.629 personas aprox., bastante parecido al número de la CONADEP. Incluso podríamos deducir inicialmente que estos gráficos favorecen a quienes aseguran que solamente hubo 8.000 muertos y desaparecidos
Pero again, encontramos dudas: no sabemos si los gráficos de 1977/1978 se refieren a personas muertas, o si incluye sobrevivientes. El Estado tiene aproximadamente más de 3.000 sobrevivientes registrados (véase el último apartado de este posteo). Tampoco sabemos si añaden a exiliados, o a quienes pasaron a disposición del PEN. Es evidente que, si incluyera algunas de estas variables, los porcentajes de desgaste y de efectivos debieran ser otros: un número mayor; que el gráfico no lo está reflejando. Por tanto "teorizamos" (no es concreto) que el gráfico habla solo de personas ya muertas en sus porcentajes de desgaste
Volviendo al ejemplo de Famaillá, en los gráficos de Carlos Martínez sobre el PRT-ERP, pese a su ilegibilidad, se sobre-entiende que Tucumán está próxima a ser aniquilada (pero no aniquilada completamente), pese a lo cual su número de efectivos restantes está en los dos dígitos y no en los 3 dígitos. Si Acdel Vilas dijo que por la escuelita pasaron 1500 personas sin contar el año 1976, eso debería reflejarse en el gráfico de Carlos Martínez aunque sea con un número de 3 dígitos. Esto es otra pauta relevante que nos permite inferir que los gráficos de Martínez no incluye a los sobrevivientes de los centros clandestinos 
Si esto fuese así, y partimos del año 1975, tenemos aproximadamente 800 personas que superan el registro estatal a 1977. Recordemos: Montoneros tiene 6.100 efectivos pero a febrero del 77 le quedan unos 2300; es decir 3.800 fueron "aniquilados". El PRT-ERP tenía 2.500 militantes en 1975 (en realidad 1976 pero "ponele" que sea de 1 año anterior), y a febrero de 1977 solo le quedan 250 efectivos, es decir 2.200 fueron "aniquilados". Sumando los 3800 aniquilados de Montoneros con los 2200 del PRT-ERP son unos 6.000 "aniquilados" desde 1975 a 1977. El Estado, como hemos visto anteriormente en la imagen del RUVTE, tiene 756 muertos en 1975 y 3819 en 1976 (y no todos esos muertos pertenecen a Montoneros y ERP) = son 4.575 personas registradas por el Estado. El gráfico de Carlos Martínez en su nota, aclara que son "efectivos a la fecha del 28 de febrero de 1977", por lo que hay que sumarle los muertos y desaparecidos de los primeros 2 meses de 1977: unos 600 muertos aprox. acorde al siguiente cuadro del RUVTE, página 20:
Sumando todos los muertos de 1975 hasta los dos primeros meses de 1977, serían unos 5.200 muertos VS los 6.000 aniquilados de los gráficos
Teóricamente los números de los gráficos no comprenden las bajas ocasionadas en las estructuras orgánicas ajenas a una Columna, como el caso del Área Federal; lo que incrementa la cifra de bajas totales de la organización guerrillera
Y hay que sumarle los muertos de otras organizaciones menores, tales como el PST; OCPO; FAP; PCML; etc.

Pero otra vez, a riesgo de marear, expliquemos los alcances de estos gráficos: no sabemos (realmente no lo sabemos) si los porcentajes de desgaste señalan únicamente a personas muertas. Además tampoco queda muy claro los criterios que utilizan los represores para calcular el desgaste, ya que en el siguiente documento -de junio de 1977- estiman que la Columna de La Plata de Montoneros está un 80% aniquilada pero con 180 efectivos, lo que proyectados al 100% darían 900 miembros, una cifra menor a la proyectada 100% en el gráfico de febrero de 1977. Pag. 48:
(la Columna Paraná tiene un desgaste de 65% y 180 efectivos, que proyectados al 100% dan un número mayor a lo que estimamos nosotros del gráfico de principios de 1977. Pag. 49 del enlace expuesto)
También, el gráfico de Carlos Martínez conceptualiza el desgaste atendiendo además los aspectos cualitativos, como puede ser la pérdida de material armamentístico o propagandístico de Montoneros / PRT-ERP. Por lo que existe posibilidad que una Columna sea considerada por los militares como desgastada, pese a tener un número casi intacto de militantes
Lo que SI podemos afirmar tajantemente, son dos cosas:
*Existe una fractura valorativa en los gráficos de Carlos Martínez, sobre los criterios de selección de efectivos en las organizaciones. Por ejemplo, no incluye en el aniquilamiento de Tucumán del PRT-ERP, todos los detenidos de la escuelita de Famaillá. Lo que nos lleva al siguiente punto: 
*El libro "El Terrorismo en Argentina", publicado en 1979, cuando la represión ya estaba casi totalmente desactivada, habla de un 0,05% de efectivos de la subversión en la población; es decir unas 15 mil personas aprox. Lo que hace discordante el gráfico de Carlos Martínez en principio, pero entendible si consideramos dicha fractura valorativa


-Otra fuente secundaria de relativa importancia es el documento desclasificado estadounidense, de junio de 1978, en el que informan que una fuente asociada con la Inteligencia de la Armada les había dicho que se ejecutaron a 19 trabajadores de cerámica en Campo de Mayo, en noviembre de 1977. El Estado tiene registrado solamente 11 desaparecidos de las cerámicas en el periodo octubre-noviembre de 1977. En teoría, faltan 8 personas por registrar. Hay 3 desaparecidos más del año 1976, por lo que si los sumamos tendríamos 14 desaparecidos registrados; continúan faltando 5 más 
Siempre es bueno recordar que esta es una fuente secundaria, y como tal no tendrá la misma valoración que una fuente primaria. Sin embargo, es una fuente relativamente seria porque, aparentemente, la información la concede un agente de la represión involucrado en la Inteligencia

El documento estadounidense sobre los trabajadores ceramistas:

https://nsarchive2.gwu.edu/NSAEBB/NSAEBB73/780614dos.pdf 

Y los que el Estado registró:

https://comisionjuiciocampodemayo.wordpress.com/juicio/obreros-ceramistas-desaparecidos-en-zona-norte/ 


-
Como indicio (y solo como indicio debilísimo), en agosto de 1976 el gobierno militar permitió la entrada de un máximo de 40 habeas corpus para la Justicia, de naturaleza referida a desapariciones. Es de preguntarse por qué el gobierno abrió la canilla hasta ese número de denuncias diarias, si tenemos en cuenta que las desapariciones registradas por el Estado no superaban las 20 diarias (con pocas alzas de 30). Empero, es un indicio y no sirve como nada más que eso. Amnistía Internacional en la pag. 37 del siguiente enlace habla del dato de los 40 habeas corpus diarios habilitados: 



-En el siguiente enlace, el investigador Marcos Taire da cuenta de la existencia de pueblitos o colonias azucareras barridas, desaparecidas; lamentablemente no menciona cuáles:

https://es.scribd.com/document/186518776/Marcos-Taire

Empero, en este artículo periodístico firmado por Taire, pone el ejemplo de la colonia Santa Elena, completamente desaparecida sin rastros de sobrevivientes:

http://www.elortiba.org/old/notapas1566.html

(esto debe tomarse como fuente secundaria)


Otro dato que expone el periodista Marcos Taire es el de un sobreviviente del centro clandestino Arsenales de Tucumán, quien le cuenta que escribía los partes diarios donde se anotaban las "bajas" que se producían en el centro, calculando unos 800 muertos aproximadamente. Pag. 20:

https://es.scribd.com/document/186518776/Marcos-Taire

Pero no ofrece el nombre del sobreviviente, asi que solo lo pongo aquí como un dato anecdótico hasta que alguien verifique su nombre y precise la calidad de la fuente. En mis frustrados intentos de contactar gente, también quise contactarme con Marcos Taire pero carece de redes sociales

Si algún buen samaritano puede contactarlo por mí, lo agradecería

-Otro caso igualmente llamativo, sucede con los espías militares argentinos que fueron detenidos por las autoridades de México en enero de 1978, a raíz de la frustrada "Operación México" (el fallido intento de los comandos de Leopoldo Galtieri para asesinar a Firmenich). Estos espías pertenecientes al Área de Inteligencia 121, le informaron a las autoridades extranjeras que le detuvieron, que Montoneros llegó a contar con 25.000 guerrilleros armados en 1974 aprox. Si bien no es una prueba a favor o en contra de una determinada cifra de desaparecidos, es incongruente con el número verdadero de combatientes que tuvo la guerrilla en total ¿Acaso los espías argentinos quisieron inflar exageradamente la capacidad de Montoneros para impresionar a las autoridades mexicanas que le descubrieron? Es una posibilidad, aunque los mismos espías estiman que los montoneros actualmente (es decir en enero de 1978) contaban solo con 100 personas en Buenos Aires y alrededor de 500 exiliados, lo que constituye una cifra coherente de lo que podrían tener ¿Qué sentido tiene exagerar el número de lo que alguna vez tuvieron los montoneros, y en cambio no exagerar el número de exiliados que resultaba el justificativo de la operación?
Nunca sabremos qué quisieron decir con el número de "25.000 guerrilleros armados", pero ahí queda esta mención dentro de un universo donde, para junio de 1978, Arancibia Clavel informaba 22.000 entre muertos y desaparecidos; y ese documento de Clavel SI es prueba
Otro aporte de esa hoja es que los militares argentinos cuantifican en 500 los exiliados de Montoneros, lo que ayudaría parcialmente a entender el gráfico de Martinez al respecto

Advertencia: todos estos ejemplos no abarcan la totalidad de los centros de detención ni del material documental y testimonial que fundamenta (con pruebas o indicios) una cifra mayor de desaparecidos


¿Redondear para arriba o para abajo? 

Aunque el documento de Arancibia Clavel nos tira la pauta de una cifra levemente superior a 22.000 hasta 1984, preferimos atender a cierto principio de reserva y redondear en 20.000. Ateniéndonos además a la hoja de Flouret; y desconociendo si el documento de Clavel contempla los 3400 sobrevivientes registrados. Si se quiere, estamos redondeando para arriba porque 22 mil - 3400 = 18.600 que se redondea a 20 mil (tal vez el represor Flouret utilizó la misma mentalidad de redondear hacia arriba en la conversación privada al embajador). Modestamente, el número de 19.000 desaparecidos y asesinados es el "pináculo" de pretensión de precisión al que puedo llegar. Es decir, ya no digamos que son 20 mil, sino 19 mil si deseamos ser muy exquisitos, muy refinados (y si por casualidad Arancibia Clavel incluia a los muertos por la guerrilla en su computo, entonces se rebaja a 18.000 los muertos por las fuerzas armadas)

Y si se quiere, estamos redondeando para arriba al tener como marco el Documento Final, que habla de 15.000 y no de 20.000. La razón para no quedarnos con los 15.000 tiene que ver con dos motivos suficientes: en primer lugar era un documento público, emitido para la televisión y que se sometió a todos los "arreglos" para quedar presentable al televidente y justificarse lo mejor posible (véase nuestro anexo del tema). Es más creíble que las fuerzas armadas hayan escrito "15.000 combatientes" con un ánimo de redondear hacia abajo y no hacia arriba

Esa puede ser una de las razones para creer que "15.000 combatientes" sugiere un número más alto. El caso Clavel y Flouret avalan el acerto

Súmese los casos trascendidos en aquella época de personas que difícilmente se las podía catalogar, de modo creíble, en el grupo de combatientes. Un episodio famoso aún en esos años era el de las monjas francesas, que resultaba practicamente imposible clasificarlas como "dos señoras combatientes ideológicamente fanatizadas para matar y técnicamente preparadas". Para estos desaparecidos, bien podían caber en la imputación (cierta o falsa) de logística y apoyo de los partidos revolucionarios; o la de "inocentes muertos por error como ocurre en toda guerra". Pero no dentro de los 15.000 combatientes del Documento Final 

La otra razón es que las fuerzas armadas no han negado totalmente que su aniquilamiento comprendía los "elementos constitutivos" de la subversión. No se trataba de eliminar a los combatientes solamente sino a cualquier elemento (logística, propaganda, célula territorial, etc.) que fuera constitutivo de las organizaciones revolucionarias. De hecho, la directiva del Consejo de Defensa n° 1/75 utiliza esa expresión o la de "aniquilar las organizaciones subversivas":

http://www.desaparecidos.org/nuncamas/web/document/militar/175.htm

En tal sentido, el "aniquilamiento" no solo pudo comprender esos ficticios 15.000 combatientes sino alguna porción de los restantes 10.000 subversivos contemplados en la cifra de "25.000 subversivos"

Aunque usted es libre de optar por el "mínimo" de 15.000 desaparecidos y asesinados, en vez de los 20 mil/19 mil. En última instancia se podrá discutir qué número va, pero no se puede discutir que hay más desaparecidos que los registrados estatalmente. Es legítimo incluso que usted manifieste "hay pruebas de una cifra de desaparecidos y sobrevivientes no registrados por el Estado; pero no necesariamente llegan a 20 mil en total sino a menos". Bueno, es perfectamente debatible. Todo depende finalmente de qué interpretación se le pretenda conceder al caso Clavel / Flouret; y del problema de los sobrevivientes no registrados que comentaremos inmediatamente 


Pero en líneas generales, aplicamos un principio de reserva y redondeamos conservadoramente hacia abajo en 20 mil (o 19 mil). No utilizamos el número de 22 mil por ejemplo

Esta reserva no es "científica" y pueden existir discusiones sobre mi postura conservadora. Para dar un ejemplo de otro país, y volviendo al holocausto, los tribunales redondearon hacia abajo las cifras de los informes de los Einsatzgruppen atendiendo a este principio y a otro de "in dubio pro reo" (en caso de duda, estar lo más favorable posible al imputado). Si un informe decía que se asesinaron a 3752 judíos en una localidad, el tribunal lo bajaba a 3500 en base a testimonios; por dar ejemplo. Discutible esa decisión sin dudas, a veces injustificada esa rebaja. En este posteo tratan el tema:

https://holocaustcontroversies.blogspot.com/2007/03/thats-why-it-is-denial-not-revisionism.html 


*Sobrevivientes no registrados: ahora, de estos 19.000 desaparecidos ¿Cuántos de ellos son sobrevivientes no registrados? IMPOSIBLE dar una respuesta, por la obvia razón que no denunciaron su situación como sobreviviente. Pero asumiendo que existen estas personas vivas sin registrar, el número de desaparecidos "reales" (los muertos) disminuye ¿A cuántos? Tampoco sabemos. Aunque no es lógico aseverar que disminuyen hasta el total registrado por el Estado, en vista de la evidencia que SI habla de muertos, de cadáveres no computados. El testimonio de Lanusse, o la nómina de Etchecolatz, no se refieren a otra cosa que no sean muertos: cadáveres de subversivos no identificados, o personas arrojadas al mar (no es necesario recordarles que una persona arrojada al mar en esas condiciones, difícilmente sobreviva) 

Por otro lado, una cifra tan elevada de sobrevivientes no registrados entra inicialmente en colisión con el número de Ricardo Flouret, porque la interpretación más "racional" de su hoja nos permite deducir que se refiere a muertos ¿O tal vez Flouret incluía a los sobrevivientes? Queda en la interpretación del lector sobre el significado de "las 20 mil vidas tomadas en la batalla han sido necesarias para salvar el país"

Pero incluso si nos basamos en el Documento Final como total de muertos, y nos guiamos por el número de 22.000 de Arancibia Clavel para desglosar, serían: 15.000 desaparecidos "en serio" + 3.600 sobrevivientes no registrados + 3400 sobrevivientes registrados por el Estado

O: 15.000 desaparecidos y muertos + 7,000 sobrevivientes

Y como lidiamos de sobrevivientes no registrados, tampoco podemos cuantificar su sufrimiento. Mientras algunos pudieron haber sido torturados por semanas, otros quizás estuvieron pocas horas de torturas en el centro clandestino y fueron largados (o quizás algunos no fueron torturados. En cualquier caso la detención era ilegal porque el centro clandestino era un lugar ilegal). Se desconoce lamentablemente estos porcentajes de sufrimiento, simplemente se intuye


Lo que descartamos con bastante tranquilidad, es que los documentos de Clavel o Flouret se refieran a detenidos a disposición del PEN. Por muy arbitraria que haya sido la detención, tanto el gobierno militar como los organismos internacionales asumían una imagen de semi-legalidad en este sistema de detenciones; por lo que no siempre el gobierno minimizaba las cifras de estos presos (o no había entusiasmo por minimizar a diferencia de las desapariciones). Por el contexto de los documentos, no es posible inferir que Clavel y Flouret hayan incluido en sus cifras a los detenidos a disposición del Poder ejecutivo: Clavel se refiere a "22.000 entre muertos y desaparecidos". El vocablo "desaparecido" se aplica perfectamente al sobreviviente que pasó por un centro clandestino (estuvo desaparecido durante ese trayecto como prisionero), pero es impropio de un detenido del PEN. Sin perjuicio que efectivamente hubo casos de desaparecidos que posteriormente resultaron legalizados como presos del PEN, o a la inversa: detenidos del PEN que fueron secuestrados en la cárcel para llevarlos a un centro clandestino y desaparecer por siempre

Además el Estado de Sitio y las consiguientes detenciones del PEN rigió a partir del 6 de noviembre de 1974. Clavel tendría que haber iniciado su "conteo" desde ese año si incluía a los detenidos del PEN. En cambio tiene sentido que haya comenzado en 1975 su contabilización, porque en ese año las fuerzas armadas, a través de los decretos de aniquilamiento, ponen en juego sus recursos logísticos y operativos para aplicar la desaparición temporal o definitiva de los secuestrados; algo que en 1974 no estaba claro todavía

Mucho menos los 15.000 del Documento Final  incluiría estos detenidos del PEN, por simple error de cálculo: si los desaparecidos registrados por el Estado ascienden a 9 mil, los sobrevivientes del Estado a 3400 y los detenidos a disposición del PEN a 8 mil, el número supera los 15.000 (y no estamos contando otra evidencia como el caso de los 700 tucumanos faltantes sin denunciar hasta el 18 de diciembre de 1975, o los cadáveres de Etchecolatz, etc.)


Ahora ¿Es posible que los 22.000 de Arancibia Clavel no incluya todos los secuestrados? Es más que probable, pues según la evidencia disponible, las fuerzas armadas se retaceaban información. Hay testimonio de un sobreviviente de la ESMA, que cuenta que las fotografías de detenidos las realizaba personal del Batallón 601 y no la Marina, para evitar que la Marina le oculte información de detenidos al ejército. No obstante, se perciben errores de datos en el Ejército como posteriormente veremos 

Sin embargo, es inviable cuantificarlo. Por lo que no es recomendable aumentar el número de Clavel

Tenemos además las "fuentes grises" como el registro de extremistas en el centro clandestino D-2: a pesar de su característica ilegal, muchos de esos secuestros eran "transitorios" (un par de días o, si eras suertudo, un par de horas detenido) y es imposible determinar cuántos de esos secuestros eran considerados por los mismos militares como "desapariciones" para ser reportadas en el Batallón 601, que centralizaba las detenciones para luego cristalizarlas en el número "22.000" que revela Clavel ¿Dentro de esos 22 mil desaparecidos se encuentra todos los detenidos del D-2, incluyendo los que estuvieron un par de horas encerrados? No se sabe
 
En última instancia, en Córdoba existía un centro clandestino transitorio aún mucho peor que el D-2: La Ribera. Éste fue inaugurado a finales de 1975 y primero fue un centro enteramente de exterminio para, después del golpe de Estado, con el funcionamiento de La Perla, convertirse en un centro transitorio o "de paso" (los prisioneros pasaban por allí antes de ir a La Perla a morir, o a disposición del PEN, o ser liberados. O los secuestrados de La Perla pasaban por este lugar antes de ser liberados). Pero las estimaciones que realizan los organismos de Derechos Humanos son muy elevadas: calculan que en La Ribera pasaron unas 4.500 personas. Aunque desconozco totalmente cómo llegaron a esa elefantiásica cifra, es en principio verosímil cuando en el D-2, una unidad mucho más reducida, pasaron más de 5 mil personas. Olvidando el problema de la estimación  en La Ribera, cualquiera sea la cantidad de prisioneros que pasaran por ahí, es mucho más probable que los prisioneros de La Ribera sean considerados como verdaderos "desaparecidos" por el ejército a diferencia de todos los secuestrados del D-2. Porque La Ribera estaba conectada con el circuito represivo de La Perla (los torturadores de La Perla visitaban con frecuencia La Ribera en 1976 para traer o llevar desde La Perla) 

Pero entre La Ribera y el D-2 había duplicados, como explicaremos el término en el apartado oportuno 



En este video, el organismo de DD. HH. estima que en el centro clandestino La Ribera pasaron 4.000 personas


Un sobreviviente que pasó pocos días en un centro clandestino tiene muchas mayores dificultades al momento de denunciar su episodio, porque carece de pruebas para demostrar que fue secuestrado. Uno de los criterios metodológico-epistémicos que utilizó la CONADEP para certificar la supervivencia y desaparición de personas, fue el habeas corpus emitido en el tiempo correcto: Una familia que denunció en el año 76, año 77 la desaparición de su hijo y tramitó el habeas corpus, funciona como presunción iuris tantum de veracidad sobre el secuestro del detenido. Así, ya sea que el detenido hubiese sido asesinado o liberado finalmente, su habeas corpus le servía como prueba de su secuestro. El sobreviviente al que ninguna familia le tramitó el habeas corpus en su tiempo de detención, carece de elementos "objetivos" para demostrar que es una víctima. Esto, desde ya, en modo alguno significa que no hubiera sobrevivientes que pudiesen demostrar su secuestro por otras vías (ej: vía testimonial). De hecho, la cifra de sobrevivientes desde la CONADEP hasta el presente aumentó, no se quedó en el mismo número de 1983. Empero, es bueno recordar las dificultades probatorias que atraviesa una persona que fue humillada y atormentada por unos dos o tres días en un centro clandestino

Ciertamente, los instrumentos de tortura como una picana eléctrica o las golpizas dejan marcas en el cuerpo durante un tiempo, pero el sobreviviente difícilmente podía denunciar al Estado cómplice en 1975 o 1977 sobre los tormentos que sufrió: nadie iba a tomarle la denuncia. Para 1983, las marcas de tortura ya se había ido o se podían confundir fácilmente con otro tipo de lastimaduras que un sujeto recibe en su vida



Fotografía real de un soldado argentino siendo torturado con picana eléctrica por sus instructores del ejército. Esta foto data del año 1986, durante el gobierno de Alfonsín, y demuestra que las torturas eran una forma de "entrenamiento" de tropas incluso después de finalizada la última dictadura; mitigada en alguna medida esas prácticas por el caso Carrasco de 1994. Esta horrenda fotografía fue descubierta accidentalmente en el año 2004. Nadie había denunciado estos episodios


Dificultad que incluso tuvieron que sortear aquellos que pudieron demostrar que habían sido secuestrados con la entrega de su habeas corpus: aunque probaran su detención ilegal, las marcas de tortura se les habían ido a muchos de ellos ¿Cómo probar que fueron torturados? Solo con una base testimonial que pudiese convencer a los jueces. Entonces, para dar unos ejemplos ilustres, el maestro Alfredo Bravo, quien testimonió que fue torturado por Etchecolatz y Ramón Camps, no quedó su caso de tormentos acreditado en el juicio a las juntas, porque solo contaban con su testimonio como única prueba


María Claudia Falcone, una de las desaparecidas de "La Noche de los Lápices", tampoco en el juicio a las juntas se acreditó su tortura


Solo quienes tuvieron la "suerte" que su sufrimiento lo presenciaran varios testimoniantes, pudieron quedar acreditados como casos de tormento en el juicio a las juntas 


(todo ello con prescindencia que en otros juicios se acreditaran sus tormentos)



Aclaración: en este posteo no se ha analizado el centro clandestino "Servicio de Informaciones" de Rosario. La estimación se ha sacado del Espacio de la memoria de este centro, pero desconozco cómo obtuvieron ese estimativo. En cualquier caso, aún si quitamos ese centro, el total es de más de 18.600 detenidos



¿Es correcto creer en la cifra del Estado o el Nunca Más como prueba exclusiva de la cantidad de desaparecidos? Comparación con otros casos históricos. Ventajas y desventajas de la posición nominalista

Llegamos así al gran problema en el debate: la postura nominalista. Todo lo que he escrito anteriormente, para la posición nominalista NO VALDRÍA NADA. Ellos dirían "si no hay nombres, no hay prueba". Es decir, si no tenemos la lista con nombres de los faltantes 10 mil represaliados, a ellos no les convencería la cifra de 20 mil desaparecidos y asesinados. No les importaría la fuente de Acdel Vilas, ni la fuente de Etchecolatz o Flouret, ni el Documento Final, ni las claves de Club Atlético, nada les importaría porque "no están los nombres" 

Cabe aclarar que esta posición no fue "inventada" por los miembros de la CONADEP, aún cuando algunos de sus ex-integrantes en la actualidad se ubiquen en ella, como el caso de Graciela Meijide. Pero baste como ejemplo el libro “El Drama de la Autonomía Militar” del año 1995 y escrito por el coronel español Prudencio García, del cual éste mantuvo entrevistas tanto con Graciela Fernández Meijide como con Ernesto Sábato (Sábato le escribió el prólogo de ese libro). Allí, Graciela Meijide sostenía la hipótesis de 15.000 desaparecidos, mientras que Sábato se quedaba con la popularizada de 30.000. Estos son los párrafos:

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(extracto del libro “El Drama de la Autonomía Militar”. Cabe destacar que en el caso de Emilio Mignone, éste tuvo contacto directo con personas que no denunciaron la desaparición, por consiguiente su conclusión es que solo la mitad de los desaparecidos fueron registrados por la comisión alfonsinista)

enlace al libro:

https://es.scribd.com/document/334517763/El-Drama-de-La-Autonomia-Militar-Prudencio-Garcia-Martinez-de-Murguia 

Este ideario de "desaparecidos sin denunciar" que heredan personas como Ernesto Sábato, se manifestaba tempranamente en el inicio democrático. Para dar un ejemplo, este video es de febrero del año 1984; en el minuto 4:20 la señora Bonafini explicita el cálculo de "2 sin denunciar por cada denunciado": 



Ernesto Sábato, presidente de la CONADEP, en esta película estima unos 15.000 a 16.000 desaparecidos (minuto 5:51). Aunque se trata de su opinión personal y no más que eso, se desmiente la tontería del apologismo más tonto de creer que la CONADEP sacraliza la postura nominalista

Pero volvamos con el argumento central que parece esgrimir cada nominalista: "no se puede confiar en una cifra sin nombres". En principio no quedaría claro por qué concluyen de esa manera, aunque también le han agregado un argumento accesorio: "no es posible que existan tantos familiares sin denunciar". Esto podría hacernos entender sobre la verosimilitud de esa propuesta nominalista 


Nuevamente Meijide, insinuando la imposibilidad de tantas personas sin familiares, vecinos, amigos que denuncien su desaparición

Aclaro que lo que viene a continuación es un capítulo con mucho "bodoque" de explicaciones epistemológicas y ejemplos a cascoporro, lo que puede hacer que algunos se aburran o se pierdan; aunque trataré de ser lo más didáctico posible. Pero lamentablemente no queda otra que explayarme con mucha "explicación", y hasta repetirme con conceptos, porque la discusión es esencialmente epistemológica y metodológica, incluso jurídica, entre dos modelos de investigación sobre el tema: quienes solo se quedan con lo que tenga nombre y apellido y rechazan todo lo demás (nominalistas), o aquellos que aceptan ese "todo lo demás" y lo incorporan como fuente válida (anti-nominalistas o innominación). Si es necesario, leerlo con días de paciencia o de a porciones este capítulo
¿Cuál postura es mejor o más "correcta"? ¿La nominalista? ¿La innominada? El gran agujero negro que tenemos es que no existen otros casos históricos donde se haya generado esta disputa, por lo que no podemos aprender de ninguna lección del pasado al respecto. Para que nos entendamos: efectivamente se pueden encontrar situaciones de negacionismo de las cifras en varios episodios mundiales. El caso más típico es la negación del número de 6 millones de judíos muertos en el holocausto. Pero lo que diferencia al caso argentino del alemán, es que los negacionistas del holocausto no critican el número desde una posición nominalista, sino innominada. 
El negacionista más famoso de la masacre judía, David Irving, al igual que otros apologistas del holocausto, nunca dijeron "los muertos no fueron 6 millones porque no están todos los nombres de esos 6 millones", sino que desconfían de la cifra innominada oponiendo como argumento otras fuentes innominadas; por ejemplo son capaces de afirmar que "un documento de la Cruz Roja indica que murieron 300 mil judíos y no 6 millones" a pesar que dicho documento no contenga los nombres de esas 300 mil personas. La discusión entre los negacionistas y los afirmacionistas de la cifra de 6 millones, se basa su núcleo en evidencia innominada
Aunque una variante ingeniosa de los negacionistas del holocausto es la localización de las fosas en el Este: quizás los negacionistas no pidan el nombre y apellido de cada judío muerto en la URSS, pero SI piden como mínimo la ubicación de fosas con cuerpos. Si no pueden ubicarla, entonces niegan los ametrallamientos masivos en Europa del Este. Por consecuencia, los afirmacionistas del holocausto en el Este europeo, se enfrentan a los negacionistas en términos innominados. Porque si bien es cierto que fundaciones como Yad Vashem encontraron muchas fosas en Ucrania, no encontraron todas: faltan miles de fosas que hasta el día de hoy nunca pudieron ser localizadas, porque los nazis en los documentos que sobrevivieron a su destrucción, no precisaron el lugar de las sepulturas. Toda la "credibilidad" de la masacre contra los judíos en el Este, descansa en documentos innominados nazis que solo detallan el número de muertos pero no sus nombres ni apellidos, ni la ubicación de sus fosas. Ahí es donde atacan los negacionistas: si no hay fosas, no hay masacre (o la matanza no fue tan grande)
Ej:

Con los muertos del comunismo, la misma vaina. Están los que afirman que "el comunismo mató a X millones de personas", y los que defienden el comunismo diciendo "el comunismo no mató a tantos, solo mató a estos X miles". Pero en cualquier caso, la discusión se centra en fuentes innominadas, es decir fuentes sin nombre y apellido

Censo del país chino sobre la devastadora Gran Hambruna de Mao Tse-Tung. Se analizan variables como tasa de nacimientos, tasa de muertes y tasa poblacional. Este es un ejemplo de fuente "innominada": una fuente que no nos ofrece los nombres y apellidos de esas miles o millones de personas que toman como variable estadística

El ejemplo chileno de Pinochet, no cuenta con la suficiente cantidad de fuentes innominadas para generar una grieta entre el nominalismo y la estimación innominada. El negacionismo chileno entonces no apunta a una rebaja del número, sino a otros aspectos (incluyendo la negación total del crimen), ya que no existen las estimaciones innominadas en Chile
El negacionismo del genocidio de Srebrenica tiene sus especificidades, ya que se encontró la evidencia física de los cadáveres: más de 7.000 cuerpos; y solo 1,000 personas extras están denunciadas sobre ese número, es decir en total unas 8.000 personas. Entonces el negacionismo no busca negar esa evidencia física, ya que no puede (¿Cómo decir que los cadáveres fueron "inventados"? Es imposible). Pero busca negar la identidad contenida en esos cuerpos. Los negacionistas serbios de Srebrenica no dicen "hay menos de 7 mil cadáveres" sino "hay menos de 7 mil bosnios". Explican que esos 7 mil cadáveres no corresponden todos a bosnios, sino que hay muertos serbios que están falsamente atribuidos como bosnios asesinados. Explican que hay bosnios que no murieron sino que continúan con vida en Europa, o que no murieron ilegalmente sino en combate, entre otros argumentos no muy diferentes a lo que aquí se decía con aquellos desaparecidos que habían sido registrados. Pero nuevamente, el problema de ese negacionismo no pasa por un conflicto entre el material innominado contra las denuncias "nominadas", porque del genocidio de Srebrenica no se encontraron fuentes innominadas al día de hoy con una cifra X mayor o menor al registro nominado. O sea, tampoco hay cifras innominadas en el caso bosnio
En ese sentido, el caso argentino posee una base "sui generis" de debate. Se tiene que debatir "por primera vez" si los nominalistas tienen razón o no la tienen, o si los innominados tenemos o no tenemos razón. Aún así, no creemos que la solución sea radicalmente distinta a lo que sucede en la historización de otras masacres en el globo, que claramente puja en favor de una posición innominada

Demos un ejemplo: la siguiente hoja pertenece a un documento administrativo interno de las Einsatzgruppen, los escuadrones de exterminio móviles del nazismo que se dedicaban a las ejecuciones masivas por ametrallamiento en el Este europeo

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traducción al inglés de este reporte:

http://www.holocaustresearchproject.org/einsatz/situationreport101.html 

En la página, los propios nazis escriben que ejecutaron a 33.771 judíos en los días 29 y 30 de septiembre de 1941 en la capital ucraniana de Kiev (lo que se conocería como la masacre de Babi Yar). Esta es una fuente puramente innominada: nos está dando el número de muertos, incluso nos da el número exacto; pero no ofrece los nombres de cada una de esas 33.771 personas asesinadas

Sin embargo, las fundaciones del holocausto al día de hoy únicamente identificaron con nombre y apellido a poco más de la mitad, unas 18.000 personas aproximadamente

En un artículo reciente del 25 de septiembre del 2020, acerca del centro que recopila los nombres de esa masacre:  

El Proyecto de Nombres ha recopilado hasta ahora datos sobre unas 18.000 personas que murieron en Babi Yar [de las 33.700 computadas por los nazis]. De ellos, solo unos pocos miles tienen archivos completos. La información sobre muchos de los demás es irregular, a veces limitada a nada más que sus nombres, según Alexander Belikov, investigador principal del centro  

enlace del artículo (en inglés): 


Las razones para la escasa cantidad de datos tienen que ver con las particularidades que atravesó Ucrania en el represivo periodo estalinista, y en medio de la invasión alemana. A eso se le suma una inadecuada metodología de denuncia, recargada ideológicamente por los conceptos colectivistas del Estado soviético. Pero, ante la ausencia de nombres ¿Qué hacen los historiadores? Confían en el documento nazi que contiene solo números

Uno podría decir: "bueno, no están los nombres de esos 33 mil pero SI están sus cadáveres". Pues no, porque los nazis cuando estaban perdiendo la guerra desenterraron la fosa masiva y quemaron todo, lo que hizo imposible una contabilización "Uno a Uno" de los cuerpos (la Comisión Soviética calculó varios miles de cuerpos en su inspección, pero no los contó uno por uno). Además un desastre natural ocurrido en la década del 60 inundó el barranco y el gobierno soviético transformó el lugar urbanizándolo, lo que vuelve geográficamente inviable  encontrar siquiera cualquier tipo de resto hoy. Eso significa que conocemos el número de muertos 33.771 por el documento innominado nazi, no porque tengamos sus cadáveres o los nombres de los muertos


(vale recordar que el territorio de la ciudad de Kiev, donde ocurrió la matanza de Babi Yar, es más chico que el territorio argentino. Y sin embargo, con esa enorme "ventaja" de los ucranianos, tampoco tienen todos los nombres de los 33.771 asesinados)


Raul Hilberg, uno de los historiadores académicos más conocidos sobre el holocausto, escribe en su libro "La Destrucción de los judíos europeos":

El Kommando se trasladó a continuación a Kiev, donde mató a 33.771 judíos entre el 29 y 30 de septiembre [de 1941]

Y pone como fuente en su libro los informes de los Einsatzgruppen, que solo tipean la cifra y ningún nombre

pag. 318:


¿Por qué los historiadores del holocausto se quedan con la cifra de 33 mil muertos y no la de 18 mil "con nombre y apellido"? Ahí los historiadores están asumiendo una posición innominada, e implícitamente eligen no quedarse con el nominalismo ¿Qué los motiva a los investigadores a confiar en un documento que no tiene nombres sino números? Inicialmente, hay un poderoso argumento epistemológico que moviliza a confiar en esta clase de documentos: no tiene sentido que los represores se mientan a sí mismos sobre los delitos que ellos mismos cometieron. Si el documento puede demostrarse externamente que no es propagandístico (no tiene intenciones de exagerar por un motivo determinado), el investigador entonces debería aceptar el contenido, bajo esta presunción epistemológica del "no mentirse a sí mismo", y siendo que los represores son la mejor fuente de sus propios hechos


Y dicha presunción epistemológica no parece esfumarse en el caso argentino. No hay fundamento en el nominalismo para desvirtuar este principio con las fuentes innominadas de los desaparecidos. Por supuesto que nadie niega las diferencias abismales entre el holocausto y los desaparecidos argentinos. Los ejemplos no apuntan a la calidad de la masacre sino a su inherente metodología: ambos sucesos pueden investigarse e historizarse con la misma metodología. Que en el holocausto haya millones de muertos, o que hayan existido más o menos dificultades para denunciar, o más o menos dificultades para individualizar, en nada implica un menoscabo a las fuentes innominadas del caso argentino o la metodología que debe emplearse

Tengamos como ejemplo la fuente de Acdel Vilas: cuando este represor escribe en su diario que pasaron unos 1500 prisioneros en su centro clandestino, es porque Vilas, como ser humano sintiente, es capaz de percibir con sus sentidos la realidad que él vivió, y la transmite en su texto. Los nombres de esos prisioneros nada nos dice sobre la capacidad o incapacidad de Vilas para percibir la realidad del suceso aludido y transmitirla. Si por ejemplo el día de mañana se descubren todos los nombres de los 1507 detenidos de Acdel Vilas, eso no valida la fuente de Vilas sino que en todo caso la reafirma en un conjunto general sobre lo que ocurrió en ese centro clandestino, al ser individualizados los detenidos. Pero el nombre por sí mismo nada dice de la validez o invalidez de la fuente en sí misma

Por ello, la fuente primaria transmite una presunción epistémica del "no mentirse a sí mismo" y quien irradia la información de esa fuente es un sujeto sensible que experimenta con sus sentidos la realidad y la transmite. Así, volviendo al ejemplo del documento nazi, quien haya escrito ese documento anotando "33.771 judíos ejecutados" ha percibido la realidad con sus sentidos, y la transmite en la hoja. Y debido a que el documento es de índole administrativa (no es un documento destinado a hacer propaganda), entonces se presume plenamente que el escritor no ha deformado la realidad percibida, porque no tiene motivos para deformarla. Corresponde a quien niegue la evidencia, la carga de la prueba para demostrar que hubo intenciones de mentir. Al menos así es como funciona en un sistema judicial normal. Para más detalles acerca de cómo se valora judicialmente esta clase de pruebas, véase nuestro anexo jurídico:


(Recordemos una vez más, que los negacionistas del holocausto rechazarían esta evidencia de Babi Yar y rechazarían la presunción del "no mentirse a sí mismo" con los nazis, pero estos negacionistas no piden los nombres y apellidos de los 34 mil judíos asesinados. Su negación no incluye una postura nominalista)


En realidad esto trasciende a las cifras de una masacre para adentrarse en la valoración de cualquier fuente documental y testimonial: ya sea un documento de empresa, como un diario íntimo, como un documento desclasificado, como la confesión de una persona en juicio. El universo de la investigación histórica y judicial tiene que aceptar este presupuesto epistémico para que la "verdad" adquiera el sentido de ser descubierta 

De lo contrario, si se no acepta esta presunción, ni siquiera podría funcionar adecuadamente el sistema judicial: ustedes piensen que bajo este criterio la Justicia no podría aceptar mensajes de celular, o diarios íntimos, o conversaciones de homicidas que los involucren; porque se llegaría al extremo relativista que esas pruebas no deben manejarse con la presunción del "no mentirse a sí mismo" ¿Cuántas pruebas judiciales se manejan con este presupuesto epistemológico? Casi todas las pruebas documentales, como así también las testimoniales

Pongámoslo en estos términos: supongamos que el día de mañana yo asesino a 3 personas. Mato a tiros a juancito, a pedrito, a marcelito. Y anoto en mi diario íntimo "hoy maté a 3 personas", sin mencionar sus nombres ni otro dato que los identifique. Supongamos que nadie denuncia a esas personas, ya sea porque sus familiares no tienen ganas de denunciar, o por la razón que fuera ¿Significa que lo que yo escribí en mi diario no refleja la realidad de mis actos, solo porque no fueron denunciados por sus familiares y no me tomé la molestia de mencionarlos con sus nombres en mi diario? No tiene sentido esa lógica

Otra cosa muy distinta, es la duda de que yo pueda estar mintiendo. Volviendo al ejemplo anterior, yo mato a 3 personas pero en mi diario pongo que maté a 10 personas ¿Cómo creer entonces en el testimonio? Eso es un escepticismo legítimo pero resulta aplicable a cualquier tipo de testimonio, y no solamente en el caso de cifras innominadas. Yo también puedo mentir diciendo que vi un accidente automovilístico que nunca ocurrió, puedo mentir que estuve de vacaciones en Francia sin nunca estarlo. La posibilidad de la mentira en un testimonio existe (incluso mentir bajo juramento legal), pero todo eso no tiene NADA que ver con la epistemología de las cifras innominadas: yo puedo mentir en cualquier clase de testimonio con independencia de si menciono números nominados o innominados [Aunque existan medidas procesales para evitar la mayor injerencia de mentiras como sea posible, en última instancia metodológicamente es imposible confirmar la veracidad al 100% de un testimonio o documento. El único método infalible es leer la mente del testimoniante.... y hasta ahora, eso no se ha inventado]. Para el cometido, ya tenemos un anexo jurídico explicando la validez de una "confesión" o de documentación interna

Todo esto no es mera especulación. Hubo casos donde los diarios íntimos sirvieron como prueba judicial o como simple prueba de investigación. Véase: 







Es cierto que en los dos casos que analizamos ahora sobre el genocidio (el documento interno nazi, y el testimonio de Acdel Vilas), no se tratan de diarios íntimos. Pero se cumplen con los mismos presupuestos epistemológicos: son una "confesión" de sus propios delitos. Por eso los investigadores lo toman como prueba válida

Los nominalistas no aceptan las fuentes innominadas (sin nombres). Pero si hasta la Justicia acepta confesiones y documentos ¿Cuál es el motivo para rechazar una fuente innominada? La fuente innominada no deja de cumplir sus funciones epistemológicas normales: si se trata de un testimonio, continúa siendo testimonio. Si se trata de una confesión, continúa siendo confesión ¿En qué momento se "rompe" la fuente en su valor epistémico? Los nominalistas no lo aclaran. Bajo el criterio de ellos, una confesión es válida judicialmente pero si por casualidad contiene un número innominado, de repente pierde valor aunque los presupuestos sean EXACTAMENTE LOS MISMOS: estamos frente a un sujeto que percibe la realidad y la transmite



Esquema simple de la Epistemología sobre la teoría de la validez de un testimonio o documento de fuente primaria. Este sencillo modo de entender la transmisión del conocimiento ha funcionado durante miles de años para el progreso humano tanto en sus investigaciones históricas como científicas y judiciales. En este sentido, las posturas nominalistas no logran explicar cómo quebrarían la cadena de transmisión del conocimiento sobre los sujetos que pretenden atacar (en este caso: los sujetos que transmiten una percepción con números "innominados" en sus documentos o testimonios). Los nominalistas no explican por qué una fuente innominada es inválida, cuando ha cumplido con este mismo esquema epistemológico al igual que cualquier otra clase de fuentes


Traspaso el mismo esquema de arriba, al siguiente dibujo tipo Plaza Sésamo. Pareciera que estoy explicando tremendas obviedades.... pero créanme que hay gente que CUESTIONA estas estupideces (algunos amiguitos de Agustin Laje quieren cuestionar la fuente de Vilas). Asi que, como no se dan por enterados, hago el mismo gráfico epistémico con el caso de Acdel Vilas: 



Si se cuestiona cualquier fuente innominada (sea el caso Vilas, o el doc. de Arancibia Clavel,  etc.), entonces implícitamente están deduciendo que no se cumple con esta cadena de transmisión del conocimiento (sujeto fuente primaria percibe una realidad - - - transmite la realidad parcial o totalmente en soporte). Bueno, corresponde a quien niega la fuente, que explique cómo saben que no se está cumpliendo con dicha cadena, o por qué mágicamente no se cumple con la cadena al escribir un número innominado. No nos corresponde a nosotros demostrar nada en este sentido, ya que epistémica y jurídicamente se presume por defecto la cadena. No se puede presumir por defecto que no se cumple con la transmisión (de lo contrario nunca podríamos creer en absolutamente nada. Entonces jurídicamente se presume que la transmisión está normalmente en funcionamiento)

Obviamente, si se descubrieran los nombres, eso funcionaría como "recomprobación" de la fuente primaria. Pero si no existiese la oportunidad de recomprobar, por esa sola circunstancia no pierde su valor para narrar la historia. Desde ya no es recomendable quedarnos con una única fuente; por eso en este posteo buscamos de varias fuentes y en varias provincias para fundamentar un número nacional 

Si el ideal es la "recomprobación por nombres" bajo pena de nulidad de la evidencia, entonces con esa lógica los citados informes de las Einsatzgruppen no tendrían valor porque no se pudieron recomprobar "al milímetro" con todos los nombres y apellidos de las cifras innominadas invocadas en los informes. Pero lo cierto es que estas pruebas fueron validadas en los juicios de Nüremberg de 1946. Pag. 9 en adelante:


Su validez judicial o meramente investigativa no significa que sean verdades inmutables, imposibles de ser destruidas por otra evidencia. Pero no se las desecha  por no tener todos los nombres y apellidos. En cualquier caso, no debemos confundir la recomprobación con la validez epistémica de la fuente. La recomprobación refuerza la seguridad metodológica de la investigación, no la seguridad epistémica de la fuente


Vamos a transcribir parcialmente un párrafo de la sentencia del tribunal militar estadounidense que condenó a los Einsatzgruppen, referidos a la evidencia innominada que utilizan los jueces para condenar: 

El alegato de la acusación se basa enteramente en esta contabilización oficial preparada por los líderes del Einsatzgruppen y Einsatzkommando. El Tribunal citará más bien copiosamente estos informes porque, solo por el lenguaje mismo de los perpetradores, puede un mundo conmocionado creer que estas cosas sucederían en el siglo veinte. Unos breves extractos revelarán gráficamente la ocupación de los Einsatzgruppen. Un informe sobre el Einsatzgruppe B, fechado el 19 de diciembre de 1941, habla de una acción en Mogilev y señala:

"Durante los controles de las carreteras que irradian de Mogilev, llevados a cabo con la ayuda de la policía, 135 personas, en su mayoría judíos, fueron detenidas * * *. 127 personas fueron fusiladas". (NO2824)

El informe también declara: 

"De acuerdo con el comandante, el campamento transitorio en Mogilev fue registrado en busca de judíos y funcionarios. 126 personas fueron encontradas y fusiladas"

El mismo informe dice que en Parichi, cerca de Bobruisk:

"Se ejecutó una acción especial, durante la cual fueron fusilados 1.013 judíos y judías"

En Rudnja:

"835 judíos de ambos sexos fueron fusilados" {NO-28U)

Sonderkommando 4a, que opera en la ciudad de Chernigov, informó que el 23 de octubre de 1941, 116 judíos fueron fusilados; al día siguiente, 144 fueron fusilados. (NO-2832)

Un Teilkommando de Sonderkommando 4a, que opera en Poltava, informado el 23 de noviembre de 1941:

"En total 1.538 judíos fueron fusilados" (NO-8405.)

El Einsatzgruppe D que opera cerca de Simferopol comunicó:

"Durante el período cubierto por el informe, 2.010 personas fueron fusiladas". (NO-3285)

Una unidad de Einsatz, que opera en Ucrania, comunicó que en Rakov:

"1.500 judíos fueron fusilados".{3876-PS.)

Un informe sobre las actividades en Minsk en marzo de 1942 dice:

"En el curso de la mayor acción contra los judíos, 3.412 judíos fueron fusilados" (NO-2662.)

Einsatzkommando 6, que opera en Dnepropetrovsk, informó que el 13 de octubre 1941:

"De los 30.000 restantes, aproximadamente 10.000 fueron fusilados" (NO-2832)

Un informe fechado el 16 de enero de 1942, que da cuenta de las actividades de Einsatzkommando 2, declaró que en Riga el 30 de noviembre de 1941:

"10.600 judíos fueron fusilados" (N0-3405)

Un informe procedente de Crimea declaró lacónicamente:

"En Crimea fueron ejecutados 1.000 judíos y gitanos"

En la Rutenia Blanca, un líder de Kommando informó:

"Ha habido evidencia frecuente de mujeres judías que muestran una actitud particularmente desobediente. Por esta razón, 28 judías tuvieron que ser fusiladas en Krugloye y 337 en Mogilev"

El Einsatzgruppe A, al informar sobre sus actividades hasta el 15 de octubre de 1941, declara muy casualmente:

"En Letonia, hasta ahora, 30.000 judíos fueron ejecutados en total". (L-180)

El Comisario General de Rutenia Blanca informó con autoaprobación el 10 agosto de 1942:

"Durante consultas detalladas con el SS Brigadeführer Zenner y el Jefe del SD, SS Obersturmbannführer Dr. jur. Strauch, descubrimos que habíamos liquidado aproximadamente 55.000 judíos en la Rutenia Blanca durante las últimas 10 semanas" (3J128-PS)

Volviendo a Simferopol, en el Informe No. 153, fechado el 9 de enero de 1942, encontramos:

"Las áreas operativas de los Teilkommandos, particularmente en los pueblos más pequeños, fueron purgadas de judíos. Durante el período que cubre este informe, 3.176 judíos, 85 partisanos, 12 saqueadores y 122 funcionarios comunistas fueron fusilados. Suma total: 79.276 ejecutados en Simferopol

El Informe de Operación No. 194, que detalla las actividades del Einsatzkommando 8, establece que, del 6 al 30 de marzo de 1942, este Kommando ejecutó:

"20 rusos por actividades comunistas subversivas, sabotaje y pertenencia a la NKVD, 5 rusos por robo, hurto y malversación de fondos, 33 gitanos, 1.551 judíos" {NO3276)

Einsatzkommando 5, para el período comprendido entre el 2 y el 8 de noviembre de 1941, habían asesinado, como dice sucintamente el Informe No. 143:

"15 funcionarios políticos, 21 saboteadores y saqueadores, 414 rehenes, 10.650 judíos". {NO-2827)

Informe No. 150, de fecha 2 de enero de 1942, que habla de acciones en el oeste de Crimea, fija: 

"Del 16 de noviembre al 15 de diciembre de 1941, 17.645 judíos, 2.504 krimchaks, 824 gitanos, y 212 comunistas y partisanos han sido fusilados" {NO-2884.)


pag. 10 en adelante:


A la fecha en que fueron juzgados estos nazis (año 1946), el tribunal difícilmente tenía los nombres y apellidos de todas las personas que mencionan las breves citas de los informes de los Eisatzgruppen. Que se sepa, los jueces no tenían los nombres de los 10.600 judíos asesinados en Riga en noviembre de 1941, ni los nombres de los 835 judíos asesinados en Rudnja, ni los 1500 asesinados en Rakov. Tampoco tenían los cadáveres de esas cifras. Eso no impidió que el tribunal tomara los informes innominados (sin nombres) como evidencia demoledora de la criminalidad alcanzada en Ucrania por los escuadrones de la muerte alemanes. Más de la mitad de las personas acusadas por estos informes, fueron condenadas inicialmente por el tribunal estadounidense a prisión perpetua o la pena de muerte

(ni siquiera los mismos acusados esgrimieron el argumento defensivo de "no están todos los nombres ni cadáveres de esos números")

Años más tarde, las fundaciones del holocausto pudieron recopilar varios nombres y apellidos de los masacrados aludidos en los informes (aunque no lograron obtener todos los nombres). Si uno tuviese que aplicar la lógica de los "nominalistas", entonces tendríamos que haber esperado 30 años a que las fundaciones recopilaran algunos miles de nombres, para recién ahí iniciarles un juicio de asesinato en masa a los Einsatzgruppen sobre las situaciones reseñadas



Otto Ohlendorf, comandante del escuadrón "Einsatzgruppe D", enfrentando el juicio del tribunal militar de Estados Unidos. En su testimonio judicial, admitió que las cifras de asesinatos en los informes de su escuadrón, eran lo más ajustadas a la actividad que llevaron a cabo. Otto Ohlendorf fue sentenciado a la pena de muerte


O sea, que apologistas faloperos como Nicolás Márquez o su amiguito el chupapija de Javier Milei, aceptarían fuentes innominadas como las siguientes:


Pero no aceptarían fuentes innominadas de la dictadura argentina como la siguiente:



Y eso que toda fuente innominada comparte el mismo valor epistemológico


Tal vez algunos nominalistas del caso argentino sean conscientes de lo que sucede con la Shoa, y para evitar negar la cifra de esa tragedia, mientras mantienen su negación de los 20 mil desaparecidos, señalen las diferencias cuantitativas entre lo sucedido con los judíos y lo ocurrido en Argentina....

Primero: el holocausto no es un "bloque" de millón por millón. En algunos países el saldo de victimas fue de decenas o centenas de miles, no millones. Se habla de 6 millones sumando el total de muchos países, entre los que se encuentran algunos con pocos miles. Asi que en términos "cuantitativos" puedo hacer una analogía de manera pertinente. De hecho no comparé los 6 millones contra 20 mil, sino los 34 mil de Babi Yar con los 20 mil de Argentina. Avisados están  

Segundo -y que deriva del primero-: los judíos no vivían en una cápsula totalmente aislados del mundo, sino que tenían sus vecinos, amigos, relaciones comerciales o profesionales con gente que no era judía y no fue perseguida por el nazismo. Yo también puedo ponerme en la misma postura de Ceferino Reato y decir "Ay, no puede ser que haya 15 mil vecinos, amigos, novios, colegas, comerciantes o funcionarios que no hayan denunciado la desaparición de los restantes judíos muertos en Babi Yar"

Tercero: si la cuestión es "no se puede comparar porque hubo comunidades barridas de millones", el holocausto tiene la "ventaja" (si se le puede llamar de ese modo) en la metodología investigativa donde, al tener millones de muertos, y sobre una etnia, se pueden utilizar los censos demográficos de posguerra y compararlos con los de la preguerra. Nosotros no podemos usarlos para el caso argentino, puesto que la cifra de 20 mil desaparecidos es insuficiente para realizar correlaciones con un censo sin caer en los márgenes de irregularidades que tiene una población con los censos; a eso se le suma su ausencia de diferenciación étnica o de otro género con el resto. La asimetría entre los dos eventos históricos, lejos de favorecer la postura del negacionista de los desaparecidos, la empeora. Salvo que el negacionista de los desaparecidos también sea negacionista del holocausto. Esa clase de sujetos existen, aunque no es el caso de los apologistas que mencionamos habitualmente: Ceferino Reato, Nicolás Márquez, Victoria Villarruel y Agustin Laje, por nombrar algunos de los apologistas más conocidos, no han negado el número de 6 millones de muertos del holocausto (o no se pronunciaron al respecto) 

Nizkor en su refutación a los negacionistas del holocausto, menciona los censos demográficos (en español): 


Cuarto: aún si tomamos los 6 millones como "bloque" ¿Cómo crees que llegaron al número de 6 millones si no tienen todos los nombres? ¿Cómo crees que llegaron al estimativo de los 6 millones si hubo comunidades enteras borradas de la faz de tierra como tan acertadamente pueden oponer?? El modo de alcanzar esa estimación es mediante la valoración prudente de testimonios y documentos (innominados). Si el negacionista de los desaparecidos acepta la cifra de 6 millones, es porque está aceptando el material testimonial/documental como una forma de acceder a la realidad. Y si acepta los documentos y testimonios como acceso a la realidad ¿Por qué se hace el distraído para no aceptar el material que acredita 20 mil desaparecidos??? 

Quinto: no hay privilegio epistémico entre dos fuentes de mismo tenor; de lo contrario es como si se violara el principio de no-contradicción. Muy sencillo: el documento nazi de Babi Yar dice que ejecutaron a 33.771 judíos. No hay nombres ni nada. El diario de Acdel Vilas dice que pasaron 1507 personas por su centro clandestino. No hay nombres ni nada ¿Por qué para el negacionista argentino un documento vale y el otro no??? El documento o testimonio no pierde su valor probatorio por el tipo de masacre. Eso es tan absurdo como creer que el ADN de un cabello en un caso policial tiene menor valor probatorio en un asesinato que en un robo, cuando tiene exactamente el mismo valor y después cada caso utilizará la prueba para determinado punto. No hay privilegio epistémico, y esperemos que con este sencillo ejemplo del ADN lo entienda


Si yo fuera negacionista del holocausto, podría plantear el argumento apologético a la inversa: tendría que decir "¿Por qué ustedes creen en esa hojita que asegura 33.771 muertos? Si solo están los nombres incompletos de 18 mil personas". Si alguno me suelta la tontería de "pero es que hubo familias enteras asesinadas, no se pudieron denunciar más casos por consiguiente" debería replicarles: "¿Y eso qué tiene que ver? No les da poder a ustedes para creerle a una hojita sin nombres. La premisa de ustedes no sigue a su conclusión". Y es verdad: creerle o no creerle a una fuente innominada no tiene nada que ver con la dificultad o facilidad de denunciar, ni con esas externalidades. En cambio, es la teoría epistemológica donde una fuente creada por un sujeto cognoscente del hecho es transmisora de ese hecho que comunica. Por eso creemos en las fuentes: porque creemos en el sujeto cognoscente del hecho, porque damos un "salto de fe" que el sujeto conoce mucho más que nosotros y que cualquiera sobre el hecho que presenció o tuvo participación. Para ilustrar: Acdel Vilas sabe mucho más que nosotros y que cualquiera (como la CONADEP) sobre los detenidos de su propio centro clandestino, porque él estaba al mando de su centro. Los nazis saben mucho más que nosotros sobre el número de sus crímenes en esos reportes, porque ellos los cometieron y tuvieron la oportunidad de contabilizarlos (oportunidad que no tuvimos nosotros porque no estuvimos en el lugar de los hechos)


Por otro lado, fíjense el absurdo del planteo: si los nominalistas argentinos como Ceferino Reato o Nicky Márquez deciden creer en la cifra de 6 millones del holocausto porque "fueron millones de muertos" en contraste con la dictadura argentina, entonces deberán explicarnos cuándo se produce el "click" mágico para que un documento adquiera validez en el tiempo. Por ej, el documento que expusimos de la masacre de Babi Yar es de septiembre de 1941: todavía los nazis no habían provocado millones de muertos judíos sino algunas decenas o cientos de miles. Aplicando la lógica extraña de personas como Márquez (que tengo entendido que NO niega el número de 6 millones del holocausto), el documento de Babi Yar durante ese lapso de tiempo no tendría ningún valor para demostrar nada, pero una vez que los nazis completaron el millón de muertos o los dos millones, entonces "mágicamente" el documento que antes no tenía valor, lo empieza a tener!!! ¿Qué clase de lógica temporal sería esa?? Y esto concibe sus propias contradicciones internas, puesto que existen documentos nazis que computan miles o decenas de miles de muertos, como es el caso de los reportes de los Einsatzgruppen; pero también existen algunos documentos nazis que hablan de millones de muertos, como el caso del telegrama de Höfle: si la idea es que "no valen los documentos o testimonios sobre miles de muertos" (los documentos y testimonios de la dictadura argentina) ¿Vamos a desechar todos los documentos nazis que indiquen miles de muertos y quedarnos con los que indiquen millones de muertos? Eso implicaría una grave destrucción de la evidencia que fundamenta la narrativa del holocausto


Telegrama de Höfle de enero de 1943, detectado por la inteligencia británica. En este telegrama las SS informan la cifra de muertos de la Aktion Reinhard hasta el 31 de diciembre de 1942, dividido por sus campos de exterminio Treblinka; Majdanek/Lublin; Belzec y Sobibor: un total de 1.274.166 judíos asesinados en esos campos citados. Solo números, no hay detalles de sus nombres

Mutatis mutandis, lo anterior se aplica a los documentos argentinos; porque la metodología de investigación es la misma. De nada sirve que Ceferino Reato o Nicolás Márquez aleguen diferencias con el holocausto o los regímenes comunistas de millones de muertos si quieren otro ejemplo histórico, porque eso significa que los documentos que rechazan del caso argentino, mágicamente los aceptarían si Argentina tuviese millones de muertos, pese a que el documento no cambió su fuente ni esencia. No tiene ningún sentido. Veamos esta fuente bastante conocida:
Como en Argentina no hubo millones de muertes sino miles, entonces los apologistas no creerían en este documento de Clavel. Pero si hipotéticamente Argentina hubiese tenido millones de muertes ¿Creerían en esta prueba? No hace a la lógica, porque el documento continuaría siendo exactamente el mismo. Apologistas como Ceferino Reato no podrían solucionar estos problemas epistemológicos sin caer también en la temida incorrección política de negar la cifra del holocausto


Más números sin nombres: documento nazi de transporte de víctimas del holocausto, con la cantidad de prisioneros que iban en los trenes

Ustedes imagínense por un momento que yo me pusiera a discutir del holocausto con, digamos, Darío Lopérfido; que al parecer le gusta turistear a Alemania. Imaginemos que yo en un momento del debate me pusiera a gritar envalentonado: "¡¡¡En Babi Yar no murieron 34 mil judíos, murieron muchos menos, murió la mitad; incluso menos de la mitad porque las fundaciones ni siquiera tienen los nombres completos de esa mitad!!!". Imagínense que yo la rematara del siguiente modo: "¡¡¡¡Se ha inflado un número a propósito, se mintió descaradamente!!! ¡¡¡Seguramente lo hicieron para obtener beneficios económicos que inventaron más muertos!!!" Sería interesante escuchar la actitud y los argumentos que me daría el ex-aliancista ¿Cuánto apostamos que él utilizaría exactamente las mismas "excusas" que le niega a los troskos para su número de 30 mil desaparecidos? ¿Cuánto apostamos que Lopérfido no le prestaría atención a la "lista" con la mitad de muertos de Babi Yar, que al fin y al cabo es la "lista con nombres" a diferencia del documento aséptico de los nazis que solo computa numeritos? Pongo Lopérfido como ejemplo del mismo modo que habría puesto a Ceferino Reato o Agustin Laje, Gómez Centurión, o cualquier otro 
Esto quizás terminaría de demostrar: su ignorancia en la metodología investigativa, y/o que existen otras motivaciones políticas para aceptar o negar una determinada cifra de desaparecidos. En todo caso, la imaginaria discusión también evidenciaría algo más importante como la fachada insostenible de lo "políticamente incorrecto" que muchos apologistas llevan con orgullo, cuando en realidad son más correctos de lo que ellos imaginan
(en cuanto al holocausto en general, actualmente la cifra de asesinados individualizada alcanza a los 4.7 millones, de los 6 millones estimados por los historiadores; aunque es de notar que no todos los registrados llevan fechas de nacimiento, por lo que el registro es inevitablemente incompleto en las individualizaciones. Véase su base de datos:
https://yvng.yadvashem.org/advanced-search.html?language=en 

Si tuviésemos que dar un ejemplo de registro más optimista que Babi Yar, véase que Grecia tiene aproximadamente el 80% de sus víctimas registradas. En porcentaje suena muy elevado, pero significa que todavía falta más de 10.000 nombres que no están registrados)



registro por país de las víctimas judías identificadas del holocausto. Aunque los historiadores fundamentan la cifra de 5,7 millones de judíos muertos por el nazismo, los registros con nombre y apellido no alcanzaron esa cuantificación. En los países donde la matanza resultó más formal (con los campos de concentración), es relativamente sencillo localizar la documentación nazi con nombre y apellido de su víctima, generalmente a través de los registros para subir a los trenes o los censos del gueto. En las masacres informales (las matanzas en el Este por ametrallamiento y gaseo en camiones) es más complejo porque los nazis solamente documentaban el número de muertos, pero no sus nombres. Pero de ninguna manera los historiadores rechazan el valor de documentos con números para estimar la cifra de muertos, independientemente que se los individualice. En esta noticia se explica mejor la problemática: 

https://www.bbc.com/news/world-middle-east-39062221 

Tal vez algún despistado me pueda decir: "Pero estamos en Argentina ¿Por qué nos ponemos a comparar la forma de investigar y cuantificar en otras partes? ¿Qué nos debería importar que los historiadores del holocausto le crean a una hojita con números y sin nombres?" Pues Argentina no es el centro del universo, y es necesario ver cómo se manejan estos mismos problemas en otras partes para sumarlo al saber empírico. Del mismo modo que un economista puede fijarse en los datos de otros países para comprobar, con sus matices, si una medida funciona o no. Pues aquí igual. Yo me tomé la ligera molestia de "más o menos" indagar cómo se cuantifican otras masacres. Para comprobar si yo estaba encerrado en mi mundo metodológico, o si lo que decía encontraba "eco" en otros lados. Ahora yo les pido a los negacionistas lo mismo: si están convencidos de su postura nominalista ¿Pueden darme ejemplos convincentes de otras masacres donde haya prevalecido su posición nominalista en detrimento de las fuentes innominadas? Porque ni siquiera los negacionistas del holocausto son nominalistas, ellos adhieren al anti-nominalismo
No hace falta irse tampoco muy lejos a otro país. En la misma Argentina tenemos el caso de la Patagonia Trágica: el fusilamiento del año 1920 que costó la vida de por lo menos 300-400 personas (según estimaciones del gobierno, aunque otros lo aumentan a 1.500 muertos). Cabe preguntarse ¿Dónde están los nombres y apellidos de esas 400 personas? No los veo a los apologistas protestar por la "mentira oficial de los 400 muertos sin nombre en la Patagonia Rebelde" ¿Por qué será?
O la Revolución del Parque del año 1890, donde tampoco tenemos datos certeros de la cifra de muertos, y cuyas estimaciones se duplican en tamaño: de 150 a 300 muertos

Al margen de esta pelea entre "posición nominalista" VS "posición innominada" o anti-nominalista, notamos que no pocos negacionistas de la cifra de desaparecidos son contradictorios cuando exponen sus intereses. Por ejemplo, la señorita Victoria Villarruel escribió un libro titulado “Los Otros muertos” donde registra las víctimas principales de la guerrilla; sin embargo en las listas se anotan varias personas sin nombre ni apellido. Villarruel explica en una entrevista que eso se debe a que recolecta el material de la prensa, y no siempre en los diarios aparecía el nombre y apellido de la víctima. El diálogo de la entrevista es el siguiente:
-Victoria Villarruel: en la lista [del libro “Los Otros Muertos”] hay personas que figuran como NN. Esas personas que no tienen nombre definido, es porque los mismos medios de prensa decían “Hubo 10 heridos”
-[entrevistadora] Claro
-Entonces nosotros corroborábamos que los diarios sostuvieran esa posición, ese número de 10 heridos y sobre eso se agregaba los 10 NN. El Estado debiera dar los nombres de esas personas

Link del extracto de la entrevista (a partir del minuto 25:07):


Con independencia de la discusión sobre el valor de las fuentes periodísticas, lo que deseamos mostrar es que Victoria Villarruel concibe una metodología de investigación para su libro o su organismo donde incluye fuentes sin nombre ni apellido, solo números. Esto vuelve contradictorio su pedido de nombres y apellidos rechazando el documento de Arancibia Clavel en el siguiente tweet:

image


Ceferino Reato y Nicolás Márquez también incurren en idéntica contradicción: exigen una lista con todos los nombres y apellidos de los desaparecidos…. pero después no tienen mucho reparo en tomar cálculos exagerados de la cantidad de guerrilleros, a pesar que no presentaron ninguna lista con los nombres ni apellidos de todos los guerrilleros que ellos estiman. Nicolás Márquez en su libro “La Otra Parte de la Verdad” escribe que en el país hubo 25.000 subversivos, y repite esta cifra en otros videos o conferencias suyas… pero él no ha presentado al día de hoy ninguna lista con los nombres y apellidos de esos subversivos. En esta conferencia el loquillo de Márquez, ya prácticamente excitado con la mentira sistemática, infla a 25.000 la cifra de combatientes directamente:

https://youtu.be/spf2faQqulE?t=5800 

Yéndonos a otras masacres con millones de muertos, el mismo Márquez resalta que el comunismo provocó 100 millones de muertos, pero independientemente de la fidelidad de esa estimación lo cierto es que ni él ni su compañero Agustin Laje han presentado ninguna lista con los nombres y apellidos de esos 100 millones

Parece que cuando les conviene, a los apologistas no les molesta la posición innominada. Si además ellos no descreen en la cifra de 6 millones de judíos muertos, en última instancia la postura de estas personas es de un nominalismo "atenuado" 






Páginas del libro de Victoria Villarruel "Los Otros muertos" donde ofrece su lista de víctimas de la guerrilla. La "nominalista" de Villarruel se pasa de mambo con la cantidad de N.N. que anota en su libro, asi que al parecer no es tan "nominalista" como predica. Supongo que con la misma lógica ella aceptará la fuente de Acdel Vilas para deducir que hay más de 700 NN en Tucumán, ya sea detenidos, heridos, muertos, etc. de la escuelita de Famaillá





Páginas del libro de Victoria Villarruel "Los Llaman... Jóvenes Idealistas", donde utiliza inevitablemente fuentes innominadas. Más allá de la fidelidad del número o de la fuente, Villarruel toma las palabras de Gorriarán Merlo de unas 30.000 acciones guerrilleras pero Villarruel no ofrece ninguna lista individualizada cada una de esas 30 mil acciones. También miss Vicky Villarruel toma el número de 12.000 militantes de Montoneros pero no ofrece ninguna lista con el nombre, apellido y DNI de cada una de esas 12 mil personas. Son fuentes innominadas (sin individualización). Pag. 43 y 77:



En una entrevista privada que le hicieron a Victoria Villarruel, ella dijo lo siguiente sobre los números de víctimas de la guerrilla:

Si no hay un número [en la acción guerrillera], se elige un número mínimo. Para explicártelo con un ejemplo concreto, lo hicimos con una de las acciones terroristas más frecuentes, que era tomar de rehenes a gente que iba en trenes. (…) Entonces, nosotros tomábamos un tren de cinco vagones, un pasajero por vagón, un maquinista y un boletero. En un tren contabilizamos solo siete personas. Es un número irrisorio, no hay ningún tren que tenga siete personas. Entonces ahí te das cuenta de que, por ejemplo, la cifra es mucho menor de lo que debe haber sido en la realidad. Pero nosotros no lo sabíamos. Elegimos un número simbólico. Siete personas es un número simbólico en un atentado terrorista de esa envergadura 

(entrevista personal de Nicolás Palmisciano a Victoria Villarruel, 5 de julio de 2017)


Independientemente de la exageración de llamar "toma de rehenes" a una ocupación de trenes, o de incluso contabilizar esa gente como víctima; más allá de eso es interesante porque Villarruel no hace asco siquiera en darle plena fe de credibilidad a suposiciones. Ya no es que tome fuentes innominadas para las víctimas de la guerrilla como vimos en el ejemplo anterior, sino que hace suposiciones: "si no sabemos cuántas personas hay en el tren, entonces lo suponemos". Aún cuando esas suposiciones sean mínimas en la cifra, sorprende que Villarruel tome como valor de prueba una suposición.... pero después no le da valor de credibilidad a fuentes como las de Arancibia Clavel que son mucho mejor prueba, epistemológicamente hablando, que una simple suposición. Muy lógico el asunto ¿no?


Y esto sin olvidar lo francamente contradictorio que resultaría descartar el material documental y testimonial que acredita una cifra mayor al Estado, para abrazar como una religión a la CONADEP….. cuando esa comisión se basa en material documental y testimonial (las denuncias no dejan de ser testimonios). Si se cree en el tipo de material de la CONADEP, sería arbitrario no creer en los documentos y testimonios que acreditan mayor número, como si el material de la comisión de Alfonsín tuviese un privilegio epistémico. De nuevo la citada desventaja que presenta la postura nominalista: no puede discriminar epistemológicamente la relevancia que tendría el material nominado por sobre el material innominado, cuando ambos provienen de los mismos géneros: documentales, testimoniales, etc.

La posición nominalista no siempre aparece con un criterio unificado en su narrativa. Para ofrecer un caso sencillito, el conocido periodista Jorge Lanata en el siguiente video adhiere implícitamente al nominalismo

Y en su libro del año 2003 "Argentinos: Tomo 2" en la página 356 que trata del Operativo Independencia y la cifra de combatientes del ERP, el periodista Lanata escribe:
Diez meses después de su comienzo, el general Vilas se jactaba de haber asesinado a 312 guerrilleros y herido o detenido a otros 322. Sólo por el campo de concentración La Escuelita, de Famaillá, pasaron 1.507 personas
Lanata no adjunta la fuente del dato, pero es obvio que la cifra de La Escuelita lo sacó del diario de Vilas. Como sea, si Lanata realmente cree que lo único válido es la lista con nombre y apellido, no tendría que haber citado el dato de Vilas. Lo tendría que haber omitido o despreciado. Esta contradicción de criterios de selección de fuentes no se reduce a este investigador
(PD: en su libro, cuando habla de las relaciones diplomáticas entre Argentina y Alemania durante la segunda guerra, Jorge Lanata también menciona la cifra de 33.771 muertos en Babi Yar)


En determinados apologistas, es poco menos que risible pedir por los nombres y apellidos de los restantes que faltan, cuando metodológicamente es bastante probable (aunque pueden existir excepciones) que los apologistas ni siquiera se hayan tomado la molestia de investigar uno a uno todos los casos denunciados por el Estado. Si los desaparecidos son 4 mil, 5 mil o 6 mil como dicen ¿El apologista se tomó el trabajo de investigar uno por uno la veracidad de todos esos casos para quedarse con esa cifra? Paradójicamente, la siguiente carta escrita por una apologista extrema (más extrema que Nicolás Márquez!!!!) llamada Andrea Alarcón, tiene su enorme cuota de coherencia con respecto a las consecuencias lógicas del negacionismo:

¿Acaso alguna vez se investigó algo respecto de los “desaparecidos”?  La CONADEP era un gran escritorio y un gran libro en donde se anotaban denuncias. Nada más 

Se dice con benevolencia que los desaparecidos no son 30 mil, que son 9 mil [refiriéndose a la CONADEP]. Y yo agrego con menos benevolencia: los “desaparecidos” no son 9 mil; nueve mil son las denuncias. El Estado argentino jamás investigó nada. Las denuncias se tomaban y se toman como verdades reveladas. Incuestionables


(en realidad el Estado con sus actuales juicios, transforma muchas de las denuncias en algo tangible. Pero recordemos que muchos apologistas, incluyendo Reato, tienen sus reparos con los juicios al acusar que poseen sus irregularidades)  

Bajo su propia lógica negacionista, esta señora Alarcón es mucho más coherente en su apologismo que Ceferino Reato, Agustín Laje, Victoria Villarruel, Nicolás Márquez, etc. Pero igualmente carece de razón, por algo tan sencillo como lo siguiente: esta señora puede descreer de toda denuncia o testimonio que provenga de la "parte interesada" como un familiar de desaparecidos o un izquierdista. Pero ¿Puede acaso desconfiar de lo que dijeron los mismos represores que ella defiende? ¿Con qué criterios no le va a creer? ¿Va a decir que de repente los represores se convirtieron en troskistas que se echan la culpa a sí mismo incrementando el número de desapariciones para hacer réditos con la vieja chota de Carlotto? En cualquier caso, volvamos al punto inicial de este párrafo completo: pedir por los restantes nombres de los 20 mil desaparecidos, aún cuando tenga alguna legitimidad ese reclamo, viniendo de ciertos apologistas suena a chiste. Se lo puedo entender a la señorita Alarcón que me pida hasta la huella dactilar de todos los 20 mil, pero no a Reato o Márquez ¿Por qué pedir los nombres que faltan, si ni siquiera pueden estar seguros de la veracidad de los nombres que tienen? En ese sentido, es congruente adoptar la posición que yo tomé: basarme en material mayormente de represores, y no en las "denuncias tomadas por los sectores progres y el Estado progre con Secretarías progres con juicios progres" 

Igual no se crean que soy el único boludo que pone sobre la mesa esta obviedad. En su Twitter, el bobito de Javier Milei, que además de ser un economista anticientífico, se metió en este caso a "respaldar" a sus colegas de pensamiento (sus amigotes Laje y Márquez) cuestionando la cifra de 30.000 desaparecidos porque, como ustedes sabrán, al Estado le falta un "cachitín" de nombres por registrar (bueno... 20 mil nombres le faltan). Pero uno de los usuarios que defiende la idea de 30 mil, salió también a comparar con lo que sucede en el holocausto
 
Otros usuarios también respondieron de modo similar:
En efecto, en el holocausto tampoco están TODOS los nombres registrados, faltan decenas y decenas de miles de nombres. De la masacre de Babi Yar faltan ¡¡¡15 mil nombres!!! A Milei obviamente no parece que le haya caído muy en gracia esa respuesta. Pero lo cierto es que los "datos duros" son esos: en el holocausto y en cualquier otra masacre, ya sea el estalinismo o la dictadura argentina, la cifra se estima CON INDEPENDENCIA DE SU REGISTRO INDIVIDUALIZADO. Si el bobito mental de Milei no lo acepta, problema de él. Pero a un historiador racional le importa un pepino si Javier Milei o el pelotudito de Laje cree que el único argumento exclusivo y excluyente es la lista con nombre y apellido.... de hecho, véase la paradoja: que el mismo Milei parece que no le importa esa lista cuando se habla del holocausto ¿O será que Milei no tiene mucha idea de cómo se investiga en el holocausto?? Les recuerdo que el ganso de Milei también repite la idea de los 100 millones, de los 150 millones, de los 500000000000 millones de muertos del comunismo ¿Cuánto apostamos que él no tiene la lista con todos los nombres de los muertos por el comunismo? Y también hay que apostar la catarata de excusas que van a oponer para no asumir su contradicción (me imagino la pavada "pero es que la diferencia radica en que son millones de muertos", argumentos que ya expliqué sus incongruencias más arriba)
Menos mal que a Javier Milei le gusta el judaísmo, lee la Torá y todo eso: 
Y no sabe algo tan básico como que en el holocausto judío muchas de las fuentes primarias son innominadas (sin nombres)
Tampoco vale excusarse en que presentar una lista de 100 millones del comunismo o los 6 millones del holocausto es más "difícil" que presentar la lista de 30 mil o 20 mil. Primero, que región por región es lo mismo; no es "difícil" en sentido de complejidad sino en recorrer más ruta. Segundo, lo que importa no es la facilidad o dificultad sino el por qué continúan mencionando el número de 100 millones aunque no tengan ninguna lista ¿cierto, Milei? 


Ay el amiguito de Laje y Márquez...... y mañana va a decir que fueron 300 millones. Total, él tiene el "derecho" de fabricar mentalmente millones de personas sin nombres mientras se queja que los "zurdos" se fabriquen mentalmente unos pocos miles de desaparecidos sin nombres
Si van a decir que "es una situación distinta", bien que podrían optar por no creer ninguna cifra en vez de aceptar de la nada millones de muertos. Esta última actitud de los apologistas no surge de la premisa anterior

Los apologistas más políticamente correctos que no quieran negar la cifra del holocausto, querrán acusarme de hacer "trampa" en mi ejemplo extremo, porque se supone que en la dictadura argentina tuvo que haber existido familiares o amigos, vecinos que denuncien. Eso es lo que dicen ellos y supongamos que tengan razón en que la mayoría debía tener a un potencial denunciante. Los apologistas se preguntarían ¿Por qué no fueron denunciados? y con eso saldarían la contradicción con respecto al holocausto. 
El problema es que para solucionar su contradicción, necesitarían recurrir a hipótesis ad hoc, que no son malos argumentos pero que no pueden derribar la evidencia innominada (sin nombres). Decir cosas como "no puede ser que haya familiares tan malos que no denuncien a sus parientes" es un argumento ad hoc, y no es mal argumento pero aún con su poder convictivo en nada refutan los materiales como la nómina de Etchecolatz o el diario de Vilas o el libro de Vergez, que son fuentes primarias y decantan la balanza hacia esta posición innominada. Tampoco esos argumentos ad hoc sirven para resolver los problemas epistemológicos que señalamos más arriba; de hecho uno puede invertir el planteo: dado que no existe una forma "pura" de acceder a la realidad como es la observación e individualización de cada muerto, se obtiene la cifra con otra forma "impura" que es la estimación innominada. De ahí en más, si tipos como Javier Milei disculpan el número innominado del holocausto, es porque consideran que esa forma "impura" es aceptable; en cuyo caso cuando se quejen del problema argentino no se quejarían de una mentira estrictamente, sino de una falta de pureza informativa que ellos mismos disculpan en otras ocasiones 
Aún suponiendo que existe un motivo válido para disculpar la impureza en una situación y no en otra, es legítimo quejarse de las impurezas "no disculpables" pero eso no las equipara con la mentira, porque entonces dirían que la cifra del holocausto es una mentira disculpable. Otra contradicción lógica que deben resolver los apologistas políticamente correctos como Javier Milei o sus amigos Laje y Márquez, o Ceferino Reato, o Lopérfido. Etc.
Y repetimos: las conclusiones no se siguen de las premisas. Del argumento "no puede ser que haya muchas personas sin denunciar" o del otro argumento "el holocausto o el régimen comunista son millones de muertos, es una situación diferente" no se deduce que debe rechazarse las fuentes innominadas del caso argentino. Esa lógica es incongruente. El problema persiste ¿Qué tenemos que hacer con las fuentes innominadas? ¿Las tiramos a la basura? ¿Las ponemos en un museo? ¿Las valoramos como prueba, como pedazos de hojas sin sentido? En eso los nominalistas no dan argumentos consistentes para despreciar la evidencia innominada, y por lo visto con el holocausto ellos hasta aceptarían esas fuentes sin nombres. Solo en el caso argentino, de manera ideológica no quieren aceptarlo y dicen que el holocausto "es diferente", como si eso fuera excusa para validar una hojita sin nombres escrita por los nazis y no validar una hojita sin nombres escrita por los funcionarios del gobierno militar argentino
Y como dijimos arriba al principio, tampoco es que las víctimas judías vivieran en una cápsula aisladas del mundo. Asi que SI puede pensarse, en principio, en potenciales denunciantes

La lógica de apologistas como Darío Lopérfido, Ceferino Reato, Javier Milei, Nicolás Márquez, Victoria Villarruel es bastante extraña y se sintetiza en:

-No creo que los desaparecidos argentinos sean 20 mil (ni 30 mil) porque no están todos los nombres. No acepto el material innominado porque considero que la familia pudo denunciar tranquilamente a su pariente desaparecido en estos 40 años
-El holocausto fueron 6 millones de muertos aunque yo no tenga todos los nombres. Le creo al material innominado porque considero que los nazis arrasaron con comunidades enteras, lo que impide cursar denuncias (aplica el mismo bolazo para los muertos del comunismo, ejemplo la Gran Hambruna de China)

Nótese que se está entrando en una falacia de non-sequitur: la premisa no sigue la conclusión. Del hecho cierto que hubo "comunidades enteras barridas" no implica que ese sea el argumento epistemológico válido para creer en el material innominado. O contrario sensu: del hecho (supuestamente cierto) que uno puede denunciar a su familiar desaparecido, no es argumento epistemológico válido para negarle entidad a las fuentes innominadas
Para atacar a una fuente innominada, hay que destruir su raíz epistemológica: hay que invalidar su carácter de suceso captado por los sentidos cognoscentes del sujeto-fuente primaria. Si queremos invalidar para siempre la fuente de Acdel Vilas sobre sus 1507 prisioneros, tenemos que demostrar que Vilas no es un sujeto humano, por ende es incapaz de crear un testimonio que transmita la realidad que él percibe con sentidos humanos 
Decir cosas como "no creo en el material innominado porque el familiar tuvo 40 años para denunciar" no es un argumento coherente para destruir el material innominado. Es sin dudas un argumento interesante que nos hace cuestionar por qué hubo 10 mil familias que no denunciaron... pero eso nada tiene que ver con la destrucción de la fuente innominada
O si no, hagamos lo siguiente: en vez de decir que desaparecieron 20 mil o 30 mil personas, digamos que desaparecieron 30 millones de personas. Se supone que ahora los apologistas tienen que creer en esa cifra, del mismo modo que creen en los "millones de muertos por el comunismo" ¿No era que con millones de muertos les creemos? 
Otra cosa: la lógica nos dicta que si algo es más "difícil" de comprobar sus nombres, deberíamos creerle menos y no más. No hace ningún sentido que pelotuditos como Milei o Lopérfido le crean a la cifra de 6 millones porque es más difícil de buscar los nombres. Si no le creen a la cifra de 30 mil o 20 mil porque no están todos los nombres, le deberían creer todavía menos a la cifra de 6 millones y no más ¿Qué sentido tiene creerle más a un suceso más difícil de individualizar? Eso es ilógico
Todavía si todos los muertos por los nazis estuvieran individualizados, no diría nada en contra o en favor de las fuentes innominadas ni del caso argentino ni del caso alemán ni de otro caso

Todo esto no supone que el investigador o historiador estén obligados a adherir al estimativo innominado por sobre la individualización. Lo que se criticaría es la elección a conveniencia. Olvidemos por un momento que lo individualizado se compone de material testimonial/documental al igual que el estimativo innominado (por lo cual no tendría sentido rechazar uno u otro); es legítimo que Ceferino Reato o Agustin Laje prefieran quedarse con los registros individualizados, pero esta elección debe ser COHERENTE y CONSTANTE, no una elección interesada. Por ejemplo, Ceferino Reato puede quedarse con la cifra de denuncias de desaparecidos que tiene el Estado, pero con la misma constancia también debería suprimir cualquier estimativo innominado, como el caso de sus estimativos de la cifra de la guerrilla. O debería quedarse con los registros individualizados completos del holocausto en vez de adherir a la cifra de 6 millones que escribió en esta parte de su libro "Disposición Final":
Para Laje o Márquez, deberían quedarse con los registros individualizados completos de los regímenes comunistas también, en vez de adherir a la cifra de 100 millones.... porque se ve que ahí, no están tan preocupados por los nombres y apellidos y DNI, ahí se les "olvida" acordarse de ello. Villarruel por su lado, debe borrar de un plumazo los casos NN de su libro
Pero estoy seguro que si alguna persona el día de mañana minimizara la represión de Stalin o Mao Tse-Tung bajo la excusa de "no están todos los nombres", y Nicolás Márquez se viera obligado a realizar una fundamentación epistemológica para sostener las validez de las cifras innominadas de estos tiranos, él diría más o menos lo mismo que estoy diciendo ahora sobre la validez del anti-nominalismo en el caso argentino

-La navaja de Ockham: la intuitiva solidez del nominalismo continúa residiendo en un punto no despreciable: la imposibilidad, a priori, de tantos potenciales denunciantes sin realizar la denuncia
No faltará quien saque de la gorra de los argumentos la hipótesis de la indemnización, al estilo de "no es factible que con la promesa de indemnización, no se hayan presentado 10 mil familias". Las especulaciones de ese calibre de ninguna manera tienen el peso para derribar las fuentes expuestas, pero lo podríamos considerar una especulación inicialmente legítima, aunque solo en los casos de masas de gente con un nivel cultural y económico decente. En otros lugares no y después puntualizaremos

En rigor de la verdad, quienes pidan por la lista de 20 mil desaparecidos con nombre y apellido, deben dirigirse a los respectivos comandos que conozcan esa información. Si ustedes quieren conocer el nombre y apellido de los 1507 detenidos en Famaillá ¿Me lo deben pedir a mi? Pues no, se lo tienen que pedir a Acdel Vilas. Cierto que ya murió, entonces podrían consultar a los amigos de Vilas, tal vez a los familiares, a los que "trabajaron" con Vilas en el centro clandestino, etc. Sobre el Operativo Moncholos, si desean conocer el nombre y apellido de los 48 detenidos, les aviso que Vergez se encuentra vivo en la cárcel al día en que se escribe esta publicación, pueden preguntarle quiénes son esas 48 personas. Además Héctor Vergez fue jefe del Batallón 601, por lo que en teoría tiene conocimiento de las listas a nivel nacional. Ahí tienen ustedes los personajes concretos para preguntarles los nombres y apellidos de los 20 mil. Yo modestamente les puedo indicar que existe material para fundamentar la cifra de 20 mil, pero la individualización de cada uno de ellos no me corresponde a mi ni a nadie más que los secuestradores. Y si ellos no quieren dar a conocer los nombres de los 1507 detenidos de Famaillá ni los muertos de la nómina de Etchecolatz, entonces tendremos que caer en la amarga conclusión que probablemente no sabremos jamás sus nombres, sin que esto invalide la evidencia que expuse


No obstante, hay que aclarar algo: cuando un apologista nos pregunta "¿Cómo es posible que haya tantas familias, amigos, vecinos que no denunciaron?" en evidente tono de pretensión de refutarnos, por empezar la pregunta está mal enfocada desde el vamos. Ese planteo se lo tienen que realizar a la persona que no denunció a su familiar, no a nosotros. Porque nosotros no podemos conocer qué razón subjetiva u objetiva llevó al familiar a no denunciar. Es cierto que podríamos especular con algunos elementos razonables: por ejemplo, el familiar es pobre o ignorante; el familiar no puede demostrar con pruebas que su hijo desapareció por culpa de las fuerzas armadas; el familiar quiere olvidar esa historia (no necesariamente olvidar a su hijo pero SI el episodio); el familiar no desea entrometerse en tramas legales; el familiar quizás tenga un poco de miedo; el desaparecido quizás no sea un desaparecido sino un sobreviviente que nunca denunció (y no desea denunciar para no revivir su traumática experiencia); tal vez los familiares del desaparecido hayan muerto por causas naturales antes de obtener la chance de denunciar; tal vez los familiares también desaparecieron; tal vez sus vecinos y amigos sufran algunos de estos problemas que impidan denunciar o no les interese hacerlo; tal vez la denuncia se haya realizado pero el Estado no computó en sus relevamientos; tal vez el familiar posee una ideología política que le impida denunciar y contribuir al "relato"; tal vez el familiar o sobreviviente se sientan responsables de la propia situación vivida y no deseen contar 
El caso más ilustrativo que se ha estudiado, es la provincia de Tucumán; si bien no puede transpolarse esta experiencia a todo el territorio del país pero es un elemento comprensivo de la problemática. De acuerdo a trabajos como los de Ana Jemio o el G.I.G.E.T. (Grupo de Investigación sobre el Genocidio en Tucumán), existe una clara diferencia entre los sectores urbanos y los rurales al momento de presentar las denuncias en tiempo y forma, al momento de seguir las causas judiciales, etc. Mientras la población urbana tiene una mayor conciencia sobre el tema (incluso se han nucleado en organizaciones de DD. HH.), los sectores rurales carecen tanto de recursos económicos como de una cultura urbana que les haga comprender que la Justicia es un regulador de la convivencia cotidiana; todavía cargan con estigmas o culpas propios de la época (no es infrecuente que los investigadores descubran que los testimoniantes se refieren al periodo como "la época de la subversión"; ni siquiera utilizan el vocablo "tortura" para contar sus padecimientos). Los sectores urbanos han denunciado casi inmediatamente la desaparición o secuestro de sus familiares, aún durante la vigencia del gobierno de facto; cosa que no ha ocurrido con el rural. Esto también pone en duda que los juicios de lesa humanidad realmente sirvan para satisfacer o recomponer a cada víctima, ya que no todos tienen la misma cultura para entender a la Justicia estatal como un bien valioso



Ejemplo de personas desaparecidas en el periodo de la dictadura pero sin pruebas que su desaparición sea culpa de la represión: Elena Mijalchuk y Manuel Darroux están desaparecidos desde 1977 y recién fueron denunciados en 1999. Debido a la ausencia de pruebas testimoniales o documentales sobre los responsables del secuestro, y debido a que no fueron denunciados en la CONADEP de Sábato, el Estado no los hace figurar en el RUVTE. No es tan "fácil" demostrar una desaparición posterior a la CONADEP de 1983 como algunos apologistas insinúan (no estamos diciendo que estas personas hayan desaparecido necesariamente por culpa de los militares)

Paradójicamente, un periodista que fue víctima de las fuerzas armadas y policiales realiza la siguiente entrevista a la apologista Victoria Villarruel. El periodista cuenta que fue torturado a pesar de no tener nada que ver con la guerrilla ni con los militares (minuto 7:26). Según se infiere de su relato, no fue a denunciar a la CONADEP ni al Estado su vivencia, lo que constituiría un sobreviviente "no registrado". Aunque no explica por qué no denunció, se puede inferir alguna razón en su ideología de "olvidar lo que pasó", la "pacificación" y la teoría de los dos demonios. De hecho en esta entrevista se pelea con Victoria Villarruel porque él sostiene que "hay que olvidar todo" (desde los desaparecidos hasta las víctimas de la guerrilla) y seguir adelante, pacificar el país, etc.

En otros casos, simplemente a la víctima no le interesa dar testimonio judicial de su sufrimiento. Es el caso de un ex-empleado de la fábrica Swift durante los momentos más duros de la represión:
Alberto habló, por un lado, sobre las especificidades de la dictadura; y por otro, indicó que estuvo preso, sin establecer ningún vínculo entre ambas cuestiones (Entrevista a Alberto, 28 de febrero de 2012, Berisso). Recién cuando indagué sobre los motivos de su detención explicó los pormenores de lo ocurrido e indicó que sucedió con los militares. Expresó que se asombró cuando lo detuvieron tras ser acusado de sabotaje, junto con otros dos trabajadores, por un supervisor. Contó que la acusación fue una equivocación porque, en realidad, se trataba de un desperfecto corriente de su trabajo de mantenimiento 
Alberto indicó que un grupo de militares lo fue a buscar a su casa y lo llevó a la Subprefectura, donde lo encerraron y fue torturado. Para Alberto esa detención fue una equivocación ya que él no había hecho ningún sabotaje y no andaba en nada. De esta manera, Alberto cuestionó la equivocación pero no la modalidad de castigo implementada. Además, indicó que sabe quiénes eran algunos de los miembros de Prefectura que lo torturaron y hasta los ha visto caminando por Berisso, pero dijo que él no atestiguaría contra ellos porque estuvo detenido solo una noche [...]. Sin embargo, cuando se refirió a este periodo no indicó esta vivencia como significativa, no la recordó como relevante para dar cuenta del régimen dictatorial

p. 68:
El entrevistado divide, al igual que los otros entrevistados, el rol de los trabajadores de la fábrica entre aquellos que "no estaban metidos en nada" y por lo tanto no fueron el blanco principal de la represión, y aquellos que "estaban metidos en algo" (siendo el objetivo de los militares). El entrevistado se ubica en la primera categoría, por lo que manifiesta que su detención y tortura fue un simple caso de error. La víctima no considera su episodio relevante como para testimoniar a la Justicia, ni tampoco lo conecta en la narrativa de sus vivencias en el periodo de la dictadura

Son especulaciones, con motivos algunos más válidos que otros, pero en última instancia la pregunta "¿Por qué no denunció?" corresponde formulársela al familiar que no lo hizo, y no a nosotros

Ahora bien es verdad que ese interrogante resulta legítimo a la luz que hablamos de 10 mil casos sin denuncias (de 20 mil desaparecidos, el Estado tiene la mitad aprox. registrada) ¿Es posible tantos sin denunciar? Realísticamente es una proporción 1:1 entre denunciado/ no denunciado; no es excesivamente inverosímil. Pero aceptamos que es un margen muy grueso. Lo que nosotros podemos hacer, en cambio, es demostrar que ese interrogante legítimo es menos importante que la siguiente problemática: hay evidencia concreta que va desde Flouret a Etchecolatz, desde Vilas a Arancibia Clavel, desde el Documento Final hasta Lanusse. Un apologista puede aceptar la evidencia o rechazarla, pero si la rechaza tiene que demostrar con pruebas la existencia de una coordinación maestra o divina para que, de repente, todas estas personas de distintos lugares decidieran "auto-incriminarse" o dejar material documental y testimonial de un número más alto, quizás a sabiendas que podría ser utilizado ese material por los organismos de DD. HH. Yo pregunto ¿Qué es más incoherente? ¿Aceptar que existen 10 mil personas que no denunciaron? ¿O aceptar una conspiración divina donde Etchecolatz, Vilas, Flouret se "echan la culpa" a sí mismos con números más altos?? Me parece que la segunda opción es mucho más mística que la primera. Entre tanto misticismo, podemos tolerar la existencia de 10 mil personas sin denunciar como lo menos místico o irracional de las opciones posibles

Demos un ejemplo: la desaparecida Ñata Monasterio, víctima de la represión en 1976, fue recién denunciada formalmente en el año 1999 tal como consta en el RUVTE. Con independencia de las razones por las cuales su caso demoró 23 años en computarse (miedo, ignorancia, etc.), lo destacable es que ella aparecía en el listado de bajas del diario de Vilas. Y ese diario fue filtrado en 1986. Es decir, que 13 años antes de su denuncia formalizada, ya aparecía como evidencia en el material documental de un represor. Por tanto ¿Vamos a rechazar la evidencia de los represores que indique un cúmulo mayor de víctimas que las registradas estatalmente? Olvidemos, si lo desean, toda la parte testimonial de los sobrevivientes; vamos a suponer que no lo tomamos por "sospecha de deformación de la verdad" ¿Deberíamos desechar lo que los mismos represores ofrecieron?? 

(enlace del listado de bajas del diario de Acdel Vilas. En el número de orden 87, encontramos a Rosario del Valle Albornoz, la "Ñata Monasterio":

https://web.archive.org/web/20031119140647/http://www.nuncamas.org/investig/vilas/acdel_68.htm 

)


Sintetizando: sobre el asunto del por qué no hubo 10 mil familiares que denunciaran a los restantes desaparecidos, sin dudas parece increíble que 10 mil familiares no denunciaran, pero es mucho más creíble que la idea de una conspiración divina para que todos los represores mágicamente inventen un material documental necesario que los incrimina en un mayor número de desaparecidos. Entre dos situaciones increíbles, hay que quedarse con la más creíble, tal como lo demanda el principio económico de razonamiento de la "Navaja de Ockham", que impide multiplicar entidades o su calidad innecesariamente para demostrar una tesis en vez de otra. Los apologistas y negacionistas tendrán que aprender eso aunque no les guste, si bien es cierto que el principio de Ockham no es irrebatible; pero no hay otra solución más acorde aquí
Además, el nominalismo con su argumento de "no es posible que haya tantos familiares o amigos sin denunciar" apela en última instancia a un conflicto de verosimilitud. Pero su argumento no es una prueba histórica. Hemos dicho anteriormente que el caso argentino es el primero donde se discutirían las posiciones nominadas e innominadas (si bien todavía no se discutió en esos términos a nivel mediático o académico). Por consiguiente, los nominalistas no tienen pruebas históricas o estadísticas sobre cómo se comportarían las familias y amigos. De hecho, por extensión analógica, los innominados pueden citar ejemplos de masacres en donde faltan miles de identificaciones, como el ya citado caso de Babi Yar. Seguro, son distintas masacres con sus especificidades, pero los nominalistas no tienen ningún ejemplo en la historia donde su posición prevalezca sobre el material innominado. En cambio los innominados poseen varios ejemplos donde los historiadores rechazan tácitamente la posición nominada
A la luz de la falta de evidencia en ambos sentidos, yo no puedo fundamentar por qué no se denunciaron las 10 mil personas restantes. Pero tal como expliqué más arriba, tampoco es relevante saber ese punto para la credibilidad de las fuentes innominadas, puesto que no pasa por la cantidad de denuncias. Una fuente innominada se puede creer o dejar de creer por una serie de presupuestos epistemológicos, no por externalidades
En este sentido de la navaja de Ockham, la respuesta más fácil ni siquiera es decir que no existieron tantos desaparecidos sin denunciar. La respuesta más fácil es decir que, aquellos que no denunciaron, son sobrevivientes que no quisieron hacerlo. Eso es mucho más razonable que afirmar que las fuentes militares innominadas son inválidas o alguna otra respuesta por el estilo (que haría adentrarnos en irresolubles planteos epistemológicos)

En definitiva, no está mal que una persona quiera quedarse con el registro individualizado del Estado o de otro organismo. Lo que está mal, es creer que eso es un argumento superior y hasta excluyente de los estimativos innominados. El que niega el estimativo incurre en 3 errores:

-Cae en la falacia del Falso dilema, creyendo que todo se reduce a dos únicas posibilidades: o una lista con nombres de los 20 mil, o simplemente "no existen tantos desaparecidos"

-Cae en una confusión epistémica, creyendo que el registro individualizado es una verdad más "dura" o tangible que el estimativo, cuando lo cierto es que ambos (estimativo y registro individual) se basan en material documental y testimonial, por lo tanto ninguno es "mejor" o "peor" que el otro, y no son incompatibles entre sí* (lo que no significa inventarse un estimativo sin fundamento)

-Cae en una violación de la navaja de Ockham, pues al negar el valor del estimativo debería recurrir a una explicación más forzada del por qué los represores se "auto-incriminaron" con números más altos, y por qué terceros imparciales ofrecieron testimonios concordantes. La solución para estos negadores es insinuar la locura colectiva de esos personajes, la "magia", etc. Argumentos bastante revirados que además se contradicen con otras actitudes de los mismos sujetos (por ejemplo, la encendida defensa en juicio que ellos realizan, la reticencia a contar más sucesos, etc.). Con la ausencia de denuncias de familiares, las explicaciones son menos rebuscadas


Así, la discusión del número de desaparecidos, de la "lista" con nombres y apellidos, se transforma en un fascinante debate epistemológico sobre la investigación histórica. Lástima que los negacionistas no se den cuenta y tengamos que lidiar con sus falacias, cuando lo cierto es que esta discusión podría estar en manos de gente escéptica de los 20.000 desaparecidos pero mucho más interesante e inteligente para discutir ¿Qué significa esto? Si el día de mañana, un escéptico encuentra sustento para una nueva epistemología de la historia aplicable a la problemática que he planteado, entonces lo que escribí en este artículo no valdría de nada..... pero los argumentos que hasta el momento esgrimieron el sector apologista (desde Victoria Villarruel hasta Ceferino Reato) para rechazar una cifra más alta, no logran revertir nada de lo que expongo, simplemente porque no discuten la problemática epistemológica
Esto puede considerarlo como otra "navaja": ¿Qué opción elegimos? ¿Aceptar las fuentes de un número más alto pero con la eterna duda del por qué no aparecieron más familiares o amigos a denunciar? ¿O decidimos reformular radicalmente los presupuestos epistémicos en los que se construye una investigación? Si la opción que usted quiere es la segunda, entonces díganos cómo reformula la metodología de investigación
Nótese como ejemplo paradojal, que si Acdel Vilas dijera "yo mandé a torturar a subversivos", seguramente hasta los apologistas como Márquez o Reato aceptarían sus declaraciones (como de hecho Reato "aceptó" de Videla que confesara que se torturaba gente en su libro "Disposición Final"). Pero si Vilas dijera acto seguido "en Famaillá pasaron 1500 personas" y los números no le cuadraran a los apologistas, entonces descartarían sus declaraciones porque "no están todos los nombres". Ni siquiera es que desecharían su declaración por argumentos como "Vilas no tuvo acceso a las listas de detenidos de Famaillá", lo que puede ser un argumento cierto o falso pero es un argumento a debatir o polemizar. Pues no, simplemente lo descartan porque no están los nombres y apellidos de esos detenidos. O sea que el apologismo se encuentra en el problema de dividir de manera anti-doctrinaria una confesión calificada, lo que contraviene la inteligencia epistémica no solo de una investigación histórica, sino del sistema procesal judicial que no valora tan arbitrariamente las pruebas como desean los apologistas
No deja de ser una versión de los problemas que ya planteaba el filósofo escocés David Hume (y sus contrapartes) sobre el material testimonial, pero aplicado a nuestro dilema "nominalismo" VS "anti-nominalismo" 

Exactamente ¿Cómo dividen un testimonio los apologistas frente a esas circunstancias? Vamos a ejemplificar con un hipotético caso más complicado: imaginemos que un sobreviviente, represor o colaborador de un determinado centro clandestino, es llamado a declarar por la Justicia, y testimonia su permanencia en ese lugar. Realizó tareas, conoció rutinas, conoció personas que trabajaban por allí, conoció personalmente a torturados y torturadores, conoció muy bien la estructura edilicia, testimonia detalles que son demostrativos que estuvo en ese lugar durante un buen tiempo. Su testimonio dura un par de horas. En un momento de su declaración, este testigo cuenta que tuvo acceso a una lista de detenidos, que albergaba tantos nombres que no los puede recordar a todos, pero rememora el número de casillas en las listas: alrededor de 3.154 casillas completas con detenidos; se acuerda muy bien del número porque estaban numerados en una columna de la hoja. Una cifra que supera lo que tiene el Estado denunciado en la provincia donde se juzga el centro clandestino. Al ser 3 mil prisioneros, es imposible que el testigo pueda recordar todos esos nombres, pero SI recuerda algunos y los empieza a nombrar con detalles que los identifique, como por ejemplo número de cédula. Así, el testigo recuerda 50 nombres de prisioneros que estaban en la lista de 3.000 prisioneros
Ahora, los nominalistas ¿Cómo dividen esta declaración judicial sin caer en arbitrarias mutilaciones que contravienen el Derecho procesal? En principio, el nominalismo no puede creer en el testigo cuando éste refiere a una lista de 3.000 prisioneros, porque "no están todos los nombres". Pero si el nominalista opta por creer en los 50 nombres que estaban en la lista de 3.000 prisioneros, cae en una flagrante arbitrariedad porque está creyendo en nombres contenidos dentro de una lista que inicialmente no le dio valor de credibilidad. Caemos en una valoración absurda jurídicamente hablando: para el nominalista, el testigo está mintiendo con los 3.000 prisioneros pero no está mintiendo con los 50 nombres ¿Por qué no al revés? ¿Por qué el testigo no miente en todo? ¿Por qué el testigo no dice la verdad en todo? El nominalista no puede discriminar coherentemente cuándo el testigo cae en la mentira y cuándo en la verdad; considerando que el nominalista (y cualquier otro tercero) no estuvo en el lugar de los hechos para confirmar con sus propios sentidos dónde está la verdad y la mentira, si verdaderamente esas 50 personas pasaron por ese centro o estuvieron en esa lista. Pero para el nominalismo, mientras el testigo cuenta detalles "identificables" no está mintiendo, pero si por casualidad el testigo menciona un mínimo, insignificante detalle innominado, entonces ya ahí mágicamente el testigo miente, mágicamente se le activa el switch de la mentira. No tiene sentido
Como sea, el nominalista solo puede resolver la incoherencia pasando al "bando" del anti-nominalismo, o descreyendo la totalidad del testimonio. Pero si adhiere a la última opción, eso prácticamente significa abolir el sistema judicial, solo porque los nominalistas ya no están capacitados de creer en el testimonio como metodología de acceso a la verdad
Claro que se podría insistir en la posición "yo solo voy a confiar en el número atado al nombre y apellido, sin importarme un rábano las fuentes innominadas". Esa persona no estaría diciéndonos cómo debemos resolver la falta de credibilidad de las fuentes innominadas ¿Entonces al final optamos por no creer en las fuentes innominadas? ¿Al final optamos por calificar esas fuentes como simples papeles sin capacidad convictiva para transmitir un suceso real? Dicha postura rompe con el estado de normalidad epistemológica de la fuente, tal como hasta ahora la experiencia humana la venía practicando. Es que lo "normal" es creer en las fuentes confiables, en vez de optar por descreer. Todos los días en los juicios civiles o penales, lo "normal" es que los abogados, fiscales, jueces opten por creer en las fuentes válidas; de lo contrario no habría sustancia para esclarecer un hecho si no existiese fuentes para confiar. El periodista, el historiador, el simple investigador de cualquier suceso, ya sea un simple homicidio como un escándalo de divorcio, todos estos investigadores optan por buscar fuentes confiables y, cuando la encuentran, lo "normal" es confiar. El nominalista, al pretender discriminar presuntas individualizaciones de las fuentes innominadas, rompe con el estado de normalidad y, por consiguiente, es quien debe explicarnos por qué la está rompiendo. Debe demostrar que sus argumentos son superiores para quitarle a una fuente la característica de transmisora de la realidad. La carga de la prueba se invierte y el nominalista debe demostrar por qué la fuente innominada es inválida por el mero hecho de ser innominada

Los nominalistas tampoco explican si esta desconfianza hacia las fuentes innominadas solo aplica a "personas", y no puede extenderse a "hechos". Por dar un ejemplo que no tiene nada que ver con los desaparecidos pero SI con una fuente innominada, el siguiente caso pertenece a un violador sexual que abusaba de sus hijas y escribía sus depravaciones en un diario íntimo:
El violador anotaba el número de violaciones con el nombre de su correspondiente víctima. “Le eché dos polvos a…”, “le eché un polvo a…”, había escrito de su puño y letra junto al nombre de la víctima, el día de la violación y la cantidad de veces que la martirizó 
Mientras la individualización de su víctima es "nominada" (la está mencionando con su nombre), la cantidad de veces que la violó constituye un hecho cuya cuantificación depende exclusivamente de que nosotros le creamos a ese número confesado. Si el violador escribió "le eché 3 polvos a X tal día tal hora", un nominalista debería cuestionarse la cifra. No queda claro cómo hace el nominalismo en estos casos para creer en los guarismos porque, al fin y al cabo, esa fuente se termina convirtiendo en una fuente innominada, aunque sea en la parte de la cantidad de violaciones (Por lo demás, la Justicia tomó este diario íntimo como prueba para acusar al depravado, con independencia de las disquisiciones que nosotros hagamos entre el nominalismo y el anti-nominalismo)
Siguiendo el razonamiento, el nominalismo no puede siquiera discriminar valorativamente la contabilidad innominada que pretende cuestionar, del simple hecho puro (sin número). Si un testigo dice "cuando me secuestraron, he visto cómo me subían a un Falcon verde", eso es el relato de un hecho puro (sin cantidades o "cantidad 1"). Pero este relato necesita de determinados presupuestos epistémicos para ser creído por el nominalista. Y esos presupuestos se reducen a la misma formula: "un sujeto percibe la realidad y la transmite parcial o totalmente en un soporte como el testimonio". Esos son exactamente los mismos presupuestos que permiten creer en el anti-nominalismo: el sujeto percibe la realidad y la transmite parcial o totalmente en un soporte. No se entiende por qué los nominalista cancelan los presupuestos epistémicos con las cifras innominadas pero, para el resto de un relato, vuelven a reflotar los mismos presupuestos que le han negado a la credibilidad del innominalismo
Fíjense que además los apologistas contrarían la necesidad del "A Maiori ad minus" ("Quien puede lo más, entonces puede lo menos"). Apologistas como Márquez o Reato creerían en lo más (testimonio de torturas extremas, muertes, sadismo) pero no pueden creer lo menos (testimonio de cifras innominadas de detenidos)

"Ay, pero es que no es de sentido común que haya tantas personas sin denunciar". Mirá, no me quiero poner pedante y filosofar más de la cuenta, pero el sentido común sin dudas es útil en medidas restringidas. Si vamos al caso, incluso en áreas mucho más importantes que este tema trivial de los desaparecidos, como el caso de las ciencias "duras", incluso en esas áreas uno se encuentra con cosas que parecen salirse del "sentido común" (como la acausalidad cuántica). Y nadie chista por eso, ni lo tildamos de "eso no es correcto" aunque nos parezca lógicamente contrario a nuestra experiencia diaria con esas ciencias. Evidentemente, las máximas de la experiencia humana son necesarias para una investigación, aún las investigaciones judiciales. Pero eso no da pie a que tengamos una mentalidad aristotélica obsoleta que encima disfrazan de falso empirismo. Lo cierto es que la evidencia disponible demuestra la existencia de fuentes innominadas en muchas investigaciones, no solo en Argentina sino en el mundo. Las fuentes innominadas existen, por más que no les guste a los nominalistas. Eso es el verdadero empirismo. Y algo hay que hacer con esas fuentes: si las desechamos, debemos argumentar el por qué. Si las usamos, hay que argumentar el por qué. Aquí en este posteo, ya argumentamos el por qué las usamos: porque sus presupuestos epistémicos son exactamente los mismos que cualquier fuente (como las nominadas)
Igual no es que todos los que emitieron una opinión nominalista sean despreciables con los que uno no pueda entablar conversación. Algunas personas, desde esa postura, han ofrecido unos matices interesantes y loables. Un caso de ello es Bernardo Salduna, miembro del Tribunal Superior de Entre Ríos, quien comentaba en una charla de alumnos: 
Algunos hablan de «treinta mil desaparecidos». Cifra emblemática, pero desde ya absolutamente fantasiosa y totalmente ajena a la realidad. Después de más de treinta años de democracia puede ser posible que existan personas desaparecidas cuyos datos se desconozcan. Pero nunca pueden ser más de veinte mil como se pretende
Como historiador aficionado que soy, quiero referir un hecho del siglo 19: durante la dictadura de Juan Manuel de Rosas (1829-1852) una firma comercial francesa la Casa Lafone -enfrentada con el dictador por motivos económicos- ofreció a un exiliado argentino en Montevideo pagarle un penique por cada víctima que le atribuyese a Juan Manuel de Rosas. El escritor y poeta Rivera Indarte, que de él se trataba, aceptó el convite y elaboró una lista donde echó la culpa al dictador porteño de cuanto muerto apareciese. Llegó a acusarlo incluso del fusilamiento de Dorrego, de la muerte de Facundo Quiroga y de miles de muertos a manos de los unitarios o en las guerras civiles. Por supuesto, el resultado fue de más de treinta mil muertos.
Historiadores «revisionistas» posteriores investigaron el tema a fondo y pusieron al descubierto el engaño. Incluso fueron más allá y, en su intento de reivindicar la figura de Rosas, llegaron casi a absolverlo de cualquier culpa. Ni tanto, ni tan poco: Rosas no era culpable del asesinato de muchos de los que le atribuían. Pero tampoco era un nene de pecho. Asesinó, degolló y persiguió sin asco y gobernó con mano dura y sangrienta durante más de veinte años. La distorsión actual [del número de desaparecidos] podría llevarnos, en un futuro quizá no lejano, a una revalidación de los dictadores
*nota al margen: las tablas de sangre de Rivera imputa falsamente a Juan Manuel de Rosas de 23 mil muertos

Salduna considera la posibilidad que existan más personas sin denunciar, aunque no cuantifica el posible número. Pero cree que no es viable la existencia de tantas miles de personas sin denuncia. También, su "metáfora" rosista es interesante: insistir con 30 mil desaparecidos cuando, siendo honestos, nadie ha dado argumentos convincentes sobre ello, empuja al apologismo a envalentonarse y no solo rebajar el número hasta lo que puede ser la "verdad" (en sentido nominalista) sino que empiezan a suavizar la represión militar como pendiente resbaladiza. Salduna no es un nominalista despreciable como Nicolás Márquez; en cierta manera es "válido" lo que está diciendo. Pero lamentablemente para nuestra óptica, Salduna continúa con el problema intelectual del "aristotelismo"  o el "sentido común" o una falsa creencia de raciocinio, o directamente un falso positivismo, sin resolver la disputa entre nominalismo VS anti-nominalismo
Que yo sepa, investigadores "moderados" como Ceferino Reato o Salduna no niegan la posibilidad que exista alguna que otra persona más sin denunciar. En última instancia niegan que haya 10 mil más, o 20 mil más, o 5 mil más sin denunciar. Niegan una "masividad" de gente sin denunciar, pero no rechazan que exista, aunque sea, 1 persona más sin que haya efectuado su denuncia. En cuyo caso ¿Ellos aceptarían las fuentes innominadas aunque sea con 1 persona sin denunciar? Supongamos que encontramos una fuente innominada que refiera a un sujeto sin individualizar, pero que contenga características de una persona que no aparece registrada en el Estado. No hablamos de fuentes innominadas como las de Etchecolatz o Vergez que se extienden a decenas o cientos, sino a una fuente innominada con una única persona sin denunciar ¿Reato aceptaría esta fuente considerando que él acepta la posibilidad de alguno más sin denunciar? No queda claro en su prédica, ni tampoco la discriminación epistemológica con las fuentes innominadas que abarquen una cifra superior de detenidos sin denunciar

Por supuesto, que podría existir perfectamente la posibilidad que el día de mañana se descubra un material suficientemente sólido (por ejemplo las listas completas de los represores) que indiquen que los desaparecidos son únicamente 9 mil; descartando la evidencia actual o reformulando su sentido. No nos cerramos a esa opción que los desaparecidos sean 9 mil y ya está. Pero actualmente, con la evidencia disponible, estamos "obligados" a inclinarnos a los 20 mil. Claro, que todo este ajetreado tema se resolvería muy rápido si los que guardan la información la publicaran en su totalidad. Si todos los GT (Grupos de tareas) publicaran las listas como las que existieron en Club Atlético, si los máximos responsables de la ESMA entregaran las carpetas que les abrían a cada detenido, si los responsables de Famaillá entregaran la información de cada detenido que pasó por el lugar, si los responsables de La Perla publicaran los libros donde se registraban a los detenidos; todo se resolvería más fácil y nos daríamos cuenta el verdadero número, nos daríamos cuenta si fallamos en la interpretación de algún elemento o si acertamos. Por ahora, la suma de elementos no nos permite decir que estamos fallando, de acuerdo a las máximas de la experiencia humana y la sana crítica; de ahí que sostengamos el número más alto que el estatal
Porque conste que no acusamos por despecho. Suponiendo la fantástica idea que el día de mañana Videla se levante de su tumba y me reproche: "vos me estás acusando de 20 mil desaparecidos. Yo no fui tan chad" Bueno ¿Por qué tu "amiguito" de Ricardo Flouret dijo que se sacrificaron 20 mil vidas? ¿Quién lo mandó a decir eso? ¿Quién mandó a tus "amiguitos" a decir que hubo 15.000 combatientes en el Documento Final? Yo no. Asi que, si no hay otra forma de interpretar todo eso, pues mi "acusación" de 20 mil queda. Es lo justo por ahora

Sin volver más largo este punto, ambas posturas, la nominal y la innominada, son LEGÍTIMAS. No digo que esté mal la postura de aferrarse a la cifra con todos sus nombres. Esto vale también para el holocausto: si alguien quiere decir que en Babi Yar murieron 18 mil y no 33 mil porque solo hay 18 mil nombres registrados, también es legítima esa postura. Ahora ¿Qué postura es más "correcta"? Ninguna en especial, pero hay mayor coherencia en una de estas posturas. En mi modesta opinión, quedarnos con la estimación innominada es más coherente, porque la posición opuesta no logra resolver algunos problemas lógicos y epistemológicos: por ejemplo, no puede explicar por qué rechaza el material documental y testimonial de la cifra innominada; teniendo en cuenta que el registro con nombre también se basa en material documental y testimonial (la denuncia es un testimonio). También esa postura implica no creer en ninguna estimación innominada: ni en los millones del comunismo, ni en los miles de combatientes de la guerrilla, nada que no tenga nombres. Y otros dilemas que ya reseñamos más arriba
La única ventaja que se le encuentra al nominalismo, es que ofrece la ilusoria sensación de seguridad informativa. No tiene que lidiar con masas abstractas de personas. Los nominalistas perfectamente pueden acusarnos, por ejemplo, que en las 700 personas faltantes de Tucumán de la fuente de Vilas, nosotros no conocemos ni sus nombres, ni tampoco conocemos si eran hombres, mujeres, ancianos, niños, si eran militantes o no lo eran, si había embarazadas, etc. Eso es totalmente cierto: para la posición innominada, tenemos el fundamento necesario para argumentar que faltan 700 personas sin denunciar, pero no podemos argumentar cómo eran esas 700 personas. Esto también pasaría con el ejemplo de Babi Yar: faltan 15 mil judíos sin identificar, y por lo tanto los historiadores del holocausto desconocen si esos 15 mil eran todos niños, mujeres, jóvenes..... incluso desconocen si las víctimas eran 100% judías o con diversos grados de mezcla ("mischlinge" o practicantes del judaísmo sin abolengo)
Pero esta sensación de seguridad solo sirve para un debate superfluo al estilo de los que Agustin Laje o Nicolás Márquez nos tienen acostumbrados cuando discuten con feministas pelotudas. De ninguna manera esa ventaja del nominalismo es útil para tratar de renovar la calidad epistemológica de la ciencia de la historia. Los nominalistas, incluso si persisten en esa postura, no pueden rechazar los fundamentos epistémicos de la metodología innominada
Quizás otro beneficio del nominalismo es que, si se expresa sin extremo, puede asumir una postura agnóstica del encuadre innominado; mientras que esto no ocurre a la inversa: los innominados están aceptando las consecuencias de su posición y no están habilitados para ser agnósticos. O mejor dicho, las dudas emergentes no logran concluir en un debate agnóstico. El nominalista bien diría "los desaparecidos son los 9 mil individualizados por el Estado, pero no soy capaz de cognoscer a las fuentes innominadas. La verdad que irradian las fuentes innominadas no es cognoscible". El anti-nominalismo en cambio, caería en una contradicción si discurre en esa filosofía agnóstica, porque acepta la eterna duda de las 10 mil familias sin denuncias, como un problema presente pero a superar por la irradiación de información de la fuente innominada, a la que ya le concede como defecto un valor de irradiación real de información. 
De todos modos el agnosticismo de ese hipotético nominalismo atenuado sería igualmente vulnerable a varios de los problemas epistemológicos ya señalados (y siendo honestos, algunos apologistas duros como Nicolás Márquez o Victoria Villarruel solo se quedarían con la posición nominalista y muy posiblemente no acepten en lo absoluto el agnosticismo de las fuentes innominadas, sino el rechazo más absoluto de ellas)
En tal camino, si el día de mañana se descubriera una "prueba maestra" que indique que los desaparecidos son 9 mil y no 20 mil, los nominalistas pasarían a tener razón pero no porque su método haya sido el correcto, ya que no lograron resolver todos los problemas  que conlleva esa postura. Simplemente pasarían a tener razón por una cuestión casual
O a la inversa: si los implicados represores entregaran absolutamente toda la documentación, y se descubriera que los reprimidos son 9 mil, no solo los represores harían un aporte a la verdad, sino que harían un aporte a la discusión metodológica, a cómo se debería interpretar los datos de aquí en adelante para no incurrir en nuevos errores. Imagínense que sentaría hasta un precedente: si realmente fueron 9 mil y las fuentes innominadas no sirven pa' nada ¿Qué sucedería con un negacionista del holocausto o del holodomor o del genocidio armenio? Estarían ahora envalentonados y empezarían a decir que las fuentes innominadas no sirven -basándose en el precedente argentino- y por consiguiente todas esas masacres produjeron cifras sensiblemente menores de muertos. Sería bastante interesante el aporte a la discusión de la metodología histórica que pueden darnos las fuerzas represoras  argentinas si realmente fuesen 9 mil represaliados. Aunque lamentablemente no tienen muchas ganas de hablar y ofrecer toda la documentación que ellos alguna vez crearon

Los nominalistas podrán jactarse en que yo no tengo los nombres y apellidos de las 20 mil personas reprimidas. Es verdad, ahí podemos decir que los nominalistas me "ganaron". Pero yo me jacto que los nominalistas todavía no han resuelto cómo destruir la posición anti-nominalista. Y ese debate precede la discusión de la cifra de desaparecidos. No tiene sentido ponerse a discutir si son 30 mil o 6 mil desaparecidos si primero no resuelven cuál postura es epistemológicamente más acorde para hablar del asunto: la nominalista, o la anti-nominalista. Esto no tiene que ver conmigo, ni con este blog, ni nada. Aunque mi blog no exista, aunque este posteo que escribí no exista más, el problema continúa quedando ahí: los nominalistas todavía no pueden demostrar que el anti-nominalismo sea una postura errada. Más bien lo contrario: el nominalismo, pese a sus ventajas, sufre de graves problemas que no han solucionado. El anti-nominalismo es una posición que trae menos conflictos

Es de notar que todos estos conflictos epistemológicos entre la postura nominalista y la anti-nominalista que desglosamos y detallamos en toda esta larguísima ponencia, solo existirían si la posición nominalista ofreciera una cifra menor que la anti-nominalista. De lo contrario, nos enfrentaríamos a otro problema mucho más complicado en la epistemología del testimonio y del documento. Ustedes imaginen esta hipótesis por un momento ¿Qué sucedería si el día de mañana, se presenta una avalancha de nuevos denunciantes a la Secretaría del Estado y de repente la cifra de desapariciones denunciadas se eleva a 60 mil casos? Esa nueva cifra "nominalista" superaría las fuentes innominadas con las que contamos ahora ¿Cómo se respondería frente a ese nuevo escenario? ¿Nos "mudamos" al nominalismo? ¿Nos mantenemos en el anti-nominalismo? 
Como verán, se puede ser nominalista y atenerse a un número más alto que el anti-nominalismo. Pero en este nuevo escenario planteado hipotéticamente, los conflictos anteriores se abandonan y asumimos otros nuevos: el choque entre sujetos cognoscentes contradictorios: por un lado, los nuevos denunciantes que percibieron una realidad.... y por el otro lado, las fuentes innominadas que transmiten una realidad que se opone a la de los nuevos cognoscentes -los nuevos denunciantes- 
Esa contradicción no existe en el nominalismo existente al momento -de cifra más baja que el anti-nominalismo-, ya que la relación entre las posiciones son de género a especie. Los nominalistas no pueden convivir con el anti-nominalismo; la postura de los anti-nominalistas en cambio, no es incompatible con los datos nominados producidos: si el RUVTE tiene individualizado a una cantidad de desaparecidos, ello no entorpece el valor de las fuentes innominadas, puesto que el RUVTE no pretende constituir un argumento contra las innominaciones, sino simplemente registrar los casos que se denunciaron
Afortunadamente no tenemos que lidiar con problemas epistémicos peores, y el conflicto entre nominalismo y anti-nominalismo en el mundo se da, por ahora, con la condición que el nominalismo siempre tiene una cifra más baja que la sostenida por el anti-nominalismo


Los 75.000 desaparecidos de Francia: el informe del gobierno argentino para responder a la CIDH

Lo que sigue a continuación no es, precisamente, la prueba más fuerte con la que contamos. De hecho es la más débil de todo lo que expusimos hasta ahora; aún cuando provenga de una fuente primaria, tan primaria como el mismísimo gobierno de Videla. Es una prueba complementaria, pero en modo alguno debe desecharse como evidencia si analizamos correctamente su contexto y relación de causalidad

Después de la visita que la CIDH (Comisión Interamericana de Derechos Humanos) realizó por la república argentina en 1979, ésta emitió un devastador informe contra el gobierno militar desnudando las graves violaciones de los Derechos Humanos. El gobierno censuró su publicación dentro del país, y rápidamente se aprestó a redactar un "contrainforme" que respondía a la CIDH acerca de un supuesto sesgo que le impedía "comprender" la dura situación vivida, sumida en el caos de facciones violentas guerrilleras. Criticaba la metodología de la comisión para arribar a conclusiones erróneas. En fin, el gobierno militar pretendía minar los resultados que obtuvo la CIDH

En el siguiente enlace, el informe del gobierno militar de Videla:

www.ruinasdigitales.com/revistas/dictadura/Dictadura - Observaciones.pdf 


En una de las páginas del informe gubernamental, se ilustraba un ejemplo bastante extraño (página 72):


No queda claro por qué escribieron eso: Francia no tuvo 75.000 desapariciones "reales", no tuvo ninguna lucha "antisubversiva" en su propio país (que era la tónica dominante del contrainforme). Y aun tomándolo desde el enfoque de desapariciones "naturales" temporales que ocurren en cualquier urbe, el ejemplo continúa siendo demasiado incongruente

Analicemos qué pretendía con esta declaración el gobierno militar, y si dicho párrafo pudiera funcionar como una prueba más de una cifra de desaparecidos argentinos superior al registro estatal, todavía en su carácter de prueba complementaria

El escritor comenta que Argentina posee una cifra de desapariciones proporcionalmente equivalente a otros países, citando a Francia de ejemplo; sin aclarar ninguna falsa o verdadera relación de causalidad con la cifra real de desaparecidos por el Estado argentino. Aunque de ello no se deduce que exista, en efecto, tantas denuncias de desapariciones receptadas por la policía, es muy significativo que el informe resalte esa situación de personas desaparecidas, si consideramos la posición absolutamente defensiva del texto y las incisivas respuestas hacia la CIDH por cuestiones metodológicas

Francia tenía, para 1976, una población de 54 millones de personas. Para 1979, la población aumenta a 55 millones

https://datosmacro.expansion.com/demografia/poblacion/francia?anio=1976 

Argentina en 1976 tenía 27 millones de personas. En el censo de 1980, la población es de 28 millones de personas

https://datosmacro.expansion.com/demografia/poblacion/argentina?anio=1976  

Proporcionalmente, Argentina tiene la mitad de la población de Francia. Yendo al ejemplo de los 75.000 desaparecidos, la Argentina habría de receptar unas 37.500 desapariciones por la policía, sin incluir el alza que sufrió por el advenimiento de la clandestinidad de la guerrilla (el texto no especifica los porcentajes de la tendencia). Es obvio que la aproximación no resulta hiper-exacta por las variables conductuales de las poblaciones entre un país y otro, es solo ilustrativo

No hay manera de saber si el escrito se refiere a denuncias repetidas (es decir, un familiar que denuncia varias veces una misma persona). La declaración, con una interpretación literal, no alude al número de denuncias, sino al número de personas de las que se efectuaron una denuncia. No es conveniente ser tan estrictamente literal en declaraciones que se prestan a otra posibilidad, por eso es que aceptando la repetición de denuncias, habría unas 37.500 denuncias. El Estado ¿verdaderamente tiene 37.500 denuncias de desaparición "natural" temporal entre 1976 y 1979 (aún incluyendo repeticiones)? ¿tantas denuncias de modo "natural" día a día durante 3 años?

Para darnos una idea, la Argentina actual, con una población mayor a la de los años 80, recibe un promedio de 2500 denuncias anuales entre personas perdidas, desaparecidas, etc. (un porcentaje elevado de ellas se resuelven rápidamente). Esto según el siguiente informe del Ministerio Público Fiscal que toma como fuente válida un recorte periodístico del 2014 (pag. 13):



No hay un modo de llegar "naturalmente" a 37.500 denuncias en 3 años ni mucho menos 

Existe una forma de llegar "más o menos" a ese registro de denuncias en la dictadura: según fuentes secundarias, durante marzo de 1976 hasta la casi finalización de año, se interpusieron un promedio de 800 habeas corpus mensuales; siendo Buenos Aires la provincia con 400 mensuales y el resto de las provincias 400 por mes. Si tomamos todo el rango anual de 1976, y si tomamos los 3 años 1976-1979, entonces 800 habeas corpus x 36 meses = 28.880 habeas corpus (incluyendo repeticiones). Este es el único modo de casi "justificar" el ejemplo con los +75.000 desaparecidos de Francia, pero aún así continúa siendo un ejemplo discordante. Por otro lado el número de desapariciones posterior a 1977 es menor al 76, y las provincias del interior en verdad tienen una proporción menor de desapariciones respecto a Buenos Aires si nos guiamos por el RUVTE; todo por lo cual el manantial de habeas corpus mencionado tendría que ser un poco más bajo. Y siempre volviendo a remarcar que el informe del gobierno habla de "desapariciones": no dice "más de 75.000  denuncias", sino "más de 75.000 desapariciones"; aunque sea un argumento muy "literal" conviene destacarlo un poquito puesto que es un informe elaborado a conciencia por el gobierno. A su vez, los habeas corpus comprenden los desaparecidos y los detenidos a disposición del PEN, cuando el ejemplo de los 75.000 refiere a los desaparecidos y el informe gubernamental discrimina pertinentemente en su folleto a los detenidos del PEN

en este enlace se detalla el caudal de habeas corpus (y además da una explicación del por qué se hablaba de 20 mil presos en ese tiempo):



El mismo gobierno militar del 79 que escribe ese informe contra la CIDH es quien tenía menos de 6700 pedidos de paradero en el ministerio del interior desde 1974 a 1982, de los cuales 1.441 estaban resueltos; asi que resulta incomprensible, sospechoso por sí mismo el ejemplo comparativo con Francia si tenían el resultado "exacto" (sin repetición de denuncias). Pero entendible la analogía cuando se somete con el resto de las pruebas sobre la cifra de desaparecidos. Véase la página 222 del siguiente enlace, donde en un acta de la junta militar se refieren a los pedidos de paradero:

https://www.argentina.gob.ar/sites/default/files/actas_tomo6.pdf 

Lo que importa es que el informe no ha puesto un ejemplo que se ajuste a la idea de 9 mil desapariciones o siquiera de 13 mil desapariciones (muertos + sobrevivientes registrados por el Estado) ¿Tal vez los que elaboraron el escrito no encontraron otro país que recepcionara menor número de desaparecidos? Pero suponiendo que se cumpla tal condición irreal, la mejor solución era NO PRESENTAR NINGÚN EJEMPLO. Porque nadie les obligaba a escribir ese extraño ejemplo

Quizás a alguno se le ocurra la idea de creer que, "tal vez", los escritores del informe se sintieron influenciados, o en la necesidad de responder sobre el elevado número de desaparecidos que se reclamaba internacionalmente. Recordemos que allá por 1979 estos organismos consignaban 15 mil; 20 mil o 30 mil desaparecidos ¿Hubo una necesidad de este estilo en el escritor? Pero eso no tiene sentido en dos caminos: primero ¿Cuál es la necesidad de responder a ello ofreciendo un ejemplo mucho más sospechoso?? Y segundo: dicho informe SI se refiere en un momento al abultamiento internacional. En la página 74 dice:
La Comisión [Interamericana de Derechos Humanos] estima que la cifra más verosímil es la de 5.818 personas desaparecidas, de las cuales el Ministerio del Interior sólo ha recibido denuncias referidas a 3.447. Esta apreciación de la CIDH muestra la mala fe con que ciertas organizaciones internacionales juegan con cifras increíblemente abultadas que carecen de toda base 
Hablando de "mala fe", la CIDH no estimó que esas 5818 personas sean la cifra más verosímil de desaparecidos, sino que fueron las denuncias recibidas por la comisión, dejando la puerta abierta a otras posibles desapariciones no denunciadas. Pero no importa ahora eso y concentrémonos en el resto: el informe es plenamente consciente de las elevadas cifras que los organismos internacionales estiman. Con menos razón se explica el ejemplo de los 75.000 desaparecidos de Francia. Además, en el mismo informe se indica que el Ministerio del Interior tiene 3.447 personas desaparecidas registradas ¿Qué motivo les movilizó al ejemplo de los 75.000 desaparecidos? Las posibilidades de un ejemplo "inocente" se esfuman para el apologismo y negacionismo 

De todas maneras, esta es una de las pruebas más débiles recogidas por nosotros debido a su vaguedad; y nunca fue utilizada como decisiva para fundamentar los 20.000 desaparecidos. Las pruebas decisivas a nuestro criterio son: el documento de Arancibia Clavel y la hoja de Ricardo Flouret. Pero incluso con la debilidad del ejemplo, no es una prueba desechable en lo absoluto. El informe fue escrito por el gobierno militar del presidente Videla, constituyendo después de todo una fuente primaria, y no hay otro modo razonable de interpretar el ejemplo excepto: una admisión que el gobierno conoce de una masa muy grande de desaparecidos y/o sobrevivientes, o de una masa muy grande de denuncias; y que esa masa no difiere "proporcionalmente" de la cantidad registradas por Francia. Si alguno tiene otra interpretación razonable, estoy dispuesto a escuchar

En este artículo del año 1980 del periódico español El País, se refieren al informe del gobierno argentino contra la CIDH y hasta resaltan el curioso ejemplo de Francia con sus miles de desaparecidos:



La duplicación de prisioneros en la investigación


¿Qué es un prisionero duplicado? Es aquel que ha pasado por dos centros clandestinos de detención, o más. Es un “duplicado” para la investigación del material, lo que obliga a realizar un concienzudo análisis para evitar una falsa multiplicación
Es sencillo de entender: supongamos que una persona es secuestrada y va a parar a Club Atlético, le asignan una clave, y después de un par de meses lo derivan a la ESMA, donde recibe otra clave. Los investigadores tienen que ser prudentes en la investigación de la clave numérica para evitar contabilizar dos veces a un prisionero a través de las claves. Si el sujeto en Club Atlético recibió la clave “X107” y en la ESMA la clave “620”, el investigador tiene que suprimir una de las claves para no contabilizar dos veces una misma persona
El problema es que no hay fuentes exactas sobre duplicaciones. No hay una fuente que me diga que un porcentaje específico de detenidos fueron a parar a otro centro. Uno tiene que postular a priori los márgenes de errores, pero también hay que basarse en los testimonios y en la compartimentación entre gente enterrada y gente que fue trasladada a los vuelos de la muerte. Daremos entonces muchos ejemplos sueltos al respecto
Si tomamos un margen de error total, entonces en los 3 mil prisioneros de la ESMA quedarían comprendidos los 1300 detenidos de Club Atlético, así que sería incorrecto sumar a la ESMA y Club Atlético con 4300 personas en total, sino que continuarían siendo 3 mil personas puesto que todos los detenidos del Atlético fueron a parar dentro de los 3 mil de ESMA. Idem con los cadáveres de Etchecolatz y Camps, por ejemplo en los 2.000 cuerpos se podrían imputar todos los prisioneros de Club Atlético. Idem con los centros de detención de otras provincias, donde podríamos suponer que prisioneros de La Perla viajaron a ESMA y Campo de Mayo
Aun calculando las duplicaciones con márgenes gruesos de errores, éstas no concuerdan con la cifra registrada por el Estado, si tenemos en cuenta el material testimonial, documental y las pericias antropológicas-forenses. Hay incongruencias cronológicas que impiden una duplicación excesiva en determinados centros, por ejemplo Club Atlético inicia su derrotero a partir de febrero de 1977, cuando la ESMA y Campo de Mayo ya funcionaban desde un año atrás, por ende los muertos de estos centros en su primer año no tienen nada que ver con Club Atlético. Además hay testimonios donde se constata que muchas víctimas fueron a parar directamente a ESMA o Campo de Mayo y no se derivaron a otro centro (las monjas francesas fueron secuestradas para ir a la ESMA y poco después arrojadas al mar. No consta que fuesen a otro lugar de detención). En cuanto a excavaciones, el equipo de antropología forense encontró fosas comunes, tierra removida en centros de detención como Arsenales; como así también hay testimonios (de represores, sobrevivientes, terceros) y pruebas de tierra removida en centros como La Perla: significa que no todos los cuerpos fueron arrojados al mar y no duplican contra ESMA/Campo de Mayo. Los muertos de Etchecolatz/Camps tampoco se duplican con los vuelos de la muerte ya que los represores citan que están enterrados. También, en centros de detención como Olimpo, hay testimonios de detenidos que eran inyectados con tranquilizantes en el mismo centro para después ir a Campo de Mayo a ser arrojados al mar: eso cuenta como duplicación únicamente en los cálculos de los vuelos de la muerte pero no cuenta como duplicación de la clave numérica de Campo de Mayo o de las celdas vacías calculadas por los sobrevivientes, porque las personas inyectadas iban directamente a morir y no se les asignaba una nueva clave ni se quedaban en el CCD


El testigo José Solanille ha visto enterramientos y muchas fosas en La Perla. No fue una víctima de los centros del gobierno militar, sino un paisano arriero que vivía en los alrededores del LRD

En el juicio a las juntas en 1985, ya se había presentado el testigo José Solanille. Y dio algunas aproximaciones de la cifra de tumbas. Los extractos:


-Doctor Orgeira [abogado defensor del imputado Viola]: en definitiva señor Presidente, si usted puede insistir, él dijo que había muchos pozos, pero una idea aproximada de a qué distancia en metros estaban los pozos

-Juez Gil Lavedra [dirigiéndose hacia el testigo]: ¿Puede dar una precisión?

-Testigo Solanille: no le puedo decir con certeza la distancia porque era casi uno al lado del otro, a veces pasaban 5 o 6 metros porque se observaban piedras que no se pueden cavar, a veces empezaban un pozo y a los 60 centímetros daban con una piedra grande [...] Así, cavaban al lado. A veces había pozos un poco más finos, un poco más grandes, había pozos grandes, como de 3 metros por 2 o algo así; y la tierra, cuando tapaban... sobraba mucha tierra, mucha tierra

-Doctor Orgeira: ¿Qué cantidad de pozos tiene idea el testigo que ha visto?

-Juez Gil Lavedra a Solanille: ¿Puede dar alguna aproximación??

-Testigo Solanille: era incalculable la aproximación de pozos. No le puedo decir qué cantidad, pero yo hasta el 77, que observé bien, le calculo así nomás, sin errarle muy lejos, arriba de 500 pozos 

-Juez Gil Lavedra: ¿¿Cuántos??

-Solanille: 500 pozos, sin errarle, porque posiblemente eran 16 hectáreas esa parte.... 15, 16, no aprecio muy bien... y estaba casi completamente....


enlace del testimonio de Solanille en el juicio a las juntas de 1985 (a partir de la página 14 en adelante:

https://cdadum.files.wordpress.com/2013/08/el-diario-del-juicio-13.pdf 

)

Por la confusión de lenguaje, no queda claro si Solanille se refiere hasta principios de 1977 esas +500 tumbas, o la totalidad de 1977. Lo más probable es que se refiera a la totalidad del año 77. Las tumbas no tenían todas el mismo tamaño

Los sobrevivientes, al no haber muerto, compartimentan naturalmente contra los muertos enterrados o en vuelos. Solo duplican para la clave numérica (la disparidad entre la clave numérica y los cálculos de los vuelos semanales podría aumentar el volumen de los sobrevivientes no registrados)

Centros de detención importantes como ESMA, Campo de Mayo, circuito Atlético/Banco/Olimpo y La Perla tenían sectores acondicionados para ocuparlos con los bienes sustraídos a las víctimas. Lo que evita una duplicación excesiva (si todos los detenidos de ESMA/La Perla/Campo de Mayo/etc. hubiesen sido derivados de otro CCD, la patota de estos grandes centros no se podrían haber quedado con sus bienes, ya que los grupos de tareas que capturaron inicialmente al prisionero se los hubiesen quedado). Testimonios de represores como el de Jorge Acosta, Antonio Pernías o Alfredo Astiz, ya sea en entrevistas periodísticas o ante la Justicia, siempre hacen alusión al esquema de una actividad diaria consistente en salir en grupo a detener al presunto terrorista y conducirlo a la ESMA: si bien esto no aporta precisiones al concepto de la duplicación, al menos ofrece una pauta por parte de los represores que la derivación de detenidos (ir ellos a recoger a personas de otros CCD) no era algo tan frecuente en su propia actividad diaria. El ex-sargento Victor Ibañez también testimonia sobre los enseres robados:

http://www.desaparecidos.org/nuncamas/web/investig/almiron/cposto/cposto26.htm  
Tanto el Ejército como la Armada, la Aeronáutica, las policías provinciales y federales, y la SIDE, secuestraban por sí mismo a personas, con independencia de su posterior repartición de detenidos para duplicar


Puede que haya algunos asesinados antes de llegar a algún centro de detención, por tanto no duplican. Como ejemplo, la nuera de María Isabel Chorobik de Mariani y otros cuatro militantes montoneros fueron muertos en una casa cuando el ejército descargó una balacera de disparos y explosivos que dejaron el hogar casi totalmente destruido. Idem con la pareja Lanuscou, asesinados junto con sus pequeños hijos en un operativo de las fuerzas armadas que arrasó el hogar con el poder de las ametralladoras y armas pesadas (Los muertos de Buenos Aires quedarían subsumidos en la nómina de Etchecolatz y la información que proveyó Camps, pero en el resto de las provincias no)

En Campo de Mayo (y tal vez en otros centros grandes como la ESMA) existía el recelo que impedía una colaboración estrecha entre las fuerzas (que igualmente la hubo). También estaban los interrogadores furtivos de todas las provincias y seccionales que no necesitaban llevarse al detenido a otro lugar sino que lo atormentaban ahí mismo en Campo de Mayo. Todo ello mengua la duplicación. El testimonio de Victor Ibáñez al respecto:

http://www.desaparecidos.org/nuncamas/web/investig/almiron/cposto/cposto30.htm 

De Campo de Mayo y ESMA, incluso si hubiese duplicaciones entre estos LRD, no olvidemos que ambos centros clandestinos tenían sus propios vuelos semanales; por consiguiente esos vuelos no duplican entre sí por su carácter independiente del otro 
Existen testimonios de gente enterrada en Campo de Mayo; véase el anexo "Sobre el número de desaparecidos". Esto minimiza la duplicación con otros centros que se basaban en vuelos de la muerte como ESMA (pero no sirve para compartimentar con los vuelos de Campo de Mayo, porque los testimonios de los traslados semanales bien pueden involucrar en su destino final el vuelo o el enterramiento. No se sabe)

Todas estas disparidades hacen imposible una duplicación excesiva para compatibilizar con los muertos registrados por el Estado

Aunque los vuelos de la muertes hayan sido una aberración humana, desde la lógica investigativa fue lo mejor que hicieron los militares, ya que inevitablemente funciona como compartimentado contra los enterrados. Si todos los desaparecidos hubiesen sido enterrados, o si todos los desaparecidos hubiesen sido arrojados al agua, entonces uno no podría compartimentar y el margen de duplicación podría ser más alto todavía
El equipo de antropología forense ha dejado al descubierto la existencia de tierra removida y marcas de retro-excavadoras. La siguiente foto pertenece al centro de detención de Arsenales de Tucumán

image

Las marcas que se observan coinciden con excavadoras… que no son del equipo de antropología. Es decir, se trata de marcas realizadas por individuos que en el pasado utilizaron excavadoras. El único motivo, el más obvio, es que se manejaron esas excavadoras para desenterrar los cuerpos enterrados (y así asegurarse la impunidad). Hay testimonios recogidos por la CONADEP sobre fosas comunes para fusilamientos en Arsenales, bastante antes que el equipo de antropología forense descubriera las “huellas” mecánicas; significa que el material testimonial coincide con el arqueológico. Esto por supuesto impide la duplicación excesiva entre los prisioneros de Arsenales con ESMA/Campo de Mayo o la nómina de Etchecolatz, porque es indudable que muchos asesinados de Arsenales no fueron parte de los traslados de ESMA/Campo de Mayo ni los enterramientos de Etchecolatz, sino enterrados en el lugar de esa foto

Aún si optamos por un criterio de duplicación 100%, no hay coincidencia con el Estado. Lanusse habla de 8.000 cuerpos en el mar, a lo que habría que sumar los 2.300 cuerpos de Etchecolatz/Camps que están compartimentados con los vuelos de la muerte en su mayoría, los NN de otras provincias, y los enterramientos ilegales como los de La Perla/Arsenal, totalizando más de 10-11 mil muertos; cifra que no llegaría a 20 mil en este extremo de duplicación 100% pero aún así supera los 8-9 mil del Estado

Del Operativo Independencia, hay sobrevivientes que no pasaron por la escuelita de Famaillá, por lo que no duplica con los 1507 detenidos de Acdel Vilas. Hay testimonios sobre Tucumán, 1975, de gente enterrada o arrojada desde helicópteros a los cerros para bombardear sus cadáveres; es decir no duplica los muertos de Vilas con otros centros importantes 

El represor de la Marina, Emilio Eduardo Massera, decía en un reportaje a Olga Wornat en la revista Gente, año 1995:
"Las mujeres a las que yo les salvé la vida son unas desagradecidas ¿De qué me acusan? ¿Usted sabe lo que les hubiera pasado si caían en manos del Ejército? Esos tipos las violaban y después las mataban. Averigüe lo que pasó en La Perla y en Campo de Mayo o en Tucumán. Ahí no se salvó nadie. En cambio, en la ESMA yo las rescaté y pagaron denunciándome" 

Fragmento sacado de la pag 18 de este libro: 
En este enlace, acerca de ese reportaje a Massera:
En este video, sobre Olga Wornat aclarando el reportaje: 
Si bien estas declaraciones merecen ser tenidas en cautela por el carácter propagandístico de Massera (el intento de deslindar responsabilidades en su reportaje), por lo pronto es una declaración que deja una constancia creíble de la ausencia de duplicaciones excesivas en los centros clandestinos mencionados. Massera no miente al decir, por ejemplo, que en Campo de Mayo y Tucumán de 1976 hay pocos sobrevivientes (en realidad dice "no se salvó nadie", lo cual es claramente metafórico: hubo sobrevivientes, pero poquitos; mucho menos que en la ESMA) 

Según el testimonio de este colaborador de centro clandestino de detención de Superintendencia (o Coordinación Federal), había traslados en vuelos de helicópteros desde ese lugar
Otros testimonios que hablan de vuelos de la muerte en helicópteros y "cercanos" a la vista de los testimoniantes (evitando duplicaciones con los vuelos a profundidad de aviones de ESMA/Campo de Mayo): 
Policía Federal podía deshacerse de sus desaparecidos sin necesidad de recurrir a ESMA y Campo de Mayo, como constata el testimonio del represor Luis Alberto Martínez. Situación que según él duró hasta la "inauguración" de Club Atlético que estaba a cargo de la Policía Federal: 
Y recuérdese que el circuito de Club Atlético solo durante los años 77-79 llegó a más de 1.000 prisioneros, sin contar con la actividad de esta policía en el turbulento año 76

El ex-conscripto Antonio Jerez, quien participó como colaborador en las operaciones de secuestro en Tucumán a partir de 1976, relata hechos atroces que tuvo que presenciar, como el caso de mujeres embarazadas en Caspinchango torturadas y asesinadas, de ancianos masacrados. Desconozco personalmente si están registrados en el RUVTE, pero al parecer éstas u otras muertes y enterramientos que presenció no duplican con el centro clandestino Arsenales, pues sus enterramientos son fuera de este centro:
Y esta película, en los minutos 49:37 y 52:34 

Ramón Camps dijo que se responsabilizaba de 5.000 desapariciones. En consecuencia: cuando hablemos de duplicaciones sobre el circuito Camps, tengamos esa cifra de 5 mil en mente y no la de 2.000 de los cadáveres NN. Para una contabilización de la cifra nacional de desaparecidos, resulta prudente tomar los 2 mil por margen de error de los restantes 3 mil -como duplicados-. Pero cuando se analice las duplicaciones, es menester considerar el número 5 mil porque Camps se responsabiliza de 5.000 y no de menos cantidad

En Campo de Mayo iban a parar los detenidos de Montoneros y PRT-ERP, pero en la ESMA es casi anecdótico que pasaran militantes del PRT-ERP; la mayoría de los secuestrados por la Marina eran de Montoneros o izquierda peronista. Un miembro de un grupo de tareas que no quiso dar su nombre en un artículo del diario "La Nación", explica en el caso del secuestro de Rafael Perrota, sobre la rareza que el Ejército derivara a un detenido a la Marina o incluso a la policía provincial:

No era común que un detenido fuera derivado del Batallón 601 del Ejército a la Policía Bonaerense o a un Grupo de Tareas de la Armada [...]. El ERP, al que se quiso vincular a Rafael Perrota, sólo era investigado por Inteligencia del Ejército y la Policía Federal

Asimismo, los prisioneros de un centro clandestino de destino final (ej: vuelos de la muerte o enterramientos NN), que fueran posteriormente derivados a otra provincia, no suponen inicialmente un duplicado para el destino final, porque si fue a otra provincia poco sentido tiene volverlo a traer al centro originario para matarlo. Por ejemplo, si un prisionero de Camps va a parar meses después a La Perla, no tiene mucho sentido mandarlo nuevamente con Camps a desaparecerlo definitivamente, pues para eso lo matan en Córdoba y se ahorran el viaje a Buenos Aires (esto debe considerarse como una especulación utilitaria, en tanto no se conoce el recorrido de los detenidos). Siguiendo este razonamiento, la duplicación pierde trascendencia ante el hecho de algunas situaciones constantes como los traslados semanales: da igual si una persona de la ESMA se muda a La Perla porque en la ESMA continúa existiendo el traslado semanal en avión y La Perla el traslado semanal en los fusilamientos por pozo 
Un lugar de inhumación clandestina (alejado de los CCD) bastante sonado fue el Pozo de Vargas: distintos prisioneros de distintos centros clandestinos del país fueron destinados sus restos a este pozo de Tucumán:

Si la ESMA tenía casi 5 mil carpetas de prisioneros según Ana Marti y otros sobrevivientes, entonces los duplicados a la ESMA solo abarcan hasta esos 5 mil. No puede duplicarse más. Entonces, de los 20 mil desaparecidos innominados que se estimen, la ESMA como mucho absorbe 5 mil, quedando una cifra de 15.000 desaparecidos que ocurrieron en la Argentina 

Contemplemos nuevamente esta tabla del RUVTE del número registrado por el Estado en todo el país año a año: 


Podemos descartar duplicaciones contrastando el registro estatal con el material testimonial de la capacidad operativa de los Grupos de Tarea: por ejemplo Scarpati había dicho que en Campo de Mayo pasaron 3.500 personas hasta mediados de 1977 aproximadamente; un número menor que la cifra del Estado en todo el país durante 1976 y mediados del 77. Eso significa que los 3.500 prisioneros de Campo de Mayo no comprendía siquiera las duplicaciones de los restantes desaparecidos registrados estatalmente. Y así con otros ejemplos

Las terminologías del destino final  de los secuestrados no son uniformes entre los centros de distintas provincias: en Tucumán estaba la denominación "DF" para la Jefatura de Policía; y "Viajó" o una cruz para los asesinados en Arsenales. En la ESMA estaba la denominación "T" en las carpetas de prisioneros, que significaba el traslado; La Perla el término "QTH: fijo" para los muertos. Esto sugiere una pauta de la relativa autonomía de estos centros para decidir, conocer, anticipar el destino de las personas asesinadas. Según el testimonio de Miriam Lewin, los oficiales de la Marina no conocían fehacientemente lo que sucedió con su novio; solo creían que lo había matado la Fuerza Aérea: 
Si Marina no conocía todos los prisioneros del país, y le sumamos lo anteriormente comentado (la relativa autonomía), no es viable inferir una excesiva duplicación cuando hablemos de las carpetas y listas de detenidos con su destino final puesto. Tampoco cabe inferir que los 5 mil archivos de la ESMA se refieran a una provincia, sino a lo que el propio centro clandestino tuvo
En septiembre de 2020, se descubrió un registro nacional de inteligencia con 500 fotografías de personas buscadas por la dictadura desde 1978 en adelante (ya sea personas exiliadas, personas dentro del país, etc.). Entre estas personas que la inteligencia buscaba, figuran militantes que ya habían desaparecido incluso 4 años antes de la elaboración del documento. Lo que hace presuponer que existían deficiencias en la comunicación de las distintas fuerzas armadas, o mejor dicho que las fuerzas retaceaban información a sus colegas: 
De ser así, no solo contribuye a minimizar la duplicación, sino que permite teorizar que el gráfico de Carlos Martínez estaría incompleto por ejemplo, y el número de militantes secuestrados sería mayor
En teoría, la competencia entre distintas fuerzas para cazar a los "blancos" impediría que los represores conocieran todos los nombres de los detenidos en otros CCD 
Según la declaración de Antonio Pernías (torturador del grupo de tareas de la ESMA), dijo que, con excepción de las mujeres embarazadas, no era práctica habitual del Ejército dejar detenidos en ese CCD
Por lo cual no duplican los detenidos del Ejército contra los de la Marina

Otro indicio que reconocemos su carácter especulativo pero tiene algún valor, es la "sofisticación" del centro clandestino como lugar de torturas, donde los interrogadores se esfuerzan y tienen todo el tiempo para atormentar prisioneros. Esto, en teoría, vuelve inútil derivarlos a otro centro cuando ya lo están "exprimiendo" al detenido en ese lugar. Un ejemplo es el circuito Club Atlético/Banco/Olimpo donde los interrogatorios eran exhaustivos. De hecho, es en estos centros donde se testimonia el uso de inyecciones para los traslados. Pag. 16-17:

Según el testimonio del torturador Valdés en el film "El Lado Oscuro", había enterramientos hechos por la Marina. Esto es un indicio (solo un indicio) que la Marina se deshacía de cuerpos por entierros también, compartimentando con los vuelos semanales de ESMA:
Algo que no se puede pasar por alto, es que la nómina de Etchecolatz no especifica quién enterró esos cadáveres de subversivos. Uno supone que fue la policía de la provincia de Buenos Aires porque Etchecolatz pertenecía a esa fuerza, y porque no tiene sentido que Etchecolatz vaya "buchoneando" sobre otras fuerzas ajenas. Pero es una suposición de nuestra parte. Igualmente no cambia lo expuesto sobre la compartimentación entierro / vuelo de la Marina 

Repetimos que esto es un somero vistazo comprensivo para que el lector entienda las formas investigativas sobre la cifra, pero lo escrito aquí sobre las duplicaciones o las pruebas no abarcan la totalidad de los centros clandestinos de reunión de detenidos o transitorios. Para el caso, nos olvidamos de centros como la Mansión Seré, La Ribera, la Superintendencia, la escuelita de Famaillá en la gestión de Bussi, Vesubio, Automotores Orletti, la “cueva” de Mar del Plata, el D-2, etc.

¿Pero es que existen más elementos que impiden una duplicación? Hay otros detalles que deberían investigarse, en la medida de la información disponible. Daremos dos ejemplos: en el centro clandestino "El Vesubio", está el testimonio del represor Néstor Cendón (condenado en un juicio a prisión perpetua por tortura, violación de mujeres, asesinato, etc. Una joyita el hombre) que relata que la Fuerza Aérea proporcionaba aviones para arrojar los cadáveres (el CCD se encuentra cerca de Ezeiza): en teoría, significa que esos vuelos son independientes de la ESMA/Campo de Mayo y, por consiguiente, no duplican sus muertos con éstos

https://www.alainet.org/es/active/48136  

Una situación similar la cuenta el colaborador Federico Talavera, un ex gendarme quien relata sobre los vuelos de la muerte en el CCD de Olimpo, que serían independientes de ESMA/Campo de Mayo. Otra situación análoga en su independencia con ESMA/Campo de Mayo son los vuelos de algunos centros del Circuito Camps. 

https://www.infobae.com/2013/03/20/701845-un-ex-gendarme-dio-detalles-como-fueron-los-vuelos-la-muerte/ 

El segundo ejemplo, son los cuerpos incinerados en los mismos centros clandestinos de Buenos Aires: testimonios de sobrevivientes, colaboradores de la represión y descubrimientos de antropología forense se dirigen a cadáveres que fueron quemados y/o enterrados en el mismo centro clandestino (o en otro lugar) sin pasar a cementerio como NN: obviamente esos cadáveres no duplican con los vuelos, pero en teoría tampoco deberían duplicar con la nómina de Etchecolatz que entregó en el juicio de 1986, ya que posiblemente Etchecolatz esté computando cadáveres en cementerios (tal como cuenta Cendón, también los cuerpos podían incinerarse en el mismo cementerio en vez de enterrarse como NN: en teoría no debería duplicar con la nómina del represor Etchecolatz)

Hay casos donde SI existe el riesgo casi certero de duplicación: los arrojados al mar que las olas devolvieron a las costas. No fueron muchos, pero muy probablemente los arrojados devueltos a Buenos Aires queden computados en la nómina de Etchecolatz, pues esos arrojados fueron enterrados como NN
También estaban los prisioneros "falsos": aquellos que no eran detenidos sino que se hacían pasar por tales, con el objetivo de parecer quebrados y convencer a los prisioneros reales que ofrecieran información. Además esos "falsos detenidos" tenían la misión de vigilar a los guardias a que cumplieran su labor de vigilancia e incomunicación con los presos. El ex-sargento Victor Ibañez, colaborador de Campo de Mayo, menciona estos falsos detenidos:
Otros casos anecdóticos, como es el de un loro que pertenecía a un prisionero secuestrado en La Perla. Los carceleros a modo de broma, tomaron al animalito y le pusieron un número de detenido, al igual que los números que le asignaban a los secuestrados (pag. 36): 
Estos "falsos" prisioneros no deben contabilizarse. Pero, es casi anecdótico este margen, no era la norma

En otros casos, los indicios son muy mínimos, chiquititos, y queda bastante por averiguar: es el caso del testimonio de Julio Omar Luna, quien cuenta que vio la fabricación de bolsas en Arsenales, las cuales tenían la función de empaquetar hasta 3 cuerpos en una bolsa para su posterior cremación en el cementerio norte. Si esto fuese en serio, implicaría que existe un número no despreciable de muertos que no duplican con Arsenales. Empero, no es más que un indicio y no se puede determinar si se usaron esas bolsas o no (pag. 160 de la siguiente causa judicial:
Otro indicio son los vuelos de la muerte en Rosario: según el testimonio de Eduardo Constanzo, colaborador de la represión, estuvo trabajando en Rosario desde julio de 1977 hasta diciembre de 1978, y ha contabilizado 3 vuelos de la muerte en la provincia desde fines del 77 hasta principios del 78. Sin embargo, no tenemos información sobre el año 76 para determinar si la metodología de los vuelos también se aplicó en Rosario con la constancia de Buenos Aires, o si fue esporádico
Testimonio Eduardo Constanzo: 


Ejemplo de ficha de "traslado" del circuito de centros clandestinos Club Atlético/Banco/Olimpo. Mediante una cruz a la casilla correspondiente, cada funcionario importante del centro decidía el destino del prisionero. Por lo visto, Ramón Camps no tiene injerencia aquí

Durante el periodo 1975-1983 hubo más de 750 centros y puntos de detención clandestinos. La mayoría eran lugares transitorios de detención, o "chupaderos", o "lugares tácticos de detención"; es decir centros o puntos donde una persona o más eran retenidas pocas horas para liberarlas o  derivarlas posteriormente a sus hermanas mayores: los "Lugares de Reunión de Detenidos", que eran los centros "grosos" de concentración y exterminio de prisioneros. En el siguiente enlace, la lista con todos los centros:
La cifra de centros no sirve para evaluar la verosimilitud del número de desaparecidos (como creemos que erróneamente hizo Duhalde en la carta contra Meijide), pero sirve como elemento más, aunque menor, para descartar una excesiva duplicación entre los CCD más importantes; al estar todos estos 700 centros distribuidos en el territorio. Se amortigua la duplicación en dos sentidos: no hay tanta necesidad que los L.R.D. se intercambien prisioneros por mera facilidad de distancia; y además los chupaderos tienen sus propios "cazadores" de detenidos, dejando que las patotas de los L.R.D. actúen capturando a otros
Como ejemplo, tenemos un memo policial escrito poco después del atentado de Ana María González contra el jefe de la policía federal Cesáreo Cardozo, en junio de 1976. El memo relata que Ana había sido detenida junto con otro compañero, "Moro", en una comisaría poco antes del atentado. Mientras a Ana la liberaron por sus contactos con Cardozo, a Moro lo enviaron a un conocido LRD. El memo dice:
en la madrugada del 1º al 2° [de junio] se la liberó en las cercanías de su casa de la calle Brasil. Moro continuó detenido y pasó a Campo de Mayo, donde continuaría al presente y suministró según trascendidos muy buenos informes
extraído del siguiente libro, página 65:
(las alusiones "continuaría" y "según trascendidos" pueden indicar la compartimentación de información entre la policía y el ejército)

Esto es un mero ejemplo de cómo funcionaban los "chupaderos": eran comisarías donde había un interrogatorio inicial bajo tortura. Si los policías consideraban que el sospechoso era un perejil o tenía algunos contactos buenos con la cúpula policial/castrense, lo liberaban. Si no, lo enviaban a los LRD para los interrogatorios practicados por "expertos", como el caso de Moro entregado a Campo de Mayo donde, al parecer, bajo tormentos logró dar "muy buenos informes". Las declaraciones del general Adel Edgardo Vilas sobre Famaillá también aluden implícitamente a estos chupaderos: "Las fuerzas de tarea dependientes de la brigada tenían 24 horas para tomarle declaración a los detenidos, tras lo cual debían remitirlos a Famaillá, donde esperaban los interrogadores del ejército que yo, en forma personal, los había elegido"
Hubo más de 700 de estos chupaderos diseminados en todo el territorio
El mismo represor Harguindeguy (ex-ministro del interior durante el gobierno del 76) sintetiza la "inmediatez" de los interrogatorios: 
Cada área de responsabilidad, cada zona, cada subzona, tenía la gente con la cual accionaba entrando a las casas, allanando, deteniendo y de ahí [los secuestrados] pasaban a centros de detención donde se hacían los interrogatorios. El interrogatorio hay que hacerlo en el lugar de los hechos, en caliente. Porque si usted toma un prisionero, lo deja reflexionar y lo deja pensar varias horas, cuando llega el momento del interrogatorio ya se ha formado una coraza interior. Mientras si usted lo interroga en el momento del hecho, y sobre todo si está herido, inmediatamente habla
extraído el  párrafo de:

Otros ejemplos de estos pequeños centros clandestinos de "distribución" de prisioneros a otros lugares: el relato de una detenida de la ESMA, acerca de un centro de detención en BIN 3:
[Esta detenida] nos contó cómo sistemáticamente hacían "traslados" de más de 50 personas por vez
María Hilda Pérez de Donda relata: 
que los prisioneros de Aeronáutica eran llevados a las Comisarias de la Provincia de Buenos Aires de la zona Oeste. También tenían "casas operativas" clandestinas. A estos lugares les llamaban "pozos" al igual que algunos pertenecientes al Ejército. Eran sótanos muy húmedos, donde los prisioneros estaban con grilletes, esposados y con capucha todo el día, tirados en el suelo
Estos lugares estaban constantemente repletos, a pesar que permanentemente se hacían "traslados" 
pag. 17-18: 
Estos traslados no deben entenderse necesariamente como la muerte (aunque puede existir la opción). Más bien sería la distribución de prisioneros a otros centros mayores 

La provincia de Buenos Aires tenía 3 grandes centros o redes clandestinas: la ESMA; Campo de Mayo (que era tan mortífero como el centro de la Marina); y el Circuito Camps. A ello se le adiciona otros centros colaterales poderosos como Club Atlético. En teoría, se hace muy difícil pensar una excesiva duplicación entre 3 demandantes centros clandestinos para coincidir con las estadísticas de desaparecidos del Estado. Y no hay testigos que siquiera por indicios mencionen una gigantesca duplicación de detenidos, ni siquiera relatos de parte de los mismos represores. No hay testimonios conjuntos sobre una situación en la que un "Lugar de Reunión de Detenidos" se vaciara para que otro LRD se llenara en conexión; en cambio SI hay testimonios donde un LRD se colma, pero no en perjuicio que otro se vaciara 

Tampoco hace sentido una duplicación desmesurada de distintas provincias, cuando Montoneros y PRT-ERP organizaban sus columnas y regionales en cada provincia
Como ejemplo, una sobreviviente del centro clandestino "Vesubio" testimonia que la derivaron a la CRI (Central de Reunión de Inteligencia) a colaborar desgrabando cassettes de Montoneros. Recuerda que los del CRI tenían un organigrama de Montoneros, enfocándose especialmente en la zona sur (de Buenos Aires). Otro testimonio de un secuestrado en 1978, en el mismo centro "Vesubio", indica que por las listas de detenidos que pasaban, la mayoría era de zona sur
pags. 242 y 406: 
Campo de Mayo tenía uno de sus dos GT (grupo de tareas) que operaba preferentemente en zona norte de Buenos Aires (extraído del testimonio de Juan Scarpati de 1980:
También Scarpati en su testimonio dijo que en el centro clandestino él estaba "aislado", porque no había compañeros de la Columna La Plata o del Área Federal de propaganda de Montoneros. Lo que es un indicio que Campo de Mayo, al menos durante el tiempo que narra Scarpati, no secuestraba a militantes de otras columnas ajenas a su geografía (Columna Norte):


Cuadro del RUVTE en el que se cita la cantidad de desaparecidos y asesinados que fueron vistos por ex-detenidos en los CCD especificados. El cuadro no detalla si se computa varias veces un prisionero que mudó a distintos centros de detención; pero tomando esta variable la disparidad entre los distintos CCD es lo suficiente notable para descartar, prima facie, una excesiva duplicación 

*Resumen de los GT: 
Campo de Mayo fue un centro clandestino que estaba "preparado" en su construcción edilicia para 2 GT: el 1 y el 2


Reconstrucción virtual de oficinas en Campo de Mayo 


Salas de interrogación y oficinas de los funcionarios de los GT en Campo de Mayo 


Lado izquierdo: sala de interrogación (primera habitación) y oficina del GT 1 (segunda habitación). Una bandera del ERP decora el despacho como "trofeo de guerra" 


Lado derecho: salas de interrogación y oficina del GT 2

No hay testimonios suficientes de la participación del GT 3 en Campo de Mayo
Para la ESMA, operaba el GT 3
En Club Atlético, los 4 GT
Una aproximación de los detenidos de estos GT: entre el GT 1 y el GT 2 (operando en Campo de Mayo; Club Atlético; etc.) hubo 3500 prisioneros hasta mediados de 1977. En el GT 3 (operando en Club Atlético; ESMA; etc.) hubo 4.700 prisioneros hasta marzo de 1978 
De acuerdo al material testimonial y evidencia arqueológica, hubo asesinatos cometidos directamente en las dependencias de Camps. Lo que apunta al hecho que varias de las muertes del Circuito Camps contaban con la capacidad decisoria del propio circuito (la policía provincial) para matar y enterrar el cuerpo; y es ajena a otros centros como ESMA o Campo de Mayo (que pudieron recepcionar muchos de los detenidos del Circuito Camps, pero no todos)

*El caso Camps: en enero de 1983, el general Ramón Camps (en la época fuerte de la represión era coronel) concedió unas entrevistas a periodistas a raíz de un libro que estaba por publicar. En los reportajes, Camps declaró en OFF (con la grabadora apagada o sin ella) que había eliminado a 5.000 personas. Se suponía que el periodista no debía sacar a la luz esta información, pero no le hizo caso. Además Camps arrojó una serie de datos que 3 meses más tarde replicaría el Documento Final, y precisó los detalles sobre esos 5.000 opositores eliminados. Todo demostrativo de la credibilidad de Camps en este tema

Dejando de un lado la provincia de Buenos Aires y concentrándonos a nivel país, Camps le comentó al periodista unos datos sobre la lucha antisubversiva que, se infieren, son de índole nacional (puesto que algunos de estos datos aparecen en el Documento Final): "Entre 1973 y 1979 hubo 2050 subversivos muertos en combate, de los que en torno a un millar y medio no fueron identificados'; 'Entre 1972 y 1976 hubo 548 muertos no identificados, y entre 1976 y 1979 fueron encontrados 729 cadáveres, de los cuales 371 no fueron identificados. Según mis informaciones, entre 1973 y 1979 fueron enterrados como NN 1.858 cuerpos en distintos cementerios":


Sumando estos números (2050 + 548 + 729 + 1858), daría un total de 5.185 enterramientos "legales" identificados y NN, desde 1972 a 1979. Es decir, hay aproximadamente 5 mil muertos en el país que fueron enterrados. El resto, se podría inferir que fueron a parar al fondo del océano, o cremados, o enterrados ilegalmente en lugares que no son cementerios



---------------------------Aquí termina el apartado------------



Con respecto a los testimonios de sobrevivientes, alguno podría sacar a relucir una tesis conspirativa ¿Tal vez los sobrevivientes forzaron sus testimonios para que los estimativos sean acordes a la cifra de +20 mil? Esto no es posible por un motivo que a los negacionistas les va a doler recordar: los organismos de Derechos Humanos, al igual que los sobrevivientes de la dictadura, siempre sostuvieron la cifra de 30.000 desaparecidos e incluso insinúan que fueron más. Esto significa, que si los sobrevivientes hubiesen conspirado en sus testimonios, lo habrían hecho para compatibilizar con la cifra de 30 mil o +30 mil, y no la de 20 mil. Por ejemplo, los sobrevivientes de la ESMA podrían haberse puesto de acuerdo para decir que en ese centro clandestino hubo 7 mil personas; los sobrevivientes de La Perla podrían haberse puesto de acuerdo para decir que por ese centro clandestino pasaron 3500 personas.... y así, inflando los números estimados en los campos de concentración para llegar a los 30 mil o superarlo. Sin embargo, a pesar de todo el bombo y platillo por la cifra de +30 mil que sostienen los mismos sobrevivientes como dogma, lo cierto es que sus testimonios reunidos se acercan mayormente a la cifra de 20 mil que la de 30 mil. Como máximo, se llegaría a la cifra de 23 mil o 24 mil si suponemos que no hay duplicación en La Ribera o con el máximo de Campo de Mayo, y si suponemos muy fantásticamente que no hay otras duplicaciones trascendentes; o 25-27 mil si sumamos otros centros que no contamos (presuponiendo exageradamente que no hay muchas duplicaciones). Esto es una señal evidente de lo pesimos conspiradores que serían los testimoniantes para su lema de +30 mil desaparecidos


Con respecto a la contundencia de la evidencia, hagamos una comparación con los historiadores del holocausto ¿En qué se basan para concluir que fueron asesinados 1.150.000 judíos por los escuadrones móviles? Se basan en la serie casi completa de reportes de los Einsatzgruppen, en los testimonios tanto de testigos como perpetradores de algunas masacres (no todas, porque no todas dejaron suficientes testigos relevantes) sobre masas indeterminadas de gente, en el respaldo fotográfico existente para los testimonios de esas masacres, y en el descubrimiento de las fosas en la zona de ocupación

Para Babi Yar, con independencia de la evidencia física de la fosa (que no se encontró) o los testimonios de perpetradores y colaboradores, los historiadores se basan en el documento que computa el número de 33.771 judíos y otros que hablan de más de 30.000 judíos que arribaron a su destino, en testimonios de testigos y sobrevivientes sobre la fosa repleta de cadáveres (pero que obviamente no han podido contar uno a uno cada cadáver ni hacer aproximaciones; por lo que su testimonio prueba la masacre pero no el número), y en fotografías sobre masas de personas caminando al corredor de la muerte

(sobre la evidencia física de Babi Yar:

https://www.hdot.org/debunking-denial/babi-yar-pruebas-fisicas/?lang=es 

)

Para la masacre de Simferopol, el cúmulo de evidencia documental/testimonial es sensiblemente menor a Babi Yar:



A pesar de todo esto, no sería increíble que algunos negacionistas quieran jactarse de ser políticamente incorrectos negando la cifra de 20.000 víctimas de la dictadura argentina.... pero por otro lado, no son tan políticamente incorrectos para negarle validez a las investigaciones de los historiadores del holocausto (ejemplo: Darío Lopérfido, quien negaría la cifra de la dictadura pero sería un afirmacionista de la cifra del holocausto. Lo cual demuestra la contradicción interna de esa persona, o su ignorancia en las formas de investigación. Victoria Villarruel, Agustin Laje y Nicolás Márquez serían otros baluartes de esta contradicción interna)


Además, puestos a ser puntillosos, la cifra exacta de Babi Yar es menos explicable que la cifra de exacta de Vilas. Se sabe que en los centros clandestinos de detención argentinos, los represores llevaban un registro. En Babi Yar, la matanza fue más informal y el número exacto es más dudoso. Tal como dice el siguiente artículo en un párrafo:


La cifra exacta del propio Einsatzgruppe de 33.771 judíos en la masacre principal resurgió esencialmente de una referencia lacónica de la 454 División de Seguridad de la Wehrmacht sobre "unos 34.000" judíos, asesinados en el transcurso de "varios días". Sería incorrecto explicar el número exacto original solo contando (se asignó a un alemán para contar a los judíos a medida que llegaban) y la entrega forzosa de los documentos de identidad por parte de las víctimas. Las circunstancias no estaban completamente bajo control alemán, y se vio a los alemanes quemando documentos de identidad en el lugar. Es más probable que la cifra precisa indique que los hombres de Blobel [oficial nazi de las SS] deseaban presentarse ante sus superiores como meticulosos

(Igualmente, no se duda que fueron masacrados más de 30 mil personas en Babi Yar, por lo que la exactitud del número no tiene relevancia. Para más información sobre cómo se documentó esta masacre alemana, véase aquí: 


)


El pensamiento políticamente prudente nos dicta que un muerto es igual a 100 mil ¿No hemos escuchado eso antes??? Y lo mismo se repite con este tema. Pero es clarito que, por mucho que digamos que 1 es igual a 30 mil, la discusión sobre la cifra de desaparecidos despierta una animosidad que difícilmente se presente en un supuesto universo donde 1 sea igual a 30 mil. Es evidente que tanto para las anticuadas Madres de Plaza de Mayo, como para gente despreciable como Nahuel Sotelo o Nicolás Márquez, como para los historiadores con aires de (verdadera o falsa) seriedad, un desaparecido no les debe parecer lo mismo que 30 mil. Si a un progresista le dicen que son 8 mil desaparecidos, se le va a desprender un tornillo. Si a un derechista o a Ceferino Reato le dicen que son 30 mil, también va a empezar a soltar delirios infumables y falsos. Asi que vamos a ser un poco más responsables y diremos: está bien, no llegan a 30.000 pero TAMPOCO son "solo" 5 mil u 8 mil. La cifra más acorde es de 20.000 muertos y desaparecidos (aunque podríamos aceptar el piso mínimo de 15.000 muertos que nos fija el Documento Final, suponiendo que ese Documento no haya rebajado un poco la cantidad. Ojo!!! mínimo, no promedio ni máximo)

Y a los negacionistas que insisten que lo único válido para la cifra total es la CONADEP o el RUVTE (cayendo en la falacia del Falso dilema), pues veamos: ya les demostramos que el número 20.000 no se obtiene únicamente de sobrevivientes malintencionados que tienen ganas de complotarse para desprestigiar a las fuerzas armadas, sino que hay represores, colaboradores y terceros de toda clase que avalan la construcción de la cifra. Desde un cabo como Victor Ibáñez, hasta torturadores, testigos del lugar, hasta el mismísimo Miguel Etchecolatz, o Ricardo Flouret. No es solamente un único documento con la cifra nacional, sino varios documentos y testimonios, incluso documentos públicos (ej: el Documento Final). Y con todos los elementos necesarios para explicar la dinámica de las muertes masivas (el caso de las duplicaciones y compartimentación). No hay contradicciones irreconciliables con el material. Frente a la evidencia ¿Qué más quieren? ¿Acaso quieren que descienda del cielo Jesucristo para que nos pueda dar la razón a nosotros? Los negacionistas tienen que ser más realistas y asumir la dura verdad

No se trata de refutar una única prueba, sino un armazón, un conjunto de material coherente entre sí. Por ejemplo, pueden ustedes desconfiar de la nómina de Etchecolatz por no conocer su margen de error, pero todavía desechando esa muy importante prueba en casi nada modifica el panorama probatorio. Tampoco es cuestión de valor individual, el conjunto es vital: el Documento Final tiene valor individual sin duda alguna, pero solo a través de la hoja de Flouret o el documento de Arancibia Clavel o la hoja de Kevin Mullen se entiende por qué escribieron "15.000 combatientes" en vez de "5.000 combatientes" o "9.000 combatientes". A través de Flouret cobra más valor el documento de Arancibia Clavel, etc.

Y no me vengan con la pavada de "ez ke loz torturadorez pueden eztarrrdd mintienddo". Decir que una persona miente e inventa cosas es tan obvio como decir que confiesa una verdad. Si hay elementos para acreditar una improbabilidad de mentir, entonces el oponente debe esforzarse para acreditar la enorme probabilidad que mienta. No se trata de desechar un testimonio o documento porque no me convence arguyendo que puede mentir pero sin probarlo; eso nos llevaría a abolir el sistema de testimonios como valor probatorio en el Derecho y en la historia. Es sencillo: ¿Qué sentido tiene que Vergez o Etchecolatz mientan inventando más crímenes de los que verdaderamente cometieron? En principio no están psiquiátricamente locos para delirar, pero dejando eso a un costado: ellos no se caracterizan por hacerles el juego a los organismos de Derechos Humanos; precisamente Etchecolatz publicó su libro para intentar (en vano) refutar a la CONADEP y sus supuestas fabricaciones de falsedades. Como plus, los libros se publicaron en vigencia de las leyes de Obediencia Debida / Punto Final / Indultos; donde ninguna sanción penal les sucedería si confesaban los hechos. Si tales confesiones hoy día salieran, quizás y muuuuy quizás uno pueda pensar que han entrado en la locura estos autores, y quizás y muuuuuy quizás se cuestione los datos (para más detalles consistentes, véase la explicación jurídica de la confesión en el apartado correspondiente). En cambio, Jorge Rafael Videla tiene obvias motivaciones de "relato" para manifestarle a Ceferino Reato que los desaparecidos fueron 8 mil en vez de 20 mil. En otros casos como Flouret, la conversación ni siquiera era pública y, por consiguiente, no tenía intenciones de trascender de no ser porque el documento se desclasificó en el 2019 gracias a Donald Trump

(Otro aspecto que mejora el valor probatorio, es que no se puede demostrar un complot por parte de los represores para escribir esas confesiones. Aun si aceptamos que Etchecolatz solo escribió la nómina para jactarse con delirios, no se explicaría por qué otros represores de otras provincias u otros CCD u otros estamentos escribieron o testimoniaron situaciones similares con cifras de desaparecidos no registradas. No está demostrado que Etchecolatz y Vergez tengan relación de amistad suficiente para complotar en algo tan absurdo como jactarse de crímenes que no cometieron. O que Etchecolatz mantuviera alguna relación con Acdel Vilas, o con Ricardo Flouret)

Además los apologistas en sus libros utilizan testimonios para probar sus supuestas verdades, asi que ellos no rechazan estrictamente el testimonio como metodología


También puede concebirse la tesis de la equivocación al mecanografiar el número. Enrique Arancibia Clavel tal vez no quiso escribir "22.000 desaparecidos"; tal vez se equivocó y quiso escribir otro número más bajo, por ejemplo "2.200" desaparecidos o por el estilo. Es una posibilidad ¿Por qué negarla? Al fin y al cabo, las pruebas las fabrican los seres humanos imperfectos ¿Por qué no aceptar que ellos se equivoquen y hayan tecleado incorrectamente? Estas posibilidades no deben ser ignoradas; existen casos históricos donde algunos registros tienen errores tipográficos (de nuevo: el holocausto es un ejemplo de ello). Pero cuando en la hoja de Flouret aparece el número de 5 cifras "20.000", cuando la hoja de Kevin Mullen aparece el número de 5 cifras "15.000", cuando el Documento Final habla de "15.000" ¿También estaban tipeando mal los números? Cuando Vilas, Etchecolatz, Vergez hablan de cifras más altas que las registradas por el Estado ¿También se equivocan? ¿También tienen la mano floja? Se admite la "casualidad" de una equivocación al momento de registrar la cifra de desaparecidos, pero no se admite que se equivoquen tantos represores o colaboradores de la represión siempre cuando teclean sobre estos números



Ejemplo de error tipográfico: el telegrama Höfle que colgamos más arriba, contiene un error de tipeo con la cifra de muertes. En el remarcado rojo, se indica el número "71.355", cuando en realidad el número correcto es "713.555" (se omitió un número "5" en el error de tipeo), ya que esta última cifra de seis dígitos es la que hace coincidir con el total de 1.274.166 muertos. Es uno de tantos ejemplos de cómo hasta una fuente primaria de alto valor probatorio, puede tener errores tipográficos


Por supuesto que una persona con dos dedos de frente tiene que darse cuenta que la necesidad tan imperiosa de los negacionistas de rebajar la cifra de desaparecidos no obedece a una búsqueda cristalina de la verdad, sino a defender a los militares y salvar su mancillado honor con la idea que la mayoría de los desaparecidos eran "terroristas" -de izquierda- y que por lo tanto el gobierno militar puso orden al país, evitó el comunismo cubano y esas pavadas. Algo así como "bueno, admitimos que los militares fueron unos brutos torturando y desapareciendo (porque no me queda más puto remedio que admitirlo), pero los militares fueron patriotas que nos defendieron de los terroristas que querían un gobierno totalitario". O el más genérico estilo de "los militares pusieron orden". Esta persistencia ignora otro aspecto esencial: la escasa cantidad de combatientes que tuvo la guerrilla (explicado en los apartados correspondientes de este blog)

En ese sentido, incluso si hubiesen sido 9 mil muertos y desaparecidos en total, sigue siendo incompatible con la escasa cantidad de combatientes que tuvo la guerrilla izquierdista. Asi que no le veo mucho sentido rebajar la cifra para "igualar" con los combatientes porque no igualan nada, continúan siendo muchos desaparecidos contra poquitos combatientes

Jo! imaginate: si son 8 mil desaparecidos y muertos "terroristas" y la cantidad de asesinatos de la guerrilla en el lapso 76-79 es de 450 (de acuerdo al conteo de Victoria Villarruel), entonces solo 1 de cada 17 de esos "terroristas" mataba a alguien mientras algún otro le hacía soporte logístico y los otros miraban al techo como inútiles. Ni hablar si fueron 15.000 combatientes como dicta el Documento Final en su apogeo y Villarruel calcula poco menos de 700 muertos de allí en adelante: solo 1 de cada 21 combatientes mataba a alguien. Mirá lo "fanatizados para matar" que debían estar.........





Ah si, no olvidemos el marketing en este siglo de los memes: el pseudo-periodista independiente para nada de "El Presto", su amigo Nahuel Sotelo y el mentor de Laje llamado Nicolás Márquez, posan con la remera de "No fueron 30.000". Está bien, es una remera simpaticona, con su halo de pretendido enfant terrible, ideal para aquellos Teletubbies que se jactan de ser políticamente incorrectos. Ciertamente la cifra más adecuada es de 20.000, aunque quizás ellos saquen su remerita de "No fueron 20.000". Da igual, aunque en vez de gastar en remeras estaría bueno que refuten las fuentes que contradicen sus argumentos ¿O tengo que estamparlo en una remera para que se acuerden??



A ver si así se acuerdan, que hasta queda bien



Otra versión de la remera "No fueron 30.000"....... con dos buenos motivos para comprarla.....


Hay algunos negacionistas que ofrecen un par de dólares si le demostramos una lista con los 30 mil desaparecidos. Agustin Laje en un video ofrecía U$S 1.000 si le mostrábamos una lista de 30 mil nombres de desaparecidos, pero también está Nahuel Sotelo que es un poco menos rata que Laje y se extiende a U$S 2500 en el siguiente video: 


Nosotros podríamos aplicar su lógica en contra, y ofrecerles a ellos más dinero si son capaces de demostrar la inutilidad de la nómina de Etchecolatz, la inutilidad del diario de operaciones de Vilas, la inutilidad de la declaración de Lanusse, la inutilidad de la declaración de Flouret, la inutilidad del documento de Arancibia Clavel, la inutilidad de la compartimentación, y si encuentran una interpretación mejor al Documento Final, y si demuestran que Luis Labraña dice la verdad. Es que si Nahuel Sotelo o Agustin Laje tuvieran huevos (que no los tienen), tendrían que pedir pruebas...... pero claro, para ellos una "prueba" es lo que a ellos se les ocurra que signifique eso. Laje por ejemplo no se da cuenta que al pedir una lista, estaría aceptando material documental y testimonial como acceso a la realidad (una lista con nombres no es otra cosa que material documental/testimonial), y no explica por qué no aceptaría otra evidencia igualmente documental/testimonial que no sea la lista (De todas maneras, debido a que estrictamente no desaparecieron 30 mil sino 20 mil, Sotelo continuaría atesorando los 2500 dólares. Menos mal para Sotelo!!)

Esto no es para nada diferente a aquellos "revisionistas" del holocausto que ofrecían sumas de dinero a aquel que pudiese probar la existencia de las cámaras de gas, pero cuando alguien se acercaba con la evidencia a reclamar la recompensa te decían que eso no era una prueba.... o sea, ellos arbitrariamente deciden qué cosa valoran como evidencia y qué cosa no es una evidencia

Nosotros podríamos ofrecerle a Nahuel Sotelo aun más dinero si nos alcanza la lista con los 25 mil combatientes que dice Nicolás Márquez. Con su nombre, apellido, número de DNI y acreditación de su calidad de combatiente

Por cierto, en esta foto que colgó en su Twitter, Nahuel Sotelo se reúne de nuevo con su amigo Luis Labraña a "charlar"



Podríamos ofrecerle dinero a Sotelo o incluso a Luis Labraña si demuestran con pruebas que la historia de Labraña es cierta. Y no, a diferencia de ellos, yo no soy arbitrario: una prueba la entiendo yo como fuente primaria, siguiendo una metodología e interpretación adecuada 

Pero en el siguiente apartado lamentablemente vamos a exponer las incongruencias de este supuesto "inventor" del número

¿Es cierto que Luis Labraña inventó la cifra de 30.000 desaparecidos?


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Por empezar, nosotros decimos que la cantidad más aproximada es de 20.000 desaparecidos, desde 1975 a 1984. Y lo podemos argumentar. Asi que el supuesto invento de Labraña es irrelevante a los efectos prácticos de nuestro conteo y fundamentación. Pero más allá de esto, nosotros por regla principal no deberíamos esforzarnos en desmontar la historia de Labraña ya que él tiene la obligación de demostrar lo que dice, y no lo ha hecho hasta el momento. El testimonio de Labraña, incluso desde un enfoque jurídico, no es un testimonio autorizado. Tengamos en cuenta que Labraña nunca dijo qué rango ocupó en Montoneros, nunca dijo si mató a alguien, nunca dijo qué importancia tuvo en el movimiento como para considerarlo una fuente primaria de Montoneros (en algunas entrevistas cuenta que abandonó la organización en 1973 con el retorno de Perón, lo que lo convierte en un montonero intrascendente para el lapso 1974-1979). Y aún así, tampoco la relevancia en dicha organización lo transforma en testigo autorizado para el relato que está contando sobre el supuesto invento de los 30 mil en una reunión, ya que no aportó siquiera el nombre de ninguna persona que pudiera corroborar la existencia de esa reunión. Mientras que en el caso de Acdel Vilas por ejemplo, su testimonio constituye una confesión jurídicamente calificada (de acuerdo a las reglas del Derecho Procesal), el caso Labraña es solo un tipo que se adjudica una hazaña sin más, sin sustento real que certifique la validez de su relato
No obstante, aun cuando no tengamos la obligación de probar que Labraña miente, vamos a explicar de todas maneras que es muy poco probable que Labraña inventara el número de 30 mil desaparecidos


Luis Labraña cuenta en el programa de Mauro Viale, que él inventó la cifra de 30.000 desaparecidos en Holanda

Pasaremos a desmentir entonces el caso de Luis Labraña, pero antes queremos remarcar que este episodio, además de demostrar los deseos de protagonismo de algunos arribistas (Labraña), también demuestra las pésimas prácticas periodísticas que inundan los medios de comunicación, lamentablemente no circunscritos exclusivamente a la Argentina. En otros países también se ha visto cómo distintos periodistas, incluso de buena fe, le han dado cabida a variopintos sobrevivientes o testimoniantes de acontecimientos históricos sin realizar las corroboraciones pertinentes, creando una falsa historia que beneficia a los mismos inescrupulosos de siempre. Ha sucedido por ejemplo, cómo algunos periodistas le han dado micrófono a distintos sobrevivientes del holocausto que testimoniaron cosas "increíbles" como haber sobrevivido a las cámaras de gas; lo cual ha alimentado el negacionismo del holocausto al asegurar que estas cámaras son fraude porque " algunas personas sobrevivieron a ellas" (cuando estos sobrevivientes simplemente malinterpretaron su experiencia personal, creyendo que estaban en una cámara de gas en vez de una simple ducha de prisioneros). Sobre estas prácticas periodísticas, véase aquí:


Darle cabida a testimonios que no pueden ser corroborados con otros, o con otra documentación confiable, constituye una práctica periodística irresponsable. Y esto corre para todos aquellos que le han dado micrófono a Luis Labraña de manera totalmente acrítica, sin chequear su valor de fuente primaria ni preguntar cosas tan elementales como si tiene algún testigo que confirme su relato, o siquiera razonar si su historia es coherente

Un ejemplo bastante peor, es el siguiente documental negacionista del holocausto que, paradójicamente, utiliza testimonios de supervivientes para "avalar" sus verdades. Es un ejemplo perfecto de la utilización indiscriminada de testimonios sin un marco metodológico riguroso



Aquí hay un listado (incompleto) de las veces que Labraña ha contado su historia. Y su narrativa es siempre igual pero en el mal sentido del término. Un relato repetitivo excesivamente gris, genérico sin lugares reconocibles, sin mencionar nombre de testigos, sin detalles concretos de cómo funcionó la mecánica de "corrupción" con el número, sin mencionar con nombre a los holandeses que estaban en dicha reunión, sin siquiera decirnos el monto del dinero obtenido, sin decirnos siquiera qué sucedió luego, nada de nada. Su relato en todas las ocasiones empieza y termina de la misma manera, sin añadir ninguna consistencia que le pueda otorgar mayor credibilidad















En fin, veremos ahora una minuciosa re-construcción del origen de la cifra de los 30 mil, así como la cronología de la actuación de Luis Labraña en su exilio y sus entrevistas, además de la coherencia de su narrativa. Justamente en este capítulo vamos a explicar lo que los periodistas NO investigaron y tendrían que haberlo hecho antes de darle prensa a este tipo


La cifra de 30 mil desaparecidos se puede rastrear fácilmente sus orígenes en dos hechos: el primero es la carta de Haroldo Conti que escribió el 2 de enero de 1976 a su amigo en Cuba, donde informa que los servicios de inteligencia calculan esa cuota de muertos para su plan represivo:


El segundo hecho es la llegada de Amnistía Internacional en noviembre de 1976 al país, donde podríamos afirmar que por primera vez un organismo internacional se hace eco de la estimación de 30 mil desaparecidos. Véase la página 37 del siguiente enlace donde se estipulan distintas cifras estimativas, entre ellas la de 30.000:

http://www.ruinasdigitales.com/revistas/ddhh/Informe%20Amnistia%201976.pdf  
O sea, si el número de 30.000 es un "invento", tenemos que darles el premio a Haroldo Conti y Amnistía Internacional por ser los primeros que inventaron el número. No a Labraña

Todavía el 1ro de noviembre, antes de la venida de Amnistía Internacional, la prensa del Partido Comunista Revolucionario escribía acerca de unos 25 a 30.000 detenidos de los cuales se ignoraba su destino (cita 40 del siguiente link):


Amnistía lnternacional ha recibido -de parte de sacerdotes, periodistas, abogados y grupos políticos- cifras distintas y aproximadas sobre la cantidad de personas que han desaparecido o sido secuestradas en la Argentina, durante los últimos 2 años y medio [1974-1976]. Los cálculos van de 3.000 a 30.000 personas, pero la cantidad que se cita con mayor frecuencia se aproxima a 15.000

Declaración de Amnistía Internacional, noviembre de 1976

Queremos recordar que el objetivo ahora es demostrar si Labraña inventó o no inventó la cifra de 30 mil desaparecidos, no la fidelidad de la cifra de 30 mil para evaluar la realidad (que ya repetimos que la cifra más realista es de 20.000)
El señor Luis Labraña ¿Cuándo se exilió del país? Según sus propias palabras, lo hizo a fines de 1977
Si el número de 30.000 desaparecidos ya circulaba desde 1976 con Haroldo Conti y Amnistía Internacional, esto demuestra acabadamente la incompatibilidad cronológica. Labraña se exilió cuando el número YA existía un año atrás, asi que no pudo inventar un número que ya estaba circulando
Por otro lado, hay incongruencias bastante curiosas: Luis Labraña fue presentado al público por primera vez por Juan Bautista Yofre en 2009 en una conferencia sobre su libro “Volver a Matar”. En ese contexto Labraña se mostró como símbolo del guerrillero que no se arrepentía de sus actos, que vociferaba que se vivió una guerra y ahora buscaba la reconciliación, buscaba la liberación de los represores (que él los denominaba “presos políticos”). En ningún momento hizo alusión a que él inventó el número de desaparecidos. En este link tenemos el discurso del año 2009 de Labraña:

https://www.lanueva.com/nota/2009-6-21-9-0-0-el-coraje-de-un-ex-montonero 

Después en el año 2009 Labraña fue invitado a un programa de Mariano Grondona 


Programa de Grondona del año 2009 donde entrevista a Luis Labraña. En ningún momento de la entrevista Labraña menciona el supuesto invento de los 30 mil, a pesar que narra su exilio a Holanda


En 2010 otra vez es invitado a polemizar con figuras como Julio Bárbaro y Marcelo Parrilli. Aunque en el programa de Grondona surgió accidentalmente el debate sobre la cifra de desaparecidos, Labraña se limitó a negar que hubiese 30 mil desaparecidos pero nunca dijo que él lo inventó, y curiosamente le espetó a Parrilli que los desaparecidos no eran 30 mil sino 12.000 (un número más elevado a lo que ahora sostiene Labraña). Véase el siguiente video que resume el programa mencionado, y se darán cuenta que Labraña no dice que inventó el número a pesar de tener la oportunidad, a pesar de estar discutiendo de la cifra y advertir que es delirante hablar de 30 mil desaparecidos:


Después Labraña prologó el libro “Los mitos setentistas” de Agustin Laje en el año 2011 y, nuevamente, no hay rastro alguno donde Labraña diga que inventó el número. De hecho en esta nota, el escritor Laje sostiene que la inventora del número fue Hebe de Bonafini, en un acto de despecho contra la CONADEP





Prólogo de Luis Labraña sobre el libro "Los Mitos Setentistas" del mugroso de Agustin Laje Arrigoni. En ninguna parte del prólogo, en ningún molde de letra Labraña se adjudica la invención del número de 30.000, a pesar que el libro dedica un capítulo a desmitificar ese número. Una de dos: o Labraña es un vago que no se tomó la molestia de leer siquiera los títulos de los capítulos en las primeras páginas. O leyó el libro y él no inventó un pomo, por lo que no sintió la necesidad de comunicarle a Laje nada para modificar su capítulo (ni para decirlo en el prólogo)

O sea que Agustin Laje lo tenía al "inventor de la cifra de 30 mil" como prologador de su libro ¡¡¡Y este inventor no le dijo nada a Laje!!!

Labraña a partir del 2013, después de todos los antecedentes que reseñamos, empezó a pronunciar en las radios, en reportajes de diario o en la televisión, que él había inventado el número. Es decir, que 4 años atrás Labraña nunca dijo inventar nada a pesar de tener la oportunidad de decirlo (ej: el programa de Grondona; el libro de Agustin Laje donde se niega los 30 mil). Solo a partir del 2013 se “acordó” que era el inventor, y en el 2015 “patentó” ese invento en el libro “Mentirás Tus muertos” de José D'Angelo donde en su prólogo cuenta la hazaña del invento
Pero hay más todavía…. más incongruencias por supuesto: el relato de Labraña, aunque suene genérico para no admitir grandes modificaciones y caber perfectamente en un lapso espacio-temporal indefinido, aun así el mismo Labraña ha alterado detalles relevantes de su supuesto invento: en ciertas entrevistas manifestó que lo había inventado por 1978-1979 aproximadamente, pero en una entrevista con Ceferino Reato dice que alguien le “recordó” la fecha para 1983. En la entrevista con El Presto en 2019, Labraña vuelve a ubicar la fecha de su invento en 1978 aprox (en la época del Mundial). Otro detalle que cambia es la cantidad de números asignados: en casi todas sus intervenciones, Labraña siempre cuenta que se eligió a modo de “bolillero” su cifra de 30 mil… pero en la entrevista con Reato, dice que se eligieron dos números: el de 15.000 y el de 30.000 (no dice quién “inventó” el número de 15 mil)
Link entrevista de Ceferino Reato a Luis Labraña:

Hay todavía más… más incongruencias por supuesto: la junta militar publicó su Documento Final en abril de 1983, donde intentaba justificar sus crímenes tergiversando que en el país hubo 25.000 subversivos, de los cuales 15.000 eran combatientes. Si la cifra de desaparecidos era tan baja y Labraña la infló en 1978-1979, no se entiende por qué los militares inflaron la cifra de subversivos y combatientes, si se supone que todo era un invento de Labraña ¿Los militares le copiaron el invento a Labraña??
El represor Ramón Genaro Díaz Bessone publicó un libro en el año 1986 donde intenta justificar sus crímenes escribiendo que en el país hubo 30.000 fanáticos

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¿Acaso el represor Díaz Bessone le copiaba el invento a Labraña??


Pero la parte más ridícula del relato de Labraña, es el supuesto cuento del tío que le hicieron a los holandeses, que carece de toda lógica burocrática. Según cuenta este tipo, a los holandeses (que no explica quiénes son estos holandeses), le entregaron una lista con 3.700 o 4.700 desaparecidos, y le contestaron que era muy poco para calificar de genocidio y recibir los subsidios.... entonces Labraña, que parece que es un sujeto tan extremadamente inteligente, se le ocurrió la brillante idea de mentirles a los holandeses solo con un par de palabras. Parece que ninguna persona en el mundo jamás ha mentido en su vida, que a Labraña se le ocurre esa inteligencia de mentir.... y los holandeses, parece que muy poco acostumbrados a ese hecho tan inusual llamado "mentira", aceptaron así sin más el cuento de Labraña; sin verificar la lista de 30 mil desaparecidos como SI lo habían hecho con la lista de los 4.700. O sea que los holandeses: o son extremadamente ingenuos de creer que el ser humano no tiende a mentir para obtener dinero (y por tanto no chequean nada), o es que los holandeses son terriblemente incompetentes. Estoy seguro que un subsidio no se obtiene de ese modo tan fácil.... pero parece que la burocracia en Holanda es muy permisiva que con un simple cuento del tío ya obtenés lo que querés

Que ni siquiera califica de algo tan elaborado como un "cuento"; Labraña simplemente dijo "son 30 mil" y los holandeses dijeron "te creemos, tome su dinero". Así es como lo explica este tipo más o menos

Nah!!! Si es súper-creíble la historia de Labraña!!! A mi me sorprende que haya gente que genuinamente le crea a una historia tan mal construida como la de Labraña. No tiene ningún sentido lo que dice Labraña

Con todas estas irregularidades, sumado al incuestionable hecho que Labraña no demostró siquiera si esa reunión existió, quiénes fueron los que lo acompañaron (él menciona a Hebe de Bonafini y a las madres de plaza de Mayo, pero esa es una acusación genérica en vista que ellas nunca confirmarán o desmentirán eso. También mencionó que estuvo con exiliados, pero no individualiza a nadie), qué dinero se asignó y cuál fue la discusión real que se manejaba (¿Por qué los holandeses aceptaron así nomás un número inventado??), entre otras cosas, vuelven al relato de Luis Labraña insostenible. Ni siquiera cuenta exactamente quién fue el que propuso el “sorteo” de números ni cómo aceptaron esa fantochada ni cómo creyeron que los holandeses se lo iban a tragar, ni por qué discutían tanto un supuesto invento de número (ni que fuera el invento más difícil del mundo, pero según Labraña “se discutía en los bares”)

En este sentido, Daniel Feierstein ya daba en el clavo con lo inchequeable que resulta las declaraciones de Labraña:

https://books.google.com.ar/books?id=s1DvDwAAQBAJ&pg=PT63&lpg=PT63&dq=los+dos+demonios+recargados+labraña+imposible+de+chequear&source=bl&ots=gw3Brjhpl3&sig=ACfU3U2A7-i2ntU62Fpug26VJuFBilR1Qw&hl=es&sa=X&ved=2ahUKEwjpu5G-y8TqAhUTHrkGHRrdB0cQ6AEwAHoECAoQAQ#v=onepage&q=los%20dos%20demonios%20recargados%20labraña%20imposible%20de%20chequear&f=false 

Algo bastante raro es que Labraña haya elegido un número redondo. Recordemos, que las cifras se redondean en las estimaciones… pero el caso que cuenta Labraña no era una estimación lo que le debían entregar a los holandeses. Y si fuese estimativo, entonces la cifra no se “inventó”, sino que se estimó
Por último: Luis Labraña es una figura que se junta con Cecilia Pando, Silvia Ibarzábal, José D'Angelo, Agustin Laje, Jorge Rafael Videla….. es evidente que, a pesar de venderse como “ex-montonero”, resulta un personaje con intereses bien definidos para el lado de quienes pretenden rebajar la cifra de desaparecidos. Asi que, a diferencia de las fuentes que nosotros mostramos, SI hay motivos probables por el cual Labraña mentiría. Por ejemplo, en este link se rodea con personajes de la "memoria completa":

https://www.youtube.com/watch?v=m2Ghe1n_50E 

https://www.youtube.com/watch?v=zMcv519_uu8 

Se juntaba con esa clase de gente (Yofre, Laje, Pando, etc.) incluso ANTES que diera a conocer públicamente su "invento". El hecho que ocurriese es importante para determinar su credibilidad. Este factor debería llevarnos a considerar la posibilidad de que la historia de Labraña no refleja una búsqueda de la verdad basada en la evidencia y objetiva. Al contrario, pueden reflejar una estrategia de defensa de sus "amigos" más calculada. Si le sumamos que, objetivamente, no existe NINGÚN indicio que pruebe que Labraña diga la verdad......
Después hay otros detalles incongruentes que reconozco que pueden ser triviales o hilar fino en demasía, por lo cual pido al lector que lo tome con cierta precaución. Pero no logro entender una parte del relato de Labraña, cuando dice que los holandeses (que él no individualiza a ninguno) le hacían la comparación con el holocausto: las Madres no podían hablar de genocidio porque ellos, los judíos de Amsterdam, habían tenido 6 millones de muertos por el nazismo. Eso era genocidio. En cambio 4 mil personas (la lista que las Madres tenían en Holanda de los desaparecidos) era poquita cosa para calificar de genocidio. Tal como cuenta Labraña en varias entrevistas y repite aquí: 
Me parece confusa esa parte: por empezar digamos que los 6 millones de muertos comprenden la totalidad de países que sufrieron el holocausto (del cual Polonia y la URSS fueron los países más castigados, con 4 millones de muertos en conjunto). Holanda solo tuvo 100 mil muertos. Asi que lo que los holandeses tendrían que haberle dicho a las Madres no era la cifra de 6 millones sino la de 100 mil personas. Y esto nos lleva a un problema subsecuente: de acuerdo a la narrativa de Labraña, los holandeses dijeron "no, genocidio es 6 millones y no 4 mil desaparecidos" y, acto seguido, las Madres ayudadas por la creatividad de Labraña inflaron el número a 30 mil. No tiene mucho sentido ya que "solo" inflaron a unos pocos miles más, no a millones como parecía insinuar el ejemplo que los holandeses habían ofrecido. Sé que esto es hilar fino en exceso, pero me da la sensación que Labraña se inventó esta tontería para así favorecer a sus amigos como Cecilia Pando y José D'Angelo, con la teoría que en la Argentina no hubo genocidio porque no fueron tantas personas (teoría cuantitativa del genocidio). Y para eso utilizó este ejemplo de los 6 millones que es incoherente con el relato que él mismo quiere mantener
Labraña dice que los holandeses son gente muy solidaria. Ha repetido el mismo latiguillo en otras entrevistas. Me parece que es una forma de justificar el absurdo de su relato: no tiene sentido que Holanda (sea el gobierno de ese país o una organización privada) entregue dinero así porque si, sin corroborar la lista de los 30 mil desaparecidos cuando se supone que ellos mismos habían revisado la lista de 4 mil personas calificándolas de "poco". Generosidad no es lo mismo que estupidez. Y que Labraña se la pase diciendo que los holandeses son gente muy generosa no sirve como argumento convictivo para obviar lo inverosímil que esos holandeses hayan caído en el engaño más bobo (como si los holandeses tuvieran tan poco cerebro que no descubren una trampa tan fácil de ver y controlar burocráticamente). Labraña tiene que ofrecer más detalles a su relato tan genérico ¿O acaso está insinuando que los holandeses son tan incompetentes y/o corruptos como los argentinos?


Algunos intentarán darle mayor peso de credibilidad al relato de Luis Labraña manoteando el salvataje de Graciela Meijide, quien también dejó prendida la idea que el número de desaparecidos se inventó en Europa y que la cifra real es la que recogió la CONADEP

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Es verdad que Graciela Meijide nunca consideró la cifra de 30.000 desaparecidos como la más ajustada a la realidad, pero lo que los desinformados desconocen es que Meijide creyó que la cifra de 15.000 desaparecidos era la más probable en el libro “El Drama de la Autonomía Militar”. Es una contradicción lo que piensa Meijide ahora y lo que ella ha dicho en el pasado (tal vez cambió legítimamente de opinión, pero no se entiende su "manía" de decir que es un invento a priori). El otro problema es que la historia de Meijide es sustancialmente diferente a la de Labraña: Meijide asegura que la cifra de 30 mil se inventó en España y de la mano de la CADHU o de Eduardo Luis Duhalde…. pero Labraña asegura que la inventó él mismo y en Holanda. Asi que el lector que pretenda creer en Labraña no puede creer a Meijide, y viceversa. Quizás me equivoco, pero tengo la ligera sospecha que España y Holanda son dos países diferentes. Pero bueno, quizás sea una equivocación mía y resulta que estos países son iguales
Tampoco tiene sentido lo que dice Meijide acerca de una necesidad de llamar la atención internacional inventando ese número para apelar al genocidio. Primero, porque no hay ninguna convención que establezca un número determinado para considerarse “genocidio” tal hecho. Busquen esa convención..... si es que la encuentran. Segundo, si realmente el mundo funciona así, no se entiende por qué otros exiliados no hacen lo mismo para llamar la atención sobre sus países ¿Por qué los exiliados de Venezuela no dicen que hay 30 mil desaparecidos también? A ver si llaman la atención internacional. Y tercero, porque Amnistía Internacional en su visita al país por noviembre del 76, describe que diversos grupos (abogados, sacerdotes, periodistas, etc.) dentro del país comentan cifras aproximadas de desaparecidos, entre ellas el número de 30 mil. Junto con el antecedente de Conti, eso es una prueba que el número se originó DENTRO del país, no en el exterior. Antes de pasar la cifra a circular por el exterior, circulaba internamente

Algo llamativo, es que la fuente de Graciela Meijide para aseverar eso, es Eduardo Luis Duhalde. O sea, según Meijide, fue el mismo Duhalde quien le confiesa haber inventado la cifra de 30.000 desaparecidos..... 


....pero resulta que Duhalde en el año 2009 escribió una carta muy dura en contra de ella donde explicaba con argumentos cómo se obtuvo la cifra de 30 mil 


Más allá de la valoración de los fundamentos que ofreció Duhalde (algunos argumentos son incorrectos, otros son correctos pero no alcanzan para cifrar en 30 mil), es un poco extraño de quién toma la fuente Meijide.... está tomando como fuente a una persona que no solo está en contra de ella sobre ese tema, sino que además dio sus propios argumentos para generar una base al número. Y, oh casualidad!!! A Meijide se le ocurre abrir la boca sobre ese supuesto invento a partir de películas como "El Diálogo" o entrevistas como las de ABC, cuando Duhalde ya estaba muerto y no tenía oportunidad de dar réplica acerca de la veracidad de esa supuesta confesión que le dijo a ella. Qué trucazo no?? 

Más específicamente Meijide en su libro del año 2009 titulado "La Historia Intima de los Derechos Humanos" escribió lo siguiente:

Los exiliados políticos que vivían en el exterior intentaban movilizar conciencias y lograr adhesiones de organismos internacionales; objetivamente, los testimonios de los liberados  de ESMA, La Perla y Campo de Mayo -por coincidencia fortuita o decisión táctica- aportaron a esa estrategia que tal vez haya dado lugar en 1977 a la cifra de 30.000 desaparecidos


Esto lo escribió en el año 2009, cuando Duhalde estaba vivo (fue así que éste le respondió con la carta antemencionada). Fíjense que en el párrafo transcripto, Meijide no dice "Duhalde lo inventó" o "los exiliados lo inventaron", sino que esboza un "tal vez aportaron a la estrategia de concebir los 30 mil". Ese "tal vez" que refleja un intento de inferencia sobre el origen de los 30 mil desaparecidos. Pero cuando Duhalde murió en el año 2012, ahí Meijide dijo otra cosa totalmente distinta en la película "El Diálogo" (año 2014): allí ya afirma directamente que Duhalde lo inventó. Minuto 49:54:


Entonces, lamentablemente, soy yo quien tiene que inferir que Meijide MINTIÓ DELIBERADAMENTE. Una lástima que hasta esta señorita se mande chamuyo. Al final, Hebe de Bonafini y Estela de Carlotto eran las menos verseras de todo este lío, ya que al menos no necesitaron involucrar a un tercero para chamuyar: si se mandan el cuento, lo hacen ellas solitas. Meijide y Labraña mienten y meten en el saco a otras personas ajenas


Por cierto, este relato se contradice con la misma Meijide sobre el genocidio: ella asegura que la Argentina no vivió un genocidio porque no se persiguió a la gente por etnia o religión, sino por política:


Si esto fuese correcto, no se entiende por qué los exiliados estaban deseosos de inventar la cifra de 30 mil para hablar de genocidio. Nunca lo habrían logrado ni aunque dijeran que desaparecieron 1 millón, porque el genocidio no abarca el componente político de persecución según ella. Como verán, la historia de Meijide tiene sus enormes contradicciones internas

Quiero recordarles que el primer sentenciado por delito de genocidio en nuestro país fue Miguel Osvaldo Etchecolatz en el año 2006 (en el juicio donde Julio López posteriormente desapareció, por segunda vez). En la sentencia de la causa, en ningún momento los jueces hacen alusión a la cifra de 30.000 desapariciones como requisito para condenarlo a genocidio:


En la causa se escribe lo siguiente (pag. 94):

Entiendo que de todo lo señalado [en la causa] surge irrebatible que no estamos como se anticipara ante una mera sucesión de delitos, sino ante algo significativamente mayor que corresponde denominar "genocidio". Pero cabe aclarar que ello no puede ni debe interpretarse como un menosprecio de las diferencias importantes entre lo sucedido en Argentina y los exterminios que tuvieron como víctimas (más de un millón) al pueblo armenio (primer genocidio del siglo XX producido a partir de 1915), el de los millones de  víctimas del nazismo durante la segunda guerra mundial o la matanza en Rwanda de un  millón de personas en 1994, para citar algunos ejemplos notorios  

No se trata de una competencia sobre qué pueblo sufrió más o qué comunidad tiene  mayor cantidad de víctimas. Se trata de llamar por su nombre correcto a fenómenos que, aún con diferencias contextuales y sucedidos en tiempos y espacios distintos registran una similitud que debe ser reconocida

Por tanto lo que está diciendo Graciela Meijide es una completa estupidez muy fácil de corroborar. Ay Graciela!!! vos sí que sos ligera... para versear. Ya estás un poco grandecita para mentir con pavadas. Y suponiendo que le damos el beneficio de la duda que Meijide no sabía sobre esta causa judicial, lo que tendría que haber hecho como un acto de honestidad intelectual es NO hablar de lo que no conoce. Es así de simple


Como sea, tanto Labraña como Meijide han construido dos "relatos" del supuesto invento de los 30 mil, que son incoherentes internamente y se contradicen con su par. Es divertido observar que al final los mentirosos no eran "solo" los izquierdistas troskos, y que también el negacionismo descaradamente tiene manía de mentir en pelotudeces ¿De qué les servía decir que los 30 mil eran un invento? Si están en contra del estimativo, ofrezcan sus argumentos y punto. Digan "El Estado tiene 9 mil registrados con nombre" y punto. Estas mentiras solo lastiman más la credibilidad de personas aparentemente respetables como Meijide. De Labraña me importa un choto, es un mercenario ¿Pero Meijide? ¿Vos también vas a mentir??


Lo único cierto es que las Madres de Plaza de Mayo viajaron a Holanda en el año 1979 y 1980. Esto por supuesto no demuestra nada de la historia de Labraña, ya que son datos que perfectamente Labraña los podría haber tomado para construir su montaje. De hecho perjudica la versión que Labraña le contó a Ceferino Reato sobre el año 1983, porque resulta que las Madres no viajaron en 1983 a Holanda. En el 83 las Madres viajaron a España; Italia; Francia; Bélgica; Suiza; Alemania Federal y Ecuador

(esta información la obtuve de e-mail que he enviado a una página asociada con el grupo de Madres de Plaza de Mayo)

Tal vez alguno se pregunte ¿La carta de Conti y el informe de Amnistía Internacional fueron decisivos en la difusión de la cifra de 30.000 desaparecidos? ¿Cómo sabemos que realmente influenciaron? Esto se resuelve fácil: en 1978, el detenido montonero Horacio Maggio logra escaparse de la ESMA y denuncia las violaciones a los DD. HH. que se cometían en ese centro, antes que fuese asesinado el mismo año por la patota de la ESMA al encontrar su refugio. A un periodista estadounidense no solo le relata sobre las condiciones terribles que se vivía, no solo le relata sobre la cantidad de prisioneros que pasaron por allí (él lo cifra en 3.000 prisioneros por el sistema de numeración correlativa), sino que cuando el periodista le pregunta por qué hay gente todavía viva en la ESMA, Maggio le contesta que cree que la dictadura tiene que guardar ciertos rehenes para apaciguar la imagen frente al exterior, pero que esos poquitos con vida no iban a poder cubrir los 30.000 secuestrados. Esto significa que ya Horacio Maggio había escuchado el slogan de los "30 mil desaparecidos" para 1978...... y las madres de Plaza de Mayo recién viajan por 1ra vez a Holanda en 1979, donde supuestamente Labraña inventa el número!!!!! El relato de Labraña hace aguas por todos lados

El testimonio de 1978 de Maggio se encuentra en el siguiente link:

https://s3.amazonaws.com/DDHH/1978%20-%20Testimonio%20de%20Horacio%20Domingo%20Maggio.pdf 

Incluso el COSPA (Comité de Solidaridad con el Pueblo Argentino), dirigido por grupos montoneros, ya tenía la cifra de 20 mil - 30 mil desaparecidos en mayo de 1978, antes que las Madres Plaza de Mayo viajaran a Holanda. En la pag. 9:
La cifra de 30.000 desaparecidos ya estaba instalada antes de la supuesta reunión de 1979 de Labraña (o medianamente instalada junto con otros estimativos), a tal punto que hasta la hermana del "Che" Guevara menciona ese número en enero de 1978, cuando todavía no había comenzado siquiera el mundial: 
Mirá qué fácil es desmentir a Labraña con una búsqueda superficial en Google. Pero es que hasta la misma Meijide en su libro con Héctor Leis reconoce que el número de 30 mil lo escuchaba ya desde 1977 (antes de la supuesta reunión de Labraña). Claro que los apologistas y periodistas apologistas tienen una aceituna de cerebro, que no se molestan en recomprobar las cosas, a ver si se la están colando de algún lado
¿Alguna prueba más? Oh si.... CLARO QUE TENEMOS MÁS PRUEBAS EN CONTRA DE LUIS LABRAÑA. En junio de 1978, es decir en los albores del mundial, los periodistas de la revista "Proceso" se reunieron clandestinamente EN BUENOS AIRES (no en el exterior, sino en el propio país) con dirigentes montoneros como Juan Gelman y Norberto Habegger


Portada de la revista "Proceso" de junio de 1978, donde informan que los líderes montoneros dieron una entrevista a la revista de manera clandestina en el propio país

En la página 7 de la revista, Juan Gelman menciona la cifra de 30.000 desaparecidos. Una vez más: estamos en junio de 1978, es decir mucho antes que las Madres de Plaza de Mayo viajaran a Holanda donde supuestamente Labraña dice haber inventado una poronga porque NO inventó nada. Y Juan Gelman, dirigente montonero, ya habla de 30 mil EN EL PROPIO PAÍS. No en Holanda, sino aquí, en nuestra tierra. Asi que más claro, a echarle una catarata: Labraña NO INVENTÓ UNA PUTA MIERDA. Así de didáctico lo vamos a decir. O al menos, si queremos ser generosos y admitir un posible margen, debemos indicarle a Labraña que no tiene el derecho de irse por programitas de televisión a decir tan ligeramente que él inventó el número
Cuando jugás mucho Phoenix Wright, empezás a razonar así. Me falta ahora el látigo de Von Karma para azotar a los apologistas chantas
Las madres de Plaza de Mayo viajaron a Holanda, en parte, ayudadas por la difusión que tuvo el siguiente reportaje en ese país. Uno de los periodistas europeos que iba a reportar el mundial de futbol en junio de 1978 se topó con la ronda que realizan las madres en la Plaza de Mayo y fue a entrevistarlas. Aunque obviamente censurado en Argentina siquiera la mención de estas reuniones en los medios de comunicación, este reportaje tuvo difusión en Europa, entre ellos Holanda. Aquí el video que hizo catapultar a las madres de Plaza de Mayo al reconocimiento internacional: 


En el video vemos a Estela de Carlotto (obviamente mucho más joven) y a otras madres representativas del movimiento. Esto fue a principios de junio de 1978 (en el video incluso se escucha la referencia a tener un mundial en paz). Labraña en ese entonces estaba pelotudeando en Holanda pero las madres de Plaza de Mayo NO habían ido todavía a Holanda. Y Juan Gelman, dirigente de Montoneros, ya había esgrimido en la revista "Proceso" el número de 30 mil. Hasta en Youtube podés desmentir al chanta de Labraña con dos clicks
Labraña utiliza la técnica clásica de los charlatanes de agarrar algo que es cierto, para mentir arriba de lo verdadero. No es que Labraña se inventa todos los detalles, porque si no su mentira caería muy rápida. Utiliza un par de datos ciertos, como que las Madres viajaron a Holanda; y ya con eso tiene el pasaporte para mentir. Dale Labraña! entre fantasmas no nos vamos a pisar la sábana, ya conozco esa táctica
Más concretamente Labraña dice en alguna entrevista, que la organización que le proveyó el dinero es la SAAM (Steun aan Argentijnse Moeders), para que las madres compren una casita
¿Y qué creen? ES CIERTO. Hubo una organización llamada así que ayudó a las madres. Esto no es un secreto de nada, porque la madre de Plaza de Mayo María Rosario Cerruti lo dijo en este libro:
Después de la Copa del Mundo, cuando los periodistas de los alrededores del mundo vinieron a reportar lo que estaba ocurriendo en la Plaza de Mayo, la gente empezó a tener noticias de nosotras. Un reportero holandés se interesó por lo que estuvimos haciendo en ese mes y retornó a Holanda a escribir un artículo grande sobre nosotras en los periódicos, y en 1978 nuestro primer grupo de ayuda fue establecido por mujeres del SAAM, que en holandés significa "Solidaridad con las Madres de Plaza de Mayo". La esposa del ex-primer ministro, escritores, periodistas y artistas se unieron y hubo un cantante que grabó una canción sobre nosotras para recaudar dinero. Esa fue nuestra primera ayuda financiera. En Francia, la gente se empezó a manifestar en las embajadas en apoyo a nuestra lucha. Después de eso, grupos de solidaridad fueron establecidos sobre toda Europa y Canadá, organizando eventos, recaudando dinero. Financieramente nos hemos manejado desde entonces con dinero del extranjero

............ pero desde ahí, Labraña agarra la guitarra y empieza a mandar verdura a full, afirmando que él mismo se inventó la cifra de 30 mil. Algo que no consta en ningún lado. También hubo otras organizaciones que financiaron a las madres de Plaza de Mayo, otros países que le dieron una ayudita; y no consta que le pidieran las exigencias que aparentemente le exigieron los holandeses de presentar el número de 30 mil personas. Al final estos holandeses son unos rompehuevos pidiendo cosas raras.....
Además que citar una organización "a secas" es muy cómodo. Sería más sustantivo que Labraña citara testigos, personajes concretos, hechos concretos. Pero es que ni siquiera presentó pruebas que existiera esa reunión que invoca. 
Como sea, Labraña solo mencionó la organización SAAM en una o dos entrevistas. En la generalidad de sus apariciones en TV, radio y prensa, Labraña se "auto-resguarda" y prefiere narrar una historia todavía más genérica sin mencionar ninguna organización. 
Que tal como lo relata Labraña en sus innumerables intervenciones, daría la sensación que las Madres fueron a Holanda a pedir dinero, cuando en realidad fue al revés: la organización SAAM se creó para ayudar a las madres; por lo que es lógicamente incongruente que una organización que se fundó con la misión de ayudar a estas personas de repente exija un número alto de desaparecidos para destrabar la ayuda. Para eso lo tendrían que haber pedido ANTES de crear la organización de ayuda ¿no lo creen? De lo contrario, si ellas no cumplían con el requisito, el organismo se creó al reverendo "cuete"
Aún así hay inconsistencias en este organismo SAAM para la versión de Labraña. Según el portal de archivos europeos:
En junio de 1979, por invitación de Amnistía Internacional, cuatro mujeres argentinas visitaron Amsterdam; eran de las 'Madres de Plaza de Mayo' ("las madres locas") en Argentina, que desde 1977 han marchado los jueves por la tarde a través de la plaza del gobierno central en Buenos Aires, para recordar sus 'desaparecidos' durante el gobierno de la junta argentina ( 1976-1983), mantener el reclamo de los niños. Esa visita y un recorrido silencioso por la Plaza Dam de Amsterdam dieron lugar a la constitución del Comité SAAM. La primera reunión fue el 20 de octubre de 1979, a la que asistieron, entre otras, Liesbeth den Uyl y Jeanne Roos; Liesbeth den Uyl fue la primera presidenta, sucedida por Mies Bouhuys. El 10 de julio de 1984 se constituyó la Fundación SAAM con el objetivo de apoyar a las madres de Plaza de Mayo en su lucha por conocer el destino de los desaparecidos en Argentina; El 26 de enero de 2006, las 'Madres locas' realizaron su última ronda de protesta en la Plaza de Mayo de Buenos Aires
Si las madres fueron invitadas por Amnistía Internacional a Holanda, entonces Labraña estaría involucrando inintencionalmente a este organismo internacional famoso en la "farsa" de los 30 mil??? Labraña jamás nombró a Amnistía Internacional. Y el SAAM tuvo como presidente constitutiva a Liesbeth den Uyl, la esposa del primer ministro holandés en esa época; una figura relativamente conocida ¿Quiere acaso Labraña ligar su "fraude" a esta señorita? ¿Está insinuando que Liesbeth den Uyl es incompetente o corrupta para participar en el destrabe financiero por un invento de número? ¿Fue ella la que pidió un número más alto? ¿Fue ella la que no revisó la lista de los 30 mil y mandó el destrabe monetario igual?

También podríamos preguntarnos, por qué Labraña se decidió a contar este relato 34 años después del hecho (lo contó por primera vez en el año 2013 y el invento aparentemente fue en 1979). Incluso tomando el año 1994, que fue cuando regresó al país (según la entrevista con el Presto), pasaron 19 años hasta que se le "ocurrió" contarlo. Es curioso que algunos apologistas que le creen a Labraña son los mismos que te dicen: "no es posible que después de 40 años no haya familiares que denuncien más desaparecidos. Ya no existe más el miedo a denunciar". Y posiblemente ese argumento sea muy atendible (aunque no resuelve la problemática entre nominalismo VS anti-nominalismo). Pero entonces ¿Qué decir de Labraña? 30 años para contar que era el inventor y no dijo ni una palabra ¿Qué temor le marcaba? ¿Quién lo iba a amenazar por contar la "verdad"? De hecho contó su historia en 2013, en gobierno kirchnerista que fue el gobierno que más "machacó" con la cuestión de DD. HH. Si Labraña lo contó en pleno régimen kirchnerista ¿Qué le impedía contarlo antes? Y lo peor de todo es que hasta en sus primeras apariciones televisivas allá por el 2009, Labraña jamás dice haber inventado nada; solo después se "acuerda" de su invento. Asi que no hay NADA, ni un pelito de mi chota que corrobore la historia de Labraña. Ni una mísera fuente innominada para comprobar este caso
Esto corre a la inversa: Labraña no testimonió nunca (al menos por ahora) haber recibido advertencias, amenazas o "sugerencias" de sus colegas de exilio acerca de la mantención en secreto del "invento de los 30.000 desaparecidos". Ustedes piensen esto: desde 1979 (época donde supuestamente inventa la cifra) hasta el 2013 (año en que Labraña revela haber inventado el guarismo), hubo muchos libros, documentales, monumentos, programas de televisión, artículos, entrevistas internacionales, causas judiciales, homenajes públicos, poemas en escuelas con presencia de figuras, etc. Mucho material donde directa o indirectamente se menciona el número de 30.000 (sea para afirmarlo, para decirlo al pasar, para lo que sea)............. y se supone que toda esta gigantesca producción montada durante décadas estaba atada a un único hombre, ignoto, llamado Luis Labraña. Parece que durante casi 40 años nadie llamó por teléfono a Labraña para decirle "Mirá, por favor no digas que vos inventaste la cifra"; nadie lo amenazó (tampoco es que fuese super importante el descubrimiento); nadie le sugirió nada a Labraña. Por lo menos él jamás dijo nada al respecto, nunca dijo que lo llamaron o amenazaron. Pareciera que durante 40 años a nadie del sector derecho-humanista le importó si un día venía Labraña a aguarles la fiesta con la revelación suprema de "su verdad", "su invento"
En realidad Luis Labraña no dice nada original. Este mito que los 30 mil se inventaron en Europa precede a este presunto autor. Es uno de los tantos mitos que la "derecha política" alimentó, donde se mezclan cosas como el Genocidio y la figura de 30 mil desapariciones. Un ejemplo elocuente es el de Ceferino Reato en esta entrevista del año 2013 sobre la matanza argentina:
De acuerdo al Estatuto de Roma, genocidio es toda persecución y dominación de un grupo determinado de personas por razones étnicas, de religión, pero no político. No haría una diferencia del uso de un término u otro, es una matanza atroz; ahora, si le queremos poner genocidio, no hay problema pero no sería ese el criterio del estatuto de Roma. Igualmente antes no había estatuto de Roma y se decía genocidio. Entiendo también que 30 mil haya sido un número que se haya creado durante el exilio, precisamente para golpear la conciencia de la opinión pública internacional y dar cuenta de un genocidio. Entiendo eso, pero ya pasó, ahora estamos en otra situación
Esto lo dijo Reato en una entrevista del año 2013, cuando Labraña ni siquiera había aparecido en el programa de Mauro Viale a "popularizar" su protagonismo como inventor, ni consta que Reato conociera el "invento" de Labraña ese año. Es decir, que antes de la existencia de Labraña en lo de Mauro, Ceferino Reato anda diciendo que la cifra "se inventó en Europa para apelar al genocidio". Es como si Reato anticipara lo que diría Labraña.... bueno, no anticipa nada en verdad. Simplemente repite los mitos subterráneos de la derecha. Así como Meijide en el año 2009 también había dicho algo parecido. O como Reato nuevamente en el 2013, en este artículo de La Nación:
Los kirchneristas, en especial los líderes de las organizaciones de derechos humanos, que insisten en que los desaparecidos durante la dictadura fueron 30.000, me recuerdan a los dirigentes de esas ONG "truchas" que se ponen contentos cuando aumenta el número de pobres porque imaginan que, de esa manera, podrán capturar mayores subsidios, ayudas y respaldos dentro y fuera del país.
¿No les basta acaso con las heridas abiertas a los familiares, amigos y compañeros de las más de 7000 víctimas que registra el último documento publicado por el Gobierno sobre este tema, en 2006? ¿Les parece poco? ¿Por qué insisten en un número que todos ellos reconocen en privado como una suerte de mentira necesaria de otros tiempos, cuando debían captar la atención de la opinión pública nacional e internacional?
Aquí Reato apela al plural: "todos ellos reconocen en privado que fue una mentira internacionalmente lanzada". No detalla Reato quiénes le dijeron en privado qué cosa. Pero nuevamente, este mito aparece ANTES de Labraña en lo de Mauro

Asi que Labraña simplemente personificó ese mito antiguo en su propia persona. Ni Reato ni Meijide ni nadie mencionaron nunca a Labraña hasta ese momento a pesar de difundir el mito; pero Labraña decidió que era buena idea darse protagonismo. Total ¿Quién le va a llevar la contraria? Pero no hizo nada original el amiguito de Cecilia Pando: el mito existía ANTES de su programa con Mauro. Ni en eso la emboca este viejo boludo de Labraña

Aclaremos lo obvio: esta historia de Labraña no tiene nada que ver con el número real de desaparecidos. El día de mañana los desaparecidos pueden ser menos de 8 mil si quieren, pero eso no significa que la historia de Labraña vaya a ser cierta, ni la de Meijide


Ninguno de los periodistas o similares que entrevistaron a Labraña le pidió mayores detalles de su historia, en un claro error de periodismo. El inútil de Presto no le preguntó, Ceferino Reato no le preguntó, Mauro "avaló la bomba a la Amia" Viale tampoco le preguntó, el boludín de Eduardito Feinmann tampoco. Por lo cual Labraña se paseó por varios programas dejando la falsa imagen de incuestionabilidad de su historia; porque sencillamente nadie tuvo dos dedos de frente para preguntarle siquiera si existe un testigo que corrobore su relato ¿No preguntaron porque eran malos periodistas? Tal vez de Feinmann o del youtuber Presto se puedan decir que son pésimos en su profesión, pero ¿Solo por eso? ¿O simplemente dejaron pasar preguntas obvias porque Labraña decía lo que querían escuchar?
Tal es el nivel de desparpajo del cuento que se gestó Labraña, que en la entrevista con el Presto dice que fue a la reunión de Holanda con las madres de Plaza de Mayo de "rebote", que fue de metido porque no estaba en contacto con las madres ¿En qué clase de reunión estaba que podía entrar cualquiera? ¿Una reunión abierta donde se supone que iba a "inventarse" un fraude y disponerse la entrega de dinero?
He intentado comunicarme con Luis Labraña, para que me pudiese relatar mejor su historia o con mayores precisiones. Labraña no tiene redes sociales pero sus amigos como Cecilia Pando, Rafael Mercado, Silvia Ibarzábal o José D'Angelo SI poseen redes. Me contacté con estas personas para ver si podían darme algún teléfono o Whatsapp de Labraña, aclarándoles que yo iba a preguntarle sobre algunas inconsistencias que encontré de su historia, y que él pudiera explicarme si yo estaba en lo incorrecto con algún dato (cosa perfectamente posible que yo me equivoque, pues también cometo errores como cualquier persona), o si él se había olvidado de añadir una fuente o precisión en su relato (lo cual excede mi culpa, pero de todos modos aceptaría su rectificación sin problemas). Gente como D'Angelo o Cecilia Pando, amablemente me dijeron en sus redes que iban a intentar contactarme con este señor. Hasta el día de hoy no se produjo ningún contacto, sigo esperando

La difusión por parte de Haroldo Conti / Amnistía Internacional quizás no explique muy bien por qué actualmente se continúa hablando de 30.000 desaparecidos. Las razones de la permanencia de esa cifra se deben a otros factores: el libro de Díaz Bessone donde asegura que en la Argentina hubo 30.000 fanáticos. Pero también el Documento Final es responsable de instalar el slogan de 30 mil porque falsamente escribe que en el país hubo 25.000 subversivos (aunque la clave de ese Documento no sean los 25 mil subversivos, sino los 15 mil combatientes). Finalmente, la proyección que hicieron los organismos de Derechos Humanos de 2 personas sin denunciar cada 1 denunciado (proyección a la cual adhirió Ernesto Sábato)

Actualmente, el sostenimiento de la cifra de 30.000 se debe a una errónea interpretación del documento de Arancibia Clavel: dado que el cómputo de Clavel termina a mediados de 1978, se ha razonado que, al faltar 5 años más para el derrumbe del gobierno militar, entonces es factible que llegara o incluso superara los 30 mil. Esta interpretación no tiene en cuenta 2 aspectos: que el documento de Clavel eventualmente podría contabilizar los sobrevivientes (no sabemos), y lo más importante es que para mediados de 1978 la represión disminuye dramáticamente. El documento de Clavel es una prueba importante para sostener desde +18.000 a +22.000 muertos, pero no para concluir que son 30.000 o lo supera
Llegados a este punto, alguna persona podría preguntarse ¿Y qué tal si los represores como Flouret, Clavel, Vilas, Vergez y otros rebajan los números de sus delitos? Esta especulación debe analizarse con cautela, aportando argumentos convincentes para sospechar una rebaja intencional. De todo lo visto, únicamente el Documento Final es pasible de entrar en esta especulación, por tratarse de una emisión pública y resultar un discurso "controlado", "analizado" y "maquillado" de cara al televidente. Si se quiere, el caso Flouret podría entrar en esta especulación inicialmente por ser una conversación de cara a un embajador de EE. UU.; aunque con la suma de la fuente de Clavel se hace bastante insostenible la especulación. Del resto, no puede argumentarse seriamente que deseen minimizar el número, no hay elementos contextuales. Consideramos por ejemplo, que el arqueólogo Ezequiel Del Bel (coordinador del LIGIAAT, y quien realizó trabajos arqueológicos en el centro clandestino de Arsenales y Famaillá), se equivoca al decir que, si Acdel Vilas blanqueó más de mil detenidos en su centro clandestino, entonces tuvieron que ser más por "lo que no blanqueó":
Asi como los apologistas no deberían especular que los represores mienten para exagerar, la lógica se emplea a contrario sensu: no puede especularse, sin elementos razonables, que los represores minimicen sus cifras. No puede decirse tan a la ligera que el Operativo Moncholos tuvo 100 víctimas por ejemplo, solo porque Héctor Vergez en su libro blanquea 48 y "podría existir la opción que no esté blanqueando todo". No lo sabemos y tenemos que mantenernos a raya con la interpretación más adecuada de las fuentes. Por lo tanto, sostenemos una vez más el número de 20.000 represaliados y no 30 mil
Considerando la "fama" que alcanzó el artículo de La Nación del año 2006 sobre el caso Arancibia Clavel y sus 22.000 desaparecidos, tal vez si las madres de Plaza de Mayo o los organismos de Derechos Humanos hubiesen "apostado" por anclar y repetir la consigna de 20 mil desaparecidos (en vez de 30 mil), al negacionismo le hubiese costado más la construcción de su relato particular, porque estarían obligados a arremeter contra el documento de Clavel. Pero como eso no fue así, como la cifra que se continuó cacareando fue la de 30 mil, la mayoría de los negacionistas no se sintieron en la necesidad de desmentir o explicar las pruebas innominadas como las de Clavel ¿Acaso hemos escuchado a Nicolás Márquez o Agustin Laje intentar desacreditar el documento de Clavel? No lo hicieron nunca, es como si esa evidencia no existiera y por tanto no se sienten con la obligación intelectual de desmentirla
Incluso si imaginamos por un momento que el día de mañana se descubren que fueron 30 mil los desaparecidos, las Madres de Plaza de Mayo y los Organismos de Derechos Humanos solo pasarían a tener razón de manera azarosa y no fundamentada. Recordemos que las Madres de Plaza de Mayo sostenían la cifra de 30 mil por lo menos desde 1982: 
Mientras que fuentes importantes como el Documento Final, el diario de Vilas, el documento de Arancibia Clavel o la hoja de Flouret se descubrieron y publicaron después de 1982. O sea que las Madres de Plaza de Mayo solo estaban haciendo "futurología" en 1982 y no contaban siquiera con el documento de Clavel como respaldo. Eso no es acertar de manera apropiada, sino por pura suerte

En el libro "Los 70: La Década que Siempre Vuelve" de Ceferino Reato, el periodista menciona ¡¡¡las dos historias!!! la de Meijide y la de Labraña; lo que es un caso extremo de estupidez de este periodista. Aún aceptando que uno de los dos, Labraña o Meijide, diga la verdad (en realidad ninguno de los dos está diciendo la verdad), Ceferino Reato no puede meter las dos historias en su libro sin realizar ningún comentario crítico de alguna de las dos. Cuando ambos relatos se contradicen entre ellos y por lo tanto, es de cajón que uno de los dos relatos está equivocado SI o SI. Además, con lo fácil es que es refutar a Labraña simplemente googleando!!!......... y eso que en mi opinión, Ceferino Reato es un apologista bastante más honesto y decente que los impresentables de Nicolás Márquez o Victoria Villarruel. Pero ni Reato ni su editorial revisaron el libro para corroborar las fuentes. Así de mal estamos con el caso Labraña (y Meijide) si ni siquiera Reato se molesta en comprobarlo
(en el colmo del absurdo, Reato en su libro señala la respuesta que Duhalde le dio a Meijide en el 2009.... lo que contradice la historia de Meijide sobre una supuesta confesión de Duhalde de haber inventado la cifra)

Volviendo a Labraña, ni siquiera ha contado a quién mató como militante de Montoneros. Para él, hacerle esa pregunta es ofensiva y él no confirma ni desmiente haber matado a alguien:
Pero es que esto solo mejora la imagen de Labraña para los propios apologistas, ya que el ex-montonero dice cosas que los favorece a ellos, y encima los apologistas no tienen que lidiar con la carga de ser amigos de un montonero acusado de asesino. Es por eso que Cecilia Pando tranquilamente puede ser amiga de Labraña mientras sigue reclamando memoria por las víctimas de la subversión. Es una situación win-win para Labraña y sus amistades. Hasta la misma Victoria Villarruel es condescendiente con Labraña y no lo tilda de "terrorista" ni le grita que pague por sus crímenes (si es que cometió alguno) ni nada de nada: 
Y se supone que le tenemos que creer a este montonero. A este montonero que recibe las felicitaciones de gente como Villarruel o Pando, y que se rodea con gente de esa calaña desde hace mucho tiempo. Daaaaaaaaaaaale, no me jodas 


Luis Labraña con su amiga Cecilia Pando ¡¡Pero qué amiguitos que tenés Luisito el palomón!! es amigo de Cecilia Pando desde antes que diera a conocer su "invento". Labraña también es amigo del marido de Cecilia Pando y del apologista "halcón" de José D'Angelo. El Quini completo

No va a faltar el tonto que intentará decirme que estoy cayendo en una falacia por fijarme en los amigos de Labraña. Pero no es falacia en lo absoluto porque yo no me baso exclusivamente en las amistades de Labraña para desmentirlo. Dicho esto, es muy importante en un testimonio fijarnos los vínculos que porta el declarante, para analizar legítimamente si puede mentir para defender dichos intereses. Que Labraña sea amigo de Videla por ejemplo, no significa que necesariamente vaya a mentir, pero es un elemento que el Derecho Procesal Civil puede tener en cuenta para catalogarlo como un testimonio interesado. Eso no lo invalida de una, pero lo pone en una situación de alarma, donde eventualmente un juez o investigador lo deseche si no encuentra un valor más alto en el testimonio. Y Labraña no aportó ningún detalle específico y convincente en su testimonio que lo saque de esa alarma: no aportó ni testigos que lo corroboren, ni detalles concretos de la reunión, ni detalles de una mierda 
Recordemos una vez más, que Labraña se hizo amigo de Cecilia Pando ANTES de dar conocer su invento, no después. Si hubiese sido después no pasa nada, pero el hecho que sea amigo desde antes, implica que al momento de dar a conocer su supuesto invento, él ya tenía un vínculo sentimental con Cecilia Pando de amistad, lo que podría influir en que mienta para caber en los intereses que Pando quiere promover

Este caso lamentablemente revela las pésimas prácticas periodísticas en las incurren los programas de televisión de este país y de otros, o la prensa en general. Yo no pido que el periodista se vaya a leer las causas judiciales sobre estos temas ni que pierda horas en fisgonear los documentos desclasificados (aunque debería hacerlo porque es su deber informarse). Lo menos que puede pedirse es que se tomen 40 minutos para investigar un poco el background de Labraña o al menos tener un gramo de cerebro y googlear si el número de 30 mil ya existía antes del exilio de este señor. Yo entiendo que si Labraña cae de sorpresa en el programa Intratables, el panelista quizás no tenga mucho margen para pensar fríamente qué preguntas hacerle o cómo refutar su discurso...... pero Labraña fue más de 1 vez al programa. No hay excusas, es periodismo mediocre, superficial. Lo vemos que Labraña va a Intratables a prácticamente hablar como si fuera una autoridad de Montoneros, cuando los panelistas no tienen ni la más pija idea de si Labraña fue un montonero importante o un simple militante del montón. Ni mucho menos deben saber las conexiones entre Labraña y Cecilia Pando o José D'Angelo. Ni deben saber que Labraña fue a visitar a Videla en calidad de "colegas" o "ex-enemigos ahora en concordia"
Ojo! que no soy hipócrita y esto va a la inversa, como en este programa donde la increparon a la pobre Victoria Villarruel con idioteces en vez de datos en la mano:
Esta vez me compadezco de mi amor no correspondido de Villarruel. En fin, esto es "periodismo independiente y profesional"
Y claro, los apologistas del vulgo le van a creer a Labraña porque es más fácil. Porque ir a buscar fuentes en serio cuesta más trabajo y no es tan divertido ¿no es cierto? Vagos de mierda y putos interneteros del ojete que solo creen en los memes de Twitter y Facebook

No todo, todo, todo, absolutamente todo lo que dice Labraña de sí mismo es mentira. Ciertamente Labraña estuvo preso a principios de los años 70, ciertamente Labraña tuvo que huir a Holanda durante la dictadura (primero pasó por Brasil, hasta que el país europeo le resolvió su trámite como exiliado). Algo que no cuenta Labraña, tal vez por un deseo personal de privacidad, es que él no huyó "solitario" a Europa. Su mujer y su hijo pequeño tuvieron que irse. Al parecer, a la mujer de Labraña la estaban persiguiendo las fuerzas armadas; por lo que tuvo que abandonar el país junto con su pequeño hijo de aquel entonces 4 años de edad, llamado Mariano Labraña. La mujer fue primero a Brasil, donde unos compañeros se comportaron de muy malos modos exigiéndole dinero para el alquiler de la casa (después una de esas compañeras, estando en Europa, se arrepintió de haber sido tan prepotente con ella teniendo un hijo). La mujer de Labraña junto con su pequeño se exiliaron finalmente a Italia. Luis Labraña no podía ir a ese país por problemas burocráticos sobre su calidad de refugiado, por lo que tuvo que asentarse en Amsterdam. La mujer junto con su hijo partieron entonces desde Roma hacia Amsterdam, donde vivieron y "pasearon" por distintos lugares de ese continente


Luis Labraña y su pequeño hijo, en la Plaza de San Marcos, Italia. Año 1979. No digas nada: a mi también me hace acordar a Assassin's Creed

Esta información la he extraído del siguiente blog público que le dedica su familia al hijo Mariano Labraña, quien lamentablemente falleció en 2018: 
Pero lamentablemente, no hay pruebas sobre el supuesto invento de este tipo de los 30 mil desaparecidos. Yo al menos no las encontré 

Otros quizás se pregunten por qué Luis Labraña, habiendo sido un guerrillero en el pasado, perseguido por los militares al punto de tener que exiliarse; ahora miente para favorecer la prédica de los represores. Dado que Labraña no es una fuente primaria, esta pregunta carece de trascendencia. No va a ser la primera vez que una persona termina haciéndole el juego a sus enemigos de ayer. Es bastante conocido el caso del activista francés comunista Paul Rassinier, quien fue hecho prisionero de guerra por los alemanes durante la segunda guerra mundial en el campo de concentración de Buchenwald, se terminó convirtiendo en uno de los primeros negacionistas contemporáneos del holocausto ¡¡¡Una víctima de los nazis se convierte en negacionista del holocausto!!! pues ocurre, qué se le va a hacer. Asi que no me extraña que Luis Labraña, antes perseguido por la dictadura, ahora se convierta en el amigo de la primera negacionista mainstream de la dictadura (con permiso de Karina Mujica), la inefable Cecilia Pando. No me extraña que Labraña haya ido a visitar a Videla en la cárcel en calidad de concordia y "reconciliación". Y no me extraña que ahora Labraña mienta para favorecer a sus nuevos amigos apologistas y represores


El relato de Labraña es tan genérico, tan despojado de detalles concretos, que en un hipotético juicio sería desechado como inverosímil por un juez mínimamente cuerdo; y a eso sumémosle que su historia pierde contra un elemento inamovible como la cronología: la visita de Amnistía Internacional de 1976 fue anterior al exilio de Labraña en 1977, la revista de COSPA reseñada es anterior a la visita de las madres de Plaza de Mayo en el 79. Salvo que tenga el DeLorean a mano, Labraña no puede ir contra el tiempo
Pero bueno, hay gente que le encanta que le vendan la moto, por más que se note a 1000 kilómetros los neumáticos pinchados. No hay que ser un genio para darse cuenta lo genérico del relato de Labraña, pero sin embargo muchos le creyeron… o hacen fuerza para creerle por su necedad ideológica
¿Por qué hay gente que le cree a una historia tan genérica y ridícula como la de Labraña? Aquí entramos en la opinión personal y la mera especulación. Olvidemos aquellos fanáticos apologistas amantes de la dictadura. No todos los que le creen a Labraña son necesariamente "apologistas de la dictadura". Pero suelen ser personas muy descontentas de la izquierda, del kirchnerismo y creen ilusamente que atacando a un supuesto "relato oficial de los años 70" están minando las bases de credibilidad y prestigio político del kirchnerismo o de la izquierda no-kirchnerista. Entonces confían en relatos como el de Labraña. Además, inteligentemente Labraña ataca sobre el corazón del conspiracionismo más verosímil: aquel que se basa en el lucro. A diferencia de las conspiraciones fantásticas que imaginan ver un gobierno iluminati oculto que nos quiere transformar en reptiles a todos, aquí Labraña insinúa que los izquierdistas mintieron para obtener dinero. El dinero indudablemente mueve el mundo, asi que no es de extrañar que uno termine creyendo en aquellas historias de "corrupción moral por dinero", donde hasta las Madres de Plaza de Mayo, que alguna vez tuvieron una lucha legítima, ahora se corrompan por algo tan hedonista y terrenal como el lucro. Pero Luis Labraña es el ejemplo perfecto que no todos se corrompen por dinero: Labraña se mandó este cuento para favorecer a sus amiguitos como Cecilia Pando, y no lo hizo por dinero sino por conversión ideológica
"Ay, pero es que nadie salió a desmentirlo a Labraña" ¿Y eso qué tiene que ver? La historia de Labraña es falsa igual, con independencia que lo salgan a desmentir o no. Es más, voy a retrucar eso: vamos a suponer que sale Estela de Carlotto a decir "es totalmente cierto lo que dice Labraña". Pues NO va a ser cierto aunque lo diga ella, porque la historia de este tipo tiene demasiadas incongruencias como para que lo pueda salvar siquiera Carlotto o Bonafini. Labraña no puede explicar algo tan básico como el hecho que los holandeses aceptasen así nomás una cifra sin chequear la lista de 30 mil (como SI lo habían revisado con la de 4 mil), o simplemente que el número de 30 mil ya circulaba cronológicamente ANTES del exilio de Labraña. Ni aunque salga toda la congregación de Madres de Plaza de Mayo a apoyar a Labraña, pues no va a ser cierto y se acabó, hombre. Que a Labraña lo desmiente la simple cronología de los sucesos
Claro que si alguien presenta pruebas concretas (por ejemplo algún documento que acredite que los holandeses pagaron una suma por 30 mil personas) entonces me callo la boca con algunas cosas. Pero me parece que me voy a quedar esqueletizado en la silla esperando a que eso pase
Si vamos al caso, también hubo personajes oscuros que salieron a decir que los hijos de Hebe de Bonafini están vivos en Europa, paseando libremente. Que yo sepa, Bonafini nunca salió a desmentir tajantemente esa versión ¿Significa que los hijos de Bonafini están vivos? Bueno, los que supuestamente conocen esta "verdad oculta" nunca presentaron siquiera un videoclip de los hijos en Europa. Asi que se ve que no las tienen todas consigo estos reveladores
Tampoco es que Labraña haya testimoniado un delito. Decir que inventaste una cifra junto a las Madres de Plaza de Mayo para obtener dinero no es un delito; asi que carece de sentido desmentir o afirmar. Otra cosa distinta es que Labraña dijera algo más grave como "yo ví a Hebe de Bonafini violando un menor de edad"; eso SI ameritaría una desmentida (a nivel televisivo o judicial) porque estamos frente a un delito gravísimo. Pero por la boludez del pretendido invento de los 30 mil, da igual que salgan a desmentirlo porque no suma ni quita nada
Y no vamos a chuparnos el dedo: si el día de mañana Hebe de Bonafini sale a desmentir a Labraña, no es que de repente Victoria Villarruel, Ceferino Reato o Nicolás Márquez le vayan a creer a Bonafini y dejar de apoyar a Labraña ¿O si? No seamos ingenuos. Una desmentida en estas condiciones no sirve de nada, porque va a ser la palabra de Bonafini contra la de Labraña; cada uno le creerá a quien le plazca. Pero queridos míos: a mi me importa una mierda eso. Labraña miente incluso si Bonafini le diera la razón. PUNTO

En definitiva, el número de 30 mil surge primero en la carta de Conti, enero de 1976, mencionando un golpe sangriento para marzo y un plan para producir 30 mil muertos (no aparece la palabra “desaparecido” todavía). Y después Amnistía Internacional en noviembre del mismo año recoge la hipótesis de 30 mil desaparecidos. Cualquier otro intento de contar un relato distinto sobre el surgimiento de la cifra, necesitará de fuentes suficientes, confiables y cronológicamente coherentes, en vez de personajes que se adjudican inventos sin probanza alguna

¿Por qué Ceferino Reato rebaja la cifra de 8.961 denuncias del Nunca Más a 6.348 desaparecidos en su conteo?? Número de sobrevivientes


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Los apologistas más interesados del proceso militar han llegado a niveles de oportunismo tales que ya no se conforman con señalar que la cifra es únicamente la que tiene el Estado, sino que encima de modo propagandístico rebajan las cifras del Nunca Más, dejando la huella impresa que los desaparecidos son poco más de 6.000 ¿Cómo hicieron para rebajar esta suma? Mediante un truco semántico: la palabra “desaparecido” quedó instalada en el acervo cultural para catalogar a todas las víctimas directas de los centros clandestinos, ya sean asesinados, personas efectivamente desaparecidas, y sobrevivientes. Es por ello que los propagandistas se aprovechan de esta vaguedad para restringir el concepto de “desaparecido” a las personas efectivamente desaparecidas, omitiendo los asesinados, los que ya encontraron el cadáver y sobrevivientes. Por ejemplo, la hija de Estela de Carlotto fue asesinada en un centro clandestino pero no es una desaparecida, porque su cadáver fue entregado por el ejército a la madre durante la dictadura. Entonces, lo que hacen estos apologistas es descontar todos estos casos y dejar “pelado” el número restringiéndolo únicamente a los cadáveres desaparecidos. Por supuesto, ellos te van a decir que no están haciendo nada malo, que están contabilizando a los desaparecidos en serio. Por consiguiente, es mejor hablar de “víctimas” de la dictadura, para evitar el truco semántico de los propagandistas del proceso militar
Pero no termina aquí el asunto: la secretaría de Derechos Humanos en la última publicación del registro estatal de víctimas del terrorismo de Estado, dejó aparte 780 casos de desaparecidos que fueron inicialmente denunciados a la CONADEP, pero al no ser ratificadas esas denuncias el Estado las tiene pendiente de investigación. Los apologistas descuentan también esos casos, lo que estrictamente no está mal, pero no realizan la correspondiente aclaración que esas personas estuvieron inicialmente en el listado de la CONADEP y que todavía no se saben si aparecieron o no, o si fueron víctimas del Estado
Otro truco de los apologistas es contabilizar desde el 24 de marzo de 1976, cuando es más apropiado contabilizar a partir de 1975. Si se aplicara la lógica de los apologistas, deberíamos concluir que la desaparición de Cecilia Viñas es un crímen imputable a Alfonsín y descontable al gobierno militar, ya que Viñas todavía para 1984 se encontraba con vida y nunca más apareció. El lapso apropiado entonces es de 1975 (inicio del cómputo de los crímenes) a 1984 (última noticia de remanentes de la dictadura). Además los mismos apologistas insisten con la existencia de un "relato" que cuenta las cosas a partir del 24M/1976 y omite lo anterior; entonces con la misma lógica el cómputo de desaparecidos debiera arrancar en el 75 y no el 24 de marzo del 76 como desea el apologismo
Entre todas estas omisiones llegan al número de 6348 casos de desaparición forzada. Pero si nosotros añadimos lo que se ha descontado, y se parte desde 1975, la cifra  es de 9400 desaparecidos y asesinados. Por regla general no se añaden los sobrevivientes, pero éstos también fueron víctimas de los centros clandestinos. No los asesinaron afortunadamente pero eso no les quita su estatus de víctimas de la tortura y el calvario, con secuelas físicas y psicológicas todavía. El registro estatal ha computado unos 3400 sobrevivientes aprox (aunque no aclara el porcentaje anterior a 1975, y deja entrever una cifra mayor de supervivientes). El número de sobrevivientes es superior a lo que la CONADEP había registrado inicialmente. La cifra total actual entre desaparecidos, asesinados y sobrevivientes registrados es de 12.800 personas aprox.
Textualmente, el registro estatal en su PDF anota lo siguiente en una aclaración con letra pequeña:

En la actualidad el RUVTE contiene información sobre 13.117 víctimas, de las que 3432 son personas liberadas, de las cuales el 77% brindaron testimonio ante la CONADEP o la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación. Este porcentaje de liberados es parcial y únicamente representa lo registrado a la fecha [2015] en el RUVTE, sin tener en cuenta otras listas obrantes en la SDHN aún no unificadas (a las que deberían agregarse los testimoniantes en causas judiciales no registrados en forma total por la SDHN a la fecha), pero que, se estima, por lo menos quintuplican el total aquí expresado
De este párrafo se deducen 2 cosas: que el RUVTE no tiene unificada toda la información de los testimoniantes en las causas judiciales (por ende el número de desaparecidos obrantes en causas no está totalmente completo para el RUVTE), y lo segundo es que el registro estatal estima más de 17.000 sobrevivientes (posiblemente incluyendo muchas personas de años anteriores al 75). Este párrafo por supuesto se lo callan los apologistas del gobierno militar

Véase el siguiente enlace, página 9 letra chiquita:

https://www.argentina.gob.ar/sites/default/files/2._anexo_i_listado_de_v_ctimas_de_desap_forzada_y_asesinato-investigacion_ruvte-ilid.pdf  

Ejemplo de sobreviviente que recién en el año 2016 decidió denunciar su vivencia, después de 40 años de su secuestro. No había denunciado ni a la CONADEP ni a ningún organismo estatal (ni siquiera al RUVTE) hasta el 2016:


Es casi seguro que ese "quintuple" que menciona el RUVTE, incluya a los detenidos del PEN. El registro estatal no especifica si esas 17 mil personas estimadas son todas sobrevivientes de CCD. Por las fuentes innominadas que hemos visto en el primer capítulo de este posteo, estos 17 mil no concuerdan con los documentos de Clavel y Flouret (recordemos que debemos añadir los desaparecidos y muertos). Asi que es segurísimo que el RUVTE esté hablando de detenidos del PEN + sobrevivientes de CCD en su número estimado de 17 mil. Aún así, no cambia el enfoque: desde el año 1984 cuando la CONADEP registró a 8.600 detenidos del PEN, hasta la fecha con casi 17 mil, significa que hubo un aumento de denuncias de casi el doble

Es falsa la muletilla que desde la CONADEP hasta la fecha no hubo casi denuncias nuevas. Tal vez de personas estrictamente muertas o desaparecidas no hubo tanto caudal de denuncias, pero SI de sobrevivientes

A su vez, el mismo gobierno militar en el citado informe de 1980 que pretendía contrarrestar a la CIDH, nos dio la cifra de detenidos a disposición del PEN desde la instauración del Estado de Sitio en noviembre de 1974 hasta la fecha. Pag. 71:



Estos datos suministrados por el mismo gobierno militar, arrojan una cifra de 8.700 detenidos del PEN. Asi que cabe pensar, prima facie, que las restantes 8 mil personas dentro de los 17 mil del RUVTE, se componen de sobrevivientes de CCD (quedando la cosa así: casi 9 mil detenidos del PEN + 8 mil sobrevivientes del CCD). Esto igualmente es hipotético, en tanto el RUVTE nunca discriminó correctamente la proporción entre sobrevivientes de centros clandestinos y detenidos del PEN


En tal sentido, es de notar que todos aquellos que hablaban de "30.000 desaparecidos" en los años 70 sea dentro del país como en el exilio, nunca dejaban claro semánticamente si la palabra "desaparecido" incluía a los sobrevivientes. Durante los años 80, ante la escasez de sobrevivientes denunciantes, se pudo imprimir la leve imagen que los "30 mil" referían a personas ya muertas.... imagen que perdura hasta nuestros días como reflejo mecánico. Pero debemos remarcar que eso no quedaba tan patente en las primeras expresiones de la cifra en los  años 70 como las de Amnistía Internacional, CADHU, el PCR, etc.


Citando nuevamente el caso de Lanusse: en vista que los desaparecidos "reales" (los que no se encontraron su cadáver) son 6.348 (el resto de los asesinados fueron encontrados mayormente en tierra), Lanusse tendría que haber dicho "más de 6 mil" cuerpos al río para compatibilizar con el Estado a nivel nacional. El hecho que este personaje dijera "más de 8 mil" significa que no estaba hablando de la cifra registrada actualmente, sino de una cifra mayor a la que poseen los gobiernos  

Discursivamente los apologistas han sido muy inteligentes en este punto: siempre se limitan a indicar el número de desaparecidos desde el 24/03/1976 y no mencionan ni los muertos encontrados ni tampoco los sobrevivientes. Tal vez el más generoso como Ceferino Reato te mencione las ejecuciones sumarias. Pero curiosamente cuando tienen que hablar de las víctimas de la guerrilla, esos apologistas no se "reducen" a indicar el número de muertos nomás, porque saben que la cifra es muy chiquita en comparación; y le agregan entonces el número de secuestrados, el número de bombas, etc. Por ejemplo Victoria Villarrel no te dice solamente que la guerrilla provocó 1094 muertos (que ya de por sí ese número está inflado, pero no importa), sino que te dice que la guerrilla produjo 17 mil víctimas en total. Ahí se acuerdan de incorporar un montón de variables que ellos mismos le quitan a las víctimas de la dictadura, para agigantar el número de víctimas de los insurgentes. Ahí contabilizan los sobrevivientes por ejemplo, una variable que ellos le quitan a las víctimas de la dictadura cuando hablan de 6 mil desaparecidos
en estos enlaces, los apologistas indican el número de desaparecidos y muertos de la dictadura (según ellos) pero en cuanto a las víctimas de la guerrilla, no se limitan a los muertos e incluyen algunas variables más: 
Este truco distorsiona el fenómeno represivo del gobierno. Puesto que si realmente hubo 6400 personas víctimas de la dictadura y ninguno más (ni siquiera sobrevivientes), significa que en la ESMA, Campo de Mayo, la escuelita de Famaillá, Arsenales, Circuito Camps, Mansión Seré, Club Atlético, Banco, Olimpo, Servicio de Informaciones, el D2, La Ribera, La Perla, Coordinación Federal y Vesubio, por nombrar los centros más "pesados" o conocidos, en todos ellos pasaron 430 detenidos cada uno. Cuando hemos visto que en Famaillá, y basándonos solamente en la fuente de un represor (y no sobrevivientes interesados), pasaron más del triple de esa cantidad. En la ESMA pasaron casi 10 veces más ese número. Entonces, aún cuando los combatientes de la guerrilla no llegaban ni a palos a 6 mil personas, la cifra de 6 mil que quieren instalar los apologistas trastorna el entendimiento sobre el funcionamiento de sus centros de detención

En realidad ambos grupos, tantos los "progres" como los "derechistas" utilizamos mal el concepto de Desaparecido. E incluso cuando se utiliza bien el concepto, la discusión está mal enfocada. Por ej, cuando Victoria Villarruel tira la afirmación que "El Estado tiene 8.000 desaparecidos con nombre y apellido" (o alguna otra afirmación semejante), está incluyendo tanto al desaparecido como al asesinado.... o sea, está empleando mal el término "desaparecidos". Cuando Ceferino Reato afirma que hubo 6.300 desaparecidos, se está refiriendo exclusivamente a la víctima desaparecida... o sea, está empleando bien el término de marras; pero su enfoque es inconsistente porque lo que quiere Reato es demostrar implícitamente que la ferocidad del gobierno militar victimizó solo a 6.300 personas, cuando la cantidad de personas calificadas de "víctimas" no se limita al desaparecido 
Significativamente en su libro "Los 70: La Década que Siempre Vuelve" Ceferino Reato contabiliza los asesinados, heridos y secuestrados de la guerrilla, además de sus colocaciones de artefactos explosivos (al parecer sin víctimas fatales).... pero el muy vivo de Reato no contabiliza de manera equivalente el número de secuestrados ilegales por el gobierno militar, o los destrozos ocasionados por los militares a civiles; solo se limita a desaparecidos y asesinados (sin siquiera dignarse a incluir los sobrevivientes). Y eso luego de criticar los errores de criterio en las ejecuciones sumarias que tiene el Estado para con las víctimas del gobierno militar, incluyendo víctimas que no son....... obviamente Reato no ejerce la misma crítica para los laxos criterios que usa el CELTYV en su conteo de víctimas de la guerrilla
De hecho, cuando Victoria Villarruel habla de "17.000 víctimas de Montoneros y ERP", ahí le mete todas las variables habidas y por haber: desde personas secuestradas por la guerrilla hasta personas insultadas o amenazadas ¿Entonces cómo va la cosa? ¿De qué tenemos que discutir al final del día? ¿Nos enfocamos únicamente en los desaparecidos? ¿Incluimos a los asesinados? ¿Incluimos a los sobrevivientes? ¿Incluimos a los detenidos del PEN? ¿Incluimos a los que fueron insultados por los milicos? Si Villarruel incluye al sobreviviente de un secuestro para su conteo de víctimas de la guerrilla ¿Por qué no hace lo mismo con las víctimas del gobierno militar? ¿O ahí no vale contabilizar los secuestrados ilegalmente por el gobierno militar?  Como verán, no hay un enfoque consistente para hablar de estos temas. Solo les importa a cada grupo tirarse tomates entre sí, enredándose en discusiones donde no siempre queda claro de qué están hablando específicamente
Por nuestra parte, asumimos que el concepto de "desaparecido" puede generar confusión cuando hablamos, por ejemplo, de las más de 700 personas sin denunciar de la fuente de Vilas. No sabemos si son "desaparecidos" estrictamente: si no denunciaron, no lo sabemos. Pero ¿Qué otro nombre le podemos asignar? ¿"persona sin denunciar"? es un término más apropiado, aunque más larguito

Ahora, de acuerdo a la evidencia (innominada) que presentamos en el primer punto ¿Podemos concluir de manera categórica, infalible que los desaparecidos son 20 mil?? En mi modesto criterio: NO
A mi, que escribí este gigantesco artículo, me gustaría que existieran más fuentes innominadas todavía (o nominadas si existiera la posibilidad). No conocemos por ejemplo, cuántos desaparecidos anuales hubo, ya que Clavel y Flouret en sus respectivas hojas hablan "por segmentos": de 1975 a 1979. No sabemos si en 1976 desaparecieron 15 mil y en el resto de los años 5 mil, o si hubo 9 mil desaparecidos en 1976 y 11 mil en los restantes. Desconocemos. Como tampoco podemos precisar los testimonios con cifras redondeadas, tales son las listas de detenidos de La Perla. Todavía no me decido si las pruebas indiciarias del Documento Final conforman una presunción probable o una presunción violenta. Entre otras cuestiones. TODAVÍA NO ES INFALIBLE LA EVIDENCIA PRESENTADA, todavía faltan más piezas para que el rompecabezas luzca integral, afinado
Si yo elijo quedarme con la cifra de 20 mil, es porque aún con la evidencia imperfecta, el nominalismo no puede resolver coherentemente cómo refutar varias de estas piezas probatorias. El nominalismo no puede refutar el número de Vilas, ni el número de Vergez, ni puede explicar la "coincidencia" de cifras altas entre el Documento Final, el caso Clavel y el caso Flouret (y ya puestos, el de Kevin Mullen), ni puede refutar otras fuentes y planteos. En ese sentido, la evidencia innominada imperfecta es más adecuada como posición epistemológica para mí, que el nominalismo con su falsa pretensión de seguridad. Pero mi actitud, como persona que quiere ser racional, es aceptar que la evidencia es falible. Y que puede ser destruida: o bien con otras fuentes innominadas que se opongan a lo que presenté, o bien con interpretaciones de mis fuentes que las invaliden, o si los negacionistas afilan sus argumentos a favor del nominalismo. Como eso no ha pasado hasta ahora, no es arbitrario ni terraplanista que yo me quede con el número provisional de 20.000. Que la evidencia que expuse sea falible no significa que no sea válida por el momento. Más bien son los negacionistas quienes deben explicar por qué eligen quedarse con la postura nominalista, considerando las problemáticas que acarrea esa posición
También aclaro una cosa por si no quedó lo suficientemente claro: este posteo puede ser refutado. No es que me la doy de genio revelador. Alguien serio puede venir a refutarme todo lo que escribí, eso está perfecto. Lo que no puede hacer NADIE es venir a pretender refutarme con excusas nominalistas que carecen de sentido. Una cosa es que venga alguien a decirme "Mirá, tu conclusión de la cifra es errada porque las fuentes que presentaste no son confiables" o "vos interpretaste mal una fuente, entendiste mal una fuente" o "esas fuentes que presentás no son primarias como vos crees" o "no hay suficientes fuentes para llegar a esa conclusión"; esa clase de argumentos son atendibles. Pero otra cosa distinta es decir "tu conclusión es errada porque no tenés la lista con nombre y apellido". El argumento nominalista no tiene cabida aquí..... salvo que esa persona me logre demostrar que el nominalismo es una posición epistemológicamente consistente
También es loable que haya gente que desconfíe de algunas fuentes y no de otras, lo que fragmenta el caudal no denunciado. Alguien me podría decir "No confío en la cifra de 20.000 porque no tomo como válida las fuentes de Flouret y Clavel". Pero esa persona podría validar la fuente de Acdel Vilas; por tanto aunque no crea que existan 20.000, SI se puede creer que hay un caudal de víctimas (muertos o sobrevivientes) que no denunciaron
Este posteo, por muy largo que resulte, no es completo. Es solo la contribución de una única persona que busca información como puede, muchas veces sin acceder a otros archivos que son importantes para clarificar (ya sea porque el archivo no se encuentra en internet, porque son datos confidenciales, etc). Por lo que cualquier interesado con los conocimientos necesarios, será susceptible de ampliar y/o corregir el posteo


***Bonus Track: BASTA DE RETRASADOS MENTALES PROGRESISTAS (una crítica mía a tontitos como Rebord, Martin Kohan, Mauro Brissio y otros pelotuditos)

Estoy hasta los huevos de escuchar gente que intenta refutar a los negacionistas...... Y LOS REFUTA PARA EL ORTO. Me va a agarrar Sida de tantas pelotudeces que dicen los "progres" en su intento de desmentir a los chantas de Reato, Villarruel, Laje, etc.

Por favor: si van refutar, HÁGANLO BIEN. Necesitan muchas fuentes en la mano, necesitan romperles el ojete a los negacionistas con fuentes, y defendiendo bien las fuentes "innominadas". Y sobre todo, necesitan conocer bien a los negacionistas, necesitan conocer cuáles son sus puntos flacos, cuáles son sus puntos fuertes, etc.

Primero, acepten las batallas perdidas: la cifra de 30 mil desaparecidos NO VA MÁS. No hay fuentes que acrediten eso, y lo único que hacen es darle de comer a los negacionistas con su obstinación ridícula

Segundo, acepten las batallas que pueden ganar fácilmente: la cifra de desaparecidos es más alta que lo que dicen los negacionistas (aunque no llegue a 30 mil, sino acorde a los 15 mil a 19 mil); y la cifra de víctimas totales es enorme (en niveles no tan distantes a la dictadura de Pinochet)

Tercero: hay que atacar donde a los negacionistas más les duele. A los negacionistas NO LES IMPORTA LA CIFRA DE DESAPARECIDOS, SINO LA CIFRA DE COMBATIENTES. Tanto les importa..... que ni Victoria Villarruel ni Ceferino Reato te hablan de ese tema. PORQUE NO LES CONVIENE

Cuarto: dejen esa tontería de "hayan sido 8 mil o 30 mil es terrible igual, no importa el número", porque dan a entender que les entró la bala. Es evidente que SI les importa a ustedes, porque de lo contrario no hubieran concentrado la discusión en esta estupidez. Repito una vez más: la discusión más importante que debería imponerse es la de la cifra de combatientes, no la de desaparecidos . Pero nunca quisieron destruir a los derechistas con ese debate, sino con el de la cifra de desaparecidos. Y ahí perdieron ustedes, porque las fuentes no dan 30 mil desaparecidos

A ellos no les conviene que sepamos que Montoneros y ERP no superaban los 2.000 combatientes para 1975. ESA ES LA VERDADERA "BATALLA CULTURAL" QUE DEBE DARSE. Esa es la batalla que los negacionistas más temen y la que culminaría con su derrota cuasi-definitiva


En cambio, lo que tenemos ahora mismo es un nivel de idiotez mental-cultural asqueroso, donde se intenta "refutar" a los negacionistas con argumentos tan rematadamente malos que me dan vergüenza ajena

Tenemos el siguiente ejemplo, donde Rebord defiende el número de 30 mil desaparecidos con unos argumentos patéticos y tristísimos (minuto 19:23)



¿En serio vamos a convencer a la gente diciendo imbecilidades como "la cifra de 30 mil es una denuncia activa", "la cifra de 30 mil es un símbolo", "los 30 mil son una identidad"? Mamita pollo

Victoria Villarruel se cagaría de risa con esos argumentos.... y yo también me río para no llorar

Hay otros sujetos igual de bobos pero un "poquito" (ojo, un poquito nomás) más cuerdos como el militante kirchnerista Mauro Brissio, que intenta ofrecer algunos pseudo-argumentos consistentes en Twitter. Lamentablemente peca de excesivo simplismo (escasas fuentes), hace suposiciones erróneas, y continúa con la cifra de 30 mil cuando no le da el cuero para sostenerla (incluye inapropiadamente a sobrevivientes registrados)


Y lo de Kohan es igual de triste que Rebord

A las madres y abuelas de Plaza de Mayo también hay que jubilarlas en serio. Todo bien con ellas, no niego sus méritos pasados y sus contribuciones...... pero en la actualidad, son incapaces de poder ganarle la discusión a un apologismo más inteligente y agresivo. Si Estela de Carlotto se pusiera a discutir con Ceferino Reato o Victoria Villarruel, seguro perdería el debate por goleada.... y no porque estos apologistas estafadores tengan razón, sino porque Carlotto no tiene ni puta idea de cómo se gana la discusión en estos momentos. Quedó anquilosada en el pasado discursivo, no tiene fuentes en la mano y cree que con puro cariño de abuelita va a llegarle a las nuevas generaciones

No las desprecio. De hecho a mi me parece adorable Nora Cortiñas.... pero no es útil arrastrarlas hacia un nuevo milenio que no entienden, y ya son muy grandes para aprenderlo. Dudo mucho que Nora Cortiñas se aprenda a sus 90 años las quichicientas fuentes sobre la cifra de combatientes de Montoneros y ERP para dar una "pelea" contra el apologismo. Y evidentemente que a Cortiñas poco le interesaría ese tipo de discusiones, porque su "chip mental" es otro

En cualquier caso, las fuentes militares NO LE DAN LA RAZÓN A LOS APOLOGISTAS. Pero es increíble que ni Rebord, ni Martín Kohan, ni las madres de Plaza de Mayo, hagan uso de esas fuentes que les darían la delantera


BASTA, BASTA!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! NO AUTORIZO A QUE EXISTAN RETRASADOS MENTALES PROGRESISTAS QUE HABLEN SIN SABER DE ESTOS TEMAS!!!!!!

No todas son pálidas. Algunos autores como Daniel Feierstein, aunque insista en la cifra de 30 mil, no obstante es el más serio al momento de argumentar. Recomiendo las lecturas de Feierstein pese a mi objeción sobre la cifra. Al menos Feierstein conoce la fuente de Acdel Vilas, y sabe que el número de "desaparecidos" incluye los sobrevivientes no registrados


Conclusión:
La cifra de desaparecidos más alta que el registro estatal, en torno a los 20.000, se puede justificar con fuentes absolutamente relevantes y en muchos casos casi irrefutables. La estimación no es una entelequía, es un reflejo realista de hechos documentados o testimoniados. Hay sin embargo material que se refiere a detenidos sin conocerse si murieron o son sobrevivientes que no informaron su situación; por ende el concepto de “desaparecido” aquí debe incluir a estos posibles sobrevivientes no registrados. Los apologistas dogmáticamente rechazan estas pruebas sin ningún motivo académico, guiándose por sus propias ideologías sectarias. Incluso hay apologistas que se contradicen en sus investigaciones personales al tomar un tipo de fuentes (las innominadas) que rechazan aquí
No hay riesgo de duplicación excesiva en la investigación con los datos del material testimonial y los datos cronológicos. La existencia de varios lugares de enterramientos (por provincia) y la utilización de 2 métodos diferentes de eliminación de cadáveres (los vuelos de la muerte y los enterramientos), fue un error de los militares que ayuda a la investigación, al poder compartimentarlos y evitar una duplicación excesiva de prisioneros, lo que acrecienta el nivel probatorio de una cifra de víctimas más alta que la que tiene el Estado
La evidencia disponible no permite fundamentar el número de 30.000 desaparecidos, sino un número menor cercano a los 20.000
La palabra "desaparecido" en este contexto, es semánticamente confusa por su precisión, ya que aquí no estamos hablando exclusivamente de personas muertas sin registrar (y cuyos restos desaparecidos), sino también hablamos de sobrevivientes sin registrar. Incluso sin conocer las proporciones entre ambas (debido a las limitaciones de las fuentes). Considero conveniente eliminar el vocablo "desaparecido" y adoptar otras formulas que abarquen las variables (ejemplo: "persona sin denunciar")
Y los que continúen intentando negar la evidencia, habría que preguntarles algunas cosas: la declaración de Vilas ¿La inventé yo? ¿Yo le puse una pistola en la cabeza a Vilas para que escribiera en su diario un número más alto que el registro estatal? ¿Yo lo obligué a Etchecolatz a que publicara esa nómina en su libro? ¿Obligué a Flouret a que dijera lo que dijo? ¿Yo le puse la pistola al demente que escribió el Documento Final? ¿Acdel Vilas o Miguel Etchecolatz escribieron esas cosas para hacerle un favor a Hebe de Bonafini auto-incriminándose con exageraciones??? Tal vez Estela de Carlotto llamó por teléfono a Etchecolatz para obligarle a inventar una nómina falseada, y Etchecolatz tan amablemente accedió por puro gusto. Y así podemos seguir. Es obligación del negacionista demostrar la inutilidad de estas fuentes, por qué no sirven, etc. Pero lamentablemente para ellos, este material SI es válido 
Además ¿Quién puede contradecir a Vergez, Clavel o Vilas sobre lo que dijeron? Si Nicolás Márquez o Victoria Villarruel quisieran derribar la validez de lo que escribió Acdel Vilas en su diario, o Héctor Vergez en su libro; habría que preguntarles a Márquez y Villarruel ¿Estuvieron allí? ¿Villarruel fue una torturadora de Famaillá? ¿Márquez fue un gendarme? ¿Estuvieron en el operativo de Vergez? ¿Tuvieron mejor acceso a la información? ¿Quién de estos apologistas puede contradecir lo que Vilas registró de su propio centro clandestino? ¿Con qué autoridad van a contradecirle?? Villarruel, Márquez, Laje, Reato van a tener que buscar una explicación satisfactoria a ese punto, y a otros 
Apelar a la CONADEP o el RUVTE como falacia de autoridad no aporta nada nuevo ni desafiante a este artículo, por la solidez de la postura innominada frente a la nominada. Además que aplica los criterios del anterior párrafo: ni Sábato ni Meijide son fuentes primarias, no tienen autoridad para refutar a Flouret o Vilas porque no estuvieron allí en el momento de los hechos. Con la notable diferencia que Sábato o Meijide tienen más humildad que el apologismo promedio y no han pretendido ser autoridad
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escrito por Juan Pablo Lopez Maggi



Una vez más, en este enlace tenemos una explicación más "jurídica" de la valoración de algunas de las pruebas presentadas:

https://spineoff.blogspot.com/2020/06/anexo-valoracion-de-la-evidencia.html 



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Comentarios

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  2. Aqui mas info
    http://pajarorojo.com.ar/?p=30809
    http://www.infonews.com/nota/306723/por-que-los-desaparecidos-son-30-000-la
    https://m.perfil.com/noticias/politica/carta-de-eduardo-luis-duhalde-a-fernandez-meijide-20090804-0037.phtml?rd=1

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  3. Aqui un importante documento que hace referencia a 27.000 casos de desaparecidos
    https://foia.state.gov/scripts/pdf.js/web/viewer.html?File=\DOCUMENTS\Argentina_Aug2018\O-2016-16244F20-23\DOC_0C06294937\C06294937.pdf#page=1

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  4. https://mobile.twitter.com/nataliavolosin/status/1225528696636919809
    https://mobile.twitter.com/Envido32/status/1109820439512186883
    https://mobile.twitter.com/Envido32/status/1109822083389886465
    https://www.pagina12.com.ar/diario/ultimas/subnotas/20-63612-2013-05-17.html
    https://m.perfil.com/noticias/columnistas/por-que-los-delitos-del-erp-no-son-de-lesa-humanidad.phtml?rd=1
    https://www.infobae.com/sociedad/2019/11/30/tres-mitos-a-desmontar-en-torno-a-la-identidad-politica-de-los-desaparecidos/?outputType=amp-type
    https://www.clarin.com/politica/reynaldo-bignone-ultimo-dictador-ordeno-destruir-toda-documentacion-desaparecidos_0_HJGZItp_f.html

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  5. Bla bla bla, los judíos de Ucrania ni de ningún otro país participaban de una -varias- organizaciones terroristas. No atacaron con acciones bélicas a gobiernos o estados con el fin de tomar el poder. ¿Que se deduce de tal afirmación? Que las familias de los terroristas argentinos sobrevivieron con sobrada suficiencia como para hacer la denuncia respectiva a partir de 1984 hasta hoy. ¿Cuáles serían los motivos para que una familia no denuncie la ausencia de uno de sus integrantes? Espero que el autor del post tenga suficiente imaginación. Quiero que se entienda, todos los delincuentes fabulan y se victimizan. Muchos de los N.N. registrados fueron descritos por guerrilleros, milicianos, TERRORISTAS; señores/as. Un número considerable de ellos que figuraban desaparecidos con nro de legajo en el informe de la CONADEP reaparecieron en la década menemista (y aún antes). Personas que habían ido al exilio, hace un par de años "apareció" un científico de Bariloche, la ministro de la CSJN Carmen Argibay Molina figuraba con DOS números de legajo diferentes en el Nunca Más de 1985. Hay más casos, algunos de La Noche de los Lápices tuvieron que ser "corregidos" y agregados a la lista de sobrevivientes. De hecho, el hermano de Claudia Falcone declaró a una periodista (Viviana Gotbato) que Claudia estaba viva y con identidad cambiada, hacia 1998. Podría hacer una lista algo extensa, pero basta que se entienda que hablamos de personas DELINCUENTES, con mentalidad de delincuentes y con la audacia de los delincuentes. Su mente no mensura lo ético y lo moral, alcanzar los objetivos de la revolución transforma en válido todo accionar o táctica. En un conflicto bélico, la primer víctima siempre fué la verdad. Y ya que hablamos de "la verdad"... tomar válido el testimonio de un ex-inteligencia militar CHILENO; es forzar ignorancia de que los militares de ambos países siempre albergaron profundos resentimientos y la hipótesis de conflicto fue bastante más cercana a una práctica que a una hipótesis. Tornar válidas todas las acusaciones realizadas por quienes se cagaron en la democracia, e intentaron instalar la revolución mediante el terror, es atentar contra el ideal de la justicia. Juzgar los excesos, claro que sí. Convalidar sin más todo lo esgrimido por un terrorista que -por ejemplo- vino de combatir en Nicaragua para instaurar la revolución sandinista, es pecar de pueril e ingenuo.

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    1. y los argumentos en serio??? Lo del documento de Arancibia Clavel, ya se aclaró que no es propagandístico, asi que no es válido lo que decís. Salvo que insinúes que Clavel le mentía a sus superiores..... además el secretario de Videla, Ricardo Flouret, también indica que las 20.000 vidas que se tomaron en la batalla fueron necesarias para salvar el país ¿Qué vas a decir ahí? Y el Documento Final ¿Quién lo escribió? ¿Fueron los "terroristas" los que escribieron ese documento??? Y los 75.000 de Francia como ejemplo ¿También fue el ERP o los Montoneros los que escribieron ese texto?? ¿Y los 1507 detenidos de Acdel Vilas??

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  6. q opinas de sto???
    "Durante el interrogatorio, según la CIA, el jefe montonero dijo que "en diciembre de 1975 los Montoneros tenían entre 7.000 y 10.000 miembros activos (combatientes) y unos 300.000 simpatizantes". Agregó que él y "Mario Firmenich eran todavía los lideres principales de Montoneros y que el tercero en liderazgo era Alberto Molinas Benuzzi, jefe nacional de propaganda", revelaron los cables"
    https://www.infobae.com/sociedad/2019/08/01/informe-secreto-segun-la-cia-montoneros-llego-a-tener-200-millones-de-dolares-ahorrados-en-1975/

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    1. lo expliqué en otro enlace, incluso lo expliqué en este mismo posteo, aunque de un modo distinto con el tema del Documento Final. Verás: si esa declaración de Quieto la hubiese dicho en 1973, o aun a principios de 1975, QUIZÁS y muuuuuuy quizás resulte creíble. Pero para finales de 1975 la guerrilla había sufrido todos los embates posibles: en Tucumán el ERP estaba aniquilado y su nuevo intento de montar un foco en el Cadillal terminó mal; Montoneros tampoco pudo instalar nada en el monte. En el intento de copamiento de Formosa, los Montoneros sufrieron una derrota a pesar que solo combatieron 33 personas (con un total de 41 miembros en la operación) y nunca más volvieron a emprender un ataque similar. Monte Chingólo otro fracaso que minó toda la capacidad militar del ERP. Desde 1976 en adelante, ni Montoneros ni ERP pudieron volver a emprender algo parecido a un intento de copamiento de cuarteles o un foco rural. La única operación grandilocuente fue la bomba que pusieron en la Policía en julio de 1976, y el ataque a Lambruschini en 1978; y eso son bombas, no un copamiento de unidad militar ni un foco guerrillero que haga suponer una mínima capacidad militar. Ahora ¿Cómo es posible que teniendo 7 mil miembros activos a finales de 1975, no hayan demostrado absolutamente NADA relevante? O esos 7 mil eran todos inútiles, o sencillamente no existieron 7 mil combatientes para finales de 1975 ni mucho antes. Además, los documentos administrativos que el ejército difundió en abril 1977 sobre la capacidad celular de Montoneros el año anterior indica, como mucho, como exageración, un máximo de 3 mil personas en 1976, de las cuales solamente 450 eran combatientes. Y no hay necesidad de mentir en los documentos administrativos, mientras que Quieto pudo mentir en el interrogatorio del ejército por propaganda, para desvirtuar la verdadera información que tenía, etc.

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  7. Min 39:20 el Teniente Ritchter admite que en el momento de mayor auge del ERP tuvo entre 70 y 250 combatientes en los montes de Tucuman descartando que estos hallan sido miles
    https://m.youtube.com/watch?v=4FQ2f0S_EPo
    https://www.theguardian.com/world/2016/aug/29/argentina-denial-dirty-war-genocide-mauricio-macri

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    1. Gracias por el video! En realidad, de acuerdo al informe interno de la guerrilla rural que reprodujo el libro "El Terrorismo en la Argentina" de 1979 (libro publicado por el Poder Ejecutivo para contrarrestar los efectos de la visita de la CIDH), la compañía de monte Ramón Rosa Jiménez tuvo este desempeño hasta mediados de 1975:

      -20 combatientes incursionaron en marzo de 1974

      -Tomaron Acheral (un pueblito que tendría poco más que media docena de efectivos policiales)

      -Se sumaron 10 personas más (no se sabe si estrictamente combatientes, porque desempeñaron tareas políticas en la zona)

      -Tras el fracaso de Catamarca, se redujeron a 18 combatientes

      -Entre septiembre y diciembre hubo un nuevo refuerzo de 10 combatientes, y se sumaron obreros y campesinos a la compañía, llegando a totalizar en 62 combatientes

      -Se produjeron 20 pedidos de baja

      -Iniciado el Operativo Independencia, y tras un par de semanas, la compañía tiene 35 combatientes permanentes

      -La compañía intenta un plan ambicioso para mayo de 1975: tomar el Lugar de Reunión de Detenidos "La escuelita" y liberar a los prisioneros; además de fusilar a Vilas y otros represores. Para ello se añaden refuerzos de otras provincias, llegando a su pico de 120 combatientes aprox. Ese mismo contingente tendría planeado atacar en la localidad de Los Sosa. Sin embargo, fracasa el plan antes de concretarse, por la confusión en la escuela de Manchalá que origina el combate y repliegue del ERP. No queda claro si finalmente usaron el contingente en Los Sosa

      El informe interno concluye a mediados de 1975 y no sabemos qué sucedió con el ERP posteriormente (el diario de Vilas anota un promedio 40-50 guerrilleros posterior a Manchalá). Sin embargo, hay un consenso en que el ERP tuvo mayor poder hasta esa fecha, ya que después el grupo sería totalmente aniquilado

      Por su parte, Acdel Vilas no es claro sobre la cantidad de combatientes: en su diario escribe que eran 600 combatientes, pero en un folleto escribe que eran 350. Posiblemente estas disparidades se deban al concepto mudadizo que él tenía sobre lo que era un "combatiente", o a las estimaciones iniciales antes de capturar el informe del ERP, etc. Sin embargo, es coherente en la narración de los combates sobre la escasa cantidad de guerrilleros; al punto de coincidir con el informe interno de la guerrilla que en Manchalá hubo 117 combatientes

      En fin, el teniente Richter no está mintiendo aquí. Aunque tira números más elevados (de 70 a 200 combatientes), esto tal vez se deba a su subjetividad en vez de una intención de inflar los números. En cualquier caso, su subjetividad es compatible con la realidad: no llegaban a 200 combatientes. Imagino el terror que debieron sentir Cecilia Pando, Luis Labraña, Silvia Ibarzábal cuando Richter abrió la boca y les recordó la "enormidad" de la compañía de monte

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  8. Gran trabajo, al que me gustaría abordar con mayor cantidad de herramientas. Sin embargo, y bajo la premisa de que el terror existió en el país, resulta limitado al campo histórico el número final de víctimas de la ilegal violencia estatal. Desde mi particular mirada, las consecuencias negativas económicas y políticas de aquel período perduran en la sociedad, la que no ha logrado reencausar el pacto que siente las bases de las reglas que debemos respetar sin cuestionamientos. Permítame felicitarlo por el trabajo realizado, el que seguramente es perfectible y del cuál puedo aprender, cuestionar y discrepar sin perder de vista su calidad. Saludos

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  9. Excelente material. Merece gozar de una enorme difusión, sobre todo porque la versión de los "apologistas" parece que se está convirtiendo en la de "sentido común" en especial entre los menores de 25 años. Una pequeña observación después del elogio. Decís que la cifra real de desaparecidos se debería ubicar más cerca de los 20 mil que de los 30. Sin embargo, veo que llegaste a ese número haciendo los cálculos sobre sólo algunos de los centros clandestinos de detención. Por ejemplo, en mi Provincia (Santa Fe) sólo contabilizaste uno de Rosario. Sin embargo, hubo muchísimos más. Sólo en la ciudad de Santa Fe (capital), existían: el departamento de Informaciones de la Policía de la Provincia de Santa Fe. la Guarda de Infantería Reforzada, las Comisarías 1, 3 y 4 e incluso algunos sectores de la misma cárcel de Coronda funcionaron como tal. En varios hubo muertos documentados: en la Comisaría 4 Alicia Rodríguez, caso que fundó la condena del comisario Facino, que era su jefe; Juan Chazarreta en la 1° (caso aún pendiente de juicio), Juan Orlando Navarro en la Comisaría 3; Luis Alberto Hormaeche y Raúl Manuel San Martín en la Cárcel de Coronda. Ninguno de ellos pasó por centros de Capital o Provinica de Buenos Aires. Teniendo presente esto, que lejos de ser esos todos los de la provincia, había varios más en el interior, es decir fuera de Santa Fe capital y de Rosario, que con respecto a algunas provincias no has hecho cómputo alguno, y que obviamente, el número de muertos real debe ser superior a los que se pueden documentar en juicio, ¿No es posible llegar a la conclusión de que la cifra real sí se puede acercar a los 30 mil?

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  10. Esta claro, no van a reconocer los demas cuerpo debido al tratado de san jose, si no hay cuerpo no hay asesino.

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  11. Hola.
    Algunos comentarios y preguntas sobre lo que leí en este artículo.
    Me interesa el tema. Mi objetivo principal es acercarme a la “verdad” lo más posible.
    Por cierto, la redacción es buena, pero los insultos y demás agravios desentonan.

    -¿Es correcto creer en la cifra del Estado o el Nunca Más como prueba exclusiva de la cantidad de desaparecidos?? Comparación con otros casos históricos.



    • Sábato: 30.000. Meijide: 15.000. Mignone: 20.000. Entonces, ¿estos números se concluyen a partir de la opinión de Sábato (si entendí bien, recogida en un libro escrito por un español, lo que significaría que en realidad no es la opinión de Sábato sino lo que un escritor escribió acerca de la opinión de Sábato), de que existía un “ambiente de terror” o “miedo” en la época en que se realizó la investigación, y en la negación de algunas personas a realizar las denuncias (negación que, entiendo, dice Sábato “personalmente pudimos comprobar”)? Pero nada de esto constituye prueba, es opinión. Por supuesto, opinión absolutamente razonable, pero sin evidencia respaldatoria.

    • Existen otros pasajes donde alguien afirma o niega algo oralmente. En mi opinión, no todas las palabras habladas tienen la misma validez, pero sin evidencia siguen siendo palabras.

    • Cuando escriben “De la masacre de Babi Yar faltan ¡¡¡17 mil nombres!!!”, me surgió la siguiente pregunta: ¿por qué tendría mayor validez el documento administrativo interno de la Einsatzgruppen sobre la masacre de Babi Yar, que la recopilación de nombres y apellidos realizada por las fundaciones del holocausto?


    -¿Hay pruebas que fueron asesinadas y desaparecidas 30.000 personas? ¿Existe evidencia de un número más alto de desaparecidos que los registrados por el Estado??

    • Adel Vilas habla de tres grupos de detenidos. 1- Liberados, 2- Enviados a la Justicia Federal de Tucumán y 3- Enviados a la Cárcel General Urquiza. Pero, de éstos últimos, “…, muchos eran retenidos en Famaillá, procediéndose a su interrogatorio hasta que no fueran de más utilidad”. ¿Esto quiere decir que los ejecutaban?

    • Más arriba también dicen que la separación en tres grupos obedece a que “…los más peligrosos e importantes nunca llegaran a la Cárcel General Urquiza”. ¿Este grupo de “los más peligrosos e importantes” entonces serían los que resultaban retenidos en Famaillá? ¿Eran más peligrosos que los enviados a la Justicia Federal, que poseían explosivos y armas de guerra?


    • Respecto de los 1507 detenidos en Famaillá, se incluyen desaparecidos, asesinados y sobrevivientes. ¿Los asesinados y sobrevivientes los contabilizan dentro de los 20.000 “desaparecidos”?

    • En su reporte, Enrique Arancibia Clavel se despide como Luis Felipe Alemparte Díaz. ¿Un seudónimo?

    • “Desde la lógica de la no-contradicción, no existe el concepto de “no mentir” y “no decir la verdad” al mismo tiempo. Alguna de las dos cosas tiene que hacer: o mentir, o decir la verdad”. Entonces, ¿la omisión la considerarían mentira?

    • De los aproximadamente 20.000 (según Clavel, Flouret, etc.), ¿cuántos fueron “víctimas legales” (asesinados en combate, etc.) y cuántos “víctimas ilegales” (torturados, etc.)?

    • ¿Cómo estar seguros que la cifra dada por el periodista español que entrevistó a Camps es cierta?

    • No encontré nada sobre sobrevivientes de los “vuelos de la muerte”. ¿Cómo es posible? Si tienen alguna información, se los agradezco.

    • Respecto de la discrepancia en el número de terroristas combatientes, una explicación (mucho) menos probable es que haya habido un reclutamiento masivo (?).

    • ¿De dónde surge el número de 5-15 integrantes para cada “célula”?

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  12. • Respecto de los gráficos de fines de febrero de 1977, firmados por el jefe de inteligencia Carlos Martínez, me surgió una duda cuando contabilizan. Yo entiendo que los porcentajes citados indican lo que fue aniquilado y el número de “efectivos disponibles” son los que quedan aún vivos. En ese caso, el número total de “efectivos disponibles” (para el combate, supongo) sería de 5645 (“Solo con estos números (sin sumar los otros casilleros que son poco legibles)”). Ustedes lo llevan aproximadamente a 6.000, haciendo algunas adiciones razonables. Tomaré este número de ahora en más.

    • No entiendo por qué dicen “…entonces el 100% es 9.200 personas”, refiriéndose al total de montoneros para 1975. Yo entendí que los “efectivos disponibles” (para el combate, supongo) serían (aproximadamente) 6.000 para abril de 1977. Esos 6.000 serían el 25%, lo que arroja un total de 24.000 combatientes montoneros en 1975.

    • Esto es menor, pero…respecto de Elena Holmberg, (según Wikipedia) su cadáver fue encontrado en el río Luján. Pero, ¿los “vuelos de la muerte” no se llevaban a cabo sobre el río de La Plata?

    • ¿Tienen alguna idea de la cantidad de detenidos que resultaban, finalmente, liberados? Me refiero a todo el período (1975-1984) y todo el territorio nacional.

    • Respecto del oficial que habla con Kevin Mullen, ¿es un “oficial superior del ejército” o “se desconoce su jerarquía y acceso a la información”? No pueden ser las dos.
    • Respecto de que “en agosto de 1976 el gobierno militar permitió la entrada de un máximo de 40 habeas corpus para la Justicia, de naturaleza referida a desapariciones”. ¿Cuántos habeas corpus se presentaron por esa época, por día?

    • Respecto de los “30.000 fanáticos que pusieron en jaque al país”, según Díaz Bessone, ¿no se refiere al período 1959-1978? Esta cifra tomaría sentido en caso de considerar en 24.000 a los montoneros y 6.000 al ERP (desestimando las otras organizaciones por ser menores), aproximadamente.

    • Respecto de los espías de la "Operación México", el número concuerda con los 24.000 que calculé más arriba (claro que puedo haber malinterpretado el texto).


    -La duplicación de prisioneros en la investigación.

    • Sobre la comparación con Babi Yar. Creo que puede ser entendida como una observación “a favor” de la evidencia de lo ocurrido en Argentina, o como una observación “en contra” de la evidencia del Holocausto.

    • “… la cifra de 20.000 víctimas de la dictadura argentina…”. Respecto de esto, técnicamente la “dictadura argentina” comienza el 24 de Marzo de 1976 y finaliza el 10 de Diciembre de 1983, y las víctimas que tratan en el artículo abarcan el período 1975-1984, ¿cierto?

    • Esto aparte del quid de la cuestión. Cuando dicen “…evitó el comunismo cubano y esas pavadas”, ¿creés que es falso que los terroristas quisieran instalar un gobierno comunista en Argentina?

    • “…, entonces solo 1 de cada 17 de esos "terroristas" mataba a alguien…”. Es posible. Habría que comparar la cronología de los asesinatos realizados por los terroristas, con la cronología de los terroristas desaparecidos y muertos. Otra posibilidad es que fueran muy malos “soldados” o poseyeran armamento escaso y/o defectuoso.

    • Otra versión de la remera "No fueron 30.000"....... con dos buenos motivos para comprarla..... ------------> ¡Ja!

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  13. -¿Es cierto que Luis Labraña inventó la cifra de 30.000 desaparecidos?


    • “Labraña no es autoridad máxima de nada relacionado con la cifra de desaparecidos, ni siquiera es autoridad máxima de algo relacionado con Montoneros, asi que su palabra no es una fuente primaria ni mucho menos”. ¿En qué se basan para hacer esta afirmación? ¿En el rango de Labraña dentro de la organización terrorista?
    • “Labraña se exilió cuando el número YA existía un año atrás, así que no pudo inventar un número que ya estaba circulando”. En realidad, sí pudo inventarlo. Aunque es cierto que es extremadamente improbable que no lo haya escuchado antes.

    • ¿Por qué el afiche catalán del mundial 78 desmiente a Meijide? Puede ser un invento el afiche.

    • ¿La evidencia de los viajes al exterior de Madres de Plaza de Mayo es un e-mail enviado por esa organización? ¿Ningún pasaje, recibo, foto, testigo independiente?

    • Respecto de las declaraciones de Maggio, de nuevo, estamos hablando de lo que un periodista estadounidense dice que Maggio dijo. ¿No hay una grabación o alguna prueba contundente de la entrevista? Por otro lado, en el documento del testimonio, la fecha de 1978 (en la primera hoja) se sigue de un signo de interrogación. Parece que no está confirmada.

    • ¡Insistan con el encuentro con Labraña! Si el tipo se desmiente, sería un golpe mortal al “negacionismo”. En caso de concretarla, graben la entrevista, por favor (aunque sea “a escondidas”).


    -¿Por qué Ceferino Reato rebaja la cifra de 8.961 denuncias del Nunca Más a 6.348 desaparecidos en su conteo?? Y la enorme cantidad de familiares sin denunciar.

    • Respecto de la definición de “desaparecido” que usan los “apologistas” es, estrictamente, correcta. Y, en pos de la verdad, debemos ser extremadamente precisos. Claro que no digo que lo hagan en pos de la verdad, pero nobleza obliga. Por otro lado, como dicen ustedes, creo que deberíamos hablar de víctimas.

    • Ya hice un comentario respecto del período abarcado. Si considerásemos el periodo 1975-1984, estaríamos hablando de crímenes cometidos por el Estado, incluyendo una dictadura militar (la mayor parte de ese período) y dos gobiernos democráticos, ¿correcto?

    • Un detalle. Cuando dicen ”…el registro estatal estima más de 16.000 sobrevivientes…”, creo que deberían corregirlo a 17.000 (3432 x 5 = 17.160).

    • “…creyendo que el registro individualizado es una verdad más "dura" o tangible que el estimativo, cuando lo cierto es que ambos (estimativo y registro individual) se basan en material documental y testimonial, por lo tanto ninguno es "mejor" o "peor" que el otro,…”. Acá discrepo levemente. Considero el registro individualizado (un poco) más “duro” que el estimativo por ser más preciso o detallista.

    -Conclusión.

    • Si bien el número 20.000 es muy convincente (por todo lo expuesto), creo que el de 15.000 es más acertado. En el “Documento final” se mencionan “15.000 combatientes” (en el apogeo de la guerrilla) y una proporción 1:0,5 entre denunciado/ no denunciado me parece más verosímil. Por supuesto, parece que, de una u otra manera, el número provisto por el Estado es (muy) menor al real.

    • Creo que una de las cuestiones más importantes es determinar cuántas víctimas fueron “legítimas y/o legales” y cuántas no. Por ejemplo, los muertos en enfrentamientos los considero víctimas legitimas/legales. Esos no deberían ser contabilizados como “desaparecidos”. Por otro lado, los muertos en “vuelos de la muerte” sí deberían ser contabilizados como “desaparecidos”.

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    1. te respondo algunos puntos porque otros los encontrás en el siguiente enlace, por ejemplo el tema de la cifra de miembros por células en el apartado del número de combatientes de Montoneros:

      https://zeldek.blogspot.com/2020/04/desmontando-el-negacionismo-de-la.html

      Otros puntos no los respondo en detalle, básicamente porque están respondidos en este posteo. Por ejemplo, cuando preguntás por qué se le creería más al documento nazi que las fundaciones del holocausto, eso está respondido en el debate epistemológico del último ítem. Es decir, el "dilema" es: ¿Le creemos a un documento, a un testimonio a pesar que no hemos presenciado el hecho? Responder afirmativa o negativamente ese planteo será crucial para ver si podemos escribir historia o no. Por ejemplo, no creo que hayas visto a San Martín cruzar los Andes, lo que hacés es "confiar" en las hojas de testimonio de época o las hojas de documento. La historia es una "ciencia" (no voy a entrar en el debate si es ciencia o no), que se basa en el criticismo (crítica de fuentes) y no en una realidad observable, porque no podemos volver al pasado y comprobar por nosotros mismos, ni se puede por ecuaciones matemáticas

      De hecho, si vos creyeras en las denuncias, te recuerdo que las denuncias son básicamente testimonios, y se someten al planteo del anterior párrafo

      Sobre la redacción: me encantaría ser más educado, en serio. Pero lamentablemente, llama un poquito más la atención así. Tenés el caso de Milei, por ejemplo, que dice cualquier cosa pero como grita posee su séquito que lo considera todopoderoso
      Te pido disculpas por eso, tendrás que pasar el mal trago de la redacción

      Lo de Sábato y su opinión, como vos decís es una opinión y jamás lo tomé como evidencia, ahí escribo expresamente que eso no refleja mi opinión. Solo quería expresar que ni siquiera los integrantes de la CONADEP sacralizaron el número de 8.960 denuncias, porque entendían que podía intentarse cuantificarse un número distinto con otros indicios. Incluso el libro "Nunca Más" relata (aunque sin pronunciarse al respecto) la metodología de la clave numérica de Club Atlético


      Caso Vilas: el general Vilas no especifica quiénes sobrevivieron ni quienes murieron en el centro clandestino. Lo que tenemos es: la cifra de muertos y sobrevivientes registrados por organismos privados o estatales, que son 769 casos hasta el 23 de marzo del 76. Y lo que dice Vilas: que solamente por la escuelita de Famaillá pasaron 1507 personas hasta el 18 de diciembre del 75 (hubo otros detenidos que no fueron a ese centro clandestino específico), lo que significa que hay muchos detenidos sin registrar por el Estado ¿Estos detenidos están vivos o muertos? No lo sabemos, asi que existe posibilidad que haya muchos sobrevivientes que nunca contaron su situación. Eso está contemplado en mi conclusión

      Luis Felipe Alemparte Díaz es su seudónimo, correcto

      Flouret no omite, sino que dice "Las 20.000 vidas tomadas en la batalla han sido necesarias para salvar el país". En el contexto de la conversación, se refiere a la "lucha antisubversiva". No especifica cuántos serían "muertos en combate", pero hay otras pistas sobre ese punto que indicás, por ejemplo el Documento Final habla de 2050 subversivos muertos en combate desde 1973 a 1979. Hay otro número recogido por Graciela Meijide en el libro "Las cifras de la guerra sucia" que se refieren a 1900 muertos en combate según el relevamiento de periódicos. Recuerde que la prensa reflejaba falsos enfrentamientos

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    2. Ramón Camps dijo al menos 2 veces que hubo 5.000 muertos, si bien no especificó las "duplicaciones". Cuando fue citado por Alfonsín para el procesamiento penal, se retractó de sus declaraciones. Hay que tener en cuenta que estaba citado y eso posiblemente motivó que negara lo que había dicho anteriormente 2 veces. Por eso, no es arbitrario de mi parte tomar lo que dijo inicialmente. Igualmente, no es la única prueba de una cifra mayor de muertos, y personalmente le he prestado más atención a la nómina de Etchecolatz que a la cifra de 5 mil de Camps. Ahora, en la causa judicial que cuelgo en el anexo "Sobre el número de desaparecidos" verás que de acuerdo a la investigación, en 8 centros clandestinos al mando de Camps hubo más de 1400 detenidos (el Circuito completo consta de 29 centros clandestinos)

      No entendí el tema de los sobrevivientes de los vuelos de la muerte: no hay sobrevivientes que fueron arrojadas al mar, eso sería convertirse en Superman. Lo que hubo fueron sobrevivientes de los centros clandestinos que testimoniaron la mecánica semanal de selección y traslado de prisioneros. También hubo algunos represores que contaron personalmente sus experiencias arrojando gente al mar. Por ejemplo el informe de la CADHU de 1980 trata el primer capítulo de la ESMA, y menciona los vuelos


      Gráficos de Martinez: los gráficos no especifican si los números debajo de los cuadritos son de efectivos disponibles o eliminados/detenidos. Yo interpreté como "disponibles", básicamente porque se intuye en los gráficos de los cuadritos. Por ejemplo Córdoba tiene el número "18" pero su gráfico está en oblicua que significa "muy fuerte desgaste y próxima a ser aniquilada". Es evidente que si mataron a 18 personas, no pueden tener el gráfico en oblicua. Así que interpreté que los números reflejan los disponibles. Si hacés la comparación con los tachados gráficos, vas a intuir lo mismo

      Los efectivos disponibles sumando los números que hay debajo de los cuadritos, es de 2.300 o más, sin contar los no-legibles. Pusiste que son "5645", creo que tipeaste mal

      Si esos gráficos los "volviéramos a cero", es decir si cada cuadrito le sumamos los porcentajes aniquilados, darían 6.000 aprox. Asi que repasando: 2300 tienen en 1977, y 6000 tenían en 1975 cuando empieza el aniquilamiento contemplado de los gráficos

      Pero Martinez en la prensa había dicho que Montoneros tenía un 25% de su capacidad, actuando en Buenos Aires, La Plata y el Arco Ribereño. Por eso, agrego a modo de simple comentario (sin tomarlo como evidencia) que pudieron tener 9.200 integrantes para 1975, ya que 2300 son los que tienen ahora en 1977
      Sobre Elena Holmberg: según testimonios, Holmberg estuvo en la ESMA. Pero nadie puede afirmar que ella haya sido estrictamente trasladada en los vuelos de la muerte. En cualquier caso, lo que importa son los 8.000 que menciona el jefe de unidad a Suárez Mason

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    3. Kevin Mullen: en el documento menciona que un oficial superior le comunicó. Pero no ofrece, por obvios motivos, el nombre. Asi que es una fuente secundaria

      Por el contexto de la narración, Díaz Bessone claramente se refiere a la guerrilla de los años 70

      Operación México: has malinterpretado los gráficos. Imaginate que si Montoneros tuvo 25.000 guerrilleros para 1974 y ahora solamente tienen 500 en exilio, eso significaría que murieron y fueron detenidos 24.500 personas. Sería muy conveniente para mi, porque refutaría fácilmente al apologismo. Pero no, no hay modo de interpretarlo así

      Sobre el terrorismo, los muertos por la guerrilla, etc. me remito al siguiente enlace:
      https://zeldek.blogspot.com/2020/04/desmontando-el-negacionismo-de-la.html


      Labraña:

      Que yo sepa, Labraña dejó de ser montonero en 1973. Eso lo dijo en el programa de Mauro Viale. O sea que ni pincha ni corta Labraña como "montonero de autoridad". Incluso suponiendo que Labraña fuese superior a Firmenich, tampoco serviría para demostrar su historia

      tenés razón en la posibilidad que lo inventara, pero lo tuvo que haber escuchado o, si no lo escuchó, su invento no tuvo gran genialidad. Me refería a eso, quizás tenga que corregir el posteo para que quede más claro

      El afiche catalán pertenece a una universidad o biblioteca de España. Aunque honestamente no me acuerdo el nombre. Por otro lado, Meijide queda desmentida por otras cosas. Con afiche o sin afiche, Meijide no tiene razón en esto

      Las madres de Plaza de Mayo sacaron una serie de libros donde cuentan su cronología. No tiene sentido pedirles "prueba" de sus viajes, como tampoco lo tendría que se lo pida a Labraña. Ellas no han negado que viajaron a Holanda en 1979, que es el año "clave" en el que se basa inicialmente Labraña. Si fuese mentira que viajaron ese año, eso empeora la historia de Labraña en vez de mejorarla

      Horacio Maggio se fugó de la ESMA en 1978 y fue asesinado el mismo año por la patota del centro clandestino que lo encontró. La fecha exacta no se sabrá, pero tuvo que ser 1978 porque Maggio no sobrevivió al 79. No hay grabación de la entrevista ni hace falta, porque se puede corroborar con otros elementos el fraude de Labraña, como el informe de Amnistía Internacional o la revista COSPA

      No pasaría mucho si Labraña admitiera que mintió. Seguramente encontraría una excusa al estilo "Mentí para que se investigara más", y seguramente muchos "negacionistas" insistirían que de todas maneras no están los nombres y apellidos de los 20 mil o los 30 mil (lo cual es cierto)

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    4. Sobre la precisión de las denuncias: cuando una persona denuncia la desaparición de otra, lo que va a hacer es narrarnos lo que sucedió con esa persona en específica. Nada tiene que ver con las masas de gente de los centros clandestinos, sus registros, sus vuelos semanales, etc.. No se trataría de precisión porque son dos niveles distintos de discusión: uno individualiza, el otro narraría mecánicas y dinámicas de los centros clandestinos. En todo caso, aplica los criterios y ejemplos de los documentos nazis VS los números registrados de las fundaciones

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    5. Post Data: hasta la página oficial de Amnistía Internacional menciona la visita de madres de Plaza de Mayo en 1979 a Holanda:

      https://www.amnesty.nl/encyclopedie/dwaze-moeders-argentinie

      No se duda que las madres fueron en 1979 al país bajo, y eso funcionaría como punto a favor de Labraña si se quiere. Lo cierto, es que ANTES de esa fecha, circulaba la cifra de 30.000 desaparecidos; sea correcto o no ese número pero circulaba

      Pero no viajaron las madres de Plaza de Mayo a Holanda en 1983. Labraña tal vez se confunda con la visita que hicieron en 1984, donde hay fotos al respecto:

      https://commons.m.wikimedia.org/wiki/File:Stille_tocht_dwaze_moeders_in_Den_Haag_met_Argentijnse_dwaze_moeders_Argenti,_Bestanddeelnr_933-1497.jpg

      Sobre Ramón Camps, una cosa que me olvidé decir: la primera vez que Camps confesó los 5.000, fue en periodo dictatorial a principios de enero de 1983 si mal no recuerdo o un poco más tarde. De haber sido mentira, Camps habría negado esas declaraciones en el mismo periodo dictatorial, donde podría haber tenido mayor difusión su palabra negatoria con los recursos estatales propagandísticos todavía en manos de los militares. Solo con la llegada de Alfonsín tuvo un poco más de prudencia al negar

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    6. Interesante. Muchas gracias por tus respuestas. Feliz año nuevo!

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  14. hola!! muy bueno este blog. Me gusta la objetividad que tratas de demostrar (sé que es dificil, pero la verdad debe prevalecer siempre). Ahora, he leído algunos libros, entre ellos más específicamente el de Diego Mazzieri: "Ni yanquis ni marxistas, peronistas" donde hace un repaso doctrinario e histórico desde el peronismo. En dicho libro se reivindica la figura de Isabel Perón y su tesis principal es que la subversión contra dicho gobierno peronista fue por "izqierda" (Guerrillas) y por "derecha" (los sectores militares más gorilas), que en todo caso ambos (las cúpulas) respondían a intereses extranjeros (llamese Inglaterra y demás). O sea, hubo un solo demonio con dos tridentes. En él se argumenta que (y esto es lo que me interesa que desarrolles en algún mometo) que "triple A" fue un operativo de las tres armas (FF.AA), no del peronismo y López Rega como se sostiene (aunque admite que López pudo haberse "prestado", pero que no dirigía nada, no era la cabeza de la misma). En fin, si podés en algún momento mirate ese libro (el cual tiene una mirada muy diferente a muchos), sobre todo cuando habla de la Triple A y con el tiempo poder hacer un artículo o una simple respuesta con respecto a ello: ¿La triple A un operativo subversivo del ejército para dar clima de desestabilización institucional y llevar a un golpe, respondiendo a otros intereses que luego Martínez de Oz lo plasmaría'? ¿ o es una oparación parapolicial llevada a cabo por López Rega e intelectualzado por Perón antes de morir? Desde ya muchgas gracias por leer esto y, también de mi parte, te doy las gracias por este trabajo de investigación histórica que haces....

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    1. Saludos! de la Triple A lamentablemente conozco muy poco para decir gran cosa, y de hecho en mi blog prácticamente no he tratado el tema; tal vez porque los apologistas más importantes como Nicolás Márquez o Victoria Villarruel no se meten mucho con ese grupo, no es del interés de ellos y por tanto yo no me he focalizado en eso tampoco. Solo leí algunos artículos como el siguiente:

      http://www.elortiba.org/old/opind.html#Rosendo_Fraga,_un_defensor_de_los_valores_tradicionales_de_La_Naci%C3%B3n

      y este PDF:

      https://es.scribd.com/document/186518776/Marcos-Taire

      Allí el periodista dice algo que estás comentando vos: que la mitad de los operativos de la "Triple A" o los comandos de la derecha (por ejemplo la CNU) eran realizados por efectivos del ejército, para "sacudir" a la opinión pública de que tenía que imponerse el orden, que el ejército tenía que intervenir en la seguridad pública, para "terminar" con el desorden en las fábricas (con sus movilizaciones), en las universidades (con sus tomas de facultad), o con el terrorismo (obviamente después los militares solo destruyeron al "terrorismo" y "subversión" de izquierda; a la derecha no la tocaron). Como un artículo de prensa es una "fuente secundaria", no garantizo que sea verdad o no, porque no investigué con fuentes "de primera mano". Aunque Marcos Taire (el escritor de la nota), me parece bastante serio dentro de todo. Creo que escribió un libro al respecto inconseguible sobre el tema

      El problema además es que en internet se consigue muchas cosas, pero no todo. Y esto aplica no solo a la Triple A, sino a otras que SI he escrito en mi blog. Te doy un ejemplo sencillo: en internet no conseguís la lista de sobrevivientes de los centros clandestinos fechados por año, ni siquiera una lista genérica. Para mi, hubiese sido importante conseguir esa lista para resolver algunos problemas con las fuentes, como el caso de los gráficos de Carlos Martínez. Para seguir con el ejemplo, una vez mandé un mensaje a la página oficial en Facebook de "La escuelita de Famaillá" (página que tiene una tilde de verificación). Les pregunté cuántos sobrevivientes registrados hubo en ese centro clandestino para contrastarlo con la fuente de Acdel Vilas sobre sus 1507 detenidos. Me respondieron que no conocían el dato.... y se supone que ellos integran ese espacio de memoria y deberían saber más que yo del tema. Pero no lo sabían en ese momento

      También mandé un e-mail al espacio de memoria del Servicio de Informaciones de Rosario para preguntarles cómo se obtuvo la estimación de 1800 detenidos en ese centro clandestino. Tampoco supieron decirme. Por supuesto que no todos se manejaban con ignorancia: gracias a una página de Club Atlético por ejemplo, pude enterarme de las claves alfanuméricas en la causa judicial y colgarlas en este posteo. Pero verás, que no se consigue todo todo todo por internet. A veces hay que tener cierto poder para conseguir las cosas, por ejemplo si sos abogado podés presentar recursos que permitan "presionar" para que te concedan información; o podés tener más contactos con colegas que sepan de las causas judiciales, en fin. Cuando algún día sea abogado, veré si consigo más info de la que ahora no puedo obtener

      Y por último, hay personas que sencillamente no tienen redes sociales ni interés en dar información. Ejemplos: el mismo Marcos Taire. Me hubiese gustado preguntarle algunas cosas, pero no conozco a nadie que tenga un contacto con ese periodista, pues carece de redes sociales. Quise comunicarme con Labraña, con Firmenich (a través de su hijo como contacto), con Luis Mattini, etc. Pero ellos son esquivos a las redes, o no les interesa responder

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  15. por cierto, te dejo el link de dicho libro sobre el que te escribí, tanto para vos como para cualquier otro interesado en el tema...
    https://www.pablodavoli.com.ar/ateneocruzdelsur/intranet/libros/Peronistas.pdf

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  16. Te agrego Labraña no solo prologo el libro de Agustin Laje, tambien lo presento junto a el en abril del 2011
    https://m.youtube.com/watch?v=qD-CHZK3kmU
    O sea Laje tuvo a su lado al inventor de la mitica cifra de los 30 mil y este no le dijo ni una sola palabra

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  17. https://www.eldestapeweb.com/opinion/dia-de-la-memoria/24-m-de-donde-viene-el-numero-30-mil-desaparecidos--202232322590
    https://m.perfil.com/noticias/columnistas/por-que-los-delitos-del-erp-no-son-de-lesa-humanidad.phtml

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  18. https://www.pagina12.com.ar/535645-identifican-a-dos-nuevas-victimas-del-terrorismo-estatal-en-

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  19. Más documentos:
    1- Junio de 1976. Folleto del Partido Revolucionario de los Obreros Argentinos (PROA): “3.000 muertos reconocidos oficialmente (asesinados por las fuerzas de seguridad), 30.000 secuestrados por comandos de las fuerzas armadas y 15.000 prisioneros políticos...”
    https://twitter.com/Eljaso2/status/1771888525014708714/photo/1
    2- 1977, boletín En Latinoamérica, editado en Jerusalén, Israel: “recordar que para el caso de Argentina por ejemplo, se denuncia oficialmente más de 6.000 presos políticos, más de 30.000 secuestrados y desaparecidos y más de 10.000 muertos desde la caída de Cámpora hasta hoy."
    https://twitter.com/Eljaso2/status/1771888528479166767/photo/1
    3 - 1978, El Correo Argentino, editado en Madrid: “Continúan los secuestros, acrecentados desde la terminación del Mundial (…) Todos somos conscientes que es más fácil arrancar los presos de las cárceles que recuperar con vida a los ya 30.000 secuestrados.”
    https://twitter.com/Eljaso2/status/1771888510246482176

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    1. muchísimas gracias, desconocía esos documentos

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